martes, 31 de marzo de 2020

La reunión con el presidente

Movimiento contra UPM 2 pidió a Lacalle Pou que suspenda el contrato.


>>> La cláusula

Hasta el 13/4 puede hacerlo amparado en el artículo 7 que establece la rescisión por un evento "grave e inesperado" como el COVID-19.



Sr. Presidente: solo RESTAN 14 DÍAS para poder suspender el INDECOROSO contrato con UPM por EPIDEMIA, apelando al art. 7.2 (a)




Impresiones de la reunión con el presidente. Gustavo Salle


INFORME URGENTE SOBRE REUNIÓN CON EL PRESIDENTE.


Hace poco más de una hora terminó la reuniòn de la Comisión Nacional por Uruguay Soberano con el Presidente Luis Lacalle Pou y el Secretario de Presidencia Alvaro Delgado.

Asistimos por la Comisiòn Gustavo Salle, César Vega, Patricia Wolf, Raùl Viñas, Enrique Echeverrìa y quien escribe. Se sumó ademàs a la reunión, a último momento Eduardo Lustt.

Como estaba previsto, durante la charla cada uno de los nombrados expuso brevemente sobre la necesidad y conveniencia de aplicar la clàusula 7 del Contrato ROU UPM para suspender el cumplimiento de las obligaciones que pesan sobre Uruguay, como mìnimo mientras dure la emergencia sanitaria.

Los representes de este Movimiento preguntamos además si UPM habìa comunicado formalmente su Decision Final de Inversiòn y en què fecha, a lo que el Presidente respondiò "No me cabe duda, pero no sé decirles en este momento la fecha. Se los contesto después".

También le informamos al Presidente que tenemos en curso una campaña de reforma constitucional, a lo que dijo estar enterado y conocer el proyecto.

Terminadas nuestras exposiciones, manifestó que tomaba nota de las mismas y que no nos darìa respuesta en el momento (cosa que ya suponíamos). Agregó que, si bien no le gusta la confidencialidad, habìa razones por las que no haría ningún pronunciamiento por el momento.

El tono de la charla fue cordial y muy respetuoso.
De modo que esperaremos novedades sobre la suspensión mientras trabajamos activamente por la reforma constitucional que anulará el Contrato y evitarà que nuevos contratos de esa clase se aprueben en secreto, sin control parlamentario ni popular.

¡¡UPM2NO!!

Uruguay Soberano. César Vega.

Patricia Wolf

Dr Enrique Etcheverria













Suspender contrato ROU UPM




Comunicado de Prensa

Ante la emergencia sanitaria y económica suspender el contrato con UPM


30 de marzo, 2020

La Coordinación Nacional contra UPM apoya los llamados a suspender el contrato ROU-UPM en vista de la actual situación de emergencia sanitaria y económica que afecta al país y el resto del mundo. En esta situación en la que el país necesita tener fondos disponibles para responder a la crisis es urgente liberar al Uruguay de un compromiso que implica destinar una gran cantidad de fondos que no dan respuesta a la emergencia actual.
De acuerdo a lo estipulado en el numeral 7, cláusulas 7.1 a 7.5 del contrato entre ROU-UPM el 7 noviembre 2017, se entiende que si existe una “causa extraña no imputable” puede no darse continuidad al contrato. Es decir, entre las causales que impidan que se cumpla el contrato aparece listada una epidemia como el tipo de evento que constituye este tipo de “causa extraña”. Exhortamos al Poder Ejecutivo y al Parlamento a que liberen al país de las obligaciones que demanda el contrato con ROU-UPM para poder utilizar estos fondos que invierte el Estado en el

FONDO SOLIDARIO para atender los numerosos y severos perjuicios de la pandemia de COVID- 19. Este tipo de fondo permitiría tener recursos disponibles para reforzar los sistemas de salud y

asistir a una gran parte de la población que está perdiendo sus trabajos a causa de la pandemia. Los fondos que el Estado destina al proyecto de UPM incluyen: tren de carga US$ 2400 millones, compromiso de pago de energía de US$ 1450 millones, viaducto del puerto de Montevideo US$ 300 millones, dragado del puerto US$ 225 millones, adaptación de puentes, carreteras y otros US$ 270 millones. Esta inversión del Estado para cumplir con el compromiso con la empresa representa un total de US$ 4645 millones de dólares (cálculos del Dr. William Yohai basados en los datos públicos disponibles). Disponer de estos recursos permitiría evitar cargar a la población de subas en las tarifas y rebajas de salario que hacen una situación de crisis mucho más difícil de sobrellevar. A modo de comparación el aporte salarial de funcionarios públicos de acuerdo a estimaciones de la Ministra de Economía sería de unos US$12 millones.

La posibilidad de rescindir el contrato con UPM permite que como sociedad tengamos la oportunidad de decidir cómo utilizar los recursos limitados que tenemos para atender las necesidades de nuestra sociedad y construir un futuro más justo, ambiental y socialmente. Coordinación Nacional Contra UPM


Contactos:
Ana Filippini 098407572
Gerardo Padilla 098103871
Marcos Umpierrez 096486245
Mariana Achugar 092010568
Narendra Becerro de Bengoa 098887400

>>> Carta a Lacalle

Sr. Presidente de la República.
Dr. Luis Lacalle Pou.
Los suscriptos nos dirigimos a Ud. en nuestra calidad de ciudadanos uruguayos e integrantes de la Comisión Nacional Pro Reforma Constitucional “Uruguay Soberano”, a efectos de formularle las consideraciones y la solicitud que a continuación expresaremos:
1) Como es notorio, nuestro País se ha declarado afectado por la epidemia de COVID-19 (coronavirus) y, en consecuencia, se ha visto obligado a adoptar medidas preventivas que alteran muy seriamente la vida social, productiva, comercial, laboral y educativa de toda su población.
2) Las referidas medidas implicarán una reducción de los ingresos del Estado y un importante aumento de sus erogaciones, para paliar las consecuencias sanitarias, económicas y sociales de la epidemia y costear las medidas dispuestas para contenerla.
3) Esas circunstancias, imprevisibles e irresistibles, se producen en momentos en que el Uruguay se encuentra abocado a la realización de costosas obras en cumplimiento del denominado “Contrato ROU UPM”, de fecha 7 de noviembre de 2017.
4) Dichas obras se financian en buena medida con créditos que comprometen la responsabilidad actual y futura del Estado por cuantiosas sumas de miles de millones de dólares.
5) El “Contrato ROU UPM” prevé en sus artículos 7.1 a 7.5 la posibilidad de que “causas extrañas no imputables” impidan a cualquiera de las partes el cumplimiento de “una, alguna o todas sus obligaciones”; para ese caso, el mismo Contrato, en su artículo 7.4 literal (b), contempla la posibilidad de la suspensión del cumplimiento de esas obligaciones al menos hasta la terminación del evento o causa extraña no imputable que hiciera imposible el cumplimiento, sin perjuicio de contemplar también la posibilidad de renegociar todo o parte del Contrato e incluso la eventual finalización del mismo.
6) La afectación del Uruguay por una epidemia sin precedentes, que tiene el carácter de emergencia sanitaria a nivel mundial, constituye un hecho imprevisible, irresistible, y sin lugar a dudas no imputable a nuestra población ni a sus autoridades, que puede demandar al País disponer de todos sus recursos, e incluso imponerle recurrir a créditos externos, para atender una emergencia sanitaria, económica y social de duración y costos imprevisibles.
7) En consecuencia, es razonable sostener que nuestro País no está en condiciones de seguir contrayendo deudas para la realización de las obras de infraestructura y otras obligaciones comprometidas con la empresa UPM, cuando se apresta a enfrentar la crisis sanitaria más importante de su historia, con consecuencias sociales y costos económicos todavía desconocidos, aunque sin duda extremadamente altos.
8) Por lo expresado, Sr. Presidente, solicitamos a Ud. que invoque a favor de Uruguay lo pactado en los artículos 7.1 a 7.5 del “Contrato ROU UPM” y, en su mérito, comunique a la empresa UPM, dentro del plazo de veinte días hábiles a contar desde la declaración de la epidemia, la imposibilidad de continuar con las obras previstas, y, por ende, la suspensión temporal del cumplimiento del Contrato debido a la emergencia sanitaria que enfrenta nuestro País.
9) Estamos convencidos de que nuestra población entenderá y agradecerá la priorización del valor salud y de su propia seguridad vital por sobre los compromisos económicos de la relación contractual con la empresa UPM.
Saludan a Ud. muy atte.,
Eduardo Abenia
Mónica Ansuas
Alcides Aldama
Garabed Arakelian
Garabed “Garo” Arakelián
Ana María Araùjo
Pedro Arregui
Alvaro Arriola
Victor Bacchetta
Laura Baldo
Juan Besuzzo
Karen Bocalandro
Alma Bolón
Fabiana Campos
Federico Cantera Nébel
Juan Ceretta
Guillermo Chiribao
Pablo Díaz
Enrique Echeverría
Marcelo Gómez Grecco
Ofelia Gutiérrez
Edgardo Gutiérrez Lavie
Daniel Hardy
Oscar Larroca
Lorena Lavecchia
Estela Magnone
Marcelo Marchese
Ana Lea Martínez
Leo Maslíah
Héctor Méndez
Graciela Milesi
Julio Mora
Aelita Moreira
Francisco “Panchito” Nolé
Daniel Panario
Javier Parga
Ney Peraza
Julio Porley
Adriana Prieto Pérez
Carlos Ramos Falero
Irineu Riet Correa
Ruth Robaina
Patricia Rodríguez Aguiar
Gustavo Rostagnol Long
Luis Sabini Fernández
Gustavo Salle
Hoenir Sarthou
Ignacio Stolkin
Sebastián Suárez
Humberto Tartaglia
Mario Thedy
Federico Valdés
César Vega
María de los Angeles “Pelusa” Vera
Enrique Viana
Brenda Vietro Lomazzi
Raúl Viñas
Ricardo Viscardi
Patricia Wolf
Horacio Zefferino



