MONTEVIDEO/URUGUAY/13.01.12/COMCOSUR AL DÍA – En el día de hoy el semanario Brecha publica una nota del colega Samuel Blixen titulada “Documentos de la justicia militar involucran a general en la muerte de detenido”. En el avance que aparece en la página web del semanario, Blixen advierte que “la situación judicial del general (r) Pedro Barneix está sumamente comprometida: un expediente de la justicia militar lo involucra directamente en la muerte de Aldo Perrini, detenido en febrero de 1974 en el cuartel de Colonia; y la autopsia correspondiente no deja lugar a dudas: murió como consecuencia de las torturas.”
¿Y quién es el general Pedro Barneix? Pues además de uno de los asesinos de Aldo Perrini, fue uno de los dos militares a los que el presidente Tabaré Vázquez encargó en 2005 investigar lo sucedido con los detenidos desaparecidos, obteniendo los vergonzosos y lamentables resultados por todos conocidos. Es de esperar que en los próximos días se hable mucho del general Barneix, por el momento, brindamos a nuestros lectores unos ilustrativos “Ayudamemoria” acerca de este hipócrita terrorista de Estado. El último es un artículo que el semanario “El Eco” de Colonia publicó el pasado 20 de diciembre, en el que ya quedaba clara la responsabilidad de Barneix en ese crimen. Vea y lea:
AYUDAMEMORIA I
COMISIÓN DÍAZ-BARNEIX ESTANCADA:
MONTEVIDEO/URUGUAY/14.06.05/COMCOSUR AL DÍA – De acuerdo a las fuentes gubernamentales del diario LA REPÚBLICA, el secretario de la Presidencia, Gonzalo Fernández se reunirá hoy con los generales Carlos Díaz y Pedro Barneix para evaluar el avance de su investigación interna sobre lo sucedido con los ciudadanos detenidos, desaparecidos y asesinados por sus colegas durante la dictadura. Es que el optimismo inicial que había despertado la creación de esta comisión, se ha venido diluyendo rápidamente debido a la falta de colaboración de los implicados.
Bajo el título “La ley del silencio militar está trabando investigación interna de las FFAA”, el matutino explica que la investigación de Díaz y Barneix “viene encontrando escollos y está estancada”. Entre los motivos para que no se halla avanzado lo esperado, se detalla la muerte de algunos de los principales responsables de los crímenes, la negativa de varios de los sobrevivientes a dar datos útiles, e incluso “la multiplicidad de pistas falsas” que siembran otros represores.
Según una alta fuente militar de la publicación, los elementos obtenidos hasta el momento “no alteran demasiado” el informe final de la Comisión para la Paz formada para este mismo fin por el presidente Jorge Batlle en 2000, la que descartó la posibilidad de ubicar los restos de los desaparecidos al aceptar la versión militar de que hacia fines de 1984, todos ellos fueron exhumados y cremados para luego esparcir sus cenizas en el Río de la Plata en una zona al oeste del departamento de Montevideo.
AYUDAMEMORIA II
MARÍA CLAUDIA NO ESTABA AHÍ
MONTEVIDEO/URUGUAY/13.09.05/COMCOSUR AL DÍA - Los coroneles José Gavazzo y Jorge Silveira (por ejemplo) le dijeron a los generales Carlos Díaz y Pedro Barneix que María Claudia estaba enterrada “ahí”. Los generales Díaz y Barneix les creyeron, y le dijeron al comandante Angel Bertolotti que María Claudia estaba enterrada “ahí”. El comandante Bertolotti les creyó y le dijo al secretario de la presidencia, el doctor Gonzalo Fernández, que María Claudia estaba enterrada “ahí”. Fernández le creyó y le dijo al presidente Tabaré Vázquez que María Claudia estaba enterrada “ahí”. Vázquez le creyó y le dijo a todo el mundo que María Claudia estaba enterrada “ahí”. Todo el mundo le creyó, y comenzaron las excavaciones. A un mes de iniciados los trabajos, ahora resulta que María Claudia no está “ahí”.
¿Donde estuvo la falla? La falla estuvo en que nadie cotejó la información brindada por los terroristas de Estado. Con una ingenuidad inconcebible, todos y cada uno de los que intervinieron en esta cadena, dieron por sentado que quienes guardaron silencio, ocultaron información, y mintieron descaradamente durante 20 años, ahora estaban diciendo la verdad. ¡Caramba! ¿Por qué habrían de decir la verdad? ¿Porque sí? No, los terroristas de Estado nunca hablarían para “contribuir a construir la paz entre los uruguayos”, sino para evitarse “males mayores” a ellos mismos. Su mezquindad y su cobardía les impiden cualquier acto de nobleza.
