La libertad que otorgó la Corte de Apelaciones de Salerno al ex jefe de Inteligencia de Fusileros Navales Jorge Tróccoli revela la desidia con que el Estado uruguayo manejó un caso de extrema relevancia en el campo de los derechos humanos. El ex marino no es un ladrón de poca monta, ni un delincuente común: se lo persigue por cometer delitos de lesa humanidad, y eso implica adoptar los recaudos pertinentes para que los derechos de los familiares de las víctimas –como el de justicia– no sean nuevamente vulnerados.
El pedido de extradición debió presentarse hasta el 27 de marzo ante el Estado italiano, pero llegó el 31 de ese mes. En este caso no le cabe ninguna responsabilidad al juez Luis Charles, puesto que el pedido de extradición salió de su sede el 13 de febrero, es decir 43 días antes de que expirara el plazo. Sin embargo, la Suprema Corte de Justicia (SCJ) demoró un mes en enviarlo al Ministerio de Relaciones Exteriores: llegó el 13 de marzo. Y, según fuentes vinculadas a la investigación consultadas por Brecha, desde la cancillería se remitió el caso vía correo ordinario, no por valija diplomática, y sin que se caratulara el envío como urgente.
El 25 de marzo, el embajador de Uruguay en Italia, Carlos Abin, firmó el documento para presentar ante el organismo diplomático receptor en Italia, pero el escrito no llegó hasta el 31 de marzo, cuatro días después de vencido el plazo legal. Así, la justicia italiana liberó a Tróccoli cumpliendo con lo dispuesto en el tratado binacional de extradición, que data de 1897. El acuerdo establece que “si en el término de tres meses de arresto provisorio” el Estado parte no presenta el pedido de extradición, “el individuo bajo custodia será puesto en libertad y no podrá ser detenido por la misma causa”. Esta última consideración del documento refleja la gravedad de la inoperancia del Estado uruguayo, responsable de que ahora Tróccoli pueda caminar libremente por las calles de Salerno.
Desde la scj se alega que el mes que el exhorto estuvo detenido en el Palacio Piria se debió a las dificultades para traducir el documento al italiano, algo increíble en estos tiempos. Por otra parte, nadie puede desconocer que el canciller Gonzalo Fernández –catedrático de derecho penal de la Universidad de la República y jurista referente en el sistema penal uruguayo– es uno de los funcionarios del gobierno mejor preparados para comprender y actuar en función de la envergadura del asunto.
Pero en la cancillería no fueron tomados los recaudos pertinentes. Resulta extraño, además, que el embajador Abin, quien integró los Grupos de Acción Unificadora azotados por la represión de la Armada y en particular de Tróccoli, no haya logrado presentar el exhorto a tiempo. Familiares de Detenidos Desaparecidos solicitaron una entrevista con el canciller para pedirle explicaciones. En tanto, la fiscal Mirtha Guianze estudia el caso a fin de solicitar al juez Charles que recurra el fallo de la Corte italiana. En principio, la Fiscalía uruguaya entiende que el caso de extradición puede seguir adelante en virtud de que no se ha juzgado sobre el “fondo del asunto” y que la aplicación de los “principios generales del derecho” imponen el juzgamiento de los delitos de lesa humanidad. De lo contrario, se vulnerarían derechos humanos como el derecho de justicia.
EL PRESIDENTE APOYA A
ALDO DE VÁZQUEZ A EMBAJADOR EN ITALIA
Volver con la extradición marchita
06.05.2008
El presidente Tabaré Vázquez respaldó al embajador en Italia, Carlos Abín, cuestionado a causa de la demora en el pedido de extradición del capitán retirado Jorge Tróccoli, que quedó en libertad. "Debería renunciar", afirmó el abogado Óscar Goldaracena.
Aunque el abogado Oscar Goldaracena afirmó que el embajador en Italia, Carlos Abín, debe volver al país con la renuncia bajo el brazo, Tabaré Vázquez manifestó su confianza en el diplomático.
Abín es cuestionado por la demora en el pedido de extradición del capitán (r) Jorge Tróccoli, que quedó en libertad luego que la solicitud se cursara fuera de tiempo.
Vázquez, según informa Últimas Noticias, manifestó su respaldo en la sesión del Consejo de Ministros de ayer. Manifestó su "más plena confianza en el compromiso demostrado por el embajador Abín".
Mientras tanto, Goldaracena afirma que el canciller Gonzalo Fernández le comunicó que el embajador había asumido su responsabilidad, lo que sin embargo fue negado por Abín. "Deberían ponerse de acuerdo sobre si fue un error de la Cancillería o de la embajada", dijo a Ultimas Noticias, además de agregar que el documento solicitando la extradición de Tróccoli llegó en tiempo y forma a la embajada, donde supuestamente se demoró el trámite.
Montevideo Portal
Muy claro por que se demoro el tramite en Italia. No fue ni por incompetencia ni por Semana Santa. Fue por COHECHO
El cohecho (coloquialmente "coima" o "soborno") es un delito que consiste en que una autoridad o funcionario público acepte o solicite una dádiva a cambio de realizar un acto o de no realizarlo.
El cohecho es simple si el funcionario público acepta una remuneración para cumplir con un acto debido por su función o calificado si recibe una dádiva para obstaculizar el cumplimiento de un acto o no llevarlo a cabo, ya sea dicho acto constitutivo o no de delito.
Enviado por El Perla
QUE RENUNCIE!
El embajador en italia debe renunciar por no haber entregado a tiempo el pedido de extradición de Troccolihttp://www.youtube.com/v/XzldAf9G0mw&rel=0
Video subido por Bistrus
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