jueves, 30 de abril de 2020

Tapabocas







Comenzó con la censura en TNU, Gerardo Sotelo exige que en los informativos y programas periodisticos, se conozca previamente lo que se va a decir.


>>> Director de medios públicos y candidato a la intendencia al mismo tiempo







Sotelo viene a ocupar el lugar de "censor oficial", y es evidente que apretará las tuercas en la prensa"chica", puesto que los canales y los diarios oficialistas, que reciben gran financiación a través de los avisos ofuciales, son sumisos al poder de turno y los periodistas apenas unos instrumentos que sí no acatan son despedidos.

¿Porqué no existe periodismo de investigación en Uruguay? Lo más parecido sería el programa de Peláez y Figares, vilipendiado por la derecha y por la izquierda. Porqué denunciar corrupción en este país es echarte encima a los miles derechistas y a los izquierdistas corruptos, que los hay y los hubo y es imposible hablar de ello. La idea de tener un semanario Frenteamplista nunca funcionó porque en la práctica no era posible equilibrar los espacios disponibles en un reparto equitativo de páginas, y lo peor, ponerse de acuerdo en la temática: saltan los matices y las diferencias profundas.

No podrías leer un periódico en el cual leyeras, por ejemplo, una nota a favor de UPM en la página 4, y una nota totalmente en contra de UPM en la página 10. Así es la realidad. Somos seres humanos pensantes y a  ex es coincidimos y muchas veces no. Las fisuras de la izquierda, los titubeos, fueron bien aprovechados por la derecha que se adueñó de la cabeza de doña María y don José, el pueblo, metiéndoles el chip de la inseguridad y el miedo, el "renunciá Bonomi" y toda esa basura machacona que logró su exiguo triunfo electoral. Los convencieron de que había que cambiar, sacar al FA del gobierno; ya lo lograron.

Y mucha responsabilidad fue del gobierno frentista, que no supo dar la batalla en los duros términos que planteaba la derecha. Se usó demasiada "mano blanda", se falló en el uso de los medios (la tele en primer lugar) para difundir todo lo hecho en 15 años. Si ANTEL tenía superávit, lo usaba en spot aburridos y para unos pocos explicando por ejemplo el origen de la fibra óptica. Quizás el televidente hubiera preferido algo así como "ANTEL presenta, los logros de estos años" y ahí meter los hospitales, las viviendas, la erradicación de cantegriles, los beneficios reales en aumentos de sueldo del Estado, policías, maestros; etc.  Todo lo que debió decirse en campaña electoral lo dijo bien clarito Tabaré en La Teja el día en que se despidió. Muy tarde. Los multicolores ya eran gobierno.
J. Estves

>>> Enviaron una carta

Justipreciado Sotelo:
Apelo a la sensibilidad de aquel muchacho socialista que estaba pronto con tres whiskys en El Lobizón de la Galería El País para advertirte que estás cometiendo una enorme injusticia con Jorge Gatti.
Sin duda, la tarea que le has encomendado excede en mucho la capacidad de trabajo de un solo hombre, aún más si tenemos en cuenta los atributos de Gatti.
Revisar previamente los contenidos de todos los medios públicos es una tarea ciclópea. Cuando la nota sea aprobada, puede haber transcurrido más de un mes de producido el acontecimiento a noticiar. Eso lo sabe cualquiera que se haya sentado en una secretaría de redacción o haya jefeado un noticiero de TV.
Es por ello que me permito aconsejarte respaldar a Gatti con otros talentos periodísticos que andan por ahí medio al pedo.
Ahí tenés a Patricia Madrid, Viviana Ruggiero, todo el staff de Ignacio Álvarez y algunos coroneles retirados que podrían dar una mano en esa desmesurada tarea. Estos últimos, los coroneles, dotados de la tecnología adecuada (no implica aumentar el gasto, alcanza con unos tachos con agua) podrían ser útiles para enmendar a aquellos periodistas que no se adapten de inmediato a esta nueva normalidad informativa.
Sin más, espero que tu designación esté a la altura de aquella desarrollada por tu par Danilo Arbilla en la Dirección de Difusión e Información de la Presidencia a partir del 27 de junio de 1973. Arbilla te dejó la vara alta. ¡A saltar!

>>> Sotelo siniestro








Estado de necesidad

Ocupación del predio "Nuevo Comienzo" en Santa Catalina


Por Jorge Zabalza
30 abril 2020



¿Tienen derecho los más humildes a un techo digno? Por supuesto. ¿Es legítimo que ocupen tierra para construir su futuro hogar? Claro que sí. A partir de estos interrogantes filosófico-jurídicas -y de sus respuestas- el doctor Helios Sarthou había elaborado su “doctrina okupa” a la uruguaya, alguna que otra decena de miles deben la posesión del solar donde levantaron su hogar.

Un par de centenas de miles no pueden acceder al terreno donde construir un techo digno, se los impide el monopolio del negocio inmobiliario urbano. Es la estructura de la propiedad la evidente razón de las desigualdades en el uso de la tierra, el problema básico, fundamental, de Uruguay y de América Latina. Mientras no se resuelva, siempre habrá ciudadanos y ciudadanas sin techo donde guarecer a sus hijas e hijos.

Por su parte, el Estado no cubre el déficit habitacional. El déficit afecta a las trabajadoras y los trabajadores más empobrecidos y, en especial, a los más jóvenes y excluidos de la vida social y política. Irresponsabilidad total de los gobiernos que, sean del color que fueren, se comen el futuro. El tan mentado Estado de Derecho, diamante del pensamiento liberal, protege solamente los privilegios de la cumbre, indiferente a las necesidades de los de abajo, reducidos a la marginación. Mas que indiferente, los empuja hacia el estado de permanente necesidad. El actual “ordenamiento territorial” arroja al precipicio multitudes, es una masacre masiva e impune.

En consecuencia, dado que los dueños de todo y su Estado de Derecho imponen la desigualdad y la marginación, los perjudicados tienen derecho tomar pacíficamente las tierras que precisan para salvarse del desbarranque. Es totalmente legítimo agarrarse de un fierro caliente cuando te empujan al vacío. La situación exculpa a los usurpadores, que, última instancia, están actuando conforme a los principios generales del derecho: sacrifican el derecho del propietario del predio para proteger el derecho a un futuro digno para sus hijas y nietas. Causan un mal menor para escapar al mal mayor.

Mis vecinas y vecinos de Santa Catalina ocuparon esas 800 hectáreas de tierra yerma, que ni siquiera estaban alambradas, donde solamente crecen chircas y abrojos. El estado de necesidad a que están sometidos justifica plenamente que hayan elegido el camino más directo, la usurpación pacífica de terrenos echados al abandono por sus propietarios. Sí, es verdad, se está agrediendo el derecho del propietario, pero, también es verdad que la propiedad no puede ser utilizada para joder a los demás, su uso debe tener una finalidad social, que impulse el desarrollo de la justicia social, no que la impida. La propiedad privada, al estar monopolizada por unos pocos es la causa de la injusticia.

No hubo daño en las cosas ni en las personas. Al ocupar dejaron marcadas las calles y los espacios comunes (merenderos, CAIF, salón comunal, etc.-, dividieron la tierra en solares, lograron que OSE -con consentimiento del MVOTMA- instalara tres canillas con agua potable, están tramitando en UTE la corriente eléctrica, en la IMM la recolección de residuos. Están dispuestos a pagar sus solares mediante un acuerdo con los propietarios.

¿Dónde está el ánimo de cometer un delito? No. La intencionalidad es resolver por una vía directa el problema social que los gobiernos no quieren resolver, su ánimo es civilizar el páramo que ocuparon, llevar la civilización al desierto. Obedecen el mandato de la justicia social. Su desobediencia social ha tenido la virtud de revelar el carácter injusto del actual estado de cosas.

El fiscal Diego Pérez no tiene dudas. Enceguecido, acusa por asociación para delinquir desechando el contenido social de los hechos. ¡Transmuta un movimiento social en organización delictiva! Asume la misión sagrada de defender la dictadura del capital sobre los más jodidos e indefensos asalariados. Un ejercicio desmedido de poder que, en su filosofía, encierra las bases del terrorismo de Estado.

Vivimos en patrias diferente, señor fiscal, la suya es la de los especuladores inmobiliarios protegidos por el Estado de Derecho, la nuestra es la patria de los trabajadores y trabajadoras que viven en el Estado de Necesidad.

