sábado, 30 de abril de 2011

Anncol somos todos

Desde la cárcel entrevista exclusiva con Joaquín Pérez Becerra, deportado de Venezuela a Colombia

 https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEinq8tbx5NlWaU8r7ZRTJf5ErH1XXgyEh0DvLGe1RVM4t_-whKeSnu67JcB_5bbSIFO2N-azSC6LodOTHaOg0Ax_V7g_j-MeWC1kO85mCEeB3zD0ngHrev8pVBDyb5CpUk4bCi2Iiv8rbw/s1600/web_20110426_6343_big_ce.jpg

“El objetivo de esta vaina es criminalizar los medios alternativos, cerrar una voz que esta en contra el gobierno colombiano, así de sencillo, esa es la finalidad”


POR DICK EMANUELSSON “ANNCOL SOMOS TODOS”



TEGUCIGALPA / 2011-04-29 / En una primera entrevista exclusiva para “ANNCOL SOMOS TODOS”, el deportado Joaquín Pérez Becerra, director de la Agencia de Noticias Nueva Colombia, ANNCOL, responde desde la cárcel La Modelo en Bogota, a las preguntas e inquietudes de miles de personas en el mundo que ha seguido hora por hora “el desarrollo de los acontecimientos en pleno desarrollo”, como suela a decir el Maestro Walter Martínez en el programa “Dossier”.

Lo relatado por Pérez Becerra a este reportero es indignante, más si entendemos que el director de ANNCOL ha sido uno de los más fieles defensores de la Revolución Bolivariana y su comandante Chávez. Varias veces Pérez Becerra y la Asociación Jaime Pardo Leal, la cual pertenece, ha sido convocante a actos de información y manifestaciones públicas en defensa al proceso político que comenzó en Venezuela 1999.
Andrés Izarra, MinCom
Pero una cosa es el mal trato por parte de la Guardia Nacional venezolana. Otra cosa es el actitud del representante político que Pérez Becerra cree fue el ministro de Comunicación, Andrés Izarra. Éste comenzó su carrera periodística en NBC y CNN, canales de televisión estadounidenses y la terminó en RCTV, Radio Caracas Televisión, la cuna mediática del Golpe de Estado en abril 2002, antes de asumir durante los años siguientes cargos altos en la administración de Chávez.
Nadie, ni Izarra ni algún representante de la migración venezolana preguntaron por la ciudadanía de Joaquín Pérez. Parece que ni siquiera estaban interesados de saberlo, dice Pérez en la entrevista, pese a que tenía el pasaporte sueco y la cédula sueca en mano.
Izarra ya tenía su versión escrita y la publicó en su “Twitter” solo una hora después de la detención de Joaquín Pérez en el aeropuerto de Maiquetía hace una semana, diciendo que Pérez era de nacionalidad colombiana.
Un periodista nunca debe exagerar o manipular la realidad y los acontecimientos. Pero no es una exageración de decir, que la reacción por la detención y la deportación a Joaquín Pérez no se ha limitado a Colombia, Suecia y Venezuela, sino a todo el mundo. Personalidades de todo tipo, movimientos sociales y organizaciones políticas se han pronunciado, alarmando a presidente Chávez, expresando que “revolucionarios no se deporta, se los defiende si es que es una Revolución auténtica”. Juristas, abogados y jueces han corregido los pocos funcionarios venezolanos estatales que han salido en defensa de la deportación, subrayando que si había alternativas jurídicas y sostenibles ante la deportación de Pérez.
Pero quiero poner en la primera línea el comunicado de La Asociación Nacional de Medios Comunitarios Libres y Alternativos de Venezuela, que muy preocupada por la deportación de Pérez dice que ella “generan una fisura en la confianza de los millones que construimos desde abajo, colectivo a colectivo, consejo comunal a consejo comunal, movimiento a movimiento, el socialismo y la patria bonita”.
Chávez no es nada sin las masas populares venezolanas. Cuando se abre una “fisura”, el enemigo la aprovecha.
A continuación la entrevista transcrita en gran parte con Joaquín Pérez:
* * *
* Dime en forma breve como fue el trato durante la detención en Caracas. La embajada sueca dijo que no pudo contactarse contigo por que no lo permitieron.
– ¡Fue muy grosera la vaina en Caracas! El tratamiento de la Guardia (Nacional) fue muy malo, muy malo y muy ofensivo. Inclusive se portó mejor la policía colombiana que a ellos, fue más correcta que ellos. Los venezolanos fueron muy ordinaria. . . No me dejaron ver televisión, nada para que no me diera cuenta de nada.
* ¿Estuviste totalmente incomunicado?
– Estuve incomunicado en Venezuela, hermano. Y rapidito al aeropuerto. ¡Fue muy, muy mala gente”! Yo he dicho acá (en la Cárcel de La Modelo) que ¡“yo no vuelvo a la patria de Bolívar”!
* ¿Había algún representante político por parte del ministerio del interior o de . . . .?
– Cuando me entregaron fue un ministro de Izarra, me parece, no me acuerdo.
* ¿Él te entregó a la policía colombiana?
– Yo creo que es él (Izarra), no estoy seguro, pero era del ministerio. Ni siquiera hablaba conmigo, se escondía y se. . . ¡eran unos HH.PP!
* ¿Alguien te preguntaba si era sueco o colombiano?
– Ellos. . yo les expliqué que era sueco.
Cédula sueca de Joaquin Perez
* ¿Tu ingresaste con el pasaporte sueco, no?
– Síííí, yo les conté . . . y tenía la cédula sueca y, ¡Pero no! Incluso llegaron al avión con la orden de Colombia y me capturaron ahí, como fuera la policía colombiana. ¡Unos malparidos! Una actitud mezquina y ordinaria. ¡Me trataron mal! Pero había una gente que estaba ahí con bajo perfil que era un poco más solidaria, pero como la orden venía de arriba, entonces no pudieron hacer nada. Estuve incomunicado, hermano.
* Ningún representante sueco . . . o venezolano. . .
– ¡Nadie, nadie!
* En Frankfurt (cuando hizo trasbordo) ¿había un chequeo especial o. . .?
– ¡No, no, no, no!
* ¿Todo normal?
– Todo normal, yo incluso dije “bye, bye” a los alemanes y seguí normal.
* En el mundo ha habido una reacción nunca antes visto, una reacción de indignación sobre la deportación de ti (a Colombia). ¿Qué piensas?
– A mi no me dieron ninguna oportunidad, a mi me aislaron para quedarse bien con el gobierno de Colombia. Fue una vaina alarmante.
* En la audiencia primera el martes pasado en la mañana (el día siguiente de la deportación) ahí ¿hablaron sobre la circula roja de Interpol?
– Si, hablaron sobre eso.
* Según el abogado tuyo, (las autoridades colombianas) abrieron el caso y armaron el expediente contra ti hace un año en una forma casi clandestinamente, basándose las pruebas en 700 supuestos correos tuyos de la computadora de Raúl Reyes.
– ¡¿Cuántos?!
* Dicen 700 correos.
– Eso es lo que dicen ellos. Tú sabes que ellos inventan y hacen trabajo logístico de meterse en los computadores, creando correos, creando cartas, tú sabes como son ellos.
* ¿Ese tipo de correos son inventos?
– No son pruebas por que no tiene ninguna credibilidad a la realidad por que son de unas computadoras que fueron destrozadas y desaparecidas. Uno no puede creer en eso, es como un fantasma. Parece que cada vez cuando ellos quieren, la computadora de Reyes escupe correos y fotos.
* . . . durante tres años. . .
– ¡Imagínate! Y sigue escupiendo correos. Y fuera de eso; en el juicio hubo un debate muy grande. El abogado (contratado por el gobierno sueco) fue muy bueno y hubo un debate, primero sobre la ciudadanía mía, la sueca, y ellos (la fiscalía) trataron de explicar que era ciudadanía colombiana. Hubo un enredado.
– Lo que pasa es que prácticamente me han enjuiciado en mi ausencia, ni siquiera me han avisado en la cancillería sueca o en la embajada (colombiana en Estocolmo), por que ellos saben que yo vivo allá. Todo el mundo sabe que yo vivo allá y que soy un hombre con papeles legales y yo no me he ocultado de nadie. ¡Es una cosa grosera!
* ¡Tu renunciaste la ciudadanía colombiana cuando volviste sueco nacionalizado hace diez años?
Joaquin Gómez, Simón Trinidad, Raúl Reyes, Gabriel ??,
canciller sueca Anna Lindh, Victor G. Ricardo,
año 2000 durante la visita en Suecia.
– Si. Yo les expliqué eso, pero no valía. Expliqué que luchaba por una solución politica negociada al conflicto (social y armado), que yo había cumplido un papel en el acercamiento con las FARC (cuando llegó a Suecia la delegación mixta entre guerrilla, gobierno y industriales colombianos encabezados por Raúl Reyes, Víctor G. Ricardo, el comisionado de paz del presidente Andrés Pastrana) y Cesar Villegas, presidente de ANDI, el 2 de febrero de 2000, nota del redactor) y que la pagina (ANNCOL) no es una pagina terrorista porque nosotros no hacemos terror y yo explique todo eso. Tengo un abogado muy bueno y solidaridad de mucha gente.
– Pero claro, el periodismo colombiano es muy grosero y muy astuto que parecen organismos de inteligencia. Incluso aquí mismo han venido periodistas para hacerme la entrevista y yo me he negado. Porque ellos utilizan cualquier cosa para hundirlo a uno pues uno no tiene confianza en esos medios. Entonces yo me negué a una entrevista con Vicky Dávila, con el diario el Tiempo y RCN (canal de televisión y de radio) y yo dije que no. Que más adelante cuando yo estuviera bien documentada y supiera los pormenores del caso, talvez yo accedería pero yo no confío en esa prensa porque es una prensa realmente grosera y arrodillada al gobierno colombiano.
* Uno sabe como manipula la información a su beneficio. ¿Este es resultado de la inteligencia y espionaje que hizo uno de los diplomáticos colombianos en la Embajada de Estocolmo en Suecia, el señor Ernesto Yamure que resultó ser también asesor político y amigo personal de Carlos Castaño?
– ¡Claro! Yo creo que puede ser por ahí, como es conocido nuestra vida por ahí y a ellos les queda muy fácil conocer nuestros nombres, como trabajamos en la radio, como yo me llamo en la radio, como me llamo en la página. A ellos les queda muy fácil hacer o sea que tienen una información muy vasta en general de lo que uno hacia ahí, conocía la radio, él conocía la acción que nosotros hicimos frente al Buque Gloria (julio 2005), nos tomó fotos. O sea; que había una documentación alta que trataron de meter en un computador y trataron de decir que había conexión con esta organización.
* Exactamente y justamente el registro sobre la manifestación en Estocolmo ahí sale la foto de Yamure, por que en ese folio (registro del DAS contra este reportero) ahí esta el articulo que yo escribí, esta en la carpeta que el DAS y el G3 que registró de mi persona como periodista en ese momento. Y se hace entender como “fuente habitual” debe ser el encargado en la Embajada colombiana en Estocolmo (Ernesto Yamhure) que hizo ese registro contra mi y contra ustedes que estaban allá en el muelle.
– Si claro, en general yo creo que esto es una vaina mediática. O sea, el objetivo de esta vaina es criminalizar los medios alternativos, cerrar una voz que está en contra del gobierno colombiano y obligar a la gente a que no hablen mal de un gobierno terrorista. Esa es la finalidad
* Lo que han ganado allí es generar cientos de nuevos corresponsales para ANNCOL.
– Uy, si, hermano, ya estoy mejor, yo estoy muy feliz.
* Es muy impresionante, realmente, la reacción por la deportación tuya de Venezuela a Colombia. Eso lo digo en forma personal de viejo amigo tuyo, no. Y no solamente es parte de esta entrevista.
– Ya te conozco. Si, mira y entre esto es que no me recuerdo que dijo Nicolás Maduro. ¿Qué dijo?
* Bueno, se pregunta el canciller Maduro por qué las autoridades suecas no habían detenido a Pérez en Estocolmo. Entonces yo me pregunto por qué Maduro no hace la misma pregunta a las autoridades alemanas, en el aeropuerto más seguro, más vigilado en el mundo, que es el de Frankfurt, Y por qué no se pregunta Maduro el por qué Santos era el más informado que las dos autoridades mencionadas, o sea sueca y alemana. Y llamó a Chávez en pleno vuelo de Pérez entre Frankfurt y Caracas y llamó informándolos tan generosamente que llegaría un pez gordo y que le hiciera el favor de detenerlo.
– Sí, sí. . .
* ¡Imagínate!
– Si, si, si, es una vaina
* Las autoridades suecas, ¿cómo se han portado? Porque yo estaba todos los días, varias veces, en contacto tanto con la cancillería sueca, en Estocolmo, como en la cancillería sueca, en Bogotá. Y han sido conmigo, como periodista, correctos, trataban de explicar y responder todas mis preguntas. De todas maneras no han tenido muchas respuestas porque decían que ha sido negado el contacto contigo en Caracas. Pero en Bogotá se encontraron, la noche que llegaste el lunes en la noche y también estuvo el cónsul Erick Wollin en la mañana del martes en la audiencia pública.
– Si, se han portado magníficamente, me han prestado el apoyo, este martes van a venir a visitarme otra vez, están pendientes de mi situación y Erik estuvo ahí en la audiencia todo el día conmigo y el abogado le pasó el informe en la noche, se han portado muy bien.
* Bueno, me alegro. ¿Algunas palabras para la comunidad internacional y sobre todo para los colombianos?
– Si, que yo me siento muy defraudado con la actitud del gobierno bolivariano. Un gobierno al que nosotros hemos apoyado, un gobierno al que nosotros hemos difundido a través de Café Stereo y ANNCOL los propósitos de la Revolución Bolivariana en Venezuela y por lo tanto creo que esto es un golpetazo. No es nada presentable para el gobierno bolivariano. Yo no sé cómo van a remediar esto, yo no se cómo van a cambiar de actitud, pero me parece que la solidaridad, de pronto, va a sufrir una merma porque se está dando cuenta que no puede haber un gobierno que entregue a un comunicador social que ha trabajado para difundir el terrorismo de estado en Colombia. Entonces a los otros latinoamericanos, suecos, europeos que nos conocen, bueno, pues, que estamos dispuestos para recibir la denuncia porque este es un ataque contra la libre expresión, contra la libertad de prensa. Es una actitud para cerrar la boca a la gente que está afuera, es un terror mediático para impedir que el mundo conozca cómo es la oligarquía colombiana, asesina, que arremete contra los derechos humanos que aparentemente está mejor con el gobierno de Santos, pero eso es una total mentira.
– Entonces, a esa colonia internacional un abrazo, los quiero mucho y seguimos la jugada, que aquí estamos decididos a enfrentar a este régimen terrorista.
Muchísimas gracias, Joaquín Pérez Becerra y siente que no estás solo.

