miércoles, 18 de mayo de 2011

Reflexión para el futuro


Si no tuviera los años que tengo y la mochila que cargo, con tantos objetos que me acompañan, como sonrisas de compañeras/os muertos que fueron quedando en el camino, alguna notita de algún compañero que decía “aguanten gurisas que yo me hago pichi caca”
Que contiene el recuerdo de alguna vez la única que me sacaron al recreo en 7 meses de interrogatorio pa que viera como torturaban a un compañero ( me sacaron la capucha)
Si no recordara la fiebre que tenía por mis pechos llenos de leche, y mi hijo que ellos me decían que no estaba con mis padres, y el médico dice que lo traerán a amamantar, y yo en pleno interrogatorio, me sacaron la capucha y miré a mi alrededor, las paredes húmedas, llenas de sangre, y yo me desdoblaba en madre desesperada por su pequeño recién nacido, por su contacto, por verlo vivo, y el miedo a que lo “usaran, además técnicamente era imposible, mi madre tendría que traerlo todos los días al cuartel de durazno y ella vivía en paso de los toros y sus recursos económicos y sus hijos, uno muy pequeño aún, no lo harían posible.
Si no hubiera visto morir compañeros en el hospital militar
Si no hubiera vivido el horror de tan cerca, los gritos de los compañeros torturados, las enfermedades contraídas, la consecuencias de las torturas (también mi madre me busco durante muchos meses y le decían estaba en Flores iba hasta allí y no estaba, está en Mercedes, no estaba, o si pero le decían que no, así de cuartel en cuartel con mi niño a cuestas, desaparecida para mi familia, tanto que me fueron a llevar presa cuando yo estaba en el cuartel, creo que de Colonia
Digo yo me sentiría desconcertada con la reacción de tantos de aquellos compañeros, que no digo que tienen todo el derecho de olvidar lo que les pasó a ellos, EL DERECHO QUE NO TIENEN ES EL DE ARROGARSE EL OLVIDO DE TODOS, Y CUANDO DIGO TODOS NO SOLO estoy diciendo los que padecimos cárcel, tortura, sino de los muertos, de los desaparecidos, de los niños apropiados por los militares, de los ciudadanos, a b y c, que no conseguían trabajo o no podían estudiar, o no podían verse con otra gente “sospechosa”, los que tenían libertad vigilada y tenían que pedir permiso pa salir de su departamento, los rehenes de un terrorismo de estado que fue todo un país, salvo aquellos que eran cómplices de la dictadura cívico-militar
Pero sobre todo no tienen el derecho de arrogarse el fin de esta historia, porque
nuestros hijos nuestros nietos, y toda esta generación que viene, deben saber la verdad, porque la impunidad seguirá campeando de todas las formas posibles, y hoy tenemos ese producto, porque la impunidad se instaló y todos se sienten impunes total, si los asesinos mas grandes siguen tan campantes transitando por ahí, salvo alguno en una cárcel bip, pero que costó mucho empeño de todos nosotros para que llegaran hasta ahí
Nos dicen y van pa atrás y pa delante, es inconstitucional anularla, y acaso no es ella por si misma inconstitucional? No deberían haberla anulado en el primer mandato de nuestros compañeros,? Cuando solo existía un referéndum trabajado bajo el signo del terror, y el otro, luego, ninguneado.
Se preocupan de esos plebiscitos, pero al pueblo le pasaron por arriba a todos los plebiscitos por las empresas publicas que se ganaron por amplio margen, y siguen siendo públicas, pero muy privatizadas en grandes fragmentos de ellas, como antel, como el agua etc. etc., y ahora con la asociación de empresas públicas y privadas
Algún alto comandante dice, ah! Los militares no van a decir la verdad si la saben pues quién la va a decir si sabe que va a ir preso?, es que acaso no tuvieron todo este tiempo en que no los llevarían preso y que se comprometieron a decirla, y dieron unos retacitos, alguno que tuvo un dejo de arrepentimiento y aparecieron 2 cadáveres, realmente, siento mucha tristeza, y no la siento por mí, los muertos y los desaparecidos caminan conmigo para siempre, y lo poco que he podido y pueda seguir aportando de lo que se, lo hice y lo seguiré haciendo, pero mi tristeza y mi dolor, es por los gurises que sufrieron, no solo los secuestrados, están todos aquellos que tienen las secuelas psicológicas que dejo la dictadura, ya sea por estar, o por ver a sus padres presos, por nacer en cautiverio o por ser criados por otros aun con mucho amor, por los exiliados, por los hijos de aquellos padres que no podían comentar cuando volvían del trabajo, pues las paredes oían y ellos también podrían sufrir las consecuencias, o los allanamientos, o….. Tanto y tanto que todos sabemos
Es vergonzoso como se ha manejado esto, el tiempo, las idas y venidas, los cambios que resultaron espantosos, pa que otros pudieran votarlo, y resultó peor, eso es lo que da tristeza, si tuvieran un poco de dignidad, tendrían ya que no quieren comprometerse con el futuro, decir que no estaban de acuerdo desde el principio, y el pueblo, ese pueblo que tiene memoria y quiere saber la verdadera historia, tarde o temprano se daría o se dará las herramientas, para que la verdad salga a luz, aunque nos amenacen, aunque nos vendan mentiras, aunque pretexten que los derechos humanos no son solo eso y si no los vamos a perder. Aunque quieran dar vuelta la página, no podrán, la historia está escrita con sangre de pueblo no de dos bandos en guerra
Los pueblos sabios, apelan a sus memorias mas arcaicas para salir adelante, para no repetir, para aprender, para cambiar.
En el confío y seguiremos porfiadamente buscando la verdad y algún día se hará justicia y desde el fondo de la tierra o de los mares devendrá la paz.


CRISTINA RAMIREZ SABANI

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