¿OTRO MUNDO POSIBLE? ¿NECESARIO?
La Chacra, Junio 2025. Álvaro Jaume (siempre REDOMÓN!)
(I)
Algunos tenemos la porfiada costumbre de juntarnos de vez en cuando para debatir, pensar,
preguntarnos...nos autoproclamamos NECIOS porque no somos demasiado amigos ni de las
ortodoxias, ni de los catecismos.Orejanos o herejes, que le dicen! Y precisamente nuestro próximo
tema de discusión es: como civilización humana ¿HACIA DONDE MARCHAMOS? ¿No existe otro
horizonte civilizatorio que no sea el de este avasllante TECNOCAPITALISMO posmoderno? ¿Murieron
las UTOPÍAS? ¿En qué quedó todo aquello de hacer LA REVOLUCIÓN para instaurar una NUEVA
SOCIEDAD?
En el pasado, tal cual así lo formulábamos, lo agitábamos contra viento y marea.Me siento orgullosamente parte de aquella “generación 68” que tenía por eje central de discusión filosófica-pero también política!-, el dilema : ¿REFORMA O REVOLUCIÓN? Y por supuesto que defendíamos encendidamente la tésis de ésta segunda, de cambiar de raíz las cosas, de no andar con “gatopardismos” intentando humanizar al capitalismo. Para nosotros- y cuidado que hablo no de decenas o centenas, sino de miles!-el único dogma que nos inspiraba era el de hacer LA Revolución para concretar la Utopía, “aquí y ahora”, de forjar un mundo JUSTO Y LIBRE sobre la faz de la Tierra. El compromiso militante lo era todo en nuestras vidas, y la diferencia entre necesariedad y posibilidad estaba fuera de discusión.
En dichos tiempos históricos, ambas categorías iban de la mano. En cuanto a la NECESIDAD, no había que discutir mucho.No solo estaban dadas las llamadas “condiciones objetivas” por las lascerantes injusticias sociales que nos rodeaban (por algo el Bebe Sendic arrancó hacia Bella Unión para organizar a los “peludos”/cañeros), sino que también las “subjetivas”, la conciencia y la organización del Pueblo, venían en espiral ascendente. No por casualidad a los Poderosos se les cayó el discurso democrático y tuvieron que ponernos la bota encima con una Dictadura. Pero tampoco estaba en cuestión la POSIBILIDAD como categoría complementaria.
Construir un mundo nuevo ( y no “mejor” como se acostumbra decir hoy en día ) resultaba más que indiscutible. ¿Porqué? Y aquí vale detenerse para entender nuestra mirada, nuestra sensibilidad de esos años. No era solo un acto de fé; una creencia como la que tienen los devotos militantes de las más diversas religiones, pretendiendo convencernos de que en la Biblia está todo dicho...Nada de eso. Fueron años de una feroz y gigantesca LUCHA IDEOLÓGICA. De discusión cotidiana, en el boliche, en el omnibus, en la calle, en los lugares de trabajo o de estudio, explicando, razonando, motivando a pensar que para nada era LEY NATURAL o DIVINA, el hecho de que los humanos estuviésemos dividi- dos en ricos y pobres, patrones y peones, etc, etc.
Y cuando te preguntaban en qué lugar del Planeta existía una sociedad así, sin clases, sin ricos explotando, sin empresarios apropiándose de una parte del trabajo asalariado (plusvalía diría el Maestro), para nosotros la respuesta no era difícil: el ejemplo REAL ya no era la URSS que venía denotando traición a los ideales/principios de la Revolución del 17, pero sí lo eran la heroica Cuba de los 60, o la China maoista de la revolución cultural (años 63/64)..
. Contábamos con ejemplos históricos, concretos, que demostraban que era POSIBLE intentar armar un puzzle social radicalmente diferente, con otros valores, con una economía organizada a partir de una lógica solidaria y cooperativa,etc,etc. La Utopía, dejaba de ser quimera para convertirse en “sueño realizable”. Hoy lo pienso y era parecido a lo que nos ocurrió en Canelones en los años 2016, confrontando al modelo Sojero, que nos invadió en esa época. Cuando los canarios te decían: Soja-T ,no . ¿Entonces qué? La respuesta era sencilla y contundente: extractivismo o agronegocio NO queremos; SÍ producción granjera, convencional o agroecológica. De este modo se racionaliza la discusión; existe una solución alternativa ; la lucha tiene horizonte.