Miserias











Miserables uruguayos




.

El escalofriante relato de Hilda Victoria




Victoria Montenegro le hizo honor a su nombre y a su sangre, aquella que recién asumió como propia hace apenas unos años. Su historia es uno de los tantos ejemplos que demuestran lo complejo y difícil que resulta para un hijo de desaparecidos, apropiado durante la última dictadura militar, asimilar la realidad a la que fue sometido. Por eso, el testimonio que Victoria brindó el pasado 25 de abril ante el Tribunal Oral Federal Nº 6, en el marco del juicio sobre el plan sistemático de robo de bebés por parte del terrorismo de Estado, fue un triunfo para la causa de los derechos humanos. Una clara muestra de que la lucha no fue –no es– en vano.

Victoria nació el 31 de enero de 1976. Tenía apenas 13 días cuando sus padres, los militantes Hilda Ramona Torres y Roque Orlando Montenegro, fueron asesinados en un operativo en Boulogne, partido de San Isidro. Su apropiador fue el jefe de aquella redada: el agente de inteligencia del Ejército Herman Tetzlaff, ya fallecido. Victoria no sólo relató a la Justicia su historia de vida, sino que ahondó en aquello que su apropiador le contó durante sus años de convivencia. Entre esas revelaciones, sobresalieron los vínculos que Tetzlaff –jefe del Grupo de Tareas que operaba en el centro clandestino de detención El Vesubio– mantenía con el actual fiscal de la Cámara de Casación Juan Martín Romero Victorica, quien hoy interviene en la causa que busca determinar si los jóvenes Noble Herrera son hijos de desaparecidos.






VICTORIA MONTENEGRO, HIJA DE DESAPARECIDOS, DECLARO POR PRIMERA VEZ CONTRA SU APROPIADOR Y REVELO EL ROL DE ROMERO VICTORICA
“El fiscal llamaba a casa y le daba información”

En la causa sobre el plan sistemático de apropiación de hijos de desaparecidos, Montenegro denunció que el fiscal de Casación Juan Martín Romero Victorica le filtraba información al coronel Herman Tetzlaff, su apropiador y asesino de su padre biológico.

Por Alejandra Dandan

Entró en la sala de audiencias sin pañuelo, convencida de que no le iba a hacer falta. Su apropiador se lo había dicho muchas veces: que no llorara, que ésa era una forma de mostrarse débil ante el enemigo. Victoria Montenegro ayer lloró, lloró mucho, acompañada por buena parte de la sala. Contó escenas de sus años de hija de desaparecidos apropiada por un coronel de Inteligencia del Ejército. Por primera vez en su vida declaró contra él y, de alguna manera, a favor de la recuperación de la historia de sus padres biológicos. En medio de ese relato denunció al fiscal de Casación Juan Martín Romero Victorica porque, mientras la Justicia investigaba a su apropiador, el fiscal filtraba información hasta veinte días antes. Al terminar la audiencia, en la causa sobre el plan sistemático para apropiar hijos de desaparecidos, el fiscal Martín Niklison pidió al Tribunal Oral Federal 6 que impulse una denuncia penal a Romero Victorica y envíe los datos al procurador general.

“Yo de Romero Victorica nunca dije nada y, pese a que tuve charlas en Abuelas, siempre me contuve –dijo Victoria–. Nunca dije nada porque estaba convencida de que soy una persona sumamente leal y que yo le debía lealtad a él, porque había ayudado a mi papá. Cuando hace poco me llamaron para declarar en una causa, me di cuenta de que a este señor no le debo nada, que en realidad no ayudó nunca. Que mi papá está desaparecido. Y que él hizo todo lo contrario: ayudó a que yo apareciera más tarde, y ahora tengo a mis abuelos muertos, a mi tía también muerta... Recién entonces pude darme cuenta de quién es esta persona.”

Romero Victorica era amigo de Herman Tetzlaff, el apropiador de Victoria. Ella ubicó esa relación desde antes de 1992. En ese momento, la Justicia reabrió una causa contra Tetzlaff y ordenó detenerlo. Romero Victorica, que en la familia era mencionado con un apodo, le puso tres abogados y en tres meses lo sacaron de la cárcel. Victoria dijo que eran abogados que ellos no estaban en condiciones de pagar. Y que luego le adelantó a su apropiador todos los avances de la causa: “El llamaba a casa y le daba información”, explicó. En una ocasión, para el momento de la primera detención de su apropiador, fue Victoria la que le atendió el teléfono. Ella lloraba: “El me dice que me quede tranquila y me pega dos gritos: me dice que llorando no se soluciona nada, que mi padre estaba orgulloso de mí, que yo debía contenerlo, que iba a salir, que él iba a poner a unos amigos para que lo sacaran... Ahí me entero de quién era esta persona”.
La historia

Victoria nació el 31 de enero de 1976. Sus padres eran Hilda Ramona Torres y Roque Orlando Montenegro, dos militantes de la JP primero y luego del ERP, salteños, una familia que escapaba del Operativo Independencia. Trece días después del nacimiento, un grupo de tareas entró en la casa donde vivían, en Boulogne. Tetzlaff era el jefe del operativo, un hombre que había sido jefe de los grupos de tareas de El Vesubio, jefe de Inteligencia y en algún momento encargado del arma de Comunicaciones en Campo de Mayo. Se apropió de Victoria seis meses después del operativo en el que –como le confesó más adelante– él mismo asesinó a su padre. ¿Usted vivió con otra identidad durante muchos años? –preguntó Niklison al comenzar la audiencia.

“Me llamaron María Sol Tetzlaff Eduartes, nacida el 28 de mayo del ’76 en Boulogne, San Isidro, como hija del coronel Herman Antonio Tetzlaff y de su esposa, María del Carmen Eduartes. Yo nunca tuve dudas de que no era María Sol, me decían que era hija de ellos”, explicó. ¿Qué versión le dieron? “Yo siempre tuve dudas, pero sobre el horario en el que había nacido. Lo que le preguntaba a mi apropiadora era la hora: sabía que el 29 de mayo era el Día del Ejército. Me decían que el 28 Herman tuvo un desfile militar en San Isidro, ella se descompone y yo nací en la Clínica del Sol.” ¿Cuándo aparecieron las dudas de que no sería hija de ellos? “Cuando tenía nueve años, calculo, llaman a Herman a un juzgado de Morón. Un día yo lo acompaño. Entro con él al despacho del juez y el juez pregunta si no era mejor que yo esperara afuera. El dijo que no. El juez saca del cajón una causa y le dice que las ‘viejas’ ya estaban empezando a molestar. Que se quedara tranquilo, que el encargado de todo esto era otro colega, pero que tomara conocimiento de que estaba pasando esto.”

Eso sucedió alrededor de 1989. Victoria no se acuerda del nombre del juez, pero sabe que en ese momento empezó la causa a Tetzlaff. “Hasta entonces, yo lo que sabía era que en Argentina hubo una guerra, en ese momento yo consideraba a Herman como mi papá, para mí la subversión se estaba vengando de ellos que habían sido soldados; que los desaparecidos eran mentira. Pensaba que no eran personas físicas, sino un invento de las Abuelas.”

Cada vez que aparecía en TV algo que no cerraba con ese relato, Tetzlaff la sentaba a adoctrinarla. Le dijo que lo primero que hacía la subversión era dañar a la familia, núcleo vital de una sociedad sana. Que las Abuelas instaban las dudas para crear miedo. “Por eso para mí eran todas unas mentiras: yo era hija de él y estaba convencida de que todo era un invento.”