AYUDAMEMORIA III
EL COMANDANTE DÍAZ DESTITUÍDO: ¡YA ERA HORA!
MONTEVIDEO/URUGUAY/21.10.06/COMCOSUR AL DÍA - El lector habitual de Comcosur al Día ya sabe que quien esto escribe estaba pidiendo la remoción del comandante en Jefe del Ejército Carlos Díaz desde hace meses. El motivo principal de esa demanda era que el informe sobre los desaparecidos elaborado el año pasado por él y por el general Pedro Barneix resultó una cruel sarta de mentiras e inexactitudes. Fue él quien hizo al presidente Vázquez decir que se había encontrado la tumba de María Claudia García de Gelman "con más de un 99.9% de certeza", y quien hizo que el entonces comandante Bertolotti llevara a Macarena Gelman hasta ese lugar.
El tiempo pasó, y no sólo no estaba allí María Claudia, sino que ningún desaparecido estaba donde Díaz y Barneix habían dicho. Los equipos de antropólogos y arqueólogos estuvieron un año entero escarbando en los lugares equivocados y terminaron su trabajo con las manos vacías. Peor aún, los restos que sí se encontraron (los de Miranda) estaban donde el informe decía que no había nada. Así pues, pedía yo el relevo del comandante Díaz, por inútil o por cómplice. Ahora ha sido destituído por reunirse con el ex presidente Julio María Sanguinetti, su ex ministro de Defensa, Yamandú Fau, y los generales Miguel Dalmao y Pedro Aguerre sin pedir la correspondiente y obligatoria autorización a su superior, la ministra de Defensa Nacional, Azucena Berrutti. Fue la gota que colmó el vaso
AYUDAMEMORIA IV
BARNEIX Y PERDOMO NO FUERON A DECLARAR
(Semanario El Eco – 20.12.11)Los jerarcas retirados del Ejército Pedro Barneix y Washington Perdomo no concurrieron ayer a declarar ante la jueza Mariana Motta por el asesinato en el cuartel de Colonia de Aldo “Chiquito” Perrini en marzo de 1974. Su abogado defensor presentó un escrito aduciendo la prescriptibilidad en el tiempo del delito que se les imputa. La situación de los jerarcas militares Barneix y Perdomo se complicó luego de que apareciera un documento interno del ejército de la época, donde se señala que ambos estaban presentes en el interrogatorio realizado a Perrini en el Batallón 4 de Colonia, donde, según afirma el documento, Perrini “se desvaneció”.
El capitán Bonjour era el jefe al mando del cuartel de Colonia cuando Chiquito Perrini fue llevado a la sala de torturas. Allí estaban el segundo Jefe Washington Perdomo y otros tres oficiales: José Pedro Barneix, José Boudean y el oficial Puijvert. Barneix y Perdomo no concurrieron ayer a declarar ante la Jueza Mota y la fiscal Tellechea. El escrito presentado por su abogado defensor señala que el delito que se les imputa ya prescribió. Un documento interno del ejército que apareció en la causa señala la presencia de estos militares. La autopsia realizada a Perrini señala claramente los golpes que presentaba su cuerpo, aunque luego la causa de su muerte se señala como “edema agudo de pulmón, originado por estrés”.
MONTEVIDEO/URUGUAY/13.01.12/COMCOSUR AL DÍA
Aldo Perrini
13/01/2012 12:22
Militar investigaba desaparecidos; ahora lo investigan a él
El general retirado Pedro Barneix ocupó lugares destacados durante el gobierno de Tabaré Vázquez. Ahora analizan su participación en una muerte por tortura en 1974José Pedro Barneix es general retirado. Durante el gobierno Tabaré Vázquez, le encomendaron una tarea fundamental: obtener información reservada sobre el destino de detenidos desaparecidos durante la dictadura.
Una investigación desarrollada por periodistas de El Eco de Carmelo y publicada este viernes por Brecha devela que Barneix está directamente involucrado en la muerte de Aldo Perrini (foto), muerto a los 34 años por torturas el 4 de marzo de 1974.
Barneix era un joven oficial en aquel entonces. Venía de realizar cursos en la base militar estadounidense del canal de Panamá: la Escuela de las Américas, famosa por haber reclutado a los grandes halcones de las dictaduras latinoamericanas.
La víctima "Chiquito" Perrini es uno de los 19 crímenes cometidos por el aparato represivo del Estado fue declarada inconstitucional e inaplicable.