Jorge Zabalza

>>> Erode Ruiz responsable de la Masacre de El filtro al frente de la represión

>>> El Fiscal Diego Perez y el Jefe de Policía Erode Ruiz sobrevolaron el lugar



El día miércoles hubo una nueva movilización, frente a la Torre Ejecutiva, de parte de las familias ocupantes del terreno lindero a Santa Catalina. En plena crisis sanitaria y social, miles de personas están siendo hostigados por un Poder Judicial al servicio de la clase propietaria. Desde Reactiva conversamos con Alejandra, vecina de Nuevo Comienzo, el barrio de 700 familias deposeídas que tanto molesta.
“Los vecinos estamos preocupados con todo este tema, las dos compañeras detenidas fueron procesadas injustamente, estamos todos con el corazón en la boca porque no sabemos qué hacer, nos movilizamos por ellas y para seguir en el terreno”, comenzó relatando.
Le consultamos a Alejandra sobre la carta que le entregaron a Presidencia la pasada movilización del día lunes, en la cual trataban de aclararle algunas versiones falsas que trascendieron en los medios: “Le aclaramos que nosotros no somos delincuentes, lo que queremos es un techo para nosotros y nuestros hijos, que nuestro barrio está en formación y necesitamos alguna solución”.
La vecina nos relató, también, la situación que vivieron el jueves pasado, cuando se desplegó un gran operativo en Nuevo Comienzo, derivando en varias detenciones: “Ese día llegó la policía haciendo un censo (supuestamente), y al rato nos avisaron que se habían llevado a dos compañeras detenidas a Zona 4”. “Al final, el censo era un operativo”, añadió.
Las dos vecinas, supuestas líderes, fueron sentenciadas a arresto domiciliario “para que nos exhortaran a todos los ocupantes a desalojar las viviendas, si ellas no lograban en 7 días que nos fuéramos iban a ser procesadas con prisión”. Alejandra negó que hubiera roles de liderazgo en Nuevo Comienzo, y afirmó que no está en los planes abandonar el terreno: “Los vecinos quieren seguir peleando y apoyando a las compañeras, porque lo que pasó es injusto”, afirmó.
Desde los medios comerciales vienen circulando versiones, como era de esperar, criminalizando a los vecinos, basadas en las versiones policiales, que, por lo demás, carecen de sustento: “Si fuéramos una cuna de delincuentes, como dicen ellos, el barrio no estaría como está. Si recorrés vas a ver realmente el trabajo que hemos hecho, cuando estaba abandonado sí era otra cosa, pero nosostras somos madres de familia, mujeres embarazadas, somos todo gente trabajadora”. Alejandra contó, además, que en la ocupación hay policías y militares, que “no se quieren involucrar mucho para no comprometerse”.
“No sé por qué nos ensucian así, nos condenan por ser pobres, de repente nos cae un operativo, procesan a las compañeras, y de la nada aparecen 13 dueños del terreno, es todo muy raro”, afirmó. Por su parte, la vecina comentó que nadie del sistema político se ha acercado a brindar soluciones, y que el apoyo que han tenido fue fundamentalmente de sindicatos: “Ningún legislador, de ningún partido, apareció. El Mides lo único que acercó fue unas canastas, y los sindicatos nos han ayudado mucho”. Entre ellos, se menciona al del taxi (Suatt), al de la UTU del barrio (Afutu), al de OSE (FFOSE) y al Sunca.
Alejandra finalizó afirmando que no tienen a dónde ir, que si los echan del predio van a parar directamente a la calle, y que están “dispuestos a resistir un desalojo» en caso de que no aparezcan soluciones..

 >>> Nueva movilización en busca de respuestas desde el barrio Nuevo Comienzo de Santa Catalina. 
••En búsqueda de respuestas vecinos y vecinas de la ocupación nuevo comienzo se manifestaron hoy nuevamente y marcharon desde torre ejecutiva hacia el ministerio de vivienda. ••








Te dije!, milicos nunca mas

Te acordás Larrañaga,? que tu proyecto miliquero marchó en las urnas?



>>> Al botón de la botonera








>>> El pueblo dijo NO a la reforma impulsada por Larrañaga y ahora a través de la LUC te la quieren imponer
>>> La inseguridad y la Ley de Urgente Consideración


"Nosotros no hemos analizado dentro del Ministerio del Interior este tema, por lo tanto no quiero hacer una reflexión pública hasta que no tenga este análisis",

Rumbo a un estado policial

>>> Primero tire y después pregunta
>>> Abuso policial garantizado
>>> Respeto al botón

>>> El que ocupare...


>>> Apariencia delictiva
>>> Submarino y plantón
>>> Orwell 1984

>>> Dientes postizos


>>> No comprende a ladrones de gallinas













El hombre que alquiló a la izquierda

George Soros


por Hoenir Sarthou
30 abril 2020


¿Qué ocurre cuando las causas sociales comienzan a recibir fuertes aportes económicos de fundaciones creadas por personalidades “VIP” del sistema financiero y empresarial global?

No hay que especular mucho. Desde hace varias décadas, fundaciones como la Open Society (de George Soros), la Fundación Bill y Melinda Gates, y las Fundaciones Rockefeller, Ford, Kellogg, y otras, destinan cuantiosos fondos a causas habitualmente consideradas “liberales”, “progresistas”, e incluso “de izquierda”. Y los resultados están a la vista.

Usando parte de las fortunas acumuladas por sus creadores en áreas más tradicionales, como las finanzas, el petróleo, la industria química, la agroindustria, la genética o la informática, esas Fundaciones han invertido mucho dinero en las siguientes causas: los derechos humanos, la enseñanza universitaria, el periodismo, el feminismo “de género” y  los derechos de las minorías LGTB (y las políticas de discriminación positiva respecto a esas dos causas), la legalización de la marihuana, el ambientalismo, las campañas por el calentamiento global, la promoción de las “tecnologías verdes”, la investigación, producción y aplicación de nuevas vacunas, la financiación de la OMS (especialidad en que se destaca Bill Gates)  y el apoyo a las políticas recomendadas por la OMS respecto al coronavirus (sepan disculpar si olvido alguna causa, son tantas…).

CONSPIRANOIA
Observen que no me pregunté por qué esas fundaciones invierten en esas causas. No lo hice porque es una pregunta que no puedo contestar. ¿Cómo podría saber qué pasa en las cabezas de Soros, Gates, los Rockefeller o los directores de las otras fundaciones?

No busquen aquí referencias a logias o conspiraciones secretas, ni a los “Iluminati” o a los “reptilianos”. Nada de eso encontrarán en esta nota ni en ninguna de las mías. Por un lado, porque no tengo ninguna noticia confiable sobre la existencia de esas logias. Por otro, porque, como dijo cierto filósofo refiriéndose a Dios, no hay necesidad de esas hipótesis fantásticas para dar cuenta de lo que ocurre, dado que los protagonistas actúan y ejercen su poder ante nuestra vista y paciencia.

La relación entre dinero y poder es consustancial. Quien tiene mucho dinero suele contar con relaciones privilegiadas con el poder político, salvo en las contadas excepciones en que se topa con líderes políticos incorruptibles y muy valientes, lo que lamentablemente no ocurre todos los días.

 Recuerden al actual Ministro de Ganadería y Agricultura diciendo, hace pocas semanas, que él era “un representante” de ciertos productores rurales. O, un poco antes, a personajes como López Mena o Salgado, erigidos en personajes de la Corte presidencial, con su correlato de concesiones abusivas. Ni hablar de UPM, que, sin importar el gobierno de turno, actúa como si fuera la dueña del País.

En lo grande ocurre lo mismo que en lo chico. Si López Mena, Salgado o ciertos empresarios obtienen un trato privilegiado en casa, ¿cómo no van a obtenerlo en el mundo personajes con el poder de incidir en la emisión de dólares, hacer tambalear al Banco de Inglaterra o cambiar el estatus político de países que operaban en la órbita de la ex URSS?

Si a eso le sumamos que varios de estos personajes son socios en muy diversos negocios, que por su actividad financiera influyen en las políticas monetarias de todo el mundo, y que, a través de la financiación y de su influencia política, tienen fuerte incidencia sobre organismos internacionales, incluida la OMS, es imposible analizar la realidad internacional, o la nacional, sin tomar en cuenta su existencia como grupo de poder. En Uruguay, el episodio Mujica-Soros-Rockefeller, respecto a la marihuana, aun siendo anecdótico, lo deja claro.