30/03/2020

Reclaman la suspensión del contrato con UPM


Diversos sectores sociales y políticos consideran que la emergencia generada por el coronavirus habilita al Estado uruguayo a suspender los compromisos con la multinacional finlandesa

Víctor L. Bacchetta


La Comisión Nacional pro Reforma Constitucional "Uruguay Soberano" entregó, el pasado 20 de marzo, una carta dirigida al presidente de la República, Luis Lacalle Pou, en la cual solicita la suspensión del Contrato ROU-UPM. Según los firmantes, el país no puede continuar contrayendo deudas para ese proyecto cuando enfrenta la que ha sido catalogada como la mayor emergencia sanitaria de su historia.

La petición se funda en las cláusulas 7.1 a 7.5 del Contrato firmado el 7 de noviembre de 2017, entre representantes del Poder Ejecutivo y de la empresa UPM, que prevén la posibilidad de suspender el cumplimiento de las obligaciones acordadas en caso de mediar una “Causa extraña no imputable” , entre las que el contrato menciona en forma expresa el caso de epidemia.

La cláusula 7.1 expresa que “se entiende por "Causa Extraña no Imputable" un evento o circunstancia imprevisible o irresistible que impide que una Parte cumpla una, algunas o todas sus obligaciones de conformidad con este Contrato, en la medida en que dicho evento o circunstancia no pueda ser superada y no pueda haber sido evitada o resistida por la parte afectada ejerciendo diligencia razonable”.

En tanto, la cláusula 7.3 fija las condiciones para aplicar la disposición: “En los casos en los que se haya producido una Causa Extraña no Imputable, la parte que la alega deberá comunicar la incidencia de la misma a la otra parte de conformidad con lo dispuesto en la Cláusula 13 del presente Contrato. Dicha comunicación deberá realizarse en un plazo máximo de 20 (veinte) días hábiles de ocurrido el suceso, debiendo aportar en el mismo momento, la información necesaria que acredite la ocurrencia del mismo, su gravedad, su duración y su incidencia en el incumplimiento a que da lugar, todo lo cual se evaluará en cada caso concreto por ambas partes”.

En este caso, el suceso que configura formalmente la situación es el decreto de la Presidencia de la República del 13 de marzo que declaró el “estado de emergencia nacional sanitaria como consecuencia de la pandemia originada por el virus COVID-19” . Los 20 días hábiles a partir de esa fecha culminan el próximo 13 de abril, por lo que ese sería el último plazo para hacer la comunicación pertinente.

De acuerdo con el contrato, la Causa Extraña no Imputable puede ser declarada por una de las partes y tendría validez mientras subsista la situación. La cláusula 7.5 prevé asimismo la posibilidad de llegar hasta “la finalización del contrato, cuando no puedan adoptarse medidas que superen, reviertan o mitiguen los impactos”, pero en este caso requiere el acuerdo de ambas partes, el gobierno y UPM.

Por esta razón, la carta enviada a la Presidencia solicita “la suspensión temporal del cumplimiento del contrato debido a la emergencia sanitaria” . Es notorio que "Uruguay Soberano" propugna la anulación total y definitiva de ese contrato, pero es un hecho incontrovertible que la circunstancia excepcional y sus imprevisibles consecuencias para el país habilitan al gobierno recién asumido a tomar esa decisión.

“Lo ideal es la rescisión, porque no es ético que se destinen 4 mil millones de dólares a maximizar la ganancia de una corporación extranjera y que, por otro lado, se le pida un enorme esfuerzo al pueblo, al empresariado”, afirma el abogado Gustavo Salle. “Hay razones para hacerlo más allá de las cláusulas del contrato, que en derecho se conocen como el cambio de las circunstancias del acuerdo” , agregó Salle.

Los fondos comprometidos por el contrato incluyen el costo del ferrocarril y el viaducto sobre la rambla portuaria, dragados, traslado del puerto pesquero y el dique Tsakos en el puerto, obras de caminería, carreteras y puentes. Si se suman las renuncias fiscales y el subsidio encubierto en la compra de energía eléctrica se llega a los 4.624 millones de dólares estimados por los economistas Gustavo Melazzi y William Yohai.

Desde sectores del gobierno, el abogado Eduardo Lust sostiene que a la mayor crisis sanitaria no hay que agregarle el mayor crimen ambiental, aludiendo al nuevo proyecto de UPM. “Más allá de las donaciones y la solidaridad, Uruguay tiene la oportunidad de volcar los cientos de millones de dólares entregados a UPM para atender las necesidades del pueblo uruguayo” , declaró el diputado de Cabildo Abierto.

Causas supresión del contrato


“Otra oportunidad en la tormenta” , tituló un escueto comunicado el movimiento Un Solo Uruguay (USU), entre otros sectores sociales y políticos que se han pronunciado en el mismo sentido. “Es el momento de suspender el contrato con UPM amparados en los puntos 7.1 y 7.2”, afirmó el movimiento y señaló que “será necesario reorientar los fondos públicos para el apoyo a la salud, los sectores más vulnerables y sobrevivencia de empresas”.

Evidenciando la naturaleza de la situación, UPM-Kimmene Corporation informó hoy a sus accionistas que dejó en suspenso sus previsiones de desempeño para 2020. En Finlandia, la primera ministra Sanna Marin apeló a la Ley de Poderes de Emergencia para adoptar medidas extraordinarias en todo el país. Mientras tanto, en Uruguay ya se habla de miles de contratos comerciales y civiles afectados por la crisis.




lunes, 30 de marzo de 2020

Los que viven al día

Lo que dejó 15 años de neoliberalismo y politicas de austeridad económica.





>>> Necesitaron al coronavirus para darse cuenta
 

15 años gestionando que capitales inversores vinieran a Uruguay para crear fuentes de trabajo, y lo que se logró fue la privatización de entes estatales, la tercerización y una masa de trabajadores informales, vendedores ambulantes, narcotraficantes, malabaristas en las esquinas, o lugares de trabajo donde no se llega a un salario de 20.000 pesos. Mas de 1 millón de uruguayos viven al día a pesar de los índices de pobreza que mostraba en INE,  Niños que si no van a la escuela no comen. El pueblo uruguayo es solidario, hoy las ollas populares estan en todos los barrios. Hoy se necesita la ayuda de unos y otros. La clase pudiente agrupada en los gobernantes de turno  pone su cuota a la crisis, 44 pesos por cabeza de ganado que se abasta por un valor de 22.000 pesos. En un país de 13 millones y medio de ganado. El Uruguay es un pais muy rico, pero con gente pobre.