Treinta y seis años después, nadie se explica en Carmelo por qué cayó en la redada junto a otras once personas. Perrini era simpatizante del Frente Amplio pero no tenía actividad partidaria. Era conocido, sobre todo, porque tenía una confitería donde se vendían "los mejores helados de la ciudad".
Perrini cayó -supone el abogado patrocinante Oscar López Goldaracena- porque alguien abrió una lista de sospechosos en la localidad para desatar una eventual caza de brujas.
El 24 de febrero fue sacado de su casa encapuchado al Batallón de Infantería N°4. Otros de los detenidos fueron llevados a Mercedes. Algunas de las detenidas fueron violadas en el camión, según consta en la investigación de la jueza Mariana Motta.
A "Chiquito" no le fue mejor. Cuando lo apremiaban gritaba "helados", un grito que había popularizado en su ciudad natal. Era su forma de que alguien lo reconociera. Le dieron picana hasta dejarlo inconsciente, Murió en una ambulancia camino a Montevideo, en el kilómetro 110 de la ruta 1.
De algún modo, su muerte contribuyó a limitar la tortura a otros encarcelados, dijeron en el juzgado algunos de los testigos que sobrevivieron al episodio.
Barneix era en ese entonces teniente primero del Batallón 4 de Colonia. Fue parte del equipo de oficiales que interrogó a Perrini.
La investigación de la justicia militar por aquel caso no impidó que siguiera su ascendente carrera, en especial en el área de inteligencia. En ese departamento trabajaba cuando, en 1993, se desató el escándalo por el asesinato en Uruguay del bioquímico y agente de la dictadura chilena, Eugenio Berríos. Este episodio no hizo mella en sus promociones y resultó designado al frente de la Dirección Nacional de Inteligencia del Estado.
Siendo jefe de la División de Ejército N°4, su nombre sonó como comandante en jefe, pero el presidente Vázquez se inclinó por Jorge Rosales.
Aunque la decisión no respetaba el orden de derechas, Barneix siguió adelante. A diferencia de algunos colegas del generalato que renunciaron, se quedó en su cargo y hasta suplantó a Rosales provisoriamente en la titularidad de la comandancia. Se retiró al cumplir los ocho años en el grado.
Pero ahora su brillante carrera se encuentra en tela de juicio. Algunas de sus afirmaciones que la justicia militar de la dictadura dejó pasar, ahora lo comprometen.
El expediente, reproducido por Brecha, cita textual: "Preguntado: si sabe o presume las causas por las cuales el presunto sedicioso Aldo Perrini presenta hematomas en su cuerpo al realizarse la autopsia, contesta: que no sabe, pero presume que pudieron haber sido ocasionadas por el trato riguroso que el personal debe exigir a los detenidos e incomunicados para mantener la disciplina y la compartimentación en virtud de encontrarse los detenidos en un sólo alojamiento".
La autopsia determinó que Perrini presentaba "hematomas y equimossis en parte del tórax y abdomen", especialmente en "hipogastrio y genitales externos, múltiples hemorragias en el panículo adiposo subyacente".
El examen realizado por el médico militar Jorge Mautone reparó en una "hemorragia subpleural".
La causa de muerte fue diagnosticada como "edema agudo de pulmón originado por el stress", una forma elegante de referirse a la asfixia y a las torturas recibidas durante el "interrogatorio".
Ver Además:
Una investigación desarrollada por periodistas de El Eco de Carmelo y publicada este viernes por Brecha devela que Barneix está directamente involucrado en la muerte de Aldo Perrini (foto), muerto a los 34 años por torturas el 4 de marzo de 1974.
Barneix era un joven oficial en aquel entonces. Venía de realizar cursos en la base militar estadounidense del canal de Panamá: la Escuela de las Américas, famosa por haber reclutado a los grandes halcones de las dictaduras latinoamericanas.
La víctima "Chiquito" Perrini es uno de los 19 crímenes cometidos por el aparato represivo del Estado fue declarada inconstitucional e inaplicable.
Treinta y seis años después, nadie se explica en Carmelo por qué cayó en la redada junto a otras once personas. Perrini era simpatizante del Frente Amplio pero no tenía actividad partidaria. Era conocido, sobre todo, porque tenía una confitería donde se vendían "los mejores helados de la ciudad".
Perrini cayó -supone el abogado patrocinante Oscar López Goldaracena- porque alguien abrió una lista de sospechosos en la localidad para desatar una eventual caza de brujas.
El 24 de febrero fue sacado de su casa encapuchado al Batallón de Infantería N°4. Otros de los detenidos fueron llevados a Mercedes. Algunas de las detenidas fueron violadas en el camión, según consta en la investigación de la jueza Mariana Motta.
