Cascos azules uruguayos haciendo mandados
Alerta máxima por la situación del Congo
El comunicado emitido por el Ejército Nacional de Uruguay, fechado el 27 de enero de 2025, revela una actualización crítica sobre la situación en la República Democrática del Congo (R.D.Congo), donde los efectivos uruguayos desplegados continúan enfrentando tensiones en un contexto de violencia y confrontaciones armadas. La información proporcionada por el Ejército refleja una jornada compleja, marcada por enfrentamientos entre las fuerzas de la FARDC (Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo) y el grupo rebelde M23, cerca de la Base "Siempre Presente", en la cual los militares uruguayos están establecidos.
ACTUALIDAD EN EL CAMPO DE BATALLA
Según el informe, desde las primeras horas de la mañana, los combates fueron ininterrumpidos hasta la tarde, lo que subraya la tensión constante en la región. A pesar de que la base en la que operan los uruguayos se encuentra relativamente protegida, el conflicto continúa desarrollándose a su alrededor. A las 08:30 hora local, las fuerzas de la FARDC comenzaron a aproximarse a la Base "Siempre Presente" con la intención de rendirse, lo que fue seguido por enfrentamientos entre estas y los rebeldes del M23, que resultaron en el control del Aeropuerto Internacional de Goma por parte del M23, una situación que aumenta la incertidumbre en la región.
LA SITUACIÓN DEL CONTINGENTE NACIONAL
Aunque los enfrentamientos fueron intensos, las autoridades informaron que dos efectivos del Contingente Nacional resultaron heridos, pero ninguno de ellos corre peligro. Se trata de los Cabos 2da Leonel Méndez y Sdo. 1ra Luis Caetano, quienes sufrieron heridas menores debido a esquirlas y rebotes. Este incidente resalta la peligrosidad del entorno y el alto nivel de riesgo al que están expuestos los efectivos uruguayos, quienes, a pesar de las adversidades, mantienen la moral alta y siguen cumpliendo con su misión.
UN ESCENARIO DE CONFLICTO COMPLEJO
Lo más preocupante de este informe es que la violencia sigue fuera de control, con los combates cesando sólo al mediodía y con un cambio en el panorama estratégico debido a la toma del aeropuerto por el M23. Este hecho señala la intensificación de la lucha en el noreste del Congo, donde los intereses internacionales se entrelazan con la política local, y las operaciones de paz de la ONU, en las que participa Uruguay, se ven gravemente afectadas.
UN EJÉRCITO EN ALERTA
A pesar de la grave situación, el Ejército Nacional de Uruguay ha destacado que todas las tropas se encuentran operando conforme al Mandato de la Misión de la ONU, tomando las medidas de seguridad necesarias. La resiliencia de las fuerzas uruguayas en este conflicto, a pesar de los riesgos constantes, refleja un compromiso con la misión de estabilidad y seguridad, mientras se siguen enfrentando las complejidades propias de un conflicto prolongado.
El comunicado destaca la importancia de mantener la calma y la concentración, a pesar de los desafíos y la incertidumbre. A su vez, subraya la importancia de la unidad y de actuar con la moral elevada, algo esencial en una misión de estas características.
El comunicado de este 27 de enero se presenta como una actualización clave, pero también como un recordatorio de la fragilidad de la situación en la región del Kivu del Norte y la inestabilidad que sigue siendo una amenaza constante para los efectivos internacionales. El Ejército uruguayo, mientras tanto, continúa desempeñando un papel fundamental en la misión de la ONU, operando con profesionalismo y dedicación en un entorno extremadamente volátil. (Crónicas del Este)
El fin de semana fue trágico para los militares de Naciones Unidas (ONU) en el Congo. Una ofensiva rebelde, apoyada por Ruanda, buscó invadir la ciudad de Goma, al este del país, y dejó como saldo una cifra aún indeterminada de muertos y heridos. Entre las víctimas hubo tres cascos azules: uno de Uruguay y dos de Sudáfrica.
El sábado 25 el Ejército Nacional anunció la muerte de Rodolfo Álvarez, soldado del Grupo de Escuadrones de Caballería Mecanizada N°1. También informó sobre heridas sufridas por el sargento Adrián Fernández, el soldado Franco Olivera y el soldado Elder Piriz (todos del Grupo de Artillería de Defensa Antiaérea N°1) y el cabo Roque Francia, del Grupo de Artillería N°5. Fernández debió someterse a una intervención quirúrgica que abarcó especialidades de otorrinolaringología, ortopedia y cirugía plástica. Permanece en estado crítico, aunque estable.
“En las últimas 24 horas se ha registrado un deterioro de la situación de seguridad en la provincia de Kivu Norte, al este, donde fuerzas rebeldes han intensificado sus operaciones militares. Asimismo, el conflicto ha provocado el retiro masivo de la población civil del área afectada”, informó el Ejército.