Es hora de organizarse crear comunidades agrarias donde se pueda vivir y comer gratis. Aqui en un pais fértil la plantas  animales crecen solos. Con voluntad política se puede!!!

Wikipedia
El Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) es un sindicato español de ideología nacionalista andaluza, anticapitalista y de clase, constituido en Sevilla el 23 de septiembre de 2007.

Surgió tras la unión de diferentes sindicatos de Andalucía: uno de olivareros del Aljarafe, otro de trabajadores municipales de Marbella, Autonomía Obrera (sindicato de trabajadores del Ayuntamiento de Cádiz), el Foro Sindical Andaluz

El SAT se declara como un sindicato de clase, alternativo, anticapitalista, asambleario, de acción directa, autónomo, independiente, solidario, internacionalista, pluralista, abierto, antipatriarcal, confederal, republicano, nacionalista andaluz, y de izquierdas.3​ Diego Cañamero fue portavoz nacional del SAT desde su fundación en 2007 hasta el II Congreso, celebrado en octubre de 2015.

Tiene unos 20 000 afiliados.1​ Destaca por las constantes manifestaciones y revindicaciones, así por los métodos utilizados en estas, como por ejemplo ocupaciones de propiedades. En los últimos dos años ha ido ganando terreno en las elecciones sindicales, siendo especialmente popular en las provincias de Cádiz y Sevilla.
Se puede!!! Viven comunitariamente y comen casi gratis





El País   "Un fuerte impacto económico” es lo que pronostica el Frente Amplio como consecuencia del coronavirus. Para enfrentarlo propuso al gobierno otorgar un subsidio equivalente a un salario mínimo -que dure el mismo tiempo de la cuarentena- para trabajadores informales y cuentapropistas.
Las medidas presentadas ayer en conferencia de prensa por el presidente del Frente Amplio Javier Miranda también plantean: garantizar los derechos mutuales a través del Fonasa aún ante la pérdida del trabajo formal, suspender la rebaja de beneficio de IVA a compras con tarjetas, evitar saltos abruptos del dólar, diferir vencimientos de tarifas de OSE y UTE a pequeñas empresas y familias de bajos ingresos, aumentar el gasto y promover la inversión pública y brindar incentivos a empresas para evitar envíos al seguro de paro.


El documento, que será entregado en mano al presidente Luis Lacalle Pou el próximo viernes 3 de abril, indica que si bien las medidas adoptadas por el gobierno hasta ahora “van en dirección correcta”, carecen del impacto suficiente para abordar los problemas de la pandemia

El material no habla de cuarentena general obligatoria (aunque sí de profundización del aislamiento) ni de rebaja de tarifas, dos ideas que venían siendo repetidas hasta el cansancio por varios dirigentes. Según supo El País, la idea de no insistir en estos planteos supone una forma de “tender la mano” al gobierno después de las insistentes críticas lanzadas desde la izquierda.
En concreto se plantean unas 30 medidas en el plano económico, sanitario y social. El Frente pide dejar sin efecto el ahorro planteado del 15% para ministerios y brindar soluciones en materia de vivienda que implican: período de gracia a intereses de los créditos sociales a jubilados que concede el BROU y de cuotas hipotecarias (entre abril y julio) para trabajadores enviados al seguro de paro y cuentapropistas. En tanto se solicita suspender desalojos de inquilinos.
En cuanto al subsidio, el senador Daniel Olesker indicó que la idea es que tenga tres escalones: los que reciban la tarjeta Uruguay Social, los hogares que reciben el Plan de Equidad y personas desvinculadas de la seguridad social. Esto supone atender a 250.000 hogares, explicó Olesker.

>>> 250.000 hogares viven al día




El Frente dedica un párrafo a la forma de financiamiento de estas medidas que entiende necesarias para enfrenar la crisis derivada del coronavirus y recuerda que hay líneas de crédito abiertas por 2.200 millones de dólares, lo equivalente a cuatro puntos del PBI. Fuentes de la coalición dejaron en claro que estas líneas están abiertas con el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y la CAF. En el documento en cuya redacción participaron el exsubsecretario Pablo Ferreri, los senadores Olesker y Mario Bergara y el diputado Alejandro Sánchez, señalan que “Uruguay cuenta con importantes fortalezas financieras y económicas que le otorgan margen de maniobra para afrontar este plan”.
En conferencia de prensa, Miranda respondió a Lacalle Pou que hace pocos días declaró que no es hora de hacer política: “Creemos que es la hora de la política, la hora del Estado donde toda la sociedad se plantea solidariamente enfrentar la situación”. En ese marco, el presidente del FA dijo que tienen disposición de diálogo para buscar “un acuerdo nacional” que suponga un plan integral para enfrentar el coronavirus.
“Es la hora de los acuerdos nacionales y el Frente pone a disposición sus mejores técnicos”, insistió. A la medida de rebaja salarial del 20% a cargos políticos y 10% a salarios públicos superiores a $ 80.000, Miranda pidió sumar “otros aportes solidarios por la vía tributaria” de “gente que ha ganado dinero y se ha beneficiado y debiera ser alcanzada por esta imposición”.

Miranda dijo que no se refería solo a los trabajadores privados, por lo que nombró específica mente las “rentas del capital”.

>>> Por un plato de comida (ayer)


 18 de julio esquina Tacuarembo,en este momento.- las personas están esperando turno para acceder a un plato de comida!!! Las reparte un móvil...

Reclamando ayuda al MIDES
14.000  llamadas diarias colapsaron la línea del MIDES.



 

Mujica pide también gravar a los privados

El expresidente José Mujica se refirió ayer en su columna radial en M24 a las medidas anunciadas por presidente Luis Lacalle Pou, entre las que destaca una reducción salarial para algunos funcionarios públicos y jubilaciones. “Nos parece que es una propina ante las necesidades que va a tener el Estado uruguayo. Tiene mucho, repito, de saludo a la bandera, pero no nos convence”, dijo el exmandatario.

Mujica aclaró “de entrada” que en el único punto en que están de acuerdo oposición y oficialismo es en el piso que fija el aporte. En tanto, el senador y líder del MPP 609 manifestó que no está de acuerdo con “que se grave solo a los públicos, porque eso es injusto, y no expresa la profunda realidad de nuestra sociedad. Tiene más bien aspecto de saludo a la bandera”, manifestó. También dijo que hay una “multitud de formas de dueños de capital del trabajo de este país, que creemos que tienen que aportar algo, no a nivel de la expropiación”,


>>> Los ques enriquecieron y no crearon empleo


>>> La mierda del MIDES














domingo, 29 de marzo de 2020

¿Qué dicen los filósofos del coronavirus?




29 de marzo de 2020


¿Se viene un capitalismo más feroz o un comunismo renovado?

 La filosofía y el coronavirus, un nuevo fantasma que recorre el mundo

Slavoj Zizek arrojó la primera piedra cuando escribió que la opción, después de la pandemia, será “barbarie o alguna forma de comunismo reinventado”. Byung-Chul Han le contestó: "El virus no vencerá al capitalismo”. Otros pensadores, como Giorgio Agamben, Franco "Bifo" Berardi, Srećko Horvat, Judith Butler y  Alain Badiou, suman al debate miradas que se corren de las noticias del minuto a minuto.


Es ya evidente que está haciendo temblar los mercados. Pero, a largo plazo, ¿el coronavirus podría derribar al capitalismo? El siempre rápido de reflejos Slavoj Zizek acaba de publicar el que seguramente sea el primer ensayo sobre coronavirus. La tesis de Pandemic! Covid-19 shakes the world (Pandemia! Covid-19 sacude el mundo) es que la actual crisis sanitaria desnudó las debilidades de las democracias liberales y que el mundo se encamina, entonces, hacia un efecto político positivo. “Barbarie o alguna forma de comunismo reinventado”: tal es la dicotomía que encuentra el esloveno en este crudo y complejo escenario histórico, también inédito.

En un contexto en que la información satura e invade mentes y hogares, puede resultar saludable o aunque sea rico introducirse en miradas que se corren de las noticias del minuto a minuto. Son varios los pensadores contemporáneos que han mirado la pandemia: los italianos Giorgio Agamben y Franco "Bifo" Berardi, el croata Srećko Horvat, la estadounidense Judith Butler, el francés Alain Badiou y el surcoreano Byung-Chul Han son algunos de los que se expresaron al respecto. La pregunta por el devenir del escenario económico mundial está en casi todos los enfoques.