SOROS, O EL MÉTODO
No tengo idea de quién es Soros realmente. No sé si es el cerebro, el vocero, o el lobista más locuaz de ese grupo de socios. Quizá sólo haga muy ostentosamente lo que otros hicieron siempre con más discreción. Lo cierto es que maneja enormes sumas propias y, durante toda su vida, ha invertido capitales ajenos.  Por añadidura es el creador y animador del Foro de Davos, en el que los más poderosos se juntan con otros no tan poderosos, no sé si para “bajarles línea” o para entretener a los “paparazzi” de la farándula financiera.

Ni siquiera puede asegurarse que el método que lo caracteriza sea invento suyo. Él mismo admite que, siendo estudiante, conoció a dos personas clave en su vida. Una fue Karl Popper, de quien tomó el concepto de “sociedad abierta”; la otra fue uno de los Rockefeller, que le transmitió un concepto esencial para su carrera: si uno puede asociar sus intereses con una buena causa, su poder no tiene límite.

Esa frase condensa el “método” que conocemos: una fundación sin fines de lucro, creada con dinero que se deduce de impuestos, respalda a una “buena causa”. Para eso, transfiere dinero a ciertas ONGs, que presionan para que, en distintos lugares del mundo, se apliquen políticas afines a la “buena causa”, políticas que, milagrosamente, terminan haciendo ganar fortunas a las empresas lucrativas del creador de la fundación. A veces la conexión entre la “buena causa” y la ganancia del filántropo es evidente. Otras veces no tanto. No puede descartarse que algunas de esas jugadas persigan fines mesiánicos, además o en lugar del lucro.

En ocasiones, las inversiones de Soros y de sus socios tienen éxito:  la desestabilización financiera de Inglaterra en 1995, los cambios políticos en Europa del Este, o la conversión de Uruguay en experimento de marihuana legal (en sociedad con Rockefeller); en otras fracasan, al menos temporalmente, como el intento de obstruir la asunción de Trump o la apuesta secesionista en Cataluña.

IZQUIERDA “SOROS”
En la izquierda, el método Soros (uso a Soros como símbolo, ya que no es el único que lo aplica y financia) ha causado un sismo silencioso.

A lo largo de tres décadas, muchos militantes “de izquierda” dieron un giro sorprendente. Los mesiánicos profetas de la revolución proletaria se incorporaron a las ONGs y adhirieron a la financiación y a la agenda “soros” de derechos identitarios, al tiempo que desarrollaron una miopía asombrosa sobre las verdaderas relaciones de poder económico y político, en sus propias sociedades y en el resto del mundo.

Así, en Uruguay, avalaron o toleraron políticas como la bancarización obligatoria y la ley de riego, o la profundización del modelo forestal celulósico, basado en el privilegio, la entrega de bienes públicos, la explotación destructiva de recursos naturales y el sometimiento a los designios del inversor.

¿Cómo fue posible?
Basta con no ver dónde está el verdadero poder, el papel de los bancos, del capital financiero y sus fundaciones, de los organismos internacionales de crédito, de las calificadoras de riesgo, de los inversores privilegiados y leoninos. Basta con ignorar los problemas estructurales del sistema y reducir la política a una lucha entre “izquierda progresista” y “derecha conservadora”. Entendiendo por “izquierda” a una agenda estandarizada de derechos identitarios, el aborto, la diversidad sexual, la marihuana libre, una difusa sensibilidad social más proclive a la caridad que a la justicia social, un ambientalismo “naif” que no cuestiona a la celulosa ni a la agroindustria, y una ciega confianza en que el mundo y los organismos internacionales avanzan por la senda de los derechos humanos hacia la inclusión social. Y entendiendo por “derecha” a una caricatura conservadora que, en el fondo, se reduce a los adversarios electorales, blancos, colorados, y ahora Cabildo Abierto.

El mundo según Soros tiene un algo de “Nunca jamás”. De un lado están Peter Pan, Wendy y los niños progresistas, que son buenos, lindos, modernos, sensibles e inclusivos.  Del otro lado está “la derecha”, compuesta imaginariamente por hombres blancos, viejos, reaccionarios, misóginos, discriminadores y opresores, y… bueno, por mujeres alienadas, y por jóvenes poco empáticos, y por algún homosexual que no termina de salir del closet, en fin….

Tiene también un aspecto terrible. Porque, en la medida en que ese progresismo a lo Soros encarna todo lo bueno, formular dudas respecto a alguna de sus causas, ya sea la brecha salarial de género, el calentamiento global, la bondad de las tecnologías verdes o la mortalidad inaudita del coronavirus y la necesidad de paralizar al mundo y encerrarse, lo convierte a uno en “inmoral, fascista, negacionista, insensible, discriminador, invisibilizador” y (el más reciente pecado mortal) “falto de empatía”.

¿IZQUIERDA?
Esta extraña situación, por la que se declaran “de izquierda” personas y organizaciones financiadas por la cúspide del sistema financiero global, tiene una explicación: nada es más confuso, ambiguo y polivalente que el término “izquierda”.

Cuando empezó a usarse, hacía referencia al lugar en que se sentaban, en la Asamblea Nacional francesa, los representantes de la burguesía radical.

Luego, quizá porque el joven Marx integró el grupo de los hegelianos de izquierda, la palabra se identificó con las luchas de las internacionales obreras y con la profecía marxista, que auguraba la dictadura del proletariado y luego la sociedad sin clases.

Más tarde, cuando el marxismo y el movimiento obrero se dividieron entre la corriente leninista y la socialdemocracia de inspiración bernsteniana, que dieron  lugar respectivamente a la revolución rusa y a la socialdemocracia europea, el término ganó ambigüedad.

El asunto siguió complicándose con el psicoanálisis, la Escuela de Frankfurt, el estructuralismo, el existencialismo, la revolución china, la revolución cubana, el 68 francés, el neomarxismo, los liberales igualitaristas estadounidenses y la posmodernidad, hasta que fue casi imposible decir qué significaba exactamente ser “de izquierda”.

La brillantez de Soros, Rockefeller y otros socios, o de algún intelectual contratado por ellos, es haber advertido que era posible aprovechar la sensibilidad y la capacidad militante de la izquierda para convertirlas en un poderoso instrumento de manipulación económica y política, fuerza de choque, en buena medida inocente, de proyectos económicos y políticos poco transparentes.

La financiación de aquellos aspectos de la sensibilidad “de izquierda” que no apuntan directamente contra las estructuras de propiedad del sistema parece haber sido la clave. Los derechos humanos, el feminismo, las cuestiones de género, la diversidad sexual, la lucha contra la discriminación racial, la preocupación por el medio ambiente, la sustitución del petróleo por tecnologías “verdes”, las campañas contra el Sida o el coronavirus, tienen en común su capacidad de convertirse en armas políticas de desestabilización y chantaje contra los gobiernos y los Estados, sin tocar nada sustancial del sistema económico. Junto a una importante influencia sobre las agencias de noticias y los medios de comunicación, pueden encumbrar, hacer caer o complicarle la vida a cualquier gobernante, como debe saberlo hoy Donald Trump.

Eso si, nunca verán a un izquierdista “Soros” cuestionar al sistema financiero o a los organismos internacionales de crédito.

PATRICIOS Y PLEBEYOS
No pretendo definir qué es o qué debe ser la izquierda, porque me parece tarea imposible.

Hace más de dos mil años, en la antigua Roma, las luchas políticas enfrentaban a patricios y plebeyos. Los que tenían privilegios económicos y poder político, y quienes no los tenían. El senado, por un lado, y los tribunos de la plebe, por otro, expresaban institucionalmente esa lucha.
Esa lucha es eterna. Basta con identificar a quienes tienen realmente el poder y los privilegios, y a quienes no los tienen. Luego es cuestión de situarse de un lado o del otro.

En el mundo actual, todo poder formal está condicionado por el capital financiero, que opera directamente o a través de organismos internacionales de crédito, fundaciones, financiación de inversión corporativa y empresas calificadoras de riesgo. Los gobiernos, los partidos, la academia, la prensa, las ONGs y hasta los sindicatos compiten por esa financiación, lo que implica al menos estar dispuesto a callar lo que ese verdadero poder no quiere oír.