En particular la lucha de ideas se sustancia materialmente, se vuelve sustentable con fundamentos lógicos.Se trasciende la mera creencia o “fé”! Síntesis: si bien en la década de los 60 no resultó fácil sembrar un nuevo IMAGINARIO capaz de romper con las visiones impuestas por los Partidos “tradicionales”, con aquel anticomunismo visceral que pronosticaba poco menos que tanques rusos invadiendonos, no obstan- te fueron tiempos históricos germinales, tiempos de una cultura de rebelión en que necesariedad y posibilidad marchaban juntas.
(II)
La fractura entre una y otra, tiene que ver con lo que fueron estos pasados 50 años de historia vivida. Durante los 70, con la implantación de las Dictaduras (por ejemplo en todo el Cono Sur)y del Terror ejercido desde el Estado, sobrevinieron las derrotas políticas. No solo de los movimientos guerrilleros; de las organizaciones populares en su conjunto.Se puso en evidencia el poder de destrucción de la clase dominante y sus respaldos imperiales. Se sembró el miedo. El furor revolucionario dió paso a la impotencia. Luego sobre los finales del S20 se produjo la revolución cultural neoliberal, se impuso el MUNDO CONSUMO (Bautman dixit) como modelo de vida, el TENER como manera de SER (Fromm), el consumismo/ individualismo expresándose como dupla indisoluble del devenir humano. Proliferaron las consignas del tipo “HACÉ LA TUYA”, “NO TE PREOCUPES, SÉ FELIZ”, etc, etc.
Comenzó a desarmarse el entramado social, COLECTIVO, gestado durante la confrontación a la Dictadura.Se redujo la consciencia a mera ambición material, estimulando con el desarrollo tecnológico la adicción a la comodidad, pero por sobretodas las cosas al promoverse la “privacidad” y “ el triunfo personal” como paradigmas de la existencia, se castró la sensibilidad social, el sentir gregario, solidario para con los demás. Retornaron al imaginario social, aquellos viejos discursos-pesimistas por definición- de que los cambios no son posibles, de que la naturaleza humana es esencialmente egoísta, de que el instinto individual es la base de toda conducta personal, y por ende la lógica del capitalismo es la única que se corresponde con la inmodificable “condición humana”.
Para cerrar el análisis de lo vivido, durante este medio siglo de trasnsición, nada menor es el significado de la debacle(¡ un auténtico derrumbe!) del “Socialismo real”. Con RUSIA a la cabeza, pero con decenas de países(toda Europa del Este)abrazando/retornando al capitalismo como único sistema de vida. Sin entrar en las razones de ésta crisis/derrota, que ameritarían un profundo debate-aún pendiente- de una Izquierda genuinamente revolucionaria , el hecho objetivo, indiscutible, es que se cerraron caminos para demostrar con ejemplos históricos,concretos, cuan reales o POSIBLES resultarían las Utopías que inspiraron las grandes revoluciones del siglo pasado.
Parecía confirmarse así la predicción del amigo Fukuyama (historiador/politólogo norteamericano) de que con la caída del muro de Berlín (1989) y la disolución de la URSS, se producía el FIN DE LA HISTORIA (nombre de su libro editado en 1992), instaurándose por siempre ,el CAPITALISMO como modelo civilizatorio para todo el Planeta. Como apéndices del fenómeno global, que no hacen más que corroborar la tendencia al “pesimismo” estructural, creo que habría que mencionar tres acontecimientos puntuales:
1)Experiencias muy singulares desde un punto de vista revolucionario, nada “ortodoxas” según los dictados de históricos manuales, como lo fueron la Zapatista en Chiapas, (1994) y la de Thomas Sankara en Burkina Faso (África/1985) experiencias que se mantienen en estado de latencia,sutilemente aisladas por la ideología dominante, y cuyo análisis podría aportarnos mucho a nuestra discusión sobre “lo posible”.
