En la previa del mundial de Rusia, unas 30 organizaciones sociales, entre ellas Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos y Rebeldía Organizada, impulsaron la campaña “Hagámosle un gol a la impunidad. Fuera Zuluaga de nuestra selección”, para que el entonces jefe de seguridad de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Miguel Zuluaga, fuera apartado de su cargo. El Ejecutivo del organismo resolvió que Zuluaga no viajara al mundial.

Ayer, el vocero de Rebeldía Organizada, Richard Mariani, compareció ante la Fiscalía Penal de 4o Turno por una denuncia de difamación e injurias presentada por Zuluaga. El abogado del ex jefe de seguridad de la selección, Diego Durand, dijo a Ecos que la denuncia “es contra él y contra las personas que formularon ataques al honor de una persona que no está denunciada en ninguno de los expedientes a los que ellos hicieron referencia”. También dijo que “salir a decir que se trata de un torturador o de un represor, a partir de unos supuestos, afectó su trayectoria laboral. En ninguno de los expedientes que manejó la campaña [sobre una denuncia presentada en 2011] él declaró como imputado”.

Mariani dijo a la diaria que fueron más de 30 organizaciones que participaron en la campaña, pero que intentan “individualizar la protesta” centrándose en él. Según agregó, hay tres testimonios que “lo reconocen en el lugar”, existe un acta de interrogatorio firmada por él y documentos oficiales del libro Investigación histórica sobre la dictadura y el terrorismo de Estado en el Uruguay (1973-1985), coordinado por el historiador Álvaro Rico, que “lo ubican en el período oscuro de la dictadura”. La denuncia penal presentada por Zuluaga busca "atacar al mensajero, desacreditarlo y silenciar a las personas”, señaló.
“De nuestra parte estamos más fuertes que nunca y vamos a cerrar filas. Con esta denuncia penal están buscando el retracto público que, ya voy adelantando, no voy a hacer, porque esa persona estuvo involucrada en las horas más negras de Uruguay y no voy a pedir perdón por eso”, aseguró Mariani.