En términos de pensamiento crítico, no es posible seguir chiflando y mirando hacia arriba ante esa realidad. Porque quien paga la cuenta decide el menú.  Es decir, decide qué se piensa, qué se investiga, qué se concluye, qué se dice, qué se hace y por qué se lucha.

No se posible pretender hablar o actuar por la “plebe” estando a sueldo de los nuevos “patricios”. La autonomía respecto de esa financiación es un requisito previo de cualquier pensamiento, praxis, investigación o comunicación que se pretendan críticos.

Es así de simple y, a la vez, de espinoso.







miércoles, 29 de abril de 2020

Porte de armas para los viejitos

Viejitos peligrosos convictos de delitos de lesa humanidad (Que tiene probado legalmente un delito, aunque no lo haya confesado.)





El artículo 115 de la LUC añade a la Ley 19.775 (Ley Orgánica de las Fuerzas Armadas) el siguiente artículo: “Artículo 30 BIS (Derecho al porte de armas por el personal militar en situación de retiro). Sin perjuicio de lo dispuesto, el personal militar en situación de retiro que no posea antecedentes penales, previa evaluación de su idoneidad, conforme a la reglamentación que dicte el Poder Ejecutivo, tendrá el derecho de portar arma corta, la que deberá estar registrada con su consiguiente Guía de Posesión actualizada. El Ministerio de Defensa llevará un registro de Personal Militar en situación de retiro con Porte de Armas vigente”. Según informó El País, la innovación fue propuesta por Cabildo Abierto.

Guido Manini Ríos y Guillermo Domenech durante la Convención Nacional de Cabildo Abierto quieren que los viejitos vayan calzados

>>> La muerte de Plef

Un militar retirado decidió una tarde que Plef era un delincuente



>>> Tiene urgencia?


>>> Para qué?

El senador Raul Lozano, donde explica que es fundamental el porte de armas cortas de militares retirados. Ellos están a las órdenes por si existe algún ataque extranjero y los necesitamos.



El único enemigo que tienen los militares retirados es la justicia









ASSE lo cesó

José Minarrieta en el Hospital Maciel justo en el día e la hecatombe.


>>> Excelente declaración





El director del Hospital Maciel, José Minarrieta, denunció "las pésimas condiciones de seguridad" con las que fue trasladado el detenido a la emergencia.



Este martes 28 de abril, pasado el mediodía se suscitó un grave incidente en el hospital Maciel que rápidamente derivó en un hecho policial.
Un ciudadano que había sido conducido al nosocomio, consiguió arrebatar el arma de reglamento de uno de los policías que lo custodiaban y con ella hirió a ambos funcionarios policiales y se dio a la fuga.
El ciudadano salió del centro hospitalario y finalmente fue abatido por la policía en la zona de la escollera Sarandí, donde supuestamente se había atrincherado.
De forma casi inmediata el director del hospital Dr. José Minarrieta denunció, via Twitter la falta de profesionalidad con que se había realizado la conducción del ciudadano.
Hace pocos minutos se acaba de anunciar que el jerarca del centro hospitalario ha sido cesado, una decisión que se le informara antes de haber realizado dicha denuncia en las redes sociales.

Porqué no te callas?


Este martes tuvo la notificación verbal y cesará formalmente este miércoles, cuando le llegue la notificación por escrito. 

El cese de Minarrieta se cruza con el episodio que ocurrió ayer en la entrada a la emergencia del Maciel que el propio Minarrieta denunció en su cuenta de Twitter: “Como director del Hospital Maciel denuncio públicamente las pésimas condiciones de seguridad con las que fue trasladado un detenido a nuestra emergencia”. Según relató, el hombre robó el arma de uno de los policías que lo trasladaban y disparó a ambos efectivos en la entrada a la emergencia. “Esta indudable falta de profesionalismo del personal policial puso en riesgo a nuestros funcionarios y pacientes, lo cual es inaceptable. ¡En la entrada del Servicio de Emergencia, un tiroteo! Inadmisible”, escribió Minarrieta.



>>> Mataron al desquiciado


Un hombre que era trasladado por la Policía al Hospital Maciel, logró desarmar a uno de los efectivos que lo acompañaba y baleó a los dos uniformados.
El individuo había sido asistido minutos antes en Mercedes y Tristán Narvaja por presentar problemas de salud, y fue llevado hasta el centro asistencial para que se chequeara su situación.
Cuando era ingresado a la puerta de emergencia se desacató y le quitó el arma de reglamento a uno de los efectivos. Tras balear a los uniformados, se fugó corriendo del hospital con el arma en la mano en dirección a la escollera Sarandí.
Varios patrulleros y más de una veintena de efectivos policiales llegaron hasta el lugar. El hombre se vio rodeado y le apuntó con el arma a uno de los policías, que repelió la amenaza.
El sujeto fue abatido y su cuerpo cayó al agua. Debió ser retirados por buzos de la Armada Nacional, con jurisdicción en el lugar, y un equipo de Bomberos.
La Unidad Táctica de Negociadores de la Guardia Republicana fue activada, pero cuando llegó, el hombre ya había sido ultimado por la Policía.
El director nacional de Policía, Diego Fernández, y el jefe de Policía de Montevideo, Erode Ruiz, concurrieron personalmente al lugar para supervisar el operativo policial.

"El detenido robó el arma a los policías que lo trasladaban, y les disparó a ambos en la entrada de la Emergencia, antes de ingresar. Esta indudable falta de profesionalismo del personal policial puso en riesgo a nuestros funcionarios y pacientes, lo cual es inaceptable. En la entrada del Servicio de Emergencia, un tiroteo! Inadmisible", publicó Minarrieta en Twitter.
El director explicó que cuando bajaron a la persona del móvil "evidentemente" lo hicieron sin medidas "porque pudo sustraer el arma y dispararle a ambos policías". "Cuando una persona persona es detenida y es trasladada al Hospital, la policía debe asegurar las condiciones mínimas de seguridad para el personal" agregó.















Solo muero si ustedes van aflojando




>>> Sobre la muerte de Raúl Sendic

Xenia Itté, la viuda del fundador del MLN, recuerda el último enfrentamiento en el que cayó herido La Armada no mató a Sendic porque no querían otro "Che" en América Latina "Hay que matarlo, es Raúl Sendic, hay que matarlo", gritaba una y otra vez el inspector Hugo Campos Hermida aquella madrugada del 1º de setiembre de 1972, mientras el líder tupamaro estaba tirado en la vereda en medio de un impresionante charco de sangre, herido por una bala que le destrozó el maxilar, los dientes y la lengua. "Yo tenía el presentimiento de que esa noche caíamos en manos de las Fuerzas Conjuntas, pero estábamos decididos a resistir y Raúl ya había dicho que no se iba a entregar vivo", recuerda Xenia Itté, que en aquel momento era la compañera del líder guerrillero, y participó en el tiroteo en el que Sendic cayó gravemente herido. A casi treinta años de aquellos hechos, Xenia dijo a LA REPUBLICA que "pudieron haberlo matado, pero un comandante del Fusna me reveló que no querían tener otro Che en América Latina".

ALVARO RODRIGUEZ

Tres décadas después de aquel enfrentamiento, Xenia Itté recordó el tiroteo con los militares, la detención, la cárcel y los viajes al exterior para atender la grave enfermedad que padecía Sendic.

Hoy tiene 60 años y vive en una chacra ubicada cerca de San Jacinto, en la zona rural del departamento de Canelones. Junto con su actual compañero se dedica a la apicultura y tareas de granja. Estuvo siete años detenida en el Fusna (1972 a 1979) y después pasó a la Cárcel de Punta de Rieles.

"Un mal presentimiento"

Había conocido a Sendic en su ciudad natal, Bella Unión, donde era maestra y también administradora y locutora de una radio local. Muchos años después formó pareja con el líder guerrillero.

Así recuerda hoy el operativo llevado a cabo por la Brigada Nº 2 de los Fusileros Navales (Fusna), minutos después de la medianoche del 1º de setiembre de 1972.

"Nosotros estábamos viviendo temporariamente en un local de la calle Sarandí 225 entre Pérez Castellano y Maciel. En realidad vivíamos en Pando, pero con Raúl veníamos esporádicamente a Montevideo y nos quedábamos allí.

Yo ya tenía el presentimiento de que esa noche caíamos. El círculo se venía cerrando y me daba la impresión de que en cualquier momento nos iban a detener. Las Fuerzas Conjuntas habían apresado a muchos compañeros y ya casi no había locales donde refugiarse. Raúl había planteado una reculada hacia el Interior, hacia el monte, donde él se sentía más seguro. Incluso, lo más probable era que esa fuese la última noche en ese lugar, porque pensábamos irnos hacia el centro y el norte del país".