Los militares uruguayos —en su gran mayoría pertenecientes al Ejército aunque también hay de la Armada y la Fuerza Aérea— están presentes en la República Democrática del Congo desde hace 25 años. Es un contingente de alrededor de 800 efectivos integrantes del Batallón Uruguay IV, divididos hoy en tres bases ubicadas todas al este del país: una en la localidad de Rusayo, otra en la base logística RVA de la ONU y el resto en la base uruguaya Siempre Presente, en Goma. Forman parte de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en la República Democrática del Congo (Monusco, por sus siglas en inglés) en la cual hay casi 18 mil efectivos de distintos países. Los cascos azules de Naciones Unidas intentan detener los avances rebeldes de grupos como el Movimiento 23 de Marzo (M23), que opera en el este del país y es acusado de tener el respaldo de Ruanda. Los soldados uruguayos, en concreto, se encargan de proteger a la población civil.
Los ataques del M23 aumentaron desde el comienzo del año y, tras las muertes del fin de semana, Monusco logró mediar para establecer el lunes 27 un alto al fuego entre los rebeldes y las Fuerzas Armadas del Congo (FMRDC). “Los integrantes del contingente nacional uruguayo se abocan a descansar tras 96 horas de intensas operaciones. La situación se mantiene en calma. No se han registrado combates en la ciudad de Goma ni en las inmediaciones. Asimismo, se están logrando con éxito los reabastecimientos logísticos necesarios para recomponer reservas. Los efectivos se encuentran en buenas condiciones de salud”, fue el último informe emitido ayer miércoles por el Ejército.
Fuentes de gobierno indicaron a Búsqueda que la situación “es muy complicada y muy tensa”, y que las gestiones más urgentes del Ministerio de Defensa Nacional son para sacar del Congo a los militares uruguayos heridos. “Acá hubo una planificación y un golpe a matar a alguien de Naciones Unidas, en este caso a un integrante de nuestro Ejército. Es un ataque a Naciones Unidas”, dijo en conferencia de prensa el comandante en jefe del Ejército, Mario Stevenazzi.
El domingo 26, tras una reunión de emergencia, el Consejo de Seguridad de la ONU emitió una declaración para condenar las acciones rebeldes. "Exacerban la grave crisis humanitaria y de desplazamiento en la zona oriental de la República Democrática del Congo y socavan los esfuerzos por alcanzar una solución pacífica y política duradera al conflicto", señaló el organismo, que exigió el cese inmediato de la ofensiva hacia Goma, la capital de Kivu del Norte. El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, pidió además al Ejército de Ruanda que se retire del este del Congo y deje de apoyar al M23.
¿Cuál es la situación actual en el Congo?
En la provincia de Kivu del Norte están activos otros grupos militares además del M23. En total se calcula que en el país operan más de 100 grupos armados, más allá de ideologías y etnias.
El M23 es el más relevante. Liderado por miembros de la etnia tutsi, tomó mayor poder a partir de 2018, con la llegada a la Presidencia del Congo de Félix Tshisekedi, quien en diciembre de 2023 fue reelecto con el 73% de los votos. Aseguran que con Tshisekedi los derechos de su etnia —minoritaria en el país— han sido despojados. Paul Kagame, el presidente de Ruanda, también es tutsi y en el pasado ha acusado al gobierno del Congo de albergar a las milicias hutus que participaron en el genocidio de 1994 en Ruanda. Más allá de los argumentos étnicos y comunitarios, el este del Congo es una región rica de minerales en un país de por sí repleto de minerales como coltán, cobalto, cobre, diamantes y oro. El propio Consejo de Seguridad de la ONU ha afirmado que el conflicto tiene uno de sus fundamentos en estos ingresos económicos y condenó “la explotación ilícita y sistemática de los recursos naturales” en el este del Congo.
Pese a pelear contra el M23 y otras bandas rebeldes, en 2023, semanas antes de su reelección, el presidente Tshisekedi solicitó ante la Asamblea General de las Naciones Unidas que los cascos azules se retiren del país. Tanto el gobierno como parte de la población civil han criticado a los militares de la ONU por su falta de resultados para controlar a los rebeldes, y desde 2022 hay manifestaciones en Goma contra la presencia de la misión Monusco.
En noviembre de 2023 el entonces ministro de Defensa Nacional de Uruguay, Javier García, informó que la misión estaba próxima a terminar. “La República Democrática del Congo ha pedido el cese. Naciones Unidas está haciendo negociaciones con el gobierno del Congo a los efectos de hacer una transición ordenada de este final. Obviamente, eso tiene consecuencias para Uruguay. Si Naciones Unidas decide el retiro, allí estamos incluidos nosotros”, informó García a la Comisión de Defensa del Senado.
