sábado, 13 de abril de 2013

Rumbo a lo ya conocido



por Jorge Zabalza



El ”baño de pueblo” no fue del agrado de la Suprema Corte de Justicia, lo calificó como ”asonada” y encomendó a la jueza Merialdo y al fiscal Zubía que mandaran Fuenteovejuna a la cárcel. Ímproba tarea para tan escasas luces!

En primer lugar porque no hubo delito: la decisión política de quitar de enmedio a la doctora Mariana Mota y proteger a los criminales de lesa humanidad despertó una indignación generalizada, que simplemente expresaron las centenas de autoconvocados frente a la puerta de la Corte, en el Pasaje de los Derechos Humanos. La concentración fue recontrapacífica como mostraron todos los medios. Hubo ausencias notorias, dirigentes del Frente Amplio que debían estar ahí, respaldando a la jueza de la Verdad y Justicia. Después llegaron tarde y mal… la Corte se agrandó, se hizo muralla de impunidad e injusticia y declaró comunes los delitos contra la humanidad.

En segundo lugar, cuando la doctora Mota entró al edificio la acompañaron un par de decenas de manifestantes que deseaban hacerle sentir su solidaridad. Hasta que a Raúl Oxandabarat cerró provocativamente las puertas de la Suprema y la gente reaccionó entrando en tropel con cánticos y aplausos. No hay ley que condene por concurrir a un acto público en una oficina pública, menos aún si los concurrentes dan muestras de respeto aunque lo hagan en forma barullenta. Por supuesto hay viejos conservadores que se molestan con el bullicio, que desearían que la sociedad fuera un cuartel y tener a todos formados en orden cerrado y silenciosos.

En tercer lugar: la cosa no pasó de algunos gritos destemplados, como en la tribuna cuando los jueces te roban el partido, pero alguien hizo intervenir los grupos de choque, los policías formaron un cordón y fueron empujando con la intención de desalojar el patio central. Después de forcejeos que parecian juegos adolescentes en el patio de recreo, un oficial insólitamente usó la cabeza para razonar y desarmó el cordón para que el público se retirara tranquilamente. Sin embargo, nadie quería dejar a Mota en manos de la arbitrariedad y solamente nos retiramos cuando el Jefe de Policía puso un plazo de cinco minutos…. De qué “asonada” hablan, señores?. Sólo existió en la mentalidad represiva de jueces que hicieron su carrera de magistrados gracias a la dictadura, para quién eran bienvenidos los que interpretaban los códigos y las leyes con visión reaccionaria y fascistoide.

Sin la provocación de Oxandabarat y sin la intervención policial, el acto se habría desarrollado normalmente, pero, por su impronta antipopular y autoritaria, solamente se sienten cómodos protegidos por cordones represivos y tomando decisiones caprichosas escondidos detrás de sus enormes escritorios. Nos hicieron vivir malos momentos a todas y todos, prensa, funcionarios judiciales y manifestantes en general.

Zubía y Merialdo tampoco quieren que les vean la cara, ordenaron que el presumario judicial quedara en manos de funcionarios policiales bajo el mando de un oficial policial y en uno de los bien recordados recovecos de la Jefatura de Policía. Merialdo y Zubía son de la misma calaña que los jueces de la Suprema, instruyeron un procedimiento que es todo un símbolo dictatorial.

Los informativos taparon de inmediato las valoraciones que cuestionaron el sentido del procedimiento judicial en Jefatura. Cumplen su papel de no divulgar opiniones que hagan pensar críticamente sobre cómo actúan las instituciones del Estado. La prensa de izquierda también hizo la vista gorda y está dejando que pase inadvertidamente esta transgresión a la convivencia democrática burguesa. Sin embargo, como las conocidas recomendaciones de Brecht son muy acertadas, tal vez ahora que varios conocidos dirigentes del PITCNT han sido también citados a Jefatura, la prensa de izquierda se haga eco de las denuncias de los insoportables ultras.

El poder político también calló la boca. El presidente dice que no puede opinar por la separación de poderes, pero esto no fue obstáculo para que atacara a la jueza Mota por sus declaraciones a Página 12. Mujica ha contribuído, y mucho, para que Uruguay sea un paraíso de impunidad, todos saben que opina sobre la decision de la Corte sobre el impuestito a los latifundios mayores de dos mil hectáreas, pero nadie sabe su opinion acerca de la arbitrariedad de la Suprema en material de DDHH. Por su parte, los parlamentarios frenteamplistas podrían plantear de una vez por todas la anulación de la ley de caducidad y, aunque más no sea, desatar un debate que permita acumular fuerzas para la Verdad y la justicia. Está claro que no quieren hacerlo, que prefieren la política de Olvido y Perdón que irradia desde el poder ejecutivo. El presidente tampoco se ha expresado sobre el proceso al Plan Cóndor que se realiza en Argentina al amparo de las actitudes del “tuerto” y de la “vieja”. A Mujica no se le escapa ni una palabrita de repudio a los asesinos y un elogio al clima favorable a juzgar que se ha generado en la otra orilla.

En conclusion, con la zancadilla a la jueza Mota colocaron la piedra fundamental de la gran muralla que impide el paso de la Verdad y la Justicia. Después vino el disparate –vergüenza internacional- de considerar delitos comunes las barbaridades cometidas por las fuerzas armadas. Ahora dieron el tercer paso, dando a la población un mensaje bien reaccionario al instruir un sumario judicial en Jefatura de Policía. El paso siguiente lo deberá dar el ministro de cultura sancionando a la fiscal Ana Tellechea por salirse de las políticas oficiales y cuestionar a la Suprema Corte de Justicia.

El poder judicial sigue caminando rumbo al autoritarismo y a un conflicto de poderes que incline la balanza hacia la extrema derecha y proteja a los criminales de lesa humanidad. A la vista y paciancia de todo el mundo se está gestando una santa alianza entre la derecha política, los dinosaurios de los centros militares, probablemente algunos mandos de la fuerza armada y el sector que gobierna al poder judicial. No pueden recuperar el gobierno en elecciones nacionales y entonces buscan los caminos menos constitucionales ya experimentados exitosamente en Honduras y Paraguay.

Avisen a todos los compañeros y compañeras!

13 de abril del 2013

Jorge Zabalza





2 comentarios:

  1. Tambien quisiera poder gritar que este pueblo dormido se despierte ;luego va a ser demasiado tarde.Soy una convencida de que a la mayoria de oa gente le importa un bledo todo:salvo si lo vive en carne propia.nunca vi unpueblo tan poco solidario y con menos conciencia de clase.Brecht lo dice muy claro :mientras no me toque a mi esta todobien.Ya es hora que estosviejos fascistas y acomodados por politica y masones se vayan y es el pueblo el que lo tiene que gritar.Pero solo existe un grupo de gente consciente y dispuesta a luchar.Que mezquinos que somos.

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  2. Grandes cambios se hacen por una razon :HAMBRE.
    Todo lo que Zabalza y los luchadores hacen son semillas para las futuras generaciones. Es un proceso largo y de muchisima paciencia. Mientras la gente siga amarrado a sus posesiones materiales le sera muy dificil desprenderse.
    Pero tambien puede haber vuelcos rapidisimos. No se olviden que Uruguay fue creado, mimado, para tener clase media baja y alta. El sentido de propiedad es muy fuerte asi sea un ranchito y un poquito de tierra, la gente se aferra. Tengamos fe aunque no lo veamos lo veran nuestros nietos o biesniestos los cambios. O por ahi, un dia te desperta que Uruguay salio a la calle a decir esto no da mas. No se desanime compa. Zabalza arriba los que luchan!!!!

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