"Grabado a fuego"

"Habían pasado unos minutos de la medianoche, cuando sentimos que golpeaban la puerta. Adentro estábamos Raúl Sendic, Jorge Ramada y yo. Desde afuera gritaban que eran las Fuerzas Conjuntas. Nosotros teníamos pensado resistir y Raúl ya había dicho que no se iba a entregar vivo.

Si hay algo que me quedó grabado a fuego fue el momento de la detención. Estábamos en total inferioridad numérica y no teníamos visión alguna. El local tenía una persiana metálica, porque antiguamente funcionaba una peluquería, y después venía un corredor largo y angosto. Allí empezó el tiroteo.

Raúl empezó a disparar con una pistola. Los tres estábamos armados. Nos dio la orden de enfrentarlos y de inmediato nosotros también empezamos a disparar. Desde afuera gritaban por un megáfono que nos entregáramos. En determinado momento, se nos terminaron las balas y Raúl nos dio la orden, a Ramada y a mí, de que teníamos que salir.

Se hizo un silencio y por el megáfono insistían en que nos entregáramos. Raúl les dijo que iban a salir dos compañeros y pidió que les respetaran la vida. Ellos pidieron que empezaran a salir y se comprometieron a respetarnos la vida.

En realidad, nosotros no sabíamos quiénes estaban afuera. Si tenemos en cuenta lo que eran las Fuerzas Conjuntas en aquella época y la forma en que sonaban los disparos afuera, nunca hubiéramos imaginado que pudiéramos contar el cuento".

"El túnel del tiempo"

"Raúl le dio la orden a Ramada para que saliera primero. Desde afuera pidieron que lo hiciera con las manos en alto. Ramada salió y Raúl volvió a gritarles que le respetaran la vida. Se hizo un silencio total. Desde adentro no sabíamos qué estaba pasando afuera.

Al rato volvieron a hablar por megáfono, pidiendo que saliera el siguiente. Raúl, gritando, les dijo que era una compañera y volvió a pedir respeto por la vida.
Salí con las manos en alto. Recuerdo que caminar por aquel corredor era como recorrer el túnel del tiempo. Los minutos parecían interminables.
Cuando llegué a la puerta, encandilada por una potente luz, me tomaron del pelo y me dieron varias trompadas. Me gritaban que me pusiera contra la pared y me preguntaban quién era, cuál era mi nombre. Lo vi a Ramada que estaba más lejos, tirado en el suelo. Y siguió el tiroteo, mientras le pedían al que estaba adentro que se entregara. Creo que ya sabían que se trataba de Raúl Sendic".

"Hay que matarlo"

"El contestó que tenía más balas y que iba a seguir peleando. Después se hizo un silencio y entraron a la casa. Minutos después sacaron a Raúl, arrastrándolo, totalmente ensangrentado. Vi que le salía sangre por la boca.

Lo dejaron un rato tirado en la vereda, junto a la puerta del local. Se oían sirenas. De repente, llegó una persona que dijo que era el inspector Campos Hermida, y gritaba: 'Hay que matarlo, es Raúl Sendic, hay que matarlo'.

Pero alguien de la Marina dijo que el operativo estaba a cargo de ellos, que era su detenido. Después se acercó una ambulancia y se llevaron a Raúl. El hecho de que quedara boca abajo le salvó la vida, de lo contrario se hubiera ahogado con su propia sangre.

El contaba después que lo trataron muy bien. Lo llevaron al Hospital Militar y le hicieron una traqueotomía para que pudiera respirar".

"No queremos otro Che"

"A mí me llevaron al Fusna. Unos días después el comandante de esa repartición, Julio César Martínez, fue a mi celda y me dijo que Sendic estaba fuera de peligro. Yo no le creí y le dije que todos eran unos asesinos, que habían matado a Raúl. El me respondió: 'No lo matamos porque no queremos tener otro Che en América Latina'.

Un mes después lo trajeron a la cárcel del Fusna. Una madrugada de octubre, me sacaron de mi celda, con los ojos vendados como siempre, y me llevaron hasta su celda.
Cuando me quitaron la venda, lo pude ver. Los dos nos sorprendimos. Tenía toda la cabeza vendada y no podía hablar, le habían pegado un tiro que le atravesó la mandíbula y le destrozó el maxilar.
En ese momento le dije que yo había sido una cobarde porque me había entregado, dejándolo solo. El después me escribió una carta donde me decía que mi actitud había sido muy valiente.

En febrero de 1973 lo volvieron a internar en el Hospital Militar, porque tenían que hacerle una nueva operación. Aquella bala actuó como una granada de fragmentación y le voló el maxilar, el labio inferior y parte de la lengua. Raúl nunca pudo volver a hablar bien.
Después que salimos en libertad, la primera operación importante se la realizaron en Cuba, a fines de 1985. Le hicieron una cirugía, porque tenía la lengua pegada a la mejilla. Después tuvo que hacer cantidad de ejercicios para poder recuperar el habla. Mejoró mucho, tuvo cierta recuperación, pero nunca volvió a hablar bien y se cansaba bastante".

El viaje a Francia

"En febrero de 1989 nos fuimos a Francia, pensando que podía tener alguna mejoría. Raúl estaba muy enfermo. La verdad es que recibíamos ofrecimientos desde todas partes del mundo, interesados en brindarle tratamiento médico especializado.

Pero el hermano, Alberto, y la cuñada Anne Marie, quisieron que nos fuéramos a París, buscando mejores posibilidades de atención.

Estuvo internado en distintas clínicas. Lo atendía un médico especializado en el mal de Charcot, que fue lo que lo afectó al final de su vida. Es una enfermedad que ataca las neuronas motrices. El médico decía que era un caso extraño, por la rapidez con que avanzaba la pérdida de motricidad. Todos los días le aparecía algo nuevo, afectando partes fundamentales.

Lo último fue la respiración y la deglución. Antes de fallecer, Raúl prácticamente no podía comer. Para poder respirar le habían colocado un aparato que sustituía el diafragma. Fue una etapa muy dura, prácticamente todos los días le sustituían alguna función colocándole un nuevo aparato. La enfermedad fue provocada no solamente por la herida de bala, sino por todo el sufrimiento que padeció en las cárceles". Sendic falleció en París el 28 de abril de 1989, a los 64 años de edad. Fue trasladado a Montevideo el 5 de mayo y, al día siguiente, una verdadera multitud acompañó el cortejo fúnebre hasta el Cementerio de La Teja.



SENDIC:
...por la tierra y con vos.
y
ahora...
qué plaza de los caídos llevará tu nombre
qué discurso te pondrá en tu sitio
qué fecha será tuya e indeleble...?

quién te hereda
los ojos la mira la mirada
la voz chiquita y terca de línea meridiana
la mansa risa de los campamentos
la artiguísima frente de luz en los cantones
la enérgica firmeza de la acción...?
quién no te debe
un rumbo cierto
una palabra exacta
una señal precisa
un triye clandestino
llegador como él sólo...
cómo será –de hoy en adelante-
el grito la consigna la pancarta
la siempreviva lucha de tu pueblo
tupamareando el curso de la historia...?
dónde volverá a ser
tu Itacumbú
tu Marquetalia
tu Tiro Suizo tan certero y claro
tu tranco convencido
por-la -vereda- de-los-pares...
cuándo vendrá
tu aurora
tu cosecha
tu vendimiosa frutedad
tu tierra
-sobre todo tu tierra tan peleada-
peludamente
y
palmo a palmo
nuestra...?
...muerto de muchas veces desde tu largo entonces
buscado requerido tiroteado capturado
no rendido de nunca y siempre en el combate
cañero empecinado de la zafra de todos...
...
te cargamos al hombro
y
sólo pesas
como
un fusil una semilla
un niño una victoria
un continente y
una estrella...
no pesan
la bandera
ni
tu cuerpo
fardo glorioso alzado a lomo nuestro...
...en esta multitud que te acompaña
anda el pedazo baleado de tu lengua
convocando orientales
reuniendo amaneceres
repitiendo seguro :
venceremos...!
Raúl
“Rufo”
Canario
COMPAÑERO...!!
miguel ángel olivera
“el cristo”
















martes, 28 de abril de 2020

Trabajadores del BROU a la ciudadanía

Desesperación ciudadana


DE LOS TRABAJADORES DEL BANCO REPUBLICA A LA CIUDADANIA

Clientes y usuarios/as:

Desde que el Gobierno declaró la emergencia sanitaria, luego de permitir ingresar al país -sin ningún control- a quienes procedían de países donde la epidemia se había desatado, los trabajadores y trabajadoras del BROU, así como el personal tercerizado que se desempeña en el mismo, no hemos dejado de atender ni un solo día.