A "Chiquito" no le fue mejor. Cuando lo apremiaban gritaba "helados", un grito que había popularizado en su ciudad natal. Era su forma de que alguien lo reconociera. Le dieron picana hasta dejarlo inconsciente, Murió en una ambulancia camino a Montevideo, en el kilómetro 110 de la ruta 1.
De algún modo, su muerte contribuyó a limitar la tortura a otros encarcelados, dijeron en el juzgado algunos de los testigos que sobrevivieron al episodio.
Barneix era en ese entonces teniente primero del Batallón 4 de Colonia. Fue parte del equipo de oficiales que interrogó a Perrini.
La investigación de la justicia militar por aquel caso no impidó que siguiera su ascendente carrera, en especial en el área de inteligencia. En ese departamento trabajaba cuando, en 1993, se desató el escándalo por el asesinato en Uruguay del bioquímico y agente de la dictadura chilena, Eugenio Berríos. Este episodio no hizo mella en sus promociones y resultó designado al frente de la Dirección Nacional de Inteligencia del Estado.
Siendo jefe de la División de Ejército N°4, su nombre sonó como comandante en jefe, pero el presidente Vázquez se inclinó por Jorge Rosales.
Aunque la decisión no respetaba el orden de derechas, Barneix siguió adelante. A diferencia de algunos colegas del generalato que renunciaron, se quedó en su cargo y hasta suplantó a Rosales provisoriamente en la titularidad de la comandancia. Se retiró al cumplir los ocho años en el grado.
Pero ahora su brillante carrera se encuentra en tela de juicio. Algunas de sus afirmaciones que la justicia militar de la dictadura dejó pasar, ahora lo comprometen.
El expediente, reproducido por Brecha, cita textual: "Preguntado: si sabe o presume las causas por las cuales el presunto sedicioso Aldo Perrini presenta hematomas en su cuerpo al realizarse la autopsia, contesta: que no sabe, pero presume que pudieron haber sido ocasionadas por el trato riguroso que el personal debe exigir a los detenidos e incomunicados para mantener la disciplina y la compartimentación en virtud de encontrarse los detenidos en un sólo alojamiento".
La autopsia determinó que Perrini presentaba "hematomas y equimossis en parte del tórax y abdomen", especialmente en "hipogastrio y genitales externos, múltiples hemorragias en el panículo adiposo subyacente".
El examen realizado por el médico militar Jorge Mautone reparó en una "hemorragia subpleural".
La causa de muerte fue diagnosticada como "edema agudo de pulmón originado por el stress", una forma elegante de referirse a la asfixia y a las torturas recibidas durante el "interrogatorio".
Ver Además:
El Muerto |||: Caso Perrini
El Muerto |||: El caso de Chiquito Aldo Perrini
Tengo el honor de haber conocido a "Chiquito" Perrini, con el un 26 de febrero de 1974 fuimos trasladados -es un términoque no se ajusta- al cuartel de infantería de Colonia, desde ese momento comenzó nuestro calvario, tal vez al quinto día Perrini ya agonizaba, desde que llegamos hasta el sexto día estuvimos de plantón, y en un régimen de palizas cada tantas horas, sintiendo que a nuestro lado violaban a algunas de las compañeras que habían sido conducidas con nosotros. Hoy después de tantos años tenemos la esperanza de quienes dieron muerte, torturaron en forma sistemática y cobarde, y además violaron a mujeres indefensas, paguen las culpas que tienen con la sociedad toda. Que así sea. (Facebook)
El general que colocó Tabaré para investigar DDHH
Por Favor limpiar y pronto
ResponderEliminarSi el Frente Amplio hubiese querido realmente sanear las FF.AA. debería haber pasado a retiro a todos aquellos que de una u otra forma hubiesen estado involucrados en los hechos del llamado terrorismo de Estado. Al día de hoy siguen ascendiendo gente con Cursos en Panamá y/o que actuaron en interrogatorios, etc, etc, Que Díaz y Barneix mintieron no hay nadie que pueda tener dudas, pero así fueron siempre, despreciando al poder político y civil. La diferencia fue su ambición por llegar a las máximas jerarquías los convirtieron en "chupa medias" de Tabaré y sus asesores más directos, y lo peor, éstos les creyeron. Uno fue Comandante y al otro lo mandaron a ganar cientos de miles de dólares a EE.UU. ...
ResponderEliminarLo que no tiene goyete es que Tabare Vazquez haya elegido a asesinos. Vazquez no conocía la siniestra historia ?.
ResponderEliminarLamentable .........