2)El triste-por tibio y transaccional con el capitalismo- papel jugado por el Socialismo “Siglo21” o los Progresismos en A.L., durante las dos primeras décadas de este nuevo siglo . Chavez/Maduro en Venezuela; Evo/Arce en Bolivia; Correa en Ecuador; Lula en Brasil, Néstor/Cristina en Argentina, Vázquez/Mujica en Uruguay,F. Lugo en Paraguay,Petro en Colombia; Boric en Chile;Toledo/ Castillo en Perú...todos estos procesos, más allá de sus diferencias en cuanto corrupción, privilegios/acomodos de la “casta política”, grados de populismo o nacionalismo, etc, todos ellos tuvieron un común denominador: ninguno cuestionó al sistema capitalista en su ADN: la propiedad privada, el mercado como regulador absoluto, y su carac- ter de clase.Reprodujeron su perfil extractivista/primarizador en paises dependientes como los nuestros, su entreguismo a las multinacionales y las inversiones extranjeras, y su abdicación ante la lógica macroeconómica neoliberal (particularmente la santificación de las deudas y los compromisos con el FMI).En suma, estos procesos no significaron verdaderas alternativas; reafirmaron la visión estática que reivindica la “imposibilidad”!
3)Por último, y en la misma dirección, podrían señalarse la crisis del paradigma cubano en A.L, y la del Chino en Asia.Este último convertido, ya no en el “anti Mao” de la Revolución cultural y la lucha de clases en el Socialismo, sino que habiendo trascendido al Deng Xiao Ping de las “cuatro modernizaciones”, hoy se muestra al mundo como el ícono máximo de la TRANSHUMANIDAD, con el reinado absoluto de la “I.A” generativa y la masiva robotización de la sociedad! Este modelo chino se vende a sí mismo como muestra acabada de “Progreso”, del irrefre- nable proceso de “desarrollo tecnológico”! Así como Elom Musk se vende en las redes sociales de todo el mundo, promocionando las chicas robóticas, los satélites y las supernaves (autos) eléctricas. Es el marketing ideológico del “ HOMO DEUS” (Yuval.N.Harari), el ser humano perfeccionado por los algoritmos, que según estos gurúes, rompe definitivamente con los LÍMITES NATURALES!
(III)
LLegado a este punto, es donde se me complica la reflexión. ¿Cómo convencer, insisto CONVENCER, a los comunes mortales, de que los CAMBIOS SOCIALES, no solo son necesarios, sino además POSIBLES?? De que no estamos condenados a este TURBOCAPITALISMO (D.Fusaro) como destino final de la Humanidad...
¿Cómo? La relación necesariedad/posibilidad tiene distintos grados de dependencia, y múltiples variables que la determinan. Recuerdo relatos de cros. del CHE en Bolivia, aislados, soportando las peores condiciones materiales (militares), que describen a un personaje con tal grado de convicción, que en ningún momento-como comandante- se detuvo a pensar las posibilidades de triunfo o derrota que tenían por delante. Tan fuertemente se vivía la necesidad de luchar, sin chance para abandonos o retiradas, que el grado de determinación de “lo necesario” respecto a “lo posible”, en este caso es absoluto. Sin duda alguna, con figuras como la del CHE, vale la afirmación: “la FÉ mueve montañas”, y la racionalidad que podría aportar un análisis de posibilidades para cimentar la convicción, en situaciones como las del CHE en Bolivia, no juega ningún papel.
En el otro extremo del mapa humano, están quienes para creer en cambios y /o comprometerse con ellos, requieren de certezas muy fundamentadas racionalmente, para que vivan la necesidad de salir de la cueva o abandonar el “rincón tranquilo”(Benedetti!). Necesitan confiar en los “resultados” de las luchas; en las posibilidades que realmente existen para cambiar las cosas. Para el 30/07/15, un rostro muy cercano afectivamente, con quién mucho compartimos en la militancia, relativamente jóven, formado en la Cuba socialista, me escribió: “..este libro (se refería al CAPITAL EN EL S.21/T Piketty) es parte de una pequeña devolución a la gran mano que he recibido para ampliar la visión de este mundo absurdo y casi imposible de cambiar. Es ese pequeño “casi” el que hace que locos como ud. anden sueltos, y nos den locura a los cuerdos que andamos tranquilos”. Un mensaje honesto y muy transparente. En el 2015 militábamos juntos; hoy este cro. se recluyó en su burbuja; trabajo y flía. Esa sensación de que el mundo es inmodificable, de que los “absurdos”(retomando sus palabras) son inherentes a la “condición humana”, de que la militancia prácticamente no “incide”, es esa sensación la que de a poco -y progresivamente- va erosionando el compromiso personal y la opción militante.
