El Inspector Principal Hugo Guillén en silla de rueda rumbo a una ambulancia y a la prisión.
El sargento Alejandro Gordo Ferreira saliendo del juzgado rumbo al patrullero y a la prisión haciendo su show ante los ex presos políticos que esperábamos enfrente el resultado.
El oficial Winston Vitale saliendo del juzgado rumbo al patrullero y a la prisión.
El abogado Pablo Chargoñia del Observatorio Luz Ibarburu.
La justicia tarda pero llega a las víctimas de la dictadura
por primera se sentenció en Canelones a 3 torturadores de la dictadura, deben cumplir 120 días de prisión preventiva, sin derecho a domiciliaria, hasta q se dicte sentencia.
sábado, 30 de noviembre de 2019
La primera causa por crímenes de la dictadura
Los tres imputados fueron procesados y el juez determinó la prisión preventiva por 120 días en tanto se concluye el proceso
Audiencia pública por denuncia de torturas y detenciones clandestinas en "Los Vagones" de Canelones
El viernes 29, a las 16.30 horas, en el Juzgado Letrado de Canelones
de 1er Turno de dicha ciudad, tendrá lugar la formalización, por parte
de la Fiscalía Especializada en Crímenes de Lesa Humanidad a cargo del
Dr. Ricardo Perciballe, de una causa penal contra tres ex policías por
torturas en el centro de reclusión clandestino conocido como “Los
Vagones”.
La audiencia pública se realizará en el marco del nuevo Código del Proceso Penal y allí se iniciará la sustanciación de los hechos denunciados el 6 de mayo del presente año por parte de la Secretaria de Derechos Humanos de la Intendencia Departamental de Canelones, y que actualmente es patrocinada por el Observatorio Luz Ibarburu.
Las torturas, las vejaciones, las atrocidades, se produjeron aproximadamente entre los años 1968 y 1979 aunque no se descarta que haya casos por fuera de ese período del que se tienen decenas de testimonios.
El largo camino para reconstruir la historia, recopilar testimonios y llegar hasta ubicar los lugares exactos donde estuvieron instalados aquellos vagones del terror, fue tarea de mucha gente. Se logró con el trabajo de la sociedad civil, la Universidad de la República a través de las facultades de Humanidades y Ciencias Sociales, el gobierno departamental y la Secretaría de Derechos Humanos de Canelones, la Institución Nacional de Derechos Humanos y decenas de anónimos.
Inicio
Un grupo de vecinos y vecinas de Canelones, formaron en el año 2016, la Asociación Civil Ágora. Tienen mucho en común. Les gusta charlar, tomar mate, reír y soñar. Y también les une la necesidad de construir la memoria colectiva sobre el centro clandestino de detención y tortura "Los Vagones". Entre los integrantes y adherentes, hay esposas de expresos, esposos de expresas, y por quienes directamente estuvieron presos y presas en el centro clandestino de detención.
Según explicó al Portal del PIT-CNT, Eugenia Cabrera, presidenta de Ágora, también se ha ido sumando gente de la zona, que quiere participar en calidad de adherente de la asociación civil. "Más que el horror nos une la esperanza" asegura.
Cuando fue detenida, Eugenia trabajaba y estudiaba Servicio Social en la Universidad de la República, "porque no había Facultad de Ciencias Sociales". Precisamente, el trabajo de investigación y recopilación de testimonios de lo que sucedió en aquellos años en "Los Vagones", se ha realizado con la cooperación de las facultades de Ciencias Sociales y Humanidades.
Uno de los ejes del trabajo de investigación implicó entrevistas, charlas, preguntas y búsqueda de testimonios. Por otra parte, un equipo de antropólogos realizó tareas de excavación para llegar a ubicar los sitios en los que estaban colocados los vagones que conformaban aquel centro de tortura. Según contó Cabrera, el proyecto museológico y el reconocimiento como sitio de la memoria en el espacio del Barrio Olímpico, han sido "mojones" en el camino. Con las excavaciones y el trabajo de antropólogos se logró ubicar dónde estaban las celdas, las casetas de los guardias, el espanto, la verdad. "Se encontraron los cimientos donde fueron apoyados los vagones y aunque parezca menor, haber podido identificar dónde estaban los calabozos le da sentido a nuestro trabajo de construcción de la memoria. Los lugares donde estuvieron los compañeros y compañeras. Sin el trabajo de los museólogos, arqueólogos no habría sido posible".