Desde entonces Uruguay solicitó a Jean Pierre Lacroix, secretario general adjunto de operaciones de paz de Naciones Unidas, que se analicen nuevos destinos para sus cascos azules, entre ellos la República Centroafricana y Malí, ya que el país considera las misiones de paz como un símbolo de sus Fuerzas Armadas e incluso de sus relaciones exteriores. "Es una política de Estado, es uno de los grandes capitales de Uruguay. Tener a estos verdaderos embajadores a lo largo y ancho del mundo es una muy buena cosa para el país”, dijo en diciembre el hoy ministro de Defensa, Armando Castaingdebat, en una rueda de prensa. Castaingdebat venía de participar en Montevideo de la Reunión Preparatoria Ministerial de las Naciones Unidas sobre Mantenimiento de la Paz, un encuentro en el que se le informó que, finalmente, Monusco iba a continuar en el Congo por lo menos hasta 2026. (Búsqueda)
La guerra por el coltán
Millones de desplazados y muertos. Pobreza y hambrunas. Un conflicto cuyo territorio se superpone con el de la extracción de uno de los minerales más buscados del planeta para la industria electrónica. El corazón del África colonial sangra.
Desde el comienzo del año, el M23 ha lanzado operaciones a gran escala en la región del norte de Kivu, con el apoyo de las Fuerzas Armadas de Ruanda. Esta ofensiva permitió a los rebeldes, equipados con artillería pesada y sistemas de lucha por GPS, extender significativamente su territorio tomando varias ciudades en el espacio de unas pocas semanas. El M23 abrió notablemente un nuevo frente en la provincia de South Kivu, en particular tomando el control esta semana desde Minova, una ciudad ubicada en una encrucijada estratégica a lo largo del camino hacia Goma.
"Estamos atrapados"
*"Estamos atrapados", declaró Bintou Keita, enviada especial de la ONU en la República Democrática del Congo (RDC) y jefa de la Misión de las Naciones Unidas en el país (MONUSCO), durante su intervención ante el Consejo de Seguridad.
La MONUSCO, que colabora con las Fuerzas Armadas Congoleñas (FARDC), había anunciado el día anterior la "reubicación temporal" de su personal "no esencial" en Goma. Según la ONU, en las últimas 48 horas, tres miembros de las fuerzas de paz de la MONUSCO han sido asesinados y otros 11 han resultado heridos.
"La reunión de hoy se celebra en un contexto de grave deterioro en la situación del este de la RDC", advirtió Jean-Pierre Lacroix, jefe de operaciones de paz de la ONU. Por su parte, Joyce Msuya, coordinadora adjunta de emergencias de la ONU, alertó sobre el rápido empeoramiento del conflicto y el peligro que supone para la población civil: "Si las hostilidades se extienden a Goma, un área densamente poblada, el impacto en los civiles podría ser devastador".
Msuya también recordó que más de 21 millones de personas en la RDC ya requieren asistencia humanitaria, en un país con una de las tasas de desplazamiento más altas del mundo.
Los militares uruguayos en el Congo, lo mismo que en Haití, son conocidos por sus actos de violaciones sexuales incluso a niñas, esto es de larga data. Es absolutamente obvio que "misiones de paz", si acaso fuesen eso, que no son porque son misiones auxiliares de uno de los bandos de una guerra, si lo fuesen, su fracaso en lograr la paz es total. La razón es que no resuelven el problema de fondo, el saqueo criminal de los bienes naturales del Congo, sino que lo agravan. El saqueo es producto del colonialismo, aquí con formas inhumanas de esclavización infantil y otras. Esa práctica es común por todas las fuerzas en guerra incluyendo al gobierno del Congo. Que además recurre a combatientes extranjeros de Burundi, el país con el peor índice de pobreza del mundo. Y el fracaso es tan evidente que el gobierno del Congo, ese al que fueron a ayudar en la guerra colonial de saqueo, les pidió que se fuesen, y no se van porque, por sus propios intereses mercenarios, quién quedarse allí hasta obtener otra misión mercenaria, seguramente peor como sería en Rca Centroafricana donde las tropas francesas practicaron violaciones similares. Esto es la prolongación del colonialismo, conscientemente, y con sus peores prácticas. Y la motivación es mantener un ejército inútil en la posible defensa del estado uruguayo, en una hipótesis de conflicto inexistente. Un ejército culpable aún de desapariciones forzosas, de actos de corrupción, y que justifica su condición mercenaria debido a la pobreza estructural en nuestro país que no se quiere resolver. "Para hacerse una casita" cuando la gente en Haití vivía en la calle durante años después del terremoto, y acá en Uruguay si se les quitase su vergonzosa condición militar y fuesen funcionarios públicos civiles podrían ayudar a resolver el problema de la vivienda de todos los pobres uruguayos. El problema de la salud, o del agua.
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