El ex Pte. José Mujica puso en marcha la idea en septiembre de 2013 y, tal como se presumía, iban a pasar algunos años para que se pudieran apreciar resultados medibles.
Pasaron seis años y Uruguay es hoy un nuevo centro mundial de tráfico de drogas. La legalización de la marihuana, abrió las puertas al consumo y a los cárteles internacionales.
Y el Pte.Mujica se prestó para eso al poner a Uruguay al servicio de grandes intereses económicos que apoyaron la iniciativa.
En 2013, el entonces primer mandatario viajó a EE:UU y allí se reunió primero con el magnate George Soros y luego con David Rockefeller, nieto del multimillonario fundador de la Standard Oil Company.
Soros, Pte.de la Open Society Foundation, fue quien ofreció a Mujica, todo el apoyo necesario para llevar adelante el experimento de la marihuana.
Rockefeller, por su parte, contó al Pte. uruguayo, que su padre había estado en una posición muy dura a favor de la Ley Seca en EE:UU, cuando se combatía el consumo de alcohol. Ante los pésimos resultados, y visto que había perdido muchísimo dinero, era mejor no quedar afuera del mercado actual de la droga y por eso creía que era positivo alentar el consumo legal de marihuana.
Uruguay, un país pequeño, iba ser el lugar ideal para la experiencia.
Ahora, seis años después, nos damos cuenta que ambos poderosos líderes de la economía mundial, contra los que Mujica y su sector político en su momento enfrentaron por representar a la más poderosa oligarquía, lo terminaron usando para su propios intereses.
Le hicieron creer que el experimento en Uruguay era para el bien del país y compró la idea.
Hoy Mujica está en retirada, el experimento fracasado, Uruguay es centro regional de narcotráfico pero nos dejó, en seis años, a la población de rehén de las consecuencias del aumento de la violencia, de los jóvenes y sus familias arruinadas por el consumo de drogas y al país en un abismo, del cual nos llevará décadas salir.
Sin embargo, los poderosos oligarcas Soros y Rockefeller, siguen dominando el mundo y se estarán riendo de Mujica y quizá inventando otra cosa para Uruguay.
El experimento salió mal, el país retrocedió, varias generaciones de uruguayos dañadas y el país hipotecado por esto.
Mujica, el MPP y el Frente Amplio se hacen los distraídos. Pero son los responsables.
Maruja y José no tienen nada que ver con el crecimiento del narcotráfico. Y el fracaso no es ese, es que ni siguiera se puede cumplir una ley si la banca norteamericana no quiere. Y que la izquierda pida represión es absurdo
ResponderEliminarConfunden regulación con trafico. El centro es colombiano, afganistan, no se hagan los distraídos
ResponderEliminarMe niego a creer que PP MUJICA DE MANERA PREMEDITADA HALLA PROMOVIDO ESTO. AQUI HAY INTENCION CLARA AL DESPRESTIGIO DEL FRENTE AMPLIO.
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