El nuevo material de Zizek es breve, 120 páginas, disponible tanto en papel como en formato digital a través de la editorial OR Books. Va en sintonía con teorías explayadas en un artículo previo para el portal RT , en el que Zizek -marxista, cinéfilo- definía a la pandemia como "un golpe a lo Kill Bill al sistema capitalista", en otra de sus habituales conversaciones con la cultura popular. Fue un artículo que hizo ruido en las redes sociales -sería lo que muchos querían oír- y que desató una respuesta de Byung-Chul Han. “Zizek se equivocaEl virus no vencerá al capitalismo ”, sentenció en una columna para el diario El País.

Mientras el nuevo fantasma recorre el mundo dejando cada vez más muertos e infectados, en Pandemic!... Zizek plantea que un “enfoque comunista” -renovado, claro- es el modo de salir de la encrucijada. Estados-Nación puestos al servicio de la defensa de los más débiles. El virus puso en evidencia que vivíamos con otro virus dentro, naturalizado: el capitalismo. Es una oportunidad para liberarse de la "tiranía del mercado". Pero a la vez el autor no es "utópico": no cree que el conflicto haga crecer la "solidaridad entre los pueblos". Porque por estos días la solidaridad es más bien “instinto de supervivencia" y, como tal, "racional y egoísta".

Resonaron "especulaciones que apuntan a la caída del comunismo en China, de la misma forma que Gorbachov dijo que la tragedia de Chernobyl llevó al fin del comunismo soviético", pero la paradoja -siempre según Zizek- es ésta: "El coronavirus nos obliga a reinventar el comunismo basándonos en la confianza en las personas y la ciencia”. Los roles de la prensa y los gobiernos no escapan a su análisis. Aunque en su opinión China gestionó mejor el coronavirus que Italia, critica el ocultamiento de datos negativos de parte de las autoridades de la República Popular. Por otra parte, arremete contra el Reino Unido y Estados Unidos por su empeño en mantener la calma de los ciudadanos y en exhibir control a través de la mentira. "Los medios nos lanzan repetidamente el mensaje de 'no caigan en el pánico' y, a continuación, disponen una serie de datos que nos llevan necesariamente al pánico", cuestiona.

El filósofo que inspeccionó la forma de los inodoros para acercarse a la ideología de los países también se anticipa al impacto del coronavirus en la vida cotidiana. No seremos tan alegres en los parques, no entraremos con confianza a baños públicos, y hasta tendremos dilemas para tocarnos la cara. "No son sólo el Estado y sus agentes quienes nos controlarán, también debemos aprender a controlarnos y disciplinarnos a nosotros mismos”, insta. Quizá la sensación de seguridad quede reservada para la realidad virtual. Moverse libremente en espacios abiertos a lo mejor sea, en el futuro, privilegio de un par de "ultra ricos" que cuenten con propias islas. Pero no todo será tan malo: avizora la desaparición de los cruceros  -"lujo obsceno"-, así como también un freno en la producción de automóviles, algo que podría conducir a vías alternativas de movilización, más sanas para el planeta.

El ensayo da lugar también al humor y a recuerdos personales. Cualquier similitud con la actualidad no debe ser mera coincidencia. "En mi juventud, en la Yugoslavia socialista, empezó a correr un rumor que decía que no había reservas de papel higiénico. Las autoridades respondieron: 'hay suficiente'. Sorprendentemente, la población lo creyó. Sin embargo, un consumidor medio razonaba de esta manera: 'Sé que el rumor es falso, sé que hay papel higiénico suficiente, pero, qué pasa si el resto de la gente cree que no hay reservas y se lanza a por el papel de las tiendas y causa una carestía... Mejor voy a comprar papel". Un fenómeno pasado totalmente en sintonía con las recientes imágenes de supermercados repletos, consumidores al borde de la desesperación y carritos con pirámides de este producto.

La polémica con Byung-Chul Han


"Zizek afirma que el virus ha asestado al capitalismo un golpe mortal y evoca un oscuro comunismo. Cree incluso que el virus podría hacer caer el régimen chino. Se equivoca. Nada de eso sucederá”, respondió Byung-Chul Han. "La emergencia viral y el mundo del mañana" (22 de marzo) se titula la columna del pensador nacido en Seúl y radicado hace 35 años en Berlín. Está completo en Lobo Suelto , con traducción de Alberto Ciria. "Tras la pandemia, el capitalismo continuará con más pujanza. La revolución viral no llegará a producirse. Ningún virus es capaz de hacer la revolución”, apuntó.

El autor de La sociedad del cansancio -quien también tiene una mirada crítica de las desigualdades y excesos del sistema económico capitalista- cree que el virus es apenas la gota que colmó el vaso. “La globalización suprime todos estos umbrales inmunitarios para dar vía libre al capital. Somos NOSOTROS, PERSONAS dotadas de RAZÓN, quienes tenemos que repensar y restringir radicalmente el capitalismo destructivo, y también nuestra ilimitada y destructiva movilidad, para salvarnos a nosotros, para salvar el clima y nuestro bello planeta”, concluye.

Si bien por momentos los pensamientos de uno y otro filósofo son diametralmente opuestos, en ciertos puntos no son tan diferentes. En definitiva, quizá sea rimbombante el polémico Zizek al presentar los temas, pero su mirada no excluye al sujeto. Respecto de la solidaridad, esto es lo que piensa Han: “El virus nos aísla e individualiza. No genera ningún sentimiento colectivo fuerte (…). La solidaridad consistente en guardar distancias mutuas no es una que permita soñar con una sociedad distinta, más pacífica, más justa. No podemos dejar la revolución en manos del virus”, advierte.

Al comparar las medidas de las naciones asiáticas con las europeas, llegó a la conclusión de que la "mentalidad autoritaria" de las primeras genera más obediencia y que Europa "está fracasando" en la batalla: "Los cierres de fronteras son evidentemente una expresión desesperada de soberanía. Pero es una de soberanía en vano". Han cuestionó, además, el modelo de control policial basado en la vigilancia digital que Pekín utilizó para encarar exitosamente la pandemia y que permitirá a China exhibir "la superioridad de su sistema con más orgullo" e incluso exportarlo.

Zizek reapareció y contestó con declaraciones a El Mundo: "El comunismo que debería prevalecer ahora no es un sueño oscuro sino lo que ya está ocurriendo. El Estado debe asumir un papel mucho más activo". Y agregó: "Han dice que los países occidentales están reaccionado de forma exagerada porque se estaban acostumbrando a vivir sin enemigos abiertos y tolerantes, sin mecanismos de inmunidad, por lo que cuando surgió una amenaza real entraron en pánico. ¿De verdad? ¿No está todo nuestro espectro político y social impregnado de visiones apocalípticas, amenazas de catástrofe ecológica, miedo a los refugiados musulmanes, defensa del pánico de nuestra cultura tradicional contra el universo LGBT y la teoría de género? Intenta hacer una broma y sentirás inmediatamente la fuerza de la censura de lo políticamente correcto. Nuestra permisividad hace años que se convirtió en lo opuesto".

Pensamientos desde el foco de la pandemia


Otros filósofos que miraron la pandemia para entenderla son de Italia, cuyas cifras de muertos e infectados aumentan exponencialmente cada día. El artículo "La invención de una epimedia" (26 de febrero), de Giorgio Agamben, no va tanto al hueso del capitalismo pero contiene un halo de lo que a muchos fascina: teoría conspirativa. Toma como punto de partida declaraciones del Consiglio Nazionale delle Ricerche para afirmar que el coronavirus es "una gripe normal". "Pareciera que, habiéndose agotado el terrorismo como motivo de las medidas de excepción, la invención de una epidemia podría ofrecer el pretexto ideal para extenderlas más allá de todos los límites", escribió el autor de la serie Homo Sacer. Esto coincide con "una necesidad real de estados de pánico colectivo", desprendida de un "estado de temor" instalado en las conciencias.