Tetzlaff era enorme: medía dos metros y pesaba 145 kilos. Era rubio como su mujer, descendientes de alemanes. Vivían rodeados de policías y de militares en los monoblocks de Villa Lugano, que recién se habían construido, dijo Victoria. El departamento solía estar lleno de banderas. Tetzlaff hablaba de la causa: “La causa no sé qué era exactamente, pero era una bandera celeste y blanca; ellos eran los buenos, había una causa nacional; era el olor a cuero, las botas, la familia cristiana, la misa, cenar afuera porque Mary no cocinaba, para mí ésa era la familia: los restaurantes llenos y Herman que terminaba las conversaciones con la 45 arriba de la mesa diciendo: ‘Yo siempre tengo razón, y más cuando no la tengo’”.
Victorica

Entre los amigos de Tetzlaff estaban Leopoldo Galtieri, Guillermo Suárez Mason y Omar Riveros. Con la democracia, a Tetzlaff lo ascendieron de teniente coronel a coronel, lo mandaron a Paraná como juez de instrucción militar para alejarlo por las causas que empezaban a ventilarse en Buenos Aires. Cuando Victoria cumplió 15 años, lo detuvieron por primera vez: entonces apareció Romero Victorica.

“Herman estaba muy nervioso. Un día me llama y me plantea que ya había una causa que había tomado (Roberto) Marquevich, que era un juez montonero, que estaban las Abuelas de por medio, que lo más probable era que me sacaran sangre para compararla con el Banco Genético que en realidad lo manejaban las Abuelas.” En ese momento, también le dijo que seguro iban a decirle que era “hija de la subversión, así es que seguramente después vengan y te saquen de casa. Yo decía mientras tanto que no: que diera lo que diera, me iba a quedar con él; él me lo agradeció y que me dijo que no esperaba otra cosa de mí”.

Para entonces, Tetzlaff tenía a su “amigo en Comodoro Py” que le pasaba todos los datos, dijo ella. Cuando Marquevich, que era juez de San Isidro, la llamó para sacarse sangre, Tetzlaff la acompañó al Banco Genético. Poco después, le anunciaron la primera parte de lo esperado: que no era hija de quienes hasta ese momento suponía sus padres. “Me dijeron que en un 99 por ciento yo no era hija de ellos, pero yo dije que me quedaba con ese uno por ciento, porque sí era hija de ellos. Les decía que eran todos unos subversivos, porque pensaba que era hija de ellos.”

En el camino, Tetzlaff quedó detenido. Romero Victorica puso a sus amigos abogados que, según el relato, le debían un favor. Uno de ellos era un sobrino suyo de apellido Romero Victorica y otro Martín Anzoátegui, juez federal durante la dictadura, que ordenó en 1981 allanamientos a los organismos de derechos humanos. “Lo sacaron a Herman a los tres meses de Caseros, entró en diciembre y salió en abril para la Pascua”, recordó ella.

Mientras tanto, Marquevich seguía buscando la identidad. Un día le pidió más sangre para compararla con otras muestras, pero ella se negó para frenar la causa. Un mes y medio después, su apropiador, que ya sabía lo que estaba pasando, le avisó que la iban a llamar de la Cámara de Casación de San Martín. Ella entró a entrevistarse con los jueces sabiendo que había tres, “uno subversivo y montonero y dos de los nuestros”, dijo. Después de entrevistarla, la Cámara sacó un fallo aceptando que no se sacara sangre, un fallo que nutrió más adelante la resolución de Evelyn Vásquez, que terminó confirmada por la Corte Suprema de Nación.

Victoria le avisó Tetzlaff: “Me acuerdo que Herman me esperaba en una parrilla cerca –dijo–, y yo fui y le llevé el fallo. Me felicitó: ‘Muy bien, m’hija’, me dijo. Se lo di y me acuerdo que cuando me senté creo que fue el comienzo del momento de empezar a hacerme cargo de la otra historia. Pensé: ahora soné si alguna vez quiero saber algo”.

Finalmente, no hizo falta una nueva muestra. Con los nuevos métodos, el juzgado hizo el cruce. Marquevich la llamó un día para decirle cuál era su familia: “Me agarró terror –dijo ella–, porque era hija de la subversión, ése fue el primer miedo”. Cuando su apropiador estaba enfermo o ya había fallecido, ella entró al despacho de Romero Victorica en Comodoro Py. Iba a preguntarle cómo hacer con su nuevo documento porque no lo quería. “¡Si lo habré tenido al gordo acá sentado horas!”, contó que le dijo el fiscal.
El complot contra el juez

Un día, Martín Anzoátegui y otro de los abogados que le había asignado Juan Martín Romero Victorica llamaron a Victoria para proponerle un complot contra el juez Roberto Marquevich. “Para destruir al joven Marquevich”, le dijeron, según contó ella. “Creo que fue cuando el juez ordenó la detención de la señora (Ernestina Herrera) de Noble –dijo Victoria–: decían que había pasado todos los límites.” La propuesta consistía en denunciar al magistrado. Tiempo antes, Marquevich se había enojado con ella porque se negaba a leer el expediente con la historia de sus padres. Le preguntó si sabía leer y le gritó que leyera. Victoria salió del despacho diciendo le habían gritado. Y los abogados ahora pretendían montarse a esa situación: “Querían que yo saliera a los medios a decir que había sido víctima de malos tratos de parte del juez y ellos me iban a ayudar para agrandar esa situación”, dijo. “El tema era que si corríamos a Marquevich de la causa se paraba el expediente y papá además zafaba de ir preso.” En ese contexto, Victoria agregó un detalle: ella aceptó hacer la denuncia para la que los abogados aseguraban contar con todos los medios, pero finalmente no avanzaron porque, al parecer, la vieron muy temerosa. Marquevich fue destituido, pero Victoria recordó que entre las causales de la destitución se mencionaba a su apropiadora: al juez lo acusaron de darle a ella prisión domiciliaria y a la dueña de Clarín, no.
Golpes, gritos y amenazas

Después de nacer, Victoria estuvo de enero a mayo del ’76 en la comisaría de San Martín, al cuidado de unas monjas. Con ella había otros seis bebés, supo por su apropiador. Las monjas los tenían al parecer durante un plazo perentorio: si no los entregaban en los primeros meses, eran enviados a Casa Cuna. Tetzlaff convenció a su mujer de recoger a la niña cuando se acercaba ese límite. Se llevó otro bebé para Lina, su empleada doméstica. Y él mismo decía que los otros se los llevaron hombres de Lugano. Cuando tenía unos cinco o seis años, ella rompió una taza de porcelana de la apropiadora: “Mary me empieza a pegar, y me dice que me devolvía a las monjas. Cuando llega Herman, él le dijo que ya no podían hacerlo, así que después yo le pido perdón, ella me perdona y me dice que por esta vez me quedo en casa”. Cuando creció, no podía escuchar música porque era subversiva. Su hermana más grande –hija biológica del matrimonio– solía hacerlo pero sin que supiera el padre. “Una vez puso la ‘Marcha de la Bronca’, la apagó y cuando salimos todos en el auto yo me pongo a cantar, porque era pegadiza... No llegué a decir uno, dos y me comí un cachetazo de Herman, que me cimbró la nuca”, contó. “Mary puso música en la radio, Luis Miguel o algo así y me dijo: ‘Vos tenés que escuchar esta música y no música subversiva’.” Otra vez, cuando la película La historia oficial ganó el Oscar, su apropiadora sacó la bandera por la ventana para festejar. ¡Vamos Argentina!, decía. “Cuando llegó Herman –dijo Victoria– va al dormitorio y le dice: ¿qué hacés? Ella le responde que habíamos ganado el Oscar y él le dice: ¿pero no entendés nada?”

viernes, 29 de abril de 2011

Juicio a un crimen brutal




Viernes, 29 de abril, 2011
Torturas en 1974
Mujica y Huidobro testigos

El presidente de la República, José Mujica, el senador Eleuterio Fernández Huidobro, y el integrante del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros (MLN-T), Mauricio Rosencof, fueron propuestos para declarar como "testigos" en un nuevo proceso judicial por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.

El tupamaro Antonio Viana Acosta presentó ante la jueza Penal de 7º Turno, Mariana Mota, una denuncia penal por los delitos de "tortura" y "desaparición forzada", bajo la figura de "genocidio", perpetrados contra su persona durante sus ocho años de detención, por parte de la dictadura.

En este sentido, la denuncia de Viana Acosta impulsa la categorización de los crímenes como delitos de lesa humanidad y, por ende, imprescriptibles y de juzgamiento obligatorio para todos los Estados, según expresó su abogado Pablo Chargoñia, en diálogo con LA REPUBLICA.

La tesis promovida en la denuncia se sustenta en el reciente fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), explicó Chargoñia.

El "Negro" Viana Acosta fue detenido el 21 de febrero de 1974 en Buenos Aires (Argentina) y trasladado a la Coordinación Federal ("Coordina"), donde fue torturado por militares y policías uruguayos.

El 4 de abril de 1974, Viana Acosta fue llevado a Aeroparque y trasladado al Uruguay en un vuelo de Pluna, siendo el primer uruguayo enviado en forma clandestina hacia Uruguay, en el marco del "Plan Cóndor".

Domingo, 14 de septiembre, 2008

A solas con Nino

Fueron testigos de aquella tortura tres dirigentes principales de los tupamaros que estaban en el Batallón. Eleuterio Fernández Huidobro ("El Ñato") se alojaba en la Celda "3". En la "2" estaba Mauricio Rosencof ("Pelado" o "Caruso") y en la Celda 1, se encontraba José Mujica ("Pepe" o "Facundo").
Fernández Huidobro relata el horror de aquella tortura al "Pantera Negra" durante aquellos días de "tacho" y "picana", en los que su cuerpo masacrado era tirado diariamente en la Celda "4". Al quinto día ya lo iban a torturar en el mismo calabozo. "Yo vivo en Buenos Aires, en Quilmes" se defendía Viana.
El 22 de abril, llegó a Rocha el mayor José Nino Gavazzo. Acababan de matar a Silvia Reyes, esposa de Washington Barrios, junto a sus amigas Laura Raggio y Diana Maidanick.
El Nino llevaba a una detenida de Artillería 1 y aprovechó para hacerle un careo con Viana en la enfermería del Batallón 12.
Quería saber sobre Washington Barrios. Ante las negativas de Viana, Gavazzo lo subió a la sala del "S 2" y lo torturó personalmente. Le llegó a cerrar una puerta en la mano para quebrarle todos los dedos. Entonces ordenaron que lo enviaran al cuartel de Minas... "Allí vas a hablar, todos hablan", le advirtieron.

Lunes 13 de agosto de 2007


Antonio Viana Acosta, uruguayo, secuestrado en Argentina en 1974


“Me torturaron en Coordinación Federal durante 15 días sin descanso”

Este testimonio se agregará a la causa sobre la Triple A, en la que la Cámara Federal ratificará en los próximos días que los delitos de la banda parapolicial son de lesa humanidad. El relato será un aporte clave para mostrar que la Alianza Anticomunista tuvo sustento estatal y colaboró con la dictadura uruguaya. Además, introduciría un caso de tortura concreto contado por un sobreviviente.