Es en casos como éste que uno intenta apelar a la racionalidad, a trascender el mero acto de “fé”, para “demostrar” que los cambios son parte de la vida real, y no la fantasía o el delirio de rebeldías patológicas. Ese intento de demostración puede ir desde una reflexión netamente filosófica, partiendo del materialismo dialéctico que incluye las transformaciones como fenómeno inevitable de las dinámicas naturales o sociales, hasta una revisión más bien de corte histórico, comprobando que con el devenir del tiempo, los diferentes modelos civilizatorios se han ido modificando sustancial- mente. Por ejemplo, en su momento, para una multitud de esclavos-lógicamente no para un Espartaco- la esclavitud podía resultar “ley natural”, algo impensable de abolir, cosa que luego la vida misma demostró lo contrario.En una mirada retrospectiva de la especie humana, desde la era del Sapiens/ Primate hasta el Sapiens/”Deus” actual, no es antojadizo o “irracional” concluir que lo que ayer parecía imposible hoy no lo es, y viceversa.
Ejemplos infinitos los habría, si nos ponemos a analizar los descubrimientos producidos por el desarrollo tecnológico: desde un ser humano aterrizando en la Luna, hasta un dron enviado desde 2000km. de distancia capaz de asesinar un Comandante de la Guardia Iraní o de depositar un paquete en la puerta de una casa.Claro que también podría pensarse la cosa desde un lugar más real.Existencial. Con un encare crítico, más bien “arqueológico y no doxológico”(Foucault), no tanto de la opinión (doxo)o juicio, sino del “por qué” de la misma. Según lo que cada uno vive materialmente, su lugar de clase, sus condiciondes concretas de vida, el interés que cada uno tenga en sacar tal o cual conclusión respecto a lo cambiable que es la sociedad(o uno mismo!). Si uno está cómodo, lo más probable es que se afilie a la teoría conservadora que legitima la pasividad política, pro sistémica.
Ni qué hablar respecto al IMAGINARIO que alberga sus sueños o ambiciones. Por los años 80 , exiliados en Holanda, nos tocó convivir con cientos de refugiados del Este (checos, polacos, rusos, etc..)cuyo único sueño/aspiración/delirio= imaginario, era adquirir los bienes y el confort propios de la Sociedad de Consumo capitalista. Como ocurre hoy en día, aquí con los emigrantes cubanos o venezolanos. En franco contraste con nuestros “Olleros” de Toledo, que aún siendo hijos del bombardeo cultural producido por ésta sociedad consumista, sin embargo están tan pero tan desguarnecidos en sus condiciones de sobrevivencia, que ni siquiera alimentan conscientemente un Imaginario. Sus angustias diarias son anteriores al sueño del “úselo y tírelo”(Galeano) u otros similares. Hjos del infraconsumo y del hambre, sus aspiraciones se reducen al “ pesito” que se convierte en un litro de leche o en un kilo de supergas. Con ellos no hay que filosofar sobre el Imaginario o el cambio de mundo. Saben, lo sienten en sus cuerpos, que el actual es insoportable ...como diría el maestro CM, “solo tienen las cadenas para romper”.
En todo caso la tarea política es convencerlos de que se PUEDE! Finalmente para pensar un Imaginario que contenga ese “ALTER OTRO MUNDO”, puede optarse exclusivamente por el análisis de la necesariedad, sea porque la voracidad capitalista es tal que inevitablemente conduciría a un “COLAPSO” natural (el llamado cambio climático sería un síntoma más de la neurótica relación hombre/naturaleza que genera ese Modo de Producción), o simplemente porque los llamados “bienes naturales” (aire,agua,tierra) y sus riquezas, tienen límites evidentes que la angurria capitalista pretende desconocer. Datos (no relato) que cualquier mirada razonablemente ecológista obviamente integra, y que en cambio no lo hace el “economicismo” tan de moda en ésta época, que falazmente sigue apostando al crecimiento “infinito”.
Desde este ángulo, en que el cambio social es NECESARIO para evitar colapsos o catátrofes producidas por la lógica del capital, la categoría de la posibilidad se reduce a una cuestión estrictamente política. A los métodos y procedimientos, estrategias y tácticas que los pueblos vayan creando/utilizando para terminar con el capitalismo y construir una sociedad alternativa. La posibilidad en lugar de determinarse a-poriori, será resultado de una CONSTRUCCIÓN política que va avanzando dialécticamente, en la misma medida que la acción de destruir/acabar con el viejo sistema capitalista, vaya abriendo nuevos espacios y nuevos escenarios de lucha y transformación.
