La debilidad de algunos viejos militares para mantener las presiones sobre el sistema político

Petras:

Yo creo que es positivo enjuiciar a Álvarez porque era el cabecilla de los homicidios y los delincuentes en el Ejército y en la política. Independientemente de la motivación, el hecho es que este torturador y asesino está frente un juicio y probablemente va a ser encarcelado, ya sea en su casa, en los cuarteles o donde sea.

Pienso que en parte representa la debilidad de algunos viejos militares para mantener las presiones sobre el sistema político en la actualidad, frente a los nuevos graduados que están tomando los puestos militares y que quieren poner distancia con el pasado, por lo menos en puntos específicos, y que no quieren ser tachados con la misma crítica.

Mientras tanto, con esta nueva confrontación de poder de estos militares jóvenes, más el interés de apoyar el neoliberalismo de Tabaré Vázquez, aprovechan para mejorar los vínculos con los EE.UU., recibir mejores salarios y promociones.

Eso me parece fundamental porque si los militares dicen no a este proceso me imagino que Tabaré y los jueces no van a mover un dedo. Es un cambio de momento, el neoliberalismo es dominante y el FMI, el imperialismo están respaldando a Tabaré. Y los militares, en este cuadro, quieren insertarse sin las cargas del pasado.

Ahora, el hecho fundamental no es lo que está pasando en el momento en sí mismo, sino si eso significa una tendencia a extender el juicio hacia los colaboradores de Álvarez. Eso me parece que es fundamental.

La izquierda, las fuerzas progresistas, las organizaciones de Derechos Humanos, tienen que aprovechar este juicio para vincular a todos los demás, militares y civiles, que participaban en este proceso y abrir los archivos militares confidenciales, todavía escondidos, para vincular al Partido Colorado particularmente y sectores del partido blanco, en estos crímenes.

Eso me parece más dudoso que se consiga, pero es necesario aprovechar esta brecha en la institucionalidad para abrir y profundizar el proceso. Mostrar en una forma educativa cómo la presencia militar, no sólo Gregorio Álvarez, fueron los progenitores de todo el proceso de liberalización del país. Porque no fue un simple problema de dictadura, sino que también impusieron un modelo antipopular y regresivo, que el modelo actual está profundizando.

Se trata de vincular los crímenes contra los derechos humanos con las medidas que han hecho tanto daño al sistema de empleo, a los derechos laborales, etc.; y la continuación económica de este proceso militar en los posteriores gobiernos civiles.

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Fin de año en la cárcel de Domingo Arena

Goyo encabezó "acto" en la cárcel especial

La República 2 de enero 2008

Los ex represores, que están encarcelados por violación a los derechos humanos en la prisión del cuartel de Domingo Arena, realizaron en la noche del 31 de diciembre una formación militar encabezada por el ex dictador Gregorio Alvarez, en la cual entonaron las estrofas del Himno Nacional. Tras cantar el Himno, los militares se abrazon y el "Goyo" improvisó un discurso en el cual deseó un futuro mejor para el país en el año que comienza. La particular situación tuvo lugar dos horas antes del año nuevo en el comedor de la cárcel. Allí estaban todos los militares procesados por delitos cometidos durante la dictadura, además los dos ex policías, José Sande Lima y Ricardo "Conejo" Medina. Para recordar sus épocas castrenses los ex represores se pararon en formación militar y cantaron el Himno Nacional con el "Goyo" Alvarez al frente. Vale señalar que en ese centro de reclusión son nueve los militares encarcelados, Gregorio Alvarez, José Gavazzo, Ricardo Arab, Jorge "Pajarito" Silveira, Luis Maurente, Gilberto Vázquez, Ernesto Soca, Juan Carlos Larcebeau y Carlos Calcagno.