"La limitación de la libertad impuesta por los gobiernos es aceptada en nombre de un deseo de seguridad que ha sido inducido por los mismos gobiernos que ahora intervienen para satisfacerlo", sugiere. Hubo quienes entendieron que en este texto había un desdén en torno al alcance de la enfermedad. El francés Jean-Luc Nancy acusó al italiano de haber intentado una "maniobra de distracción" más que "una reflexión política". En cambio, llegando al final de su texto, luego de expresar su deseo de que no llegue a Europa un régimen policial digital similar al chino, Han dialoga con Agamben y lo cita, porque de ocurrir aquello "el estado de excepción pasaría a ser la situación normal" y "el virus habría logrado lo que ni siquiera el terrorismo islámico consiguió del todo".

El día en que Italia superó a China en cantidad de muertes fue publicada una suerte de crónica diaria mechada con reflexiones de Franco "Bifo" Berardi, disponible en la página de Caja Negra Editora . El filósofo y activista comienza con citas de Burroughs y Jefferson Airplaine y plantea al coronavirus como un "virus semiótico", como "fijación psicótica". Un "biovirus que prolifera en el cuerpo estresado de la humanidad global". Advierte que por primera vez sucede una crisis que no proviene de factores financieros o económicos, sino del cuerpo. "Lo que provoca pánico es que escapa a nuestro saber: no lo conoce la medicina, no lo conoce el sistema inmunitario. Y lo ignoto de repente detiene la máquina. (...) Bloquea el funcionamiento abstracto de la economía, porque sustrae de ella los cuerpos", dice.

"Hace tiempo que el capitalismo se encontraba en un estado de estancamiento irremediable. Pero seguía fustigando a los animales de carga que somos, para obligarnos a seguir corriendo, aunque el crecimiento se había convertido en un espejismo triste e imposible", escribe Bifo en el extenso y dinámico texto. Le discute al croata Srećko Horvat, otro de los que creen que lejos está el Covid-19 de ser una amenaza para la economía neoliberal, ya que lo entiende como el "ambiente perfecto" para el desarrollo de esa ideología.

Pero Bifo, en su Crónica de la psicodeflación, es más precavido que Zizek. Lo que para Zizek es golpe a lo Kill Bill, para Bifo es "detención de la máquina". Detención parida del agotamiento y el estrés de los cuerpos. Es más ambiguo al hablar sobre un futuro posible, aunque también aquí hay dicotomía. "Podríamos salir de esta situación imaginando una posibilidad que hasta ayer parecía impensable: redistribución del ingreso, reducción del tiempo de trabajo. Igualdad, frugalidad, abandono del paradigma del crecimiento, inversión de energías sociales en investigación, en educación, en salud. No podemos saber cómo saldremos de la pandemia cuyas condiciones fueron creadas por el neoliberalismo, por los recortes a la salud pública, por la hiperexplotación nerviosa". Según el post-deleuzeano hay dos caminos: o salimos de esta más "solos, agresivos o competitivos" o "con un gran deseo de abrazar, (de) solidaridad social, contacto, igualdad".

Se suma Alain Badiou

Francia acaba de extender su cuarentena hasta el 15 de abril. Desde su aislamiento, Alain Badiou descree tanto del carácter "inaudito", "nuevo" de la epidemia actual como del "evento fundador de una revolución increíble". No obstante, la conclusión a la que llega en su artículo "Sobre la situación epidémica"  -21 de marzo, también en Lobo Suelto- es ésta: "En cuanto a nosotros, que queremos un cambio real en los datos políticos en este país, debemos aprovechar el interludio epidémico e incluso el confinamiento, bastante necesario, para trabajar en nuevas figuras políticas, en el proyecto de lugares, nuevas políticas y el progreso transnacional de una tercera etapa del comunismo, después de eso, brillante, en su invención". De nuevo el comunismo, pero, eso sí, un comunismo finalmente "derrotado de su experimentación estatal", a diferencia del que postula Zizek. El momento exige, para el dramaturgo, filósofo y novelista, "una crítica cercana de cualquier idea de que fenómenos como una epidemia se abran por sí mismos a cualquier cosa políticamente innovadora".
El texto ofrece una perspectiva sobre cómo "un dato fundamental del mundo contemporáneo" -el acceso del capitalismo de Estado chino a un rango imperial- dialogó con el tránsito local entre especies animales a humanos, que es "el punto de origen de todo el asunto". La "gran contradicción" es que la economía es parte del mercado mundial, en tanto que los poderes políticos "siguen siendo esencialmente nacionales". Así se sintetiza la "contradicción entre economía y política" que expone la pandemia. "Los estados nacionales tratan de enfrentar la situación epidémica respetando al máximo los mecanismos del Capital, aunque la naturaleza del riesgo los obliga a modificar el estilo y los actos de poder", postula Badiou.

Más allá de diferencias ideológicas y enfoques diversos, desde la óptica filosófica parece haber una coincidencia: la percepción de que el virus quita el velo a aquello que ya estaba -y estaba mal- o lo acentúa de manera radical. Por fuera de Agamben y Horvat, quienes trazan una perspectiva a lo mejor más distópica, en el resto de los pensamientos se detecta una oportunidad para la humanidad de crear algo nuevo. Puede adquirir el nombre de comunismo renovado, comunismo en tercera etapa o quedar fuera de las coordenadas simbólicas todavía. Volviendo a Bifo, el coronavirus es "la condición de un salto de salud mental que ninguna prédica política habría podido producir. La igualdad ha vuelto al centro de la escena. Imaginémosla como el punto de partida para el tiempo que vendrá".

El virus de la desigualdad 

Al parecer, el mundo de la filosofía es todavía un terreno machista. Una de las voces femeninas que se escuchó ante la pandemia fue la de Judith Butler. Para la posestructuralista estadounidense el fracaso de algunos estados y regiones para prepararse por anticipado, el refuerzo de políticas nacionales y el cierre de fronteras y la llegada de empresarios ávidos de capitalizar el sufrimiento global testimonian la "velocidad" con la cual "la desigualdad radical y la explotación capitalista encuentran formas de reproducir y fortalecer su poderes".

La autora de El género en disputa. El feminismo y la subversión de la identidad puso el ojo en el desesperado intento de Donald Trump de anotarse "puntos políticos" para asegurar su reelección a través de la compra de los derechos de la vacuna contra el coronavirus desarrollada por una compañía alemana. "¿Imagina que la mayoría de la gente piensa que es el mercado quién debería decidir cómo se desarrolla y distribuye la vacuna? ¿Es incluso posible dentro de su mundo insistir en un problema de salud mundial que debería trascender en este momento la racionalidad del mercado?", se pregunta. Augura un escenario de puja distributiva en torno a la vacuna. Una "distinción espuria" entre vidas a proteger y otras que quedarán a la deriva. "La desigualdad social y económica asegurará que el virus discrimine. El virus por sí solo no discrimina, pero los humanos seguramente lo hacemos, modelados como estamos por los poderes entrelazados del nacionalismo, el racismo, la xenofobia y el capitalismo", escribió en el artículo "El capitalismo tiene sus límites" , con fecha del 19 de marzo, originalmente publicada en Verso.

"La idea de que podríamos convertirnos en personas que desean ver un mundo en el que la política de salud esté igualmente comprometida con todas las vidas, para desmantelar el control del mercado sobre la atención médica que distingue entre los dignos y aquellos que pueden ser fácilmente abandonados a la enfermedad y la muerte, estuvo brevemente vivo. Llegamos a entendernos de manera diferente cuando (Bernie) Sanders y (Elizabeth) Warren ofrecieron esta otra posibilidad. Entendimos que podríamos comenzar a pensar y valorar fuera de los términos que el capitalismo nos impone", dice Butler. La propuesta de una salud pública y universal "revitalizó un imaginario socialista" en Estados Unidos, "ideal" que "debe mantenerse vivo en los movimientos sociales" en la lucha a largo plazo.