Por Irina Hauser PAGINA/12

“Hacía varios días que percibía que me estaban siguiendo. Eran las tres y media de la mañana cuando me desperté con el ruido de los vidrios de las ventanas que se quebraban y vi que estaban empujando la puerta de mi habitación. Me encañonó el comisario (Juan Ramón) Morales. Con él estaban (Alberto) Villar y (Luis) Margaride. Me sacaron a la terraza y la lluvia de puntapiés no terminaba más. Como yo tenía un taller de reparaciones de radios para hacerme un manguito, ahí mismo agarraron la punta de los cables y me picanearon. Me llevaron a Coordinación Federal y me siguieron picaneando durante dos semanas.” La pesadilla de Antonio Viana Acosta comenzó aquel 21 de febrero de 1974 y continuó. Estuvo tres meses cautivo en Buenos Aires y después el gobierno de Juan Domingo Perón lo mandó a Uruguay, su país de origen, donde la dictadura lo tuvo preso casi ocho años más, relató a Página/12. Su testimonio será presentado en la causa de la Triple A que instruye el juez Norberto Oyarbide como muestra de la coordinación represiva que antes del golpe de 1976 mantenían ambos países y como prueba de que ya entonces se cometían delitos de lesa humanidad.

“¡Sos tupa, sabemos que sos tupamaro y te venimos a llevar!”, recuerda Viana Acosta que le gritaba la patota que lo apresó, liderada por la propia cúpula de la Federal: su jefe, Villar, y el superintendente Margaride. Los escoltaban Morales y su yerno Rodolfo Almirón, ambos hombres clave de la custodia oficial, jefes operativos de la Triple A que habían sido ascendidos tres días antes a comisario inspector y subcomisario, respectivamente.

Entre el tumulto, Viana cuenta que advirtió que participaba de su captura “gente del comando de la Juventud Peronista de la República Argentina (JPRA)”, que lideraba Julio Yessi, mano derecha del ministro de Bienestar Social, José López Rega, quien movía los hilos de la organización terrorista. También vio, asegura, al general Miguel Angel Iñíguez, primer jefe de policía de Perón a su regreso del exilio. Iñíguez había participado en la masacre de Ezeiza, que desató la derecha peronista en la movilización que había ido a recibir al General el 20 de junio de 1973. Actuó allí como miembro del COR (Comando de Oficiales Retirados), una organización que luego se fusionó con la AAA.

El ex subcomisario Almirón fue descubierto en diciembre del año pasado por periodistas del diario español El Mundo en un pueblito de Valencia. Frente al hallazgo, el juez federal Norberto Oyarbide desarchivó la olvidada causa sobre la Triple A, originada en 1975. Le bastó revolver unos papeles para encontrar que había un pedido de captura contra Almirón librado en 1984, lo actualizó y pidió su extradición, que está en trámite. Había un pedido de detención idéntico contra Morales. A comienzos de enero, Morales fue visto bastante más cerca: estaba tomando aire en su balcón en Palermo. Ahora cumple arresto domiciliario. Oyarbide también imputó a Isabel Perón y detuvo a otro ex policía, Miguel Angel Rovira.

Como paso previo, el juez declaró que los crímenes de la banda parapolicial son delitos de lesa humanidad (imprescriptibles) por haber sido cometidos desde el aparato del Estado. La apelación de Morales sería resuelta en los próximos días por la Sala I de la Cámara Federal, que prepara un fallo que avalaría el criterio del juez. El testimonio de Viana Acosta sería un aporte clave para mostrar que el despliegue de la Alianza Anticomunista tuvo sustento estatal y colaboró con la dictadura uruguaya. Además, introduciría un caso de tortura concreto contado por un sobreviviente. El dirigente tupamaro vive actualmente en la barra del Chuy, en Uruguay. Ya se contactó con la fiscalía de Eduardo Taiano, que interviene en la causa, y enviará su relato a través de la abogada Liliana Mazea.

Caras inconfundibles

Viana tiene hoy 58 años. Había llegado a Buenos Aires en abril de 1973, para continuar su militancia en derechos humanos. “En Uruguay me tenían mangiado”, comenta. “Trabajaba junto con Zelmar Michelini, Enrique Erro y Juan José Chenlo. Fundamos la Junta Coordinadora Revolucionaria, que integraban el ERP, el Ejército de Liberación Nacional de Bolivia, los tupamaros uruguayos y alguna que otra organización. Queríamos difundir lo que pasaba en cada país ya que había una represión total a todos los movimientos políticos y revolucionarios de la región”, repasa.

A mediados de aquel año vio en los diarios que el Ministerio de Bienestar Social pedía voluntarios para trabajar como asistentes sociales. Y se anotó. “Era una forma de retribuir la hospitalidad que recibía”, explica. “Atendía, junto con otras treinta personas, a la gente de las villas que venía a pedir ropa, alimentos, querosén y ayuda de distinto tipo. Después firmaba los recibos. Me acuerdo que en una oportunidad tuvimos que asistir un parto que se precipitó en la espera.” Así pinta la cara amigable de la repartición donde había recalado, aunque en unos meses comenzó a ver la faceta demoníaca: “Hombres que entraban y salían con Itakas y FAL y a la vista, vestidos con camperas de cuero negras, eran una constante. Había una entrada por la calle Alsina 120, donde yo estaba, y los veía pasar todo el tiempo. Mis compañeros me explicaron que era la efervescencia de la ultraderecha peronista”.

Así fue como conoció, dice, a Morales y Almirón. Por eso no tardó en reconocerlos cuando lo fueron a buscar a su casa. Vivía en un hotel en Once, en Anchorena y Rivadavia, que administraba con un grupo de personas a modo de cooperativa. Desde varios días antes, cuando llegaba de trabajar, advertía en los alrededores “autos y rostros de personas que había visto en el ministerio”. Horas antes de que se lo llevaran había sido detenida su mujer, Estela Angela Barboza Silva, mientras hacía un trámite para su radicación.

“Margaride y Villar me torturaron en persona, en mi propia casa, con corriente eléctrica. Morales lo hizo en Coordinación Federal (organismo represivo de la policía). En los ojos, en la boca, en todo el cuerpo. Me interrogaban sobre el ERP, el MLN Tupamaros, querían datos, direcciones. En Coordinación fueron 15 días de tortura sin descanso dentro mismo de la celda”, reconstruye. Después fue trasladado a la cárcel de Devoto, luego pasó por Caseros y al final en una alcaidía. En el ínterin, a través de la hija de otro detenido y de un grupo de bolivianos que había sido liberado, hizo llegar un pedido de ayuda a los abogados de presos políticos Silvio Frondizi y Rodolfo Ortega Peña.

No tardaron en ir a verlo. Pero un día después de ese encuentro, el 4 de abril de 1974, Viana Acosta fue llevado a Aeroparque, donde varios policías de civil lo obligaron a subir a un avión de Pluna. En la escalinata del avión se reencontró con su mujer. “La vi muy mal y si podía disparar de al lado mío disparaba. Incluso le di una esquelita que ella rompió. Cortó toda comunicación conmigo desde entonces. Aquella esquela apareció después en la Dirección de Inteligencia uruguaya”, se entristece.

Ida y vuelta

Uno de los primeros en recibir a Viana en Montevideo fue un capitán del Servicio de Inteligencia, Pedro Enrique Buzó Troncoso, quien dos años antes le había jurado con cinismo al tener que liberarlo: “Vaya donde vaya lo vamos a ir a buscar”. “Te prometí y te cumplí”, le espetó esta vez mientras le sacaba la capucha. Después fue a parar al Batallón de Infantería 12 de Rocha y de allí al 11 en Minas, donde lo interrogó con ferocidad el jefe de la División IV del ejército, Gregorio Alvarez, sobre las actividades de la Junta Coordinadora Revolucionaria. En diciembre lo llevaron a lo que bautizó como el “mini Sheraton” del penal de Libertad, donde pasó siete años y medio. A esa altura, en Argentina, la AAA ya había matado a Frondizi y a Ortega Peña, entre otros cientos de casos que ahora integran la investigación judicial de Oyarbide.

La familia de Viana había aceitado contactos con la embajada de Suecia y la Cruz Roja. “Me soltaron por presión de la embajada sueca y me terminé yendo a vivir allí, donde volví a sentirme un ser humano”, cuenta. Volvió en 1995 con el plan de quedarse tres meses. “Tenía un juicio contra el Estado y quería hacerme cargo. Cuando me quise acordar llevaba nueve meses y mi compañera sueca me mandó el divorcio por fax. Y sí –se ríe– me divorcié por fax.”

El regreso lo puso en contacto con las investigaciones sobre violaciones a los derechos humanos. No logró hasta ahora que su país investigue su caso, pero consiguió por su cuenta documentación importante, que entregó a la Justicia uruguaya en una causa sobre desapariciones en Argentina. Se trata de un memorándum de la Dirección Nacional de Inteligencia D4 uruguaya que revela que su propia detención en Buenos Aires se efectuó por un pedido de información del Organismo de Coordinación de Operaciones Antisubversivas (OCOA) –del Plan Cóndor– y que un grupo de funcionarios viajó luego a Buenos Aires para recibir materiales que le habían sido incautados. “Yo creo que al final me mandó a secuestrar (el dictador) Juan María Bordaberry, que unas semanas antes se había reunido con Perón en la isla Martín García”, arriesga.

Viana Acosta vive ahora cerca de la playa. En los últimos siete años tuvo tres hijos y trabaja para organizaciones de derechos humanos, como Amnistía Internacional. “No tengo militancia política, pero sigo siendo tupamaro y lo seré hasta la muerte”, dice del otro lado del teléfono. Cuando se enteró de la reapertura de la causa sobre la Triple A, mandó cartas a la Cancillería argentina y a la Secretaría de Derechos Humanos, que le recomendaron presentarse en Tribunales. “Quiero ayudar a que se conozca una parte de la historia argentina que por alguna razón no fue contada. Me inspira un sentimiento de justicia, no de protagonismo. Es que la verdad tiene que salir a la luz.” ■

Una ejecución salvaje en Bella Unión


Escrache a Colonización



Desde Bella Union escribe el Cholo Gonzalez
Hoy se cumple un aniversario más de la desaparición física de nuestro compañero Raúl Sendic. Luchador incansable por los derechos del trabajador rural. Raúl trabajo por frenar el éxodo de las familias rurales a la periferia de las grandes ciudades, para eso impulso todo lo que  fortaleciera el  afincamiento de la familia rural.  Lucho  para que fuera realidad, la consigna de “tierra para quien la trabaja”.                                       

Nos dejo el plan por la tierra y contra la pobreza, plan de lucha para el trabajador del campo y el pobre de la ciudad, que hoy es más vigente que nunca.  Y justamente hoy en esta fecha, tuvimos en Bella Unión, el dolor de despertarnos con la noticia de que al amanecer, en un predio de la Colonia Eduardo Acevedo (fracción parte de las 30. 000 hectáreas por las que UTAA lucho tanto en la década del 60) era invadida por fuerzas policiales para concretar el desalojo de Ney Tedy, trabajador rural de 70 años, asentado desde hace años en esas tierras.                        

Haciendo un poco de historia, Tedy viejo compañero de UTAA, cortador de caña toda una vida, vivía desde hace 18 años en un predio del instituto de Colonización, tierra que arrendaba como todos los colonos. El predio era de 228 hectáreas, donde levanto una pequeña construcción de material muy humilde, donde vivía.   Como la mayoría de los colonos, se atraso desde la época de crisis, su deuda era de 27.000 dólares de los cuales con mucho esfuerzo y con la venta de animales pago 23.000 dólares .