Pese a la recomendación del MSP de quedarse en casa, y a la del BCU de establecer tareas primordiales y mantener hasta 1/3 de las Dependencias abiertas, únicamente se cerraron dependencias en aquellas localidades donde había al menos una que permaneciera brindando servicio. Nunca se determinó qué tareas resultaban imprescindibles, por lo que TODOS los servicios fueron brindados.

Los trabajadores del BROU no fuimos aplaudidos, como en el caso de otras profesiones, sino que, por el contrario, somos insultados a través de las (cuándo no!) entrevistas parcializadas de los grandes medios de comunicación, y agredidos física y verbalmente en Dependencias de todo el país.

En particular, poco recuerdo tienen los medios, como Subrayado, que el 12 de marzo una compañera fue baleada por hacer su trabajo y hoy alimentan el odio de esta misma población (Paysandú) hacia trabajadores que, a pesar de los intentos y propuestas del sindicato, no han podido revertir las decisiones capitalistas y antihumanistas del gobierno anterior, profundizada por este nuevo gobierno.

El BROU no tuvo un protocolo de atención porque jamás se detuvo. Día a día, con un directorio acéfalo, esta Comisión Representativa negoció cada frasco de alcohol, cada limpieza, cada mampara, cada forma de atender, cada procedimiento, que permitiera que los trabajadores estuvieran seguros y que ustedes siguieran siendo atendidos.

Poner trabajadores contra trabajadores parece ser la herramienta de cuanto gobierno neoliberal nos preside, y la población desesperada arremete sin siquiera analizar que la riqueza de nuestro país se reparte en pocas manos, que los trabajadores y jubilados no llegan a fin de mes si no sacan un préstamo, que los intereses que el banco "país" les cobra, más el IVA, van a parar a las arcas del Estado y ascienden a más de 15 millones de dólares al mes.

Las largas filas no son producto de trabajadores "sinvergüenzas" sino de este Directorio que se negó una y otra vez a establecer atención por agenda en todos sus productos, a diferir en forma automática las cuotas de nuestros créditos "sociales" y tarjetas de crédito para trabajadores del sector público y jubilados y, por supuesto, al ingreso de personal en un momento en que la tasa de desempleo subió al 16%. La eliminación de vacantes de este Directorio, y del anterior, es un claro atentado contra los trabajadores y clientes del BROU y, por supuesto, contra esta institución. A modo de ejemplo, hay 26 trabajadores del interior del país listos para ingresar. Su salario es el 0,18% de las ganancias que ustedes, los uruguayos, pagan al brou mensualmente por sus créditos "sociales". Estos 26 trabajadores permitirían atender a más de 1.000 clientes y usuarios por día.

A partir del 4 de mayo, y sin ninguna mesa de negociación con el sindicato, en una clara violación al Convenio Colectivo, el BROU pretende reintegrar compulsivamente a todos los trabajadores que no estén en población de riesgo. Ello aumentará exponencialmente el riesgo de contagio y el mantenimiento de la atención, ya que sin personal en reserva, un solo contagio es un banco cerrado.

Pero la economía está por encima de la salud, sobre todo si se trata de la salud de los pobres y la economía, la de los ricos.

El Directorio y el Gobierno son responsables de cada cliente no atendido, y de cada trabajador enfermo. Un reconocimiento absoluto a todos los trabajadores que día a día arriesgan su vida y la de sus familias por mantener la cadena de pagos y la atención de los verdaderos dueños del banco: los uruguayos y uruguayas. Exhortamos por tanto a la población a reflexionar sobre hacia dónde dirigir tan justificada ira. Dirigirla hacia los trabajadores es lo que parece que todo Gobierno quiere. No les demos el gusto.

Es desinteligente no buscar medidas efectivas para que los clientes y usuarios no concurran en masa a las dependencias del Banco. Las propuestas realizadas por el sindicato han sido o bien rechazadas o simplemente ignoradas por el Directorio. Por todo lo expuesto deslindamos toda responsabilidad de los trabajadores. La Comisión Representativa evaluará junto con sus afiliados los pasos a seguir, si el Directorio mantiene el desconocimiento a la organización sindical que hasta el momento ha garantizado la atención de usuarios y clientes.

COMISIÓN REPRESENTATIVA BROU

AEBU – PIT-CNT















La emergencia viral y el mundo de mañana.



   Byung-Chul Han, el filósofo surcoreano que piensa desde Berlín


Los países asiáticos están gestionando mejor esta crisis que Occidente. Mientras allí se trabaja con datos y mascarillas, aquí se llega tarde y se levantan fronteras



Byung-Chul Han
22 mar 2020

El coronavirus está poniendo a prueba nuestro sistema. Al parecer Asia tiene mejor controlada la pandemia que Europa. En Hong Kong, Taiwán y Singapur hay muy pocos infectados. En Taiwán se registran 108 casos y en Hong Kong 193. En Alemania, por el contrario, tras un período de tiempo mucho más breve hay ya 15.320 casos confirmados, y en España 19.980 (datos del 20 de marzo). También Corea del Sur ha superado ya la peor fase, lo mismo que Japón. Incluso China, el país de origen de la pandemia, la tiene ya bastante controlada. Pero ni en Taiwán ni en Corea se ha decretado la prohibición de salir de casa ni se han cerrado las tiendas y los restaurantes. Entre tanto ha comenzado un éxodo de asiáticos que salen de Europa. Chinos y coreanos quieren regresar a sus países, porque ahí se sienten más seguros. Los precios de los vuelos se han multiplicado. Ya apenas se pueden conseguir billetes de vuelo para China o Corea.
Europa está fracasando. Las cifras de infectados aumentan exponencialmente. Parece que Europa no puede controlar la pandemia. En Italia mueren a diario cientos de personas. Quitan los respiradores a los pacientes ancianos para ayudar a los jóvenes. Pero también cabe observar sobreactuaciones inútiles. Los cierres de fronteras son evidentemente una expresión desesperada de soberanía. Nos sentimos de vuelta en la época de la soberanía. El soberano es quien decide sobre el estado de excepción. Es soberano quien cierra fronteras. Pero eso es una huera exhibición de soberanía que no sirve de nada. Serviría de mucha más ayuda cooperar intensamente dentro de la Eurozona que cerrar fronteras a lo loco. Entre tanto también Europa ha decretado la prohibición de entrada a extranjeros: un acto totalmente absurdo en vista del hecho de que Europa es precisamente adonde nadie quiere venir. Como mucho, sería más sensato decretar la prohibición de salidas de europeos, para proteger al mundo de Europa. Después de todo, Europa es en estos momentos el epicentro de la pandemia.

Las ventajas de Asia

En comparación con Europa, ¿qué ventajas ofrece el sistema de Asia que resulten eficientes para combatir la pandemia? Estados asiáticos como Japón, Corea, China, Hong Kong, Taiwán o Singapur tienen una mentalidad autoritaria, que les viene de su tradición cultural (confucianismo). Las personas son menos renuentes y más obedientes que en Europa. También confían más en el Estado. Y no solo en China, sino también en Corea o en Japón la vida cotidiana está organizada mucho más estrictamente que en Europa. Sobre todo, para enfrentarse al virus los asiáticos apuestan fuertemente por la vigilancia digital. Sospechan que en el big data podría encerrarse un potencial enorme para defenderse de la pandemia. Se podría decir que en Asia las epidemias no las combaten solo los virólogos y epidemiólogos, sino sobre todo también los informáticos y los especialistas en macrodatos. Un cambio de paradigma del que Europa todavía no se ha enterado. Los apologetas de la vigilancia digital proclamarían que el big data salva vidas humanas.