(IV)
Para cerrar, vuelvo al título:¿iMAGINARIO “DISRUPTIVO”? ¿Por qué ésta palabreja, muy empleada por el posmodernismo, con tufillo intelectualoide? Por que tiene el mérito de ser provocadora. Creo que traduce mejor que cualquier otra la fuerza de choque contra lo pre-establecido, contra lo que se dá por hecho y no debe cuestionarse. Buscaba con un título provocador , aguijonear esa suerte de somnolencia ideológica/cultural que estamos padeciendo; romper con la domesticación del pensa- miento único.Retomando al amigo Foucault, la pesantez de LO MISMO es tal, que nos impide pensar críticamente, imaginar, concebir la existencia de LO OTRO! En estos dos últimos siglos, el capitalismo ha obtenido a lo largo y ancho del Planeta, victorias políticas en base a violencia y terror, pero las victorias culturales impuestas a través de la ciber-revolución digital, mediante celulares, redes sociales y dispositivos de IA,es de tal magnitud que aún cuesta dimensionar sus efectos. Si M/E, que profetizaron en la IDEOLOGÍA ALEMANA que la “ideología dominante en una sociedad es la de la clase dominante”, se levantaran de la tumba, comprobarían con orgullo que en los tiempos que corren,su aseveración se ha convertido en axioma incuestionable.Se manejan multitudes con una facilidad...
Queda por sugerir una pista clave para romper con las cadenas de la alienación cultural y poder
rescatar históricas utopías: la de un cambio de ACTITUD! En lugar de resignación, es hora de
emprender el camino de la “disrupción”, de la subversión del pensamiento; de terminar con la
ceguera/omnubilación que nos han producido las pantallas y los individualismo enfermizos, inhabili-
tándonos a proyectar un NUEVO MUNDO, a imaginar, a necesitar, un BUEN VIVIR, en armonía con la
naturaleza y sin opresión o explotación entre seres vivientes! En el pasado yo solía llamarlo
“SOCIALISMO LIBERTARIO”, pero como las palabras pueden jugarnos encerronas indeseadas, o
conducirnos a malos entendidos(por ejemplo qué entendemos por Socialismo!), prefiero afiliarme a la
propuesta de Koheí Saito, que en su libro EL CAPITAL EN LA ERA DEL ANTROPOCENO, resume su
utopía con dos palabras claves: ¡COMUNISMO DECRECENTISTA! Vale leer(o releer) el libro; aporta
mucho. Imprescindble para discutir/definir qué entendemos por “comunismo”, y porqué el
“decrecentismo” es necesario como nueva racionalidad económica.Pero fundamentalmente debemos
DESDE YA , con nuestra práctica cotidiana de vida, ir concretando un estilo revolucionario que llene de
contenido real a ésta emblemática consigna.¡Todo un desafío!
“Hasta ahora, ninguna revolución fue razonada; por ese poderoso motivo, ninguna completó una victoria.
ResponderEliminarLa gran revolución intelectual que libera a los espíritus, trae como lógica consecuencia la emancipación en relación con otros individuos. Es correcto afirmar que evolución y revolución son dos actos sucesivos del mismo fenómeno. Primero ocurre la evolución y luego la revolución, que a su vez genera nuevas evoluciones, causa eterna de otras revoluciones. Si la revolución es siempre muy posterior a la evolución, se debe a la resistencia que ofrece el ambiente. Las transformaciones son contrariadas por la resistencia de este y el fenómeno novedoso solo puede producirse empleando una resistencia mas violenta aun”.
Pierre Joseph Proudhon, siglo XIX
“Las revoluciones no siempre causan adelantos, del mismo modo que no siempre las evoluciones llevan a un principio de justicia.
ResponderEliminarTodos los movimientos importantes, sin excepción, fueron obra de la masa movilizada por su instinto o por algunos interesados. Por ello, las ventajas obtenidas solo fueron a parar a las manos de sus dirigentes. La psicología social indica que se necesita vivir prevenido tanto del gobierno establecido como del que pretenda establecerse”.
Pierre Joseph Proudhon, siglo XIX
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ResponderEliminarCuando algo se tiñe de IDEOLOGÍAS (como la ideología marxista, o la ideología de género, por ejemplo) y creencias religiosas, mal vamos...
ResponderEliminarSobra decir que este blog murió durante el confinamiento, es decir el Golpe de Estado Mundial, ya que no fue capaz de combatir las mentiras de la Dictadura Sanitaria Global, este blog está Muerto y Enterrado
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