De todas formas hace 2 días se quiso concretar el lanzamiento, cuando concurrió el juez, estaban en el predio unos 100 cortadores de caña y representantes de diferentes organizaciones sociales apoyando a Tedy por lo cual no se concreto el desalojo.  En la mañana de hoy, estando en la casa Tedy y familiares,  nos relata el hijo, que a las 6 de la mañana vio entrar a grupos policiales fuertemente armados, con cascos, escudos, una imagen de una película de guerra nos dice.   Más tarde supimos que concurrieron al lugar integrantes del grupo GEO, de la policía especializada en la lucha contra el abigeato de Artigas, ATA de Salto, personal policial de Bella Unión y  de la octava sección del departamento. Don Tedy se negó a salir de su vivienda y tuvo una descompensación de su salud, subiéndole la presión a 22, según información del medico forense allí presente, por lo cual Tedy se acostó, manteniendo la posición de no salir.

Al fin a la fuerza, en una camilla, lo trasladan a una camioneta policial y de ahí a un centro asistencial donde permanece internado.               

En este momento siendo las 16 horas siguen los hijos con algún otro familiar en el predio, y hay un grupo importante de cortadores de caña afuera apoyando a los familiares que están adentro. Siguen los efectivos policiales y la tensión es grande.   Los compañeros llaman a seguir congregándose en el frente de la finca y están manejando la posibilidad de acampar ahí.    Hoy con este procedimiento policial de tal magnitud, con este vergonzoso desalojo, a un trabajador rural de 70 años mientras a ganaderos ricos se les perdonan sus deudas millonarias, con este hecho nuevamente Raúl fue traicionado.                                                                                                                                   
Pero hay compañeros, gente sencilla que siguen luchando, que levantan sus banderas y continúan con fuerza la lucha por la tierra.   
Cholo Gonzalez – Bella Union – 28/4/2011 
  


Cartón ligador

29 de abril de 2011
Jorge Zabalza


En octubre del 2007, hace apenas cuatro años, el periodista Federico Leitch publicó  “Cero a la izquierda”. En su página 179 aparecen algunos comentarios sobre las reuniones entre dirigentes del MLN(T)  y un grupo de militares; se refiere, además, a la única de ellas en que participé. Se vendieron 10.000 ejemplares de dicho libro y, por si ello fuera poco, abundé sobre el tema en varias entrevistas de prensa. Se puede  suponer, por consiguiente, que esas  informaciones son del dominio  público. No despertaron, sin embargo, ninguna reacción de  los militares involucrados que todavía estaban en actividad. En cambio, Fernández Huidobro y Luis Rosadilla negaron a los periodistas la realización de esas reuniones. Aunque aclaró que sus tareas senaturiales no le dejaban tiempo para leer el libro. Fernández Huidobro me trató de “buchón” y a Leitch lo calificó como “agente policial”.   
Ahora, con los episodios “video con la intención de  amedrantar al Presidente” y “documento donde se habla de tratativas realizadas en 1998 para hacer una declaración conjunta de algunos dirigentes del MLN(T), la masonería, la Iglesia Católica y una logia militar”, la cuestión ocupó las portadas de los infomativos. Desafiando mi opción por mantenerme lejos de los medios, algunos periodistas se arrimaron a Santa Catalina para entrevistarme: Jorge Traverso, Radio Carve y los canales 4, 10, 12 y VTV.  Les dí mi opinión sobre lo publicado en el diario “El Observador”.
Esta vez, por confesión de parte, la opinión pública se enteró que las reuniones habían existido, que no eran producto del delirio de ningún loco de la bolsa.  El secreto a voces dejó de ser negado por los protagonistas civiles y militares.
Después un breve tiroteo entre quienes compartimos la celda, Eduardo Radaelli fué entrevistado en la cárcel de Santiago  donde cumple su condena por el secuestro del químico chileno Berríos, delito que aún sigue impune para el Poder Judicial uruguayo en cuya jurisdicción se cometió. Cuando Radaelli fue extraditado a Chile contó con la defensa oficiosa de Huidobro. Dos días después, su camarada de armas Walter Villanueva apareció en la tapa de “La República”, órgano oficial del gobierno.
Radaelli comienza por decir que participé en varias reuniones, pero Villanueva fue más allá y recalca que fuí quién tomó la iniciativa para promoverlas.
Reitero mi versión del 2007, estuve solamente en una reunión. Quienes convivíamos en el MLN(T) posdictadura saben perfectamente que no poseía la “fuerza” en la interna como para ser el iniciador de este tipo de acercamientos. Tampoco pasaban por allí las ideas que sostenía en el debate en el Comité Central. Recuerdo haber planteado  mis dudas: estaba claro que el objetivo de ellos era neutralizar a la reserva ideológica  de la revolución que contaba con mayor arraigo popular; lo que no estaba nada claro, al menos para la mayoría de nosotros, era que quería el movimiento con tales “conversaciones”. 
También dejaron caer  sus dudas otros integrantes del Comité Central (Carlos Casares, Roberto Villanueva, Washington Muniz, Mario De León y varios más), cada cual lo hizo por cuenta propia, de manera independiente de los demás, en el MLN (T) no se estilaba organizar tendencias. Es cierto que no fue una oposición al estilo “patria o muerte”,ninguno dijo nos vamos si se continúa así. En esos años el espíritu de cuerpo era muy fuerte, los lazos emotivos oscurecían el análisis, éramos más hermanos que compañeros políticos de la misma organización.  
Asumo no haber dado con mayor claridad la batalla en los organismos de dirección para impedir que continuaran las “conversaciones”. Lo asumo de la misma manera que me siento responsable por las muertes de Pascasio Baez  y de Roque Arteche, así como de todos los actos del MLN(T) entre 1963 y 1995, aunque no haya sido directamente  mi mano la que actuó.  Entre esas responsabilidades está la de haber firmado la nota que un compañero, cuyo nombre no podía salir en “Mate Amargo”, le hizo a un “carapintada” refugiado en Uruguay. Así funciona la cabeza de los hombres de un aparato partidario.
Nos fuimos yendo de a uno, cada cual por la suya, una especie de riego  por  goteo. Alejarse del espacio donde se desarrollaba toda nuestra  vida de relación, nos permitió empezar ver las cosas con una luz distinta y comprender las que no habíamos comprendido. Fué un proceso colectivo en varias dimensiones, en los fenómenos de la conciencia hay un “click!” en el que uno “se da cuenta” de hechos y relaciones que hasta ese momento no percibía.
En 1997 algunos de los “idos” y otros que estaban “dentro”, publicamos el “Colectivo Tupamaro” cuya circulación interna fue prohibida. En ella se daba una opinión que rechazaba las relaciones con militares, opinión que, en lo personal, fui afinando en sucesivos documentos, entrevistas y artículos periodísticos. El rechazo fué mucho más explícito en el folleto “La Revolución en el Uruguay hoy”, discutido por un par de docenas de compañeros que habíamos pertenecido al MLN y que circuló en el 2003.  Una vez desvirtuada la fraternidad, para nosotros quedaban más que claros los vínculos entra las actuales conversaciones con militares y las “negociaciones” del Batallón “Florida”. En el año 2005 escribí una carta pública a Fernández Huidobro, que fue firmada por cincuenta compañeros tupamaros que compartían el  repudio a sus actitudes con relación a los militares.
No tengo ninguna duda:  el juicio y castigo que merecen los criminales del terrorismo de Estado no puede quedar sujeto a acuerdos entre tupamaros y militares de la logia que sean; la sanción es cuestión judicial por cierto, pero fundamentalmente debe ser de carácter social. Nadie puede arrogarse el derecho de “negociar”  la impunidad en nombre del pueblo uruguayo, la principal víctima de los criminales. Se debe comprender que el “nunca más dictadura” solamente será posible si la sanción social de las conductas criminales es tan contundente que disuade a los candidatos a golpistas y terroristas de Estado. Las confusiones sólo sirven de caldo de cultivo para que caigan en tentaciones criminales los nuevos oficiales, predispuestos a ello porque siguen siendo educados en la doctrina de la seguridad nacional y en una visión maniqueísta de la historia reciente, que justifica el terrorismo en aras de “salvar a la patria”. La lucha por Verdad y Justicia no sólo apunta a resolver asuntos del pasado, asegura el futuro desarrollo de la comunidad. Es asunto de la juventud más que los viejos.
Está claro que están disparando sobre el mensajero para desvirtuar el mensaje: El objetivo es descalificar y denigrar  al emisor del mensaje para confundir a los oídos que pudieran ser receptivos. Enchastrar al portador de las ideas para desautorizarlas y quitarles fuerza. Una antiquísima metodología, nada nuevo bajo el sol. Vamos a ver que resultado les da.
Eduardo Radaelli  expresó al aire que “en algún momento se va a tener que hacer responsable de sus dichos”. Bueno, la responsabilidad por decir de frente lo que pienso, la he debido asumir en circunstancias muy diversas, no obstante ello no puede dejar de preocuparme, al esposo y padre, la amenaza subyacente en esas palabras, más todavía cuando ellas provienen de un oficial procesado por una asociación ilícita que se llama “Plan Cóndor”. Al parecer mi destino es ser cartón ligador.
“La República” merece un brevísimo comentario. La noticia de tapa de hoy, 28 de abril, son los dichos del mayor retirado Villanueva para descalificar, y demonizarlo  un poco más, al “cero a la izquierda” de los sobrevivientes tupamaro. Había noticias bastante más relevantes y significativas, como la del desalojo a Ney Thedy en Bella Unión, colono del Instituto, viejo “peludo” fundador de UTAA,  amigo personal de Raúl Sendic, expulsado de la tierra por quienes dicen ser  tupamaros.. . ¿éste es su homenaje en la fecha en que recordamos la muerte de Raúl Sendic? ¿No merecía una tapa?.
He intentado jugar lo mejor posible, evitando caer en un “intrusos en la política” que solamente serviría para aumentar la confusión y el descrédito de la “clase política”.
Por Verdad y Justicia
Arriba los que luchan!
Jorge Zabalza

Carta a "El Muerto":


"La República" con toda la tapa a varios colores considera y publica que lo que los agentes de iinteligencia presos en Chile por el asesinato de Berríos es la noticia (LEER BIEN NOTICIA) mas importante del Uruguay de hoy que según los botones (amigotes de El Ñato, lo dice el mismo, fijate mas abajo lo que la misma la republica publica) que Zabalza estuvo en reuniones con ellos. ESO ES "LA NOTICIA".