Cómo están pensando los filósofos la crisis global que provocó el coronavirus



Slavoj Žižek, Byung-Chul Han, Yuval Noah Harari, Judith Butler, Giorgio Agamben, Noam Chomsky, Roberto Espósito y Jean-Luc Nancy son algunos de los intelectuales que están reflexionando sobre las transformaciones que están empezando a suceder en el sistema económico, político y social y qué futuro nos aguarda a todos cuando esta cuarentena mundial termine


Son tiempos raros. No sólo ahora, que estamos todos encerrados contando a través de las pantallas la cifra de infectados y de muertos y rogando —algunos le rezan a dios, otros al azar— que la de curados aumente drásticamente. De pronto, somos más espectadores de lo que ya éramos con una pasividad que desborda la razón y nos acorrala en la incertidumbre. También están el temor, la paranoia, el pánico, ¿qué más? La cruda sentencia de Fredric Jameson, que hoy parece “más fácil imaginar el fin del mundo que el fin del capitalismo”, algunos la empezaron a poner en duda. ¿Cómo será el mundo cuando salgamos de nuestras casas y el coronavirus esté, por decirlo de algún modo, controlado?

Varios filósofos están pensando alrededor de estas cuestiones. Hay muchos puntos para desarrollar y es mejor hacerlo ahora, al calor de los hechos, con la impunidad del presente, pero con la convicción de que es mejor hacer preguntas inteligentes que dar respuestas tranquilizadoras. En ese sentido, Slavoj Žižek, lacaniano y marxista, se anticipó a todos y publicó un libro. Su título, Pan(dem)ic!, COVID-19 shakes the world, es un juego entre las palabras pandemia y pánico. Según adelantó la editorial, en sus páginas se cruzan Quentin Tarantino y H. G. Wells con Hegel y Marx. Hay fragmentos traducidos, pero empecemos por el principio, cuando el coronavirus aún no era pandemia sino apenas el nombre de una gripe peligrosa.

La primera alerta proveniente de Wuhan, el epicentro del virus, la recibió la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 31 de diciembre. Doce días después, la primera muerte. A fines de enero empiezan a detectarse casos en otros países, como Alemania y Japón. Rusia cierra las fronteras con China que, con varias ciudades aisladas, declara el 31 de enero 43 muertos en apenas 24 horas. Luego las fichas empiezan a caer como un dominó que salta de Asia a Europa, llega a América y se propaga como lo que es: una amenaza mundial. Los sistemas de salud que aún no colapsaron amagan con hacerlo, los Estados declaran cuarentena obligatoria y mandan a las Fuerzas de Seguridad a vigilar las calles. Esto no es un capítulo Black Mirror.


Quien comenzó, podría decirse, es el filósofo italiano Giorgio Agamben. Lo hizo el 26 de febrero en Quodlibet hablando de “medidas de emergencia frenéticas, irracionales y completamente injustificadas para una supuesta epidemia debida al coronavirus”, al que calificaba, con muy mala puntería, como “una especie de gripe”. Finalmente Italia se convertiría en el país más afectado. En ese primer artículo, Agamben señalaba la “tendencia creciente a utilizar el estado de excepción como paradigma normal de gobierno” (“agotado el terrorismo”, llega esta pandemia) y “la limitación de la libertad, aceptada en nombre de un deseo de seguridad que ha sido inducido por los mismos gobiernos que ahora intervienen para satisfacerla”.

Su par francés, Jean-Luc Nancy, uno de los más influyentes del país galo, le respondió en un breve artículo publicado en Antinomie. No lo hizo con dureza, puesto que Agamben es “un viejo amigo”, pero sí marcó su error: “La gripe ‘normal’ mata a varias personas y el coronavirus, para el que no hay vacuna, es claramente capaz de una mortalidad mucho mayor”. Su aporte, más allá del contrapunto, es este: “No hay que equivocarse: se pone en duda toda una civilización, no hay duda de ello. Hay una especie de excepción viral –biológica, informática, cultural– que nos pandemiza. Los gobiernos no son más que tristes ejecutores de la misma, y desquitarse con ellos es más una maniobra de distracción que una reflexión política”.

Roberto Espósito —también filósofo, también italiano— fue el que puso paños fríos. “Me parece que lo que sucede hoy en Italia (...) tiene más el carácter de una descomposición de los poderes públicos que el de un dramático control totalitario”, escribió en Antinomie, sin embargo deslizó una línea importante en todo este debate: “Hoy ninguna persona con ojos para ver puede negar el pleno despliegue de la biopolítica (...) Todos los conflictos políticos actuales tienen en el centro la relación entre política y vida biológica”. Si bien para Espósito la democracia no está en riesgo, al menos por ahora, “estamos presenciando una politización de la medicina investida de tareas de control social”.

Agamben volvió a la carga con una columna en Una voce el 17 de marzo para aclarar mejor su posición. “Lo primero que muestra claramente la ola de pánico que ha paralizado al país es que nuestra sociedad ya no cree en nada más que en la vida desnuda. Es evidente que los italianos están dispuestos a sacrificar prácticamente todo, las condiciones normales de vida, las relaciones sociales, el trabajo, incluso las amistades, los afectos y las convicciones religiosas y políticas ante el peligro de caer enfermos”, sostiene el filósofo. Habla también de “una guerra civil” donde “el enemigo no está fuera, está dentro de nosotros” y asegura que “una sociedad que vive en un estado de emergencia perpetua no puede ser una sociedad libre”.

Antes de que salga su libro, Žižek escribió una columna en Russia Today mirando más allá de los estados. “La actual expansión de la epidemia de coronavirus ha detonado las epidemias de virus ideológicos que estaban latentes en nuestras sociedades: noticias falsas, teorías conspirativas paranoicas y explosiones de racismo”, escribió el filósofo esloveno, para quien los aislamientos decretados tienen otro objetivo, además de evitar la propagación del COVID-19: “mantener en cuarentena a los enemigos que representan una amenaza a nuestra identidad”. Además, asegura que la necesidad de reflexionar sobre el sistema que nos rige es prioritaria, así como “reinventar el comunismo basándonos en la confianza en las personas y la ciencia”.

Apegado al cine y la cultura popular, hace una analogía con la película Kill Bill de Tarantino y el golpe asesino conocido como técnica del corazón explosivo, donde la persona que lo recibe puede seguir viviendo como si nada pero, más temprano que tarde, su corazón explotará. “Mi modesta opinión sobre la realidad es mucho más radical: la epidemia de coronavirus es una forma especial de técnica del corazón explosivo en el sistema global capitalista, un síntoma de que no podemos seguir en el camino que hemos seguido hasta ahora, se necesita ese cambio”. Su propuesta, expresada mejor en el libro, es simple aunque para nada fácil: “El dilema al que nos enfrentamos es: barbarie o alguna forma de comunismo reinventado”.

“Žižek afirma que el virus ha asestado al capitalismo un golpe mortal. Cree incluso que el virus podría hacer caer el régimen chino. Žižek se equivoca. Nada de eso sucederá. China podrá vender ahora su Estado policial digital como un modelo de éxito”, escribió Byung-Chul Han en El País hace una semana. “El virus no vencerá al capitalismo. La revolución viral no llegará a producirse. Ningún virus es capaz de hacer la revolución. El virus nos aísla e individualiza. No genera ningún sentimiento colectivo fuerte. De algún modo, cada uno se preocupa solo de su propia supervivencia (...) No podemos dejar la revolución en manos del virus. Confiemos en que tras el virus venga una revolución humana”, sostiene el filósofo surcoreano.

¿Por qué en los países de Asia se ha logrado mayor efectividad en combatir la pandemia? La respuesta está en la vigilancia digital, “un cambio de paradigma del que Europa todavía no se ha enterado”, dice Han. Un control poblacional inédito: “En China hay 200 millones de cámaras de vigilancia, muchas de ellas provistas de una técnica muy eficiente de reconocimiento facial. Captan incluso los lunares en el rostro. No es posible escapar”, explica sobre algo que ocurre también en Corea del Sur, Hong Kong, Singapur, Taiwán o Japón, donde “no existe una conciencia crítica ante la vigilancia digital o el big data”. Hay “un motivo cultural” que lo permite: “En Asia impera el colectivismo. No hay un individualismo acentuado”.


Yuval Noah Harari no es filósofo, es historiador, pero cuando escribe reflexiona como si lo fuera. En una nota publicada por Financial Times, el israelí asegura que “esta tormenta pasará, pero las decisiones que tomemos ahora podrían cambiar nuestras vidas para los años que vienen”. En este juego donde “países enteros sirven como conejillos de indias en experimentos sociales a gran escala”, hay dos opciones: “el primero es entre la vigilancia totalitaria y el empoderamiento ciudadano; el segundo, es entre el aislamiento nacionalista y la solidaridad global”. Sin embargo, para Harari, “una población bien informada y auto-motivada, usualmente es más poderosa y efectiva que un pueblo ignorante vigilado por la policía”.