Varios ciudadanos, todos ellos con mascarilla, hacen cola para coger el autobús el pasado 20 de marzo en Pekín

La conciencia crítica ante la vigilancia digital es en Asia prácticamente inexistente. Apenas se habla ya de protección de datos, incluso en Estados liberales como Japón y Corea. Nadie se enoja por el frenesí de las autoridades para recopilar datos. Entre tanto China ha introducido un sistema de crédito social inimaginable para los europeos, que permite una valoración o una evaluación exhaustiva de los ciudadanos. Cada ciudadano debe ser evaluado consecuentemente en su conducta social. En China no hay ningún momento de la vida cotidiana que no esté sometido a observación. Se controla cada clic, cada compra, cada contacto, cada actividad en las redes sociales. A quien cruza con el semáforo en rojo, a quien tiene trato con críticos del régimen o a quien pone comentarios críticos en las redes sociales le quitan puntos. Entonces la vida puede llegar a ser muy peligrosa. Por el contrario, a quien compra por Internet alimentos sanos o lee periódicos afines al régimen le dan puntos. Quien tiene suficientes puntos obtiene un visado de viaje o créditos baratos. Por el contrario, quien cae por debajo de un determinado número de puntos podría perder su trabajo. En China es posible esta vigilancia social porque se produce un irrestricto intercambio de datos entre los proveedores de Internet y de telefonía móvil y las autoridades. Prácticamente no existe la protección de datos. En el vocabulario de los chinos no aparece el término “esfera privada”.
En China hay 200 millones de cámaras de vigilancia, muchas de ellas provistas de una técnica muy eficiente de reconocimiento facial. Captan incluso los lunares en el rostro. No es posible escapar de la cámara de vigilancia. Estas cámaras dotadas de inteligencia artificial pueden observar y evaluar a todo ciudadano en los espacios públicos, en las tiendas, en las calles, en las estaciones y en los aeropuertos.
Toda la infraestructura para la vigilancia digital ha resultado ser ahora sumamente eficaz para contener la epidemia. Cuando alguien sale de la estación de Pekín es captado automáticamente por una cámara que mide su temperatura corporal. Si la temperatura es preocupante todas las personas que iban sentadas en el mismo vagón reciben una notificación en sus teléfonos móviles. No en vano el sistema sabe quién iba sentado dónde en el tren. Las redes sociales cuentan que incluso se están usando drones para controlar las cuarentenas. Si uno rompe clandestinamente la cuarentena un dron se dirige volando a él y le ordena regresar a su vivienda. Quizá incluso le imprima una multa y se la deje caer volando, quién sabe. Una situación que para los europeos sería distópica, pero a la que, por lo visto, no se ofrece resistencia en China.
Los Estados asiáticos tienen una mentalidad autoritaria. Y los ciudadanos son más obedientes
Ni en China ni en otros Estados asiáticos como Corea del Sur, Hong Kong, Singapur, Taiwán o Japón existe una conciencia crítica ante la vigilancia digital o el big data. La digitalización directamente los embriaga. Eso obedece también a un motivo cultural. En Asia impera el colectivismo. No hay un individualismo acentuado. No es lo mismo el individualismo que el egoísmo, que por supuesto también está muy propagado en Asia.
Al parecer el big data resulta más eficaz para combatir el virus que los absurdos cierres de fronteras que en estos momentos se están efectuando en Europa. Sin embargo, a causa de la protección de datos no es posible en Europa un combate digital del virus comparable al asiático. Los proveedores chinos de telefonía móvil y de Internet comparten los datos sensibles de sus clientes con los servicios de seguridad y con los ministerios de salud. El Estado sabe por tanto dónde estoy, con quién me encuentro, qué hago, qué busco, en qué pienso, qué como, qué compro, adónde me dirijo. Es posible que en el futuro el Estado controle también la temperatura corporal, el peso, el nivel de azúcar en la sangre, etc. Una biopolítica digital que acompaña a la psicopolítica digital que controla activamente a las personas.
En Wuhan se han formado miles de equipos de investigación digitales que buscan posibles infectados basándose solo en datos técnicos. Basándose únicamente en análisis de macrodatos averiguan quiénes son potenciales infectados, quiénes tienen que seguir siendo observados y eventualmente ser aislados en cuarentena. También por cuanto respecta a la pandemia el futuro está en la digitalización. A la vista de la epidemia quizá deberíamos redefinir incluso la soberanía. Es soberano quien dispone de datos. Cuando Europa proclama el estado de alarma o cierra fronteras sigue aferrada a viejos modelos de soberanía.
La lección de la epidemia debería devolver la fabricación de ciertos productos médicos y farmacéuticos a Europa
No solo en China, sino también en otros países asiáticos la vigilancia digital se emplea a fondo para contener la epidemia. En Taiwán el Estado envía simultáneamente a todos los ciudadanos un SMS para localizar a las personas que han tenido contacto con infectados o para informar acerca de los lugares y edificios donde ha habido personas contagiadas. Ya en una fase muy temprana, Taiwán empleó una conexión de diversos datos para localizar a posibles infectados en función de los viajes que hubieran hecho. Quien se aproxima en Corea a un edificio en el que ha estado un infectado recibe a través de la “Corona-app” una señal de alarma. Todos los lugares donde ha habido infectados están registrados en la aplicación. No se tiene muy en cuenta la protección de datos ni la esfera privada. En todos los edificios de Corea hay instaladas cámaras de vigilancia en cada piso, en cada oficina o en cada tienda. Es prácticamente imposible moverse en espacios públicos sin ser filmado por una cámara de vídeo. Con los datos del teléfono móvil y del material filmado por vídeo se puede crear el perfil de movimiento completo de un infectado. Se publican los movimientos de todos los infectados. Puede suceder que se destapen amoríos secretos. En las oficinas del ministerio de salud coreano hay unas personas llamadas “tracker” que día y noche no hacen otra cosa que mirar el material filmado por vídeo para completar el perfil del movimiento de los infectados y localizar a las personas que han tenido contacto con ellos.
Ha comenzado un éxodo de asiáticos en Europa. Quieren regresar a sus países porque ahí se sienten más seguros
Una diferencia llamativa entre Asia y Europa son sobre todo las mascarillas protectoras. En Corea no hay prácticamente nadie que vaya por ahí sin mascarillas respiratorias especiales capaces de filtrar el aire de virus. No son las habituales mascarillas quirúrgicas, sino unas mascarillas protectoras especiales con filtros, que también llevan los médicos que tratan a los infectados. Durante las últimas semanas, el tema prioritario en Corea era el suministro de mascarillas para la población. Delante de las farmacias se formaban colas enormes. Los políticos eran valorados en función de la rapidez con la que las suministraban a toda la población. Se construyeron a toda prisa nuevas máquinas para su fabricación. De momento parece que el suministro funciona bien. Hay incluso una aplicación que informa de en qué farmacia cercana se pueden conseguir aún mascarillas. Creo que las mascarillas protectoras, de las que se ha suministrado en Asia a toda la población, han contribuido de forma decisiva a contener la epidemia.
Los coreanos llevan mascarillas protectoras antivirus incluso en los puestos de trabajo. Hasta los políticos hacen sus apariciones públicas solo con mascarillas protectoras. También el presidente coreano la lleva para dar ejemplo, incluso en las conferencias de prensa. En Corea lo ponen verde a uno si no lleva mascarilla. Por el contrario, en Europa se dice a menudo que no sirven de mucho, lo cual es un disparate. ¿Por qué llevan entonces los médicos las mascarillas protectoras? Pero hay que cambiarse de mascarilla con suficiente frecuencia, porque cuando se humedecen pierden su función filtrante. No obstante, los coreanos ya han desarrollado una “mascarilla para el coronavirus” hecha de nano-filtros que incluso se puede lavar. Se dice que puede proteger a las personas del virus durante un mes. En realidad es muy buena solución mientras no haya vacunas ni medicamentos. En Europa, por el contrario, incluso los médicos tienen que viajar a Rusia para conseguirlas. Macron ha mandado confiscar mascarillas para distribuirlas entre el personal sanitario. Pero lo que recibieron luego fueron mascarillas normales sin filtro con la indicación de que bastarían para proteger del coronavirus, lo cual es una mentira. Europa está fracasando. ¿De qué sirve cerrar tiendas y restaurantes si las personas se siguen aglomerando en el metro o en el autobús durante las horas punta? ¿Cómo guardar ahí la distancia necesaria? Hasta en los supermercados resulta casi imposible. En una situación así, las mascarillas protectoras salvarían realmente vidas humanas. Está surgiendo una sociedad de dos clases. Quien tiene coche propio se expone a menos riesgo. Incluso las mascarillas normales servirían de mucho si las llevaran los infectados, porque entonces no lanzarían los virus afuera.
En la época de las ‘fake news’, surge una apatía hacia la realidad. Aquí, un virus real, no informático, causa conmoción
En los países europeos casi nadie lleva mascarilla. Hay algunos que las llevan, pero son asiáticos. Mis paisanos residentes en Europa se quejan de que los miran con extrañeza cuando las llevan. Tras esto hay una diferencia cultural. En Europa impera un individualismo que trae aparejada la costumbre de llevar la cara descubierta. Los únicos que van enmascarados son los criminales. Pero ahora, viendo imágenes de Corea, me he acostumbrado tanto a ver personas enmascaradas que la faz descubierta de mis conciudadanos europeos me resulta casi obscena. También a mí me gustaría llevar mascarilla protectora, pero aquí ya no se encuentran.
En el pasado, la fabricación de mascarillas, igual que la de tantos otros productos, se externalizó a China. Por eso ahora en Europa no se consiguen mascarillas. Los Estados asiáticos están tratando de proveer a toda la población de mascarillas protectoras. En China, cuando también ahí empezaron a ser escasas, incluso reequiparon fábricas para producir mascarillas. En Europa ni siquiera el personal sanitario las consigue. Mientras las personas se sigan aglomerando en los autobuses o en los metros para ir al trabajo sin mascarillas protectoras, la prohibición de salir de casa lógicamente no servirá de mucho. ¿Cómo se puede guardar la distancia necesaria en los autobuses o en el metro en las horas punta? Y una enseñanza que deberíamos sacar de la pandemia debería ser la conveniencia de volver a traer a Europa la producción de determinados productos, como mascarillas protectoras o productos medicinales y farmacéuticos.