Con fecha setiembre de 2007 aparece el libro "Cero a la izquierda" prologado por Blixen es un libro que te recuerdo el Ñato dijo que nunca leeria.
En la página 179:
"También habia lugar para las dudas y las intrigas que se venian sembrando en el seno del MLN. Si bien el estaba al tanto de las reuniones de Eleuterio Fernandez y otros venían llevando a cabo con varios militares,entre ellos el coronel Wellington Sarli y el teniente coronel Eduardo Radaelli, a fines de 1991 planteo en el ejecutivo su voluntad de asistir a una de esas "tenidas".La reunion se llevo a cabo en un chale de Parque del Plata, a 60 quilometros de Montevideo,bajo la premisa de coordinar una entrevista para "Mate Amargo" con uno de los protagonistas del tercer alzamiento carapintada durante el gobierno de Alfonsin (1988) que los militares uruguayos "albergaban solidariademte".A la reunion en Parque del Plata asistieron los cuatro viejos.Fernandez Huidobro-a quien siempre interesaron los temas militares-se despacho con una larga exposicion sobre las nuevas lineas en el Ejercito,sobre la contraposicion entre los brasilenios y Estados Unidos y la situacion en la OTAN.Pero para sorpresa de Zabalza tambien se hablo de socialismo,nacionalismo y nacionalsocialismo,y cuando llego el tema de las denuncias sobre derechos humanos que se venian haciendo desde "Mate Amargo",Zabalza , dirigiendose a Wellington Sarli,exploto por la boca.-Vos sos un torturador , asi que no mires para el costado. - Estas equivocado,te debes estar confundiendo con alguien mas-respondio Sarli.-No me confundo,vos sos un torturador,y la verdad no se que es lo que quieren,para que nos quieren juntar aca...El clima se tenso y la reunion fue interrumpida para evitar que las cosas se salieran de madre.Fuera del chale los cuatro pensaban cosas distintas,pero Jorge se habia convencido de que las charlas erna un operativo de inteligencia destinado a neutralizar mediante "tanteos" informales las posiciones de la unica fuerza de izquierda que seguia haciendo,aunque cada vez menos abiertamente,un planteo de poder.Las reuniones con los militares,sin embargo,continuaron,logicamente sin Zabalza,en varias oportunidades mas,confirmando las tesis de Eleuterio Fernandez de que "las mismas forman parte de toda la historia del MLN"

Se puede seguir leyendo en ese capítulo sobre mas reuniones, pedidos de controlar a los vascos y una serie de asuntos con los tenientes de artigas y demas detalles. Debo remarcar varias cuestiones

1) El boton preso en Chile tira "la tremenda primicia" de algo que el mismo Zabalza ya metió en su libro en eL 2007 !!!

2) La asquerosamente oficialista, el "pravda-la republica" preferentemente "Ñatista"
LO DA EN PRIMERA PLANA TAPA Y TODO A VARIOS COLORES como la super primicia como el deschave del siglo, repito algo que ya esta explicado con nombres y demas en el libro cero a la izquierda,repito 2007 !!!

3)Por que entre el 2007(citación al juzgado de por medio),no se hizo pamento con estas reuniones ?? por que el Ñato ni las menciona?.Claro que cabe de que fueran inventos de Zabalza,porque se demoraron entonces cuatro años y NI LO MENCIONARON?,ahora los milicos confirman todo lo que esta en el libro (de un policia y no lo voy a leer dijo el Ñato entonces)

4) Por qué la otra prensa, los partidos,etc,etc no atacaron? (La República es el único diario que da la "primicia", que ya publicara desde el 2007 Zabalza, y que le cupo a Zabalza tanto la acusacion del Ñato como el pasaje por el juzgado

5) Resulta evidente que nadie quiso tocarlas, solo Zabalza, que sorpresivamente cuatro años después de que fuera acusado de boton por develarlas, resulta ser primicia.Que circo siniestro !!

6) Obsérvese que en todo momento se habla en el libro de ORGANISMOS DE DIRECCION Y DE PLANTEOS EN EL ORGANISMO Y DE QUE VAN POR LOS MENOS CUATRO DE ESE ORGANISMO (Ñato, Pepe, el Viejo Julio Marenales y Zabalza).

7) Si hubiera sido una mentira de Zabalza en el libro "Cero a la izquierda", por que el organismo NO LA DESMINTIERON YA EN EL 2007.

8) Se habla de organismos de dirección de un PARTIDO POLITICO LEGAL, EL MLN QUE TENIA CONGRESOS, CC Y TODO LO DEMAS Y ERA LEGAL REPITO, asi que no cabe el asunto como se presenta hoy (el boton y LA REPUBLICA) como que Zabalza tenia reuniones con los milicos. Si a alguien hay que atacar es a toda la dirección y, dos: al "gigante idiota" que la eligió.Pero no hay que olvidar tampoco que es a partir de ese período y de esas cuestiones que se producen las salidas masivas de los viejos militantes que van gota a gota vaciando el MLN.

El hecho es que Carve, El Espectador, Canal 10 y Canal 12 van y le preguntan a Zabalza. Eso,a mi gusto, es lamentable ya que "del otro lado" no hay nadie, solo Zabalza como referente y claro,carton ligador, Desde luego que Zabalza molesta y mas si sigue insistiendo con lo de la caducidad y todo lo demas,y claro que es mas facil para el Ñato tirarse contra uno, que en tiempos recientes el y el viejo Julio han dicho que esta loco, que esta para siquiatrico,etc.
Lástima que no haya al menos, como antes, un conglomerado serio de tendencia , con mas de uno que Zabalza , que de hecho es un militante suelto, que hubiera una tendencia, y que muchos pudieran responderle a la carve el 10 el 12 y el espectador.
De lo que se trata es que gente con poder, con mucho, pero mucho poder, persigue a un
pobre naufrago, con tanta desproporción . Mas que nada cuando eso está en un libro que tiene un monton de ediciones a esta altura y se ha vendido por miles desde 2007 !! repito: 2007



El Juanca

Pactos, mentiras y videos
LOS INDAGABLES CONTINÚAN SU OPERACIÓN PSICOPOLÍTICA PARA APUNTALAR LA IMPUNIDAD



Documentos sobre pactos entre guerrilleros y militares, videos que anuncian acciones armadas, declaraciones disonantes de militares retirados y en actividad, operaciones de propaganda y contrainteligencia, debates sobre la constitucionalidad de una ley que declara inconstitucional otra ley, campañas de doctrina jurídica y la velada amenaza de una supuesta resistencia de ex militares a una citación judicial, constituyen el escenario para un inminente replanteo de la pregunta “¿y después qué?” si se anula la ley de caducidad, mientras la Marcha del Silencio del 20 de mayo promete ser multitudinaria.

ROGER RODRÍGUEZ

rogerrodriguez@adinet.com.uy



La “operación psicopolítica” que un grupo de militares “indagables” por crímenes de lesa humanidad lanzó a principios de año continúa en “ejecución” con acciones “políticas”, de “propaganda”, “jurídicas” y de “inteligencia”, mientras se prepara el ambiente para una eventual acción “militar” en el marco de su definida “misión” de “luchar para eliminar las acciones del enemigo sobre los camaradas y alcanzar la liberación de todos los presos políticos, militares, policías y civiles”.

La aparición pública del autodenominado Foro de Libertad y Concordia, del que un pequeño grupo de militares retirados se constituyeron en voceros públicos, podría ser sólo el inicio de una ofensiva mayor, auspiciada por organizaciones internacionales de ultraderecha que en los últimos años jugaron entre bambalinas durante frustradas intentonas golpistas en Venezuela, Bolivia, y Ecuador, pero consiguieron su propósito con el derrocamiento del presidente constitucional de Honduras.

En el artículo 'La ofensiva de los indagables', publicado en Caras y Caretas el 4 de febrero, se revelaba un documento interno de los creadores del 'Foro' en el que se establecía como “maniobra general y propósito” de la organización, lograr “formar opinión pública, psicosocial y política”, para alcanzar el objetivo de su “misión” que se haría “en principio por medios legales”. Una frase amenazante que ya habían lanzado en su primera carta pública a los mandos militares, a quienes advirtieron sobre “extremos a los que no desearíamos llegar jamás”.
En la nota, también se explicaba que el grupo de indagables se había dado una organización encabezada por un “Grupo Coordinador” (integrado por representantes de “tandas” o “generaciones” según el año de promoción de los oficiales retirados) que se distribuiría en diez “secciones” o “grupos de tareas” (“no direcciones ni frentes de trabajo por ser terminología enemiga y no militar”, decían). Las “secciones” se dividían en: “política y psicosocial”, “propaganda”, “jurídica”, “prisioneros”, “familia”, “internacional”, “organización”, “inteligencia”, “militar” y “finanzas y logística”

El grupo de ex militares intentó primero conquistar a la oficialidad activa de las Fuerzas Armadas (que en su gran mayoría se formó después del régimen dictatorial), a través de un “grupo de apoyo” formado en “Facebook” al que rápidamente integraron más de dos mil “amigos” locales y, especialmente, internacionales. Pero la evidente ideología nazi y fascista de un importante grupo de adherentes, sumada a las amenazas a periodistas que desde la web se realizaron, llevaron a disolver la página de Internet.



LOS TIGRES DE PAPEL

Si las tareas de la “sección política y psicosocial” (“ejecutar acciones en partidos, gobierno e instituciones nacionales”) habían tenido éxito con la aparición pública del grupo, la carta a los comandantes, las reuniones con altas autoridades y la adhesión de dirigentes políticos a su Facebook, sería con las actividades de su “sección propaganda” (“ejecutar acciones por los medios de comunicación, atendiendo la reivindicación de la lucha antisubversiva y la injusticia de los actos de venganza”) que los “objetivos” de los “indagables” lograrían su mejor posicionamiento en el ámbito local.

No parece una casualidad que en los primeros días de marzo el semanario “Búsqueda” “filtrara” la existencia de un video de un presunto “Ejército Nacional de Liberación” que anunciaba el inicio de “acciones militares”, sólo días después que se comenzaba a generar un consenso dentro del Frente Amplio para mandatar a sus senadores a aprobar el proyecto de ley interpretativa que busca anular la ley de caducidad. El video, audio o el simple texto difundido generó un escenario político de idas y venidas, declaraciones y contraaclaraciones, que terminó esta semana en una interpelación a los ministros de Defensa y de Interior.

Y cuando todavía no se había apagado el incendio mediático sobre si el presidente José Mujica había visto o no la filmación, si los servicios de inteligencia eran o no capaces de encontrar su origen y la propia justicia intervenía de oficio ante la amenaza del ENL de rescatar por la fuerza a los criminales de lesa humanidad presos en la cárcel de Domingo Arena, un nuevo “documento” terminó apareciendo, esta vez en El Observador”, para plantear que en 1987 dirigentes del MLN – Tupamaros habían hecho un “pacto” con la militar “Logia Tenientes de Artigas” para cerrar el tema derechos humanos.

El nuevo documento, golpeó la interna del Frente Amplio que en esos días había votado en el Senado la ley interpretativa de la ley de caducidad, y particularmente la interna de los propios tupamaros, cuando uno de sus principales referentes, el senador Eleuterio Fernández Huidobro había acatado el mandato de su partido al votar una norma con la que no estaba de acuerdo, para de inmediato presentar renuncia a su banca. A las críticas y contracríticas por la renuncia, se sumó la exhumación de los pactos o charlas que con los militares existieron desde la tregua armada del Batallón Florida en 1972.

El presunto documento de acuerdo, catalogados por unos como una “traición”, por otros como un insulto al líder Raúl Sendic (que aparecía mencionado) y por otros referentes históricos tupamaros como una clásica maniobra de contrainteligencia, todavía no ha terminado de generar sus repercusiones, en un escenario político tenso en el que el partido de gobierno muestra contradicciones ante las cuales algunos dirigentes de la oposición buscan sacar provecho, reclamando la dimisión de ministros, cuya permanencia en el cargo terminó siendo expresamente confirmada por el gobierno.