“La situación es muy grave. Y no hay credibilidad en la afirmación de que el virus se propagó deliberadamente”, dice Noam Chomsky en una entrevista que le hicieron en Il Manifesto acerca de la pandemia y la reacción de los diferentes Estados. “Los países asiáticos parecen haber logrado contener el contagio, mientras que la Unión Europea actúa con retraso”, agrega. El filósofo y politólogo estadounidense desliza tres problemas sustanciales en este escenario: 1) “no tenemos ni idea de cuántos casos hay realmente”; 2) “el asalto neoliberal ha dejado a los hospitales sin preparación”; 3) “esta crisis es el enésimo ejemplo del fracaso del mercado, al igual que lo es la amenaza de una catástrofe medioambiental”.

Por su parte, la filósofa estadounidense Judith Butler escribió un artículo titulado “El capitalismo tiene sus límites” y publicado en Verso donde plantea “la llegada de empresarios ansiosos por capitalizar el sufrimiento global”. Se refiere a “la producción y comercialización de una vacuna efectiva contra el COVID-19. Claramente desesperado por anotarse los puntos políticos que aseguren su reelección, Trump ya ha tratado de comprar (con efectivo) los derechos exclusivos de los Estados Unidos sobre una vacuna de la compañía alemana, CureVac, financiada por el gobierno alemán. El Ministro de Salud alemán, con desagrado, confirmó a la prensa alemana que la oferta existió”.

La curva de contagios y muertes sigue ascendiendo, y si bien hay países donde la situación parece ser menos caótica que en otros, todos dicen lo mismo: lo peor aún no pasó. De este lado del Atlántico, la cuarentena se va a extender varias semanas más y, posiblemente, se radicalice la seguridad: control poblacional en las calles por parte de los Estados. ¿Con qué mundo nos encontraremos cuando por fin salgamos de nuestras casas y el coronavirus esté, por decirlo de algún modo, controlado? Los filósofos, los pensadores, los intelectuales insisten en que, además de acatar las medidas preventivas, es necesario reflexionar sobre la vida que llevamos. Las preguntas inteligentes nos sacan de la pasividad.










Procesado sin ruido

Además del COVID19


El militar retirado  Lawrie Rodríguez fue procesado con prisión por el asesinato de un militante de OPR 33 en la dictadura 

27 de marzo de 2020
La Diaria


Además, la Justicia solicitó la extradición de Manuel Cordero por su participación en el crimen. 



La jueza Isaura Tórtora procesó con prisión al militar retirado Lawrie Rodríguez por el asesinato de Iván Morales Generalli, dirigente de la Federación Anarquista del Uruguay-Organización Popular Revolucionaria 33 (OPR 33), durante la dictadura, informó hoy el semanario Brecha. Además, la jueza solicitó la extradición de Manuel Cordero por su participación en el asesinato. Cordero actualmente está preso en Argentina por su participación en delitos de lesa humanidad, en el marco del Plan Cóndor.
Morales estaba exiliado en Buenos Aires, pero en un viaje a Uruguay fue detenido por el Organismo Coordinador de Operaciones Antisubversivas (OCOA). Lo trasladaron a la Dirección de Información e Inteligencia y de allí lo llevaron al Regimiento de Caballería N° 6. Allí falleció a causa de las torturas que sufrió mientras estuvo detenido. Según el semanario, en el expediente de la justicia militar consta que Cordero y el capitán Gustavo Taramasco participaron en el interrogatorio.
En su momento, el médico militar José Mautone escribió en su autopsia que la causa de muerte fue intoxicación. En diálogo con la diaria, Tórtora explicó que la partida de defunción decía entre paréntesis “probable”. Cuando se investigó el caso, se constituyó una junta médica de la Cátedra de Medicina Legal de la Universidad de la República, que hizo una autopsia histórica y concluyó que “toda la información disponible en el expediente indica que la muerte de Iván Morales ocurrió en prisión” y la principal causa de muerte fueron los “traumatismos múltiples que vivió la víctima”, al ser torturado, el 21 de noviembre de 1974.


Caras & Caretas  27 marzo 2020

La información confirmada por el semanario Brecha agrega ademas, que la jueza solicitó la extradicción de Manuel Cordero por su participación en el asesinato. Cordero se encuentra  preso actualmente en Argentina, vinculado a delitos de terrorismo de estado durante la puesta en práctica del Plan Cóndor.
Iván Morales era dirigente de la Organización Popular Revolucionaria 33 Orientales, brazo de autodefensa de la Federación Anarquista del Uruguay; había nacido en Bella Unión departamento de Artigas y tenia 26 años al momento de su detención , el 21 de noviembre de 1974.
Según describe la “Investigación histórica sobre la Dictadura y el Terrorismo de Estado en el Uruguay (1973-1985)”, Morales “se encontraba viviendo en Buenos Aires desde mediados de 1973, luego de la decisión de la FAU de replegarse a dicha ciudad. El 20 de noviembre viaja hacia Montevideo y los servicios de inteligencia toman conocimiento de que al otro día se dirigiría a la casa de su compañera, por lo que, a partir del mediodía, se monta un operativo comandado por OCOA (Organismo Coordinador de Operaciones Antisubversivas), con apoyo de los Departamentos 4 y 5 de la Dirección Nacional de Información e Inteligencia (DNII)”.
Tras la detención lo llevan a la Dirección de Inteligencia policial de la calle Maldonado, por “30 minutos”, y luego al Regimiento de Caballería Nº 6, donde fue interrogado y murió: “aproximadamente a las 20:30 del mismo día, se le informó al juez militar de Instrucción de 4º turno su fallecimiento” recuerda en su dictamen la fiscal Ana María Tellechea.
La investigación recuerda que en el interrogatorio estuvieron presentes los militares Cordero y el capitán Gustavo Taramasco .
A partir de ese momento – sostiene la fiscal- se monta un plan de encubrimiento de las verdaderas causas de la muerte, que involucra una autopsia falsa y un también apócrifo estudio del cadáver firmado por el jefe del Servicio de Anatomía Patológica del Hospital de las Fuerzas Armadas, José Mautone, que caratuló en principio el caso como “suicidio”.
El militar retirado Lawrie Rodriguez  oriundo de Cerro Largo y sobre quién ya pesaban acusaciones de homicidio,como la de la militante Silvina Saldaña, y Leonado de los Santos, ayudó en el 2006  a la fuga de la  Justicia, del militar Gilberto Vázquez, a quien dio cobijo, según reconoció años después.
Lawrie Rodriguez ademas  fue responsable en el regimiento de caballería del interrogatorio a la militante Alma Rodríguez,compañera de militancia de Elena Quinteros y testigo de su detención.
El pedido de procesamiento por parte de la fiscalia data del año 2017.