La Universidad de la República también participa en la sistematización de la información recopilada en las entrevistas realizadas. "Nos están ayudando además en la preparación para que esas entrevistas puedan ser compartidas con la población a través de la web".
"Éramos tan jóvenes"
Eugenia preside Ágora aunque no estuvo detenida en "Los Vagones" sino en la cárcel de mujeres de Canelones, después de haber estado en la clandestinidad. Con el paso de los años, aprendió a valorar el aire que respira, los colores y los reencuentros con los viejos conocidos de aquellos años. A celebrar los abrazos, las risas y las miradas. Cuando salió de la cárcel, recuperada la democracia, intentó retomar los estudios pero ya nada era igual. "Me sentí una vieja cuando fui a la Facultad y eso que tenía 32 años, pero bueno, todo había cambiado, nosotros habíamos cambiado, entonces éramos tan jóvenes…".
Eugenia tiene una hija socióloga y confía en que pronto podrá ser abuela. "Todavía no tengo nietos pero los espero con ansias". De todos modos, disfruta a más no poder sus dos sobrinos nietos y dice que son la alegría de cada día. "Ellos me hacen una persona muy feliz, mis sobrinos nietos, mi familia y mis amigos, especialmente aquellos que mantengo desde hace tanto tiempo".
La presidenta de Ágora, celebra también que el camino esté lleno de gente joven que quiere construir memoria, como la directora de la Secretaría de Derechos Humanos del gobierno de Canelones, Valeria Rubino. "Ella es muy joven y ha sido un apoyo tremendo, se abrazó a esta causa, es invalorable lo que ha hecho en este tiempo".
Sensibilidad
La directora de la Secretaría de Derechos Humanos del gobierno de Canelones, explicó al Portal que cuando conocieron la iniciativa no dudaron un segundo en preguntar de qué forma podían ser parte y contribuir con el trabajo que se había proyectado. "Fue un trabajo de mucha gente que quiso ayudar, pero en mi caso, cuando me encontré con tantos testimonios de hechos de apariencia delictiva, con tanta evidencia, el camino que tenía era el de la denuncia". Rubino actuó como funcionaria pública que tuvo conocimiento de hechos de apariencia delictiva pero también desde el compromiso humano. "Fueron decenas o cientos de personas, porque no podemos precisar la cifra ya que nadie escribió nada, esas personas estuvieron secuestradas, estaban ahí pero no se registró que salieron de allí, tan solo algunos que luego fueron procesados y fueron trasladados a las cárceles. Pero los que están registrados por algún motivo de traslado a otro sitio de detención y dejaron de ser detenidos clandestinos son la minoría". Para la responsable de DDHH del gobierno de Canelones, lo que existió en "Los Vagones" fue lisa y llanamente el terrorismo de Estado aplicado a detenidos en condiciones clandestinas. "Gracias a la sociedad civil, esto ahora es visible y llegamos a una instancia judicial".
Rubino entiende que todo lo que ha tenido que realizar en este proyecto trasciende el cargo y la función administrativa. Habla de involucramiento y compromiso de la institucionalidad con las políticas de DDHH.
"La gente con el paso del tiempo, viene a contarnos cosas, cuando van envejeciendo y tienen miedo de morir sin haber contado todo, se acercan y nos tratan de ayudar contándonos lo que padecieron o lo que vieron. Como víctimas directas o como vecinos que vieron o escucharon algo".
El trabajo hormiga
En cuanto al proceso de trabajo, la jerarca dijo al Portal que hubo que dejar de lado los escritorios y hacer tarea en territorio. "Cuando se comienza a reconstruir esta historia, como en cualquier orden de la vida, hay que asumir el trabajo de peón. La teoría sirve mucho, los libros son maravillosos, pero si realmente uno quiere meterse con la historia real y poder contar muchísimo que aún no se ha contado, debemos necesariamente realizar el trabajo de peón. Hay que escuchar, leer, volver a escuchar y preguntar más. En estos cuatro años, la sociedad civil ha trabajado miles de horas que aunque hubiera querido, el Estado no habría podido pagar. Miles de horas de trabajo de hormiga, día a día, y nuestra tarea fue colaborar y ayudar a que la información se sistematizara", aseguró.
Cuando se enteró que no existían denuncias presentadas en Canelones sobre las atrocidades cometidas en "Los Vagones", Rubino comprendió que tenía la responsabilidad de que esa información llegara a la Justicia. No solo por ser funcionaria pública "sino porque no entiendo otra forma de proceder" acotó. "Nunca me habría imaginado que todo eso tan brutal no había sido denunciado ante la Justicia", concluyó.
La audiencia pública se realizará en el marco del nuevo Código del Proceso Penal y allí se iniciará la sustanciación de los hechos denunciados el 6 de mayo del presente año por parte de la Secretaria de Derechos Humanos de la Intendencia Departamental de Canelones, y que actualmente es patrocinada por el Observatorio Luz Ibarburu.
Las torturas, las vejaciones, las atrocidades, se produjeron aproximadamente entre los años 1968 y 1979 aunque no se descarta que haya casos por fuera de ese período del que se tienen decenas de testimonios.
El largo camino para reconstruir la historia, recopilar testimonios y llegar hasta ubicar los lugares exactos donde estuvieron instalados aquellos vagones del terror, fue tarea de mucha gente. Se logró con el trabajo de la sociedad civil, la Universidad de la República a través de las facultades de Humanidades y Ciencias Sociales, el gobierno departamental y la Secretaría de Derechos Humanos de Canelones, la Institución Nacional de Derechos Humanos y decenas de anónimos.
Inicio
Un grupo de vecinos y vecinas de Canelones, formaron en el año 2016, la Asociación Civil Ágora. Tienen mucho en común. Les gusta charlar, tomar mate, reír y soñar. Y también les une la necesidad de construir la memoria colectiva sobre el centro clandestino de detención y tortura "Los Vagones". Entre los integrantes y adherentes, hay esposas de expresos, esposos de expresas, y por quienes directamente estuvieron presos y presas en el centro clandestino de detención.
Según explicó al Portal del PIT-CNT, Eugenia Cabrera, presidenta de Ágora, también se ha ido sumando gente de la zona, que quiere participar en calidad de adherente de la asociación civil. "Más que el horror nos une la esperanza" asegura.
Cuando fue detenida, Eugenia trabajaba y estudiaba Servicio Social en la Universidad de la República, "porque no había Facultad de Ciencias Sociales". Precisamente, el trabajo de investigación y recopilación de testimonios de lo que sucedió en aquellos años en "Los Vagones", se ha realizado con la cooperación de las facultades de Ciencias Sociales y Humanidades.
Uno de los ejes del trabajo de investigación implicó entrevistas, charlas, preguntas y búsqueda de testimonios. Por otra parte, un equipo de antropólogos realizó tareas de excavación para llegar a ubicar los sitios en los que estaban colocados los vagones que conformaban aquel centro de tortura. Según contó Cabrera, el proyecto museológico y el reconocimiento como sitio de la memoria en el espacio del Barrio Olímpico, han sido "mojones" en el camino. Con las excavaciones y el trabajo de antropólogos se logró ubicar dónde estaban las celdas, las casetas de los guardias, el espanto, la verdad. "Se encontraron los cimientos donde fueron apoyados los vagones y aunque parezca menor, haber podido identificar dónde estaban los calabozos le da sentido a nuestro trabajo de construcción de la memoria. Los lugares donde estuvieron los compañeros y compañeras. Sin el trabajo de los museólogos, arqueólogos no habría sido posible".
La Universidad de la República también participa en la sistematización de la información recopilada en las entrevistas realizadas. "Nos están ayudando además en la preparación para que esas entrevistas puedan ser compartidas con la población a través de la web".
"Éramos tan jóvenes"
Eugenia preside Ágora aunque no estuvo detenida en "Los Vagones" sino en la cárcel de mujeres de Canelones, después de haber estado en la clandestinidad. Con el paso de los años, aprendió a valorar el aire que respira, los colores y los reencuentros con los viejos conocidos de aquellos años. A celebrar los abrazos, las risas y las miradas. Cuando salió de la cárcel, recuperada la democracia, intentó retomar los estudios pero ya nada era igual. "Me sentí una vieja cuando fui a la Facultad y eso que tenía 32 años, pero bueno, todo había cambiado, nosotros habíamos cambiado, entonces éramos tan jóvenes…".
Eugenia tiene una hija socióloga y confía en que pronto podrá ser abuela. "Todavía no tengo nietos pero los espero con ansias". De todos modos, disfruta a más no poder sus dos sobrinos nietos y dice que son la alegría de cada día. "Ellos me hacen una persona muy feliz, mis sobrinos nietos, mi familia y mis amigos, especialmente aquellos que mantengo desde