JUSTICIA PARA TODOS

Mientras los medios de comunicación asocian y disocian el video, el pacto, la ley interpretativa, los plebiscitos, el tribunal de conducta para el senador Jorge Saravia, los futuros planteos de inconstitucionalidad sobre la ley que todavía no se aprobó, los festejos de los Tenientes de Artigas cuando el general Lino Oviedo dio un golpe en Paraguay, la reestructura de la institución militar o la sugerencia del ministro de Defensa de debatir la existencia misma de las Fuerzas Armadas, otro de los escenarios previstos por los “indagables” sigue su curso: el del debate jurídico.

La “sección jurídica” se programó con el cometido de “ejecutar acciones para formar un equipo de abogados y juristas dispuestos a luchar contra el “derecho penal del enemigo”, formando opinión pública (no para defender en los estrados a los acusados)” decía el documento germinal del grupo de ex militares que procura no ser convocado por sus violaciones a los derechos humanos. Y así lo vine haciendo desde tiempo atrás, a través de largas cartas publicadas por algunos presos en Domingo Arena, que hicieron un curso acelerado de derecho o sólo firman los escritos de algunos juristas contratados.

En el mismo escenario, se realizaba ayer un primer seminario sobre el tema con conferencias del ex fiscal Miguel Langón y el ex vicepresidente Gonzalo Aguirre Ramírez, quien pocas semanas atrás ya había salido a la opinión pública, junto al ex presidente Jorge Batlle, para criticar una sentencia de la jueza penal Mariana Mota en la causa por la que fue procesado el torturador Carlos Calcagno (detenido por la desaparición forzada de los uruguayos Nelson Santana y Gustavo Izaurralde en 1977), quien próximamente también sería encausado por el asesinato de Humberto Pascaretta.

Aunque el caso fue laudado por un Tribunal de Apelaciones que dio razón a la jueza Mota, el tema volvió a ser tocado esta semana en El País por el “duende” Daniel Herrera Lussich quien salió a alertar sobre un “tsunami” de impugnaciones y recursos de inconstitucionalidad sobre la ley interpretativa cuya votación, finalmente, el Frente Amplio aceptó posponer para el próximo 20 de mayo. La fecha en que se procura organizar la mayor marcha del silencio en los 16 años que se vienen reclamando contra la impunidad el día que en 1976 fueron asesinados Zelmar Michelini, Héctor Gutiérrez Ruiz, Rosario Barredo y William Whitelaw en Buenos Aires.

El tema de fondo, sin embargo, sigue siendo el pronunciamiento que la Suprema Corte de Justicia pueda dar a un reclamo de la fiscal Mirtha Guianze en la causa del “Segundo vuelo de Orletti” donde el Ministerio Público pide que los crímenes de los militares procesados se tipifiquen delitos de lesa humanidad. Si así fuera, el debate jurídico dejaría de existir porque las violaciones a los derechos humanos cometidas durante la dictadura serían delitos inamnistiables, imprescriptibles y perseguibles sea cuando fuera la fecha de su realización, como establece el derecho internacional.



EL JUEGO DEL MIEDO

En su ofensiva, los indagables continúan sus acciones a favor de los presos en Domingo Arena y sus familias, procuran fortalecer su organización buscando las simpatías de la interna militar, realizan finanzas para su logística, y reafirman sus conexiones internacionales con el grupo UnoAmérica (que coordina las sectores conservadores en el continente y ha auspiciado intentos de golpe de Estado en varios países), y con grupos de ultraderecha europeos y norteamericanos, que ven con buenos ojos que cesen los gobiernos progresistas latinoamericanos.

Sin embargo, dos de las “secciones” de la organización de ex militares, son las que más preocupan a los servicios de seguridad del Estado: el grupo de tareas de Inteligencia (que se propuso “ejecutar acciones de búsqueda, análisis y diseminación”) y el grupo de tareas “militar” (que se plantea “ejecutar acciones de coordinación con las Fuerzas Armadas, centros, clubes, cooperativas y eventualmente otras fuerzas amigas”). En particular porque en torno a los centros, clubes y cooperativas militares se han enquistado algunos de los más comprometidos violadores de los derechos humanos y por la ambigua definición de “otras fuerzas amigas” que daba el documento original.

En su claro propósito de mantener el “pacto de silencio” que les permite su impunidad, los indagables todavía no parecen haber jugado todas sus cartas para generar temor en la sociedad civil, pero ya comenzaron a practicar el “juego del miedo” que se utilizó en otros períodos. El propio Jefe del Estado Mayor de la Defensa, general (av) José Bonilla (el mismo ex comandante que le devolvió una bandera de los tupamaros al presidente Mujica), salió esta semana a afirmar que si se aprueba la ley interpretativa para anular la caducidad, “el que sabe algo no lo va a decir porque iría a prisión”. Y concluyó que “no puede haber verdad si hay Justicia”.

El objetivo de volver a plantear el “¿y después qué?”, que había acuñado Wilson Ferreira Aldunate para justificar la aprobación de la Ley de Caducidad en 1986, promete ser una de las próximas operaciones que se plantearan en el escenario político uruguayo, sin tomar en cuenta que desde aquel año hasta la fecha son precisamente las verdades encontradas lo que más impulsa al reclamo de justicia. Cuando se aprobó la Ley 15.848 no se había confirmado que había niños desaparecidos, ni que existían cuerpos enterrados en unidades militares, ni que medio centenar de desaparecidos en Argentina en realidad fueron trasladados a Uruguay para su ejecución sumaria, como ocurrió con los “fusilados de Soca” en 1974, aunque los “repatriados” del 76 y el 78 luego fueron enterrados, probablemente en fosas comunes, y eso es lo que no se quiere admitir.

Mientras el juego del miedo crece (el ex general Ricardo Galarza definió a su “enemigo” al decir que “las organizaciones de derechos humanos reemplazaron a los terroristas”) y algunos funcionarios alertan sobre algún “alzamiento” al estilo de los “carapintadas”, el gobierno también comenzó a recibir críticas de los familiares de las víctimas de la dictadura, quienes señalaron públicamente su preocupación por el retroceso que se ha tenido desde la asunción del presidente Mujica. “Estamos bastante mal en Familiares con toda esta situación. Hace casi dos años que le pedimos al gobierno la comisión de seguimiento y hasta ahora no recibimos contestación. No estamos conformes", dijo Luisa Cuesta, madre de un desaparecido.

La denuncia judicial continúa siendo el escenario que mayores expectativas genera entre las víctimas, que a las indagaciones en curso sobre el la muerte de Norma Cedrés, las 19 muertes por tortura durante el mandato de Juan María Bordaberry, los casos Gelman, Fusilados de Soca, el secuestro de los niños Julién, y las desapariciones de Gelós Bonilla y Julio Castro, ya han agregado denuncias en las que, por primera vez, se plantea la tortura como un crimen de lesa humanidad. A la que ya presentaron quienes sufrieron apremios en Boisso Lanza, se agregarían en breve otra sobre lo ocurrido en el Regimiento de Caballería Nº 9, a la que seguirían similares causas por otros centros de detención. Decenas de ex militares podrían estar implicados en esos delitos.


*****
Caras y caretas 29 abril 2011

jueves, 28 de abril de 2011

Zabalza desmintió acusaciones




Montevideo COMM, actualizado: 28/04/2011


Jorge Zabalza desmintió las acusaciones del mayor retirado, Walter Villanueva, quien afirmó que el tupamaro había participado en las reuniones de militares y el MLN. "Lo que dice Villanueva es totalmente falso. Nunca participé en esas reuniones, y además ¿de qué me serviría ir armado?", afirmó en alusión a las acusaciones.
El dirigente tupamaro Jorge Zabalza negó hoy las acusaciones vertidas en la República y Radio Sarandí por el mayor retirado Walter Villanueva, quien dijo que Zabalza había participado en las primeras reuniones de militares y del MLN en a búsqueda de un "pacto" pos-dictadura.
En diálogo con el programa Cría Cuervos, de CX 30, Zabalza dijo que nunca participó en tales reuniones: "En un libro sobre mí, que se llama 'Cero a la izquierda' y fue publicado en el año 2007, ahí yo dije por primera vez en forma pública que participé en una sola reunión. Yo integraba los órganos de dirección de un organismo político (MLN), por eso participé, pero nunca tuve la iniciativa de esas primeras reuniones. Por tanto lo que dice Villanueva es totalmente falso. Quienes conocen mi trayectoria saben que no tengo ese perfil", expresó.
Villanueva dijo incluso que Zabalza había mostrado un arma en los encuentros."En primer lugar, repito: nunca participé en esas reuniones; en segundo lugar, ¿de qué me serviría ir armado? ¿De qué se trata todo esto? Puede haber una explicación si atendemos a que hay varios temas que salen en los medios de comunicación, como por ejemplo el tema del supuesto video (en que militares amenazarían al Poder Judicial) y la publicación que el diario El Observador sacó hace poco, sobre un texto muy viejo que en su momento nadie le prestó atención y ahora lo quieren difundir, sobre discusiones del año 98", manifestó a la 30.
"Están intentando dispararle al mensajero. La República hace su política, está asociada con quienes está asociada y, bueno, yo tengo tranquilidad de conciencia de que, desde el año 2007, hablo estas cosas públicamente y antes ya lo hacía con mis compañeros", agregó.

Acusaciones de Villanueva
Cuando esta semana salió a luz el presunto pacto de militares y tupamaros pos-dictadura, a poco de aprobado en el Senado el proyecto interpretativo de la Ley de Caducidad, el tupamaro Jorge Zabalza criticó duramente a quienes participaron de aquellos encuentros.
"Es un tema de vieja data. Provocó mi alejamiento del MLN, lo cual no quiere decir que yo haya dejado de ser tupamaro. Estas conversaciones comenzaron tras la muerte de Raúl Sendic, luego que triunfó el voto amarillo", dijo Zabalza a Carve.
"Yo hablo de esto hace tiempo, y siempre dicen que estoy loco, Y Fernández Huidobro dice que soy esquizofrénico y que cambie de tratamiento psiquiátrico, Esa es la locura que yo he tenido: oponerme a hacer acuerdos a espaldas de la gente, de la militancia. Acuerdos firmados quizá en calabozos", concluyó entonces. "Si yo hubiera consentido negociar con los militares, hoy sería ministro", dijo además a Canal 10.
Sin embargo, uno de los militares que participó de los encuentros afirmó que Zabalza estuvo en esas primeras reuniones. El mayor retirado Walter Villanueva aseguró tanto al diario La República como a Informativo Sarandí que Zabalza fue el primero con el que se reunió.
"Con el primero que me reuní fue con Zabalza: en las conversaciones Zabalza hablaba y hablaba en sintonía" con los objetivos buscados, dijo Villanueva al matutino.
Agregó que esos encuentros que él describe "son ciertos, porque él participaba, me reuní con él en varias ocasiones, y con otros integrantes del MLN-T". "Fue el primero que yo me reuní hace 20 años y con otro integrante del MLN-T. En algún encuentro estuvo presente el Ñato (Eleuterio Fernández Huidobro). En esas primeras conversaciones, Zabalza dice que está armado y saca de un bolso una pistola 7.65; es el recuerdo que tengo de aquella época", agregó.
Sobre la existencia de un documento escrito como resultado de las conversaciones, el militar dijo que "conozco uno pero no es el que salió (en El Observador), tampoco vi ese documento en manos del MLN-T; sí en la circulación interna", de los militares.
Villanueva también fue entrevistado por Informativo Sarandí, explicando que los encuentros se dieron hace más de 20 años, con el fin de cerrar el capítulo de la dictadura.
"Fue una guerra a nivel continental y mundial. Lo que quiso hacer el Che Guevara era guerra y hubo combatientes. Zabalza y Huidobro hicieron eso, acciones de guerrilla, y festejan la toma de Pando", contó, en alusión a lo sucedido en la dictadura.
"Lo que está en proceso es un golpe de Estado", afirmó en torno a la aprobación del proyecto interpretativo de la Ley de Caducidad, agregando que el supuesto video amenazante de los militares "no salió de las Fuerzas Armadas, ni hay operativo alguno, ni se pretende conseguir nada. Lo que se hace es a través del Foro Libertad y Concordia, que lucha por la libertad de los presos".
Montevideo Portal