En el día de ayer 26 de marzo, fue condenado Lawrie Rodriguez Haldene Rodríguez Freire, quien a partir de denuncia presentada en el año 2011 estaba siendo indagado por la muerte de la militante comunista Silvina del Carmen Saldaña Lapeira.
La causa 88-221/2011, fue iniciada en el juzgado Penal de 7º Turno de Montevideo, en el año 2011 y tenía como indagados a Pedro Porto; Antonio Farcic; Walter Forischi; Celmar Aridez; Miguel Meireles; Tulio Salaverry; Lawrie Rodriguez.
Silvina del Carmen Saldaña Lapeira había nacido en Salto el 21 de diciembre de 1943, era estudiante del Instituto de Profesores Artigas (IPA) y de la Escuela Universitaria de Servicio Social.
Militaba en la UJC, en el CEIPA (Centro de Estudiantes del Instituto de Profesores Artigas) y en la FEUU (Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay)
Fue detenida en la vía pública (en la intersección de 18 de Julio y Juan Paullier) en el marco del operativo a gran escala que desde el 20 de octubre de 1975 se desarrolló contra el Partido Comunista y el Partido por la Victoria del Pueblo, operación conocida como «Operación Morgan».
Toda vez que se produce su detención, Silvina es conducida al centro clandestino de detención y tortura conocido como “300 Carlos”, “El Infierno Grande” o “La Fábrica”, que funcionaba en las instalaciones del Servicio de Material y Armamento del Ejército (SMA), en los fondos del Batallón de Infantería Mecanizada Nº 13.
Un testimonio presentado por la OEA-CIDH, al gobierno uruguayo, por un detenido relataba en los términos siguientes la llegada de la militante al centro de torturas «300 Carlos»:“… Recuerdo que Silvina llegó al galpón de torturas. Batallón Blindados 13, y que fue retirada de allí aún con vida el 31 de marzo de 1976. Durante ese período sufrió brutales torturas, a consecuencia de las que perdió la razón, cosa que fue aprovechada para castigarla aún más, en medio de burlas groseras…”
Por su parte expresas políticas han relatado en el libro “Memorias para armar” lo que conocieron de Silvina:
“… contaron que te detuvieron en un café de 18 de Julio y Paullier. Fuiste desaparecida por algún tiempo, hasta que alguien te reconoció cuando estabas colgada desnuda en un barracón. Cada vez que pasaban te daban un puñetazo que te reventaba contra la pared. Tu cuerpo estaba lleno de machucones. Cuando te descolgaron te tiraron al suelo. A los compañeros que se acercaban les pediste humildemente: señores tápenme. Una noche te llevaron, ya no te vieron más…”
El testimonio de Beatriz Weissman, otra detenida, detalla la situación en que estaba Silvina cuando fueron separadas:“… Llegué ya vendada al “300 Carlos”, luego supe que era un cuartel, el “13” en la calle Instrucciones. Allí estuve cinco meses y medio, mi esposo seis meses. Al lado mío enloquecieron a Silvina Saldaña, y un día inolvidable, 31 de marzo de 1976, la bañaron y vistieron y se la llevaron, hablaba incoherencias… luego supe que nunca la volvieron a ver con vida…”
El certificado de defunción firmado por el Dr. José Mautone señaló en su momento como causa de la muerte “Suicidio por ahorcamiento”. Irónicamente el Ministerio de Defensa Nacional informó que “fue puesta en libertad”.
Los familiares señalaron que “la mataron en la tortura”.
Silvina Saldaña tenía, al morir, 32 años de edad y ayer se hizo justicia.

Brecha   Lawrie Rodríguez, un militar con activa participación en la represión antes y durante la dictadura, fue procesado con prisión por el crimen de Iván Morales Generalli.

LA JUEZA ISAURA Tortora dispuso este jueves el procesamiento con prisión del coronel (r) Lawrie Rodríguez Freire por el “homicidio muy especialmente agravado” del militante de la OPR 33 y dirigente de la Federación Anarquista Uruguaya Iván Morales Generali, en noviembre de 1974. Se trata del segundo procesamiento de militares desde la creación de la Fiscalía Especializada en Crímenes de Lesa Humanidad.

Rodríguez fue detenido en Treinta y Tres y trasladado al Juzgado Penal en Montevideo, donde la jueza Tortora le notificó su procesamiento; el militar fue alojado en la Guardia de Coraceros. Asimismo, la jueza solicitó la extradición del coronel (r) Manuel Cordero, condenado en Argentina por los crímenes del Plan Cóndor.

El procesamiento de Rodríguez fue solicitado en 2017 por la fiscal Ana María Tellechea, y más tarde ratificado por el fiscal Ricardo Perciballe. Según la investigación judicial, Morales fue detenido en una operación del Organismo Coordinador de Operaciones Antisubversivas (OCOA) y trasladado a la Dirección de Información e Inteligencia. Posteriormente, se lo trasladó al Regimiento de Caballería número 6, donde falleció. La autopsia oficial intentó encubrir la causa de su muerte. El documento firmado por el médico militar José Mautone estableció que su muerte se produjo por intoxicación. Sin embargo, la indagatoria judicial descartó esta versión: Morales falleció a causa de las torturas a las que fue sometido en la unidad militar.

Entre las pruebas recopiladas está el expediente de la justicia militar, que se inició tras la muerte de Morales en la unidad militar. El memorando de los hechos fue redactado por el entonces capitán Lawrie Rodríguez, que cumplía funciones de S2 (inteligencia) en el Regimiento. En ese expediente surgen los nombres de Cordero y del capitán Gustavo Taramasco, ambos del OCOA, como partícipes del interrogatorio.

Rodríguez tiene otro pedido de procesamiento por crímenes de la dictadura. El fiscal Perciballe solicitó su procesamiento por el “homicidio muy especialmente agravado” del estudiante de Agronomía Hugo Leonardo de los Santos, en setiembre de 1973. De los Santos, integrante del MLN-Tupamaros, fue detenido en las cercanías de la facultad y trasladado al Regimiento de Caballería número 6. Su muerte también intentó ser ocultada: la autopsia, también firmada por Mautone, señaló que murió a causa de un edema agudo pulmonar. Por este crimen el fiscal solicitó el procesamiento de otros dos militares: Alexis Grajales y Ariel Ubillos.

Lawrie Rodríguez fue un militar con activa participación en la represión antes y durante la dictadura. En 1971, fue comandante del Escuadrón de Operaciones Antisubversivas donde su gestión fue destacada. En dictadura se integró a los cuadros del OCOA, con activa participación en sus operativos; en 1974, Rodríguez comenzó a actuar como juez sumariante del Regimiento de Caballería número 6.

Rodríguez cobró notoriedad en 2006, ya que fue uno de los militares que colaboró con la fuga del coronel (r) Gilberto Vázquez, condenado por graves violaciones a los derechos humanos durante la dictadura. Vázquez se había fugado del Hospital Militar.











sábado, 28 de marzo de 2020

Como se hace un virus

Con guita


Por El Muerto (basado en una documental holandesa)(parte 2)

Algunos virus solamente afectan a animales  y otros virus atacan a los humanos. No pueden saltar de animales a humanos. Zoonosis son los virus que pueden transmitir enfermedades de animal a humanos


Para ello los virus deben de estar dotados de un código genetico especial que pueda ser compatible con los genes humanos llamado ACE2


La declaración oficial es que el coronavirus en el primer paciente se habría enfermado del COVID19 por comer sopa de murciélagos. Imposible! El virus del murciélago tendría que haber 1) Mutado para una celula humana 2) donde pueda alimentarse y reproducirse con material humano 3) ademas debe de ser transmisible.


El virus de un murciélago para integrarse y contagiar a una célula humana de forma natural necesita miles de años para que suceda. No sucede en un dia para otro.
Un virus de murciélago no puede sobrevivir sin ser inquilino de una célula de murciélago


El virus del murcielago ademas debe de ver cómo entra al cuerpo humano

Y se debe de integrar al cuerpo humano
.La naturaleza para lograrlo necesita millares de años. Hablamos de la evolución NATURAL de un virus.

Pero este tiempo no existió, espontaneamente esto no puede suceder.
Es la versión de los expertos de la Organización Mundial de la Salud, las Naciones Unidas y el Fondo Monetario Internacional.

Y que fue entonces lo que pasó?
Se manipuló el virus con ingeniería biológica

Así se fue descubriendo que las primeras versiones del nuevo virus se iban patentando aunque  no llegaron a ser el causante del COVID 19

Numero de patente, empresa, fecha. 
Las patentes estan a nombre de The Pirbright Institute

Y quien fue el que financió esta empresa?

El dueño de Microsoft

También conocido por financiar laboratorios que fabrican vacunas


Si vemos en las aciones que maneja este hombre veremos su habilidad para manejar capitales que no son para nada filantrópicos. Su interés es financiar en la industria farmacéutica. 200.000.000 bill Gates invirtió en la mas grandes empresas farmacéuticas

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Hace 2 días ... Event 201. >>> Del simulacro a la pandemia. El Centro Johns Hopkins para la Seguridad de la Salud en asociación con el Foro Económico ...

En febrero 2020 la empresa Moderna que trabaja en biotecnología estuvo experimentando con vacunas del corona virus para fabricarlas financiado por CEPI

Se formó una coalicion de empresas farmaceuticas para descubrir la vacuna del corona virus. Todas las empresas financiadas por Bill Gates.

Hay un problema y Bill Gates viene con la solución

El problema es el virus y Bill Gates tiene la vacuna