El presidente de Corea del sur, el tercero por la izquierda, el pasado 25 de febrero en el Ayuntamiento de Daegu

A pesar de todo el riesgo, que no se debe minimizar, el pánico que ha desatado la pandemia de coronavirus es desproporcionado. Ni siquiera la “gripe española”, que fue mucho más letal, tuvo efectos tan devastadores sobre la economía. ¿A qué se debe en realidad esto? ¿Por qué el mundo reacciona con un pánico tan desmesurado a un virus? Emmanuel Macron habla incluso de guerra y del enemigo invisible que tenemos que derrotar. ¿Nos hallamos ante un regreso del enemigo? La “gripe española” se desencadenó en plena Primera Guerra Mundial. En aquel momento todo el mundo estaba rodeado de enemigos. Nadie habría asociado la epidemia con una guerra o con un enemigo. Pero hoy vivimos en una sociedad totalmente distinta.
En realidad hemos estado viviendo durante mucho tiempo sin enemigos. La guerra fría terminó hace mucho. Últimamente incluso el terrorismo islámico parecía haberse desplazado a zonas lejanas. Hace exactamente diez años sostuve en mi ensayo La sociedad del cansancio la tesis de que vivimos en una época en la que ha perdido su vigencia el paradigma inmunológico, que se basa en la negatividad del enemigo. Como en los tiempos de la guerra fría, la sociedad organizada inmunológicamente se caracteriza por vivir rodeada de fronteras y de vallas, que impiden la circulación acelerada de mercancías y de capital. La globalización suprime todos estos umbrales inmunitarios para dar vía libre al capital. Incluso la promiscuidad y la permisividad generalizadas, que hoy se propagan por todos los ámbitos vitales, eliminan la negatividad del desconocido o del enemigo. Los peligros no acechan hoy desde la negatividad del enemigo, sino desde el exceso de positividad, que se expresa como exceso de rendimiento, exceso de producción y exceso de comunicación. La negatividad del enemigo no tiene cabida en nuestra sociedad ilimitadamente permisiva. La represión a cargo de otros deja paso a la depresión, la explotación por otros deja paso a la autoexplotación voluntaria y a la autooptimización. En la sociedad del rendimiento uno guerrea sobre todo contra sí mismo.

Umbrales inmunológicos y cierre de fronteras.

Pues bien, en medio de esta sociedad tan debilitada inmunológicamente a causa del capitalismo global irrumpe de pronto el virus. Llenos de pánico, volvemos a erigir umbrales inmunológicos y a cerrar fronteras. El enemigo ha vuelto. Ya no guerreamos contra nosotros mismos, sino contra el enemigo invisible que viene de fuera. El pánico desmedido en vista del virus es una reacción inmunitaria social, e incluso global, al nuevo enemigo. La reacción inmunitaria es tan violenta porque hemos vivido durante mucho tiempo en una sociedad sin enemigos, en una sociedad de la positividad, y ahora el virus se percibe como un terror permanente.
Pero hay otro motivo para el tremendo pánico. De nuevo tiene que ver con la digitalización. La digitalización elimina la realidad. La realidad se experimenta gracias a la resistencia que ofrece, y que también puede resultar dolorosa. La digitalización, toda la cultura del “me gusta”, suprime la negatividad de la resistencia. Y en la época posfáctica de las fake news y los deepfakes surge una apatía hacia la realidad. Así pues, aquí es un virus real, y no un virus de ordenador, el que causa una conmoción. La realidad, la resistencia, vuelve a hacerse notar en forma de un virus enemigo. La violenta y exagerada reacción de pánico al virus se explica en función de esta conmoción por la realidad.
La reacción pánica de los mercados financieros a la epidemia es además la expresión de aquel pánico que ya es inherente a ellos. Las convulsiones extremas en la economía mundial hacen que esta sea muy vulnerable. A pesar de la curva constantemente creciente del índice bursátil, la arriesgada política monetaria de los bancos emisores ha generado en los últimos años un pánico reprimido que estaba aguardando al estallido. Probablemente el virus no sea más que la pequeña gota que ha colmado el vaso. Lo que se refleja en el pánico del mercado financiero no es tanto el miedo al virus cuanto el miedo a sí mismo. El crash se podría haber producido también sin el virus. Quizá el virus solo sea el preludio de un crash mucho mayor.
Zizek afirma que el virus asesta un golpe mortal al capitalismo, y evoca un oscuro comunismo. Se equivoca
Žižek afirma que el virus ha asestado al capitalismo un golpe mortal, y evoca un oscuro comunismo. Cree incluso que el virus podría hacer caer el régimen chino. Žižek se equivoca. Nada de eso sucederá. China podrá vender ahora su Estado policial digital como un modelo de éxito contra la pandemia. China exhibirá la superioridad de su sistema aún con más orgullo. Y tras la pandemia, el capitalismo continuará aún con más pujanza. Y los turistas seguirán pisoteando el planeta. El virus no puede reemplazar a la razón. Es posible que incluso nos llegue además a Occidente el Estado policial digital al estilo chino. Como ya ha dicho Naomi Klein, la conmoción es un momento propicio que permite establecer un nuevo sistema de gobierno. También la instauración del neoliberalismo vino precedida a menudo de crisis que causaron conmociones. Es lo que sucedió en Corea o en Grecia. Ojalá que tras la conmoción que ha causado este virus no llegue a Europa un régimen policial digital como el chino. Si llegara a suceder eso, como teme Giorgio Agamben, el estado de excepción pasaría a ser la situación normal. Entonces el virus habría logrado lo que ni siquiera el terrorismo islámico consiguió del todo.
El virus no vencerá al capitalismo. La revolución viral no llegará a producirse. Ningún virus es capaz de hacer la revolución. El virus nos aísla e individualiza. No genera ningún sentimiento colectivo fuerte. De algún modo, cada uno se preocupa solo de su propia supervivencia. La solidaridad consistente en guardar distancias mutuas no es una solidaridad que permita soñar con una sociedad distinta, más pacífica, más justa. No podemos dejar la revolución en manos del virus. Confiemos en que tras el virus venga una revolución humana. Somos NOSOTROS, PERSONAS dotadas de RAZÓN, quienes tenemos que repensar y restringir radicalmente el capitalismo destructivo, y también nuestra ilimitada y destructiva movilidad, para salvarnos a nosotros, para salvar el clima y nuestro bello planeta.

Byung-Chul Han es un filósofo y ensayista surcoreano que imparte clases en la Universidad de las Artes de Berlín. Autor, entre otras obras, de ‘La sociedad del cansancio’, publicó hace un año ‘Loa a la tierra’, en la editorial Herder.
Traducción de Alberto Ciria.