Carta de Jorge Zabalza a E. Fernández Huidobro

Esta carta fue escrita en el 2005 y firmada por un montón de compañeras y compañeros que adherían a lo allí escrito. El año pasado circuló de nuevo por Internet. Hoy la rescato y publico por considerarla actual, y para recordarles que hay hechos que Jorge viene denunciando y diciendo desde hace ya tiempo. Muchos de los "síntomas" se han agravado y nos encontramos frente a la realidad de que así como Huidobro parece haber tomado el compromiso en defender a los militares (cosa que más allá de lo que diga, ha demostrado en varias oportunidades), hoy le es devuelto el favor de parte de algunos de ellos que sin perder tiempo se manifiestan para desmentir lo que Jorge declara y para involucrarlo de una manera "sospechosa" en las famosas conversaciones entre militares y dirigentes del MLN.
Veronika Engler

Para qué diablos sobrevivimos, Ñato?
Decía el Che Guevara que en una revolución, cuando es verdadera, se triunfa o se muere. ¡Y vaya si la tupamara fue verdadera! ¡Vaya si se daba la vida entera! Pero nosotros ni triunfamos ni morimos, sobrevivimos a gatas y eso, en algunos casos, ha sido una lástima, porque se podía haber quedado como recuerdo entrañable y en cambio, al seguir viviendo, siempre se está a tiempo de mandarse alguna gran macana.
Hay viejos tupas, ustedes entre ellos, que ya no hacen política tupamara, esto es, política con un horizonte insurreccional, como el que alumbraron los soles de los 60, pero también las lunas primaverales a la salida de la dictadura. Clandestina o en la legalidad, con armas o sin ellas, en los 70 o en los 90, juntos hicimos política en serio, política para transformarnos en mujeres y hombres con valores e ideas revolucionarias, para transformar la sociedad actual en otra, sin clases y sin Estado.
Después, al perder el horizonte revolucionario, ustedes se han vuelto "operadores políticos". Hacen política sin horizonte transformador, política para medrar en el sistema. Aceptan como algo inevitable ?"es lo que hay, Valor"? la dominación de clases y la explotación capitalista. Aceptan vergonzosamente, la dependencia del imperio en lo económico y militar.
¿Para qué sobrevivimos, entonces? ¿Para hacer política virtual en la televisión? Política mediática que ni siquiera roza la estructura del poder económico. Es la política de "como te digo una cosa, te digo la otra". Como aseguro en un 99,99 por ciento que es cierto que los restos de María Claudia están en el 14, a los pocos días afirmo que esos informes, a cuya veracidad me jugué, no son los definitivos y me vuelco, iracundo, contra los informantes, a quienes debía haber supuesto mentirosos.
Mentían cuando negaban que en Uruguay hubiera presos políticos y desaparecidos. Mintieron en el asesinato del chileno Berríos. Mienten y siguen impunes los asesinos de Morroni y Facal. Mintieron en la Comisión para la Paz y mientras sigan encontrando crédulos bobalicones... ¿por qué habrían de dejar de mentir ahora?
Política virtual y mediática donde viejos revolucionarios tupamaros aparecen como garantía de las viejas instituciones del sistema sin percibir que, al ser incapaz, no digo de eliminar, sino al menos achicar, la brecha de desigualdad e injusticia sociales, esta democracia se va agotando por sí misma. De puro inoperante, nomás.
Y ustedes le están saliendo de garantía a eso, a una democracia chueca, sin contenido de pueblo asalariado, que sólo es instrumento para profundizar la dependencia de los organismos financieros internacionales.
El FMI y los acreedores definen la política económica, el presupuesto nacional y, en definitiva, hasta el proyecto de país que lleva adelante el gobierno progresista. El mismo modelo que todo un pueblo rechazó el 31 de octubre de 2004. No sólo en el tema del agua están desconociendo la voluntad popular. ¿Qué clase de democracia es ésta?
¿Soberanía nacional? ¿Uruguay productivo? ¿Por qué no han tenido voluntad suficiente para impulsar el proyecto de independencia económica y política? Por lo menos algo parecido a lo de Venezuela. Déjense de prometer cosas que no van a cumplir y de hacer demagogia al peor estilo del Uruguay Batllista del siglo XX. Están haciendo exactamente lo mismo que hacían aquellos políticos burgueses, los que despertaron la indignación de Raúl Sendic y los tupamaros primigenios.
En materia de derechos humanos, los tantos van quedando claros y también el papel tuyo en la jugada. El Pepe se abraza con el botón que lo baleó, y eso es grave, pero es peor aún lo tuyo y lo del Ratón Rosadilla al abrir los brazos a cuanto uniforme se les cruza, se están abrazando, seguramente, con algunos de los asesinos de compañeros y compañeras.
En lugar de avanzar hacia la justicia se dan pasos que consolidan la impunidad. Se votan ascensos, como el de Dalmao, que no se consentían antes, cuando se era oposición parlamentaria. Se mantiene en los mandos policiales a gente como Rolán y Navas. Se soporta que Moller, un fiscal comprometido con la impunidad, frene impunemente las investigaciones en marcha. Hay que destituirlo, como a Bonelli del comando de la fuerza aérea, confeso culpable de ser copiloto en el primer vuelo de Orletti y sospechoso de haber piloteado algún otro vuelo de la muerte.
Hay que anular la ley de caducidad para que la investigación se realice de forma independiente, bajo control de las organizaciones que luchan por los derechos humanos o, por la vía de los hechos se está consintiendo la instalación de una nueva mentira, que "sobrevuela o subyace" al jueguito de la mosqueta que la gente está siguiendo por la televisión. Mientras se continúe investigando en el marco de la ley de impunidad y en base a las mentiras de los criminales, descubrir la verdad sería otra que un milagro. La confianza en que los culpables contribuirán en el proceso de investigación... sólo puede ser producto de una ingenuidad mayúscula o de una maldad imperdonable. No es cuestión de perdonar, Ñato. ¿Quién puede ser tan temerario de arrogarse la potestad de perdonar desapariciones forzosas, violaciones y torturas?
Tampoco es cuestión de desligarse de toda responsabilidad y hacer caer sobre las endebles espaldas de los familiares de desaparecidos el peso de la lucha por verdad y justicia. Hay que ser muy caradura para pasarles a los familiares semejante tarea. Caradura y tener el corazón ganado por la impunidad. Caradura y tener la voluntad quebrada por el temor. Sería la salida más pragmática y facilonga para dejar todo como está.
Simplemente es cuestión de justicia. Y nada más que justicia. Cada día más, mentira a mentira, crece la necesidad de castigo. Claro que inválido, castrado y amarillo, el Poder Judicial administra la impunidad de los militares en lugar de hacer justicia. Pero vos bien sabés, Ñato, que los pueblos oprimidos no olvidan ni perdonan. Que la historia enseña como, a la corta o a larga, habrá justicia para todos, sea de la manera que fuere, porque no hay punto final en una sociedad de clases y la página que se quiere cerrar, más tarde o más temprano, siempre volverá a abrirse.
Consintiendo la impunidad... ¿en qué filosofía política están educando a la juventud?, ¿En creer que la mentira es un ingrediente natural de la vida política y social?, ¿en la lógica de la existencia de dos justicias, una para la guardia pretoriana y otra para los plebeyos? Dejar a hijos y nietos un Uruguay santuario de criminales, es traspasarles la responsabilidad de dar la batalla que no estás dando y es, además, una cobardía mayúscula que reniega de la historia heroica de las compañeras y compañeros. Es peor que la maldición de Malinche.
Además, vos sabés que el obvio objetivo que sustenta la Impunidad, es mantener el brazo armado en condiciones de amedrentar y disuadir. Al consentirlo hay viejos guerrilleros que están contribuyendo a crear esa subjetividad de temores que abre las puertas a la tutela, nuevos desmanes militares y la dictadura.
No olvidar que, ayer como hoy, la doctrina de guerra de las FFAA no es la defensa del territorio nacional a las órdenes del presidente de la república. Su verdadero comandante en jefe es el Pentágono, que las emplea para la estrategia de dominación mundial, destinándolas al Congo y Haití para liberar los "marines" que necesita en Afganistán e Irak.
A no equivocarse. A no repetir la película de Salvador Allende pidiendo apoyo a Pinochet para derrotar el golpe de Estado. Las Fuerzas Armadas aquí, y donde sea, siguen siendo la columna vertebral del poder económico y político de los dueños del capital y del imperialismo. Son tan ajenas al pueblo asalariado como lo fueron en los años setenta, cuando secuestraban niños y desaparecían gente.
¡Cómo quebraste la vieja fraternidad, Ñato!... Pensar que en aquellos años no fuiste tan pragmático como en los actuales, que sabías de concepciones y estrategias revolucionarias; que, vos y los otros viejos nos convocaron a dar vuelta la tortilla, no a esta miseria política que hoy protagonizás. ¿Te acordás cómo te escribiste los documentos históricos del MLN, los que inflamaban corazones e impulsaban a emprender grandes hazañas? ¿Te acordás cuando hiciste el Plan Cacao? ¿Y el Satán? ¡Cuántos estábamos dispuestos a dar la vida para preservar la tuya y la de los viejos!
¿Se dan cuenta del montón de los convocados, que tomaron los fierros para ofrendar la vida? ¿Olvidaron a Carlitos Rodríguez Ducós?, ¿al Percherón Clavijo?, ¿y al Hugo Candán y al Caudillo Lerena? ¿y a los caídos en Pando? ¿Ustedes creen que se jugaron para que el pueblo uruguayo recibiera los mendrugos que quedan después de pagar los servicios de la Deuda Externa?
Podrán convencer a los televidentes de la política que este Uruguay progresista tiene algo que ver con aquella patria para todos o para nadie de los tupamaros. Pero a nosotros, no. Los viejos testigos de los años tupamaros, los que no perdimos el horizonte insurreccional, seguimos sintiendo la responsabilidad de continuar aquella lucha por un poder revolucionario del pueblo, por una producción gestionada por los productores libremente asociados y un país independiente de toda dependencia. Algún día, estoy seguro compañeros, ¡habrá patria para todos o para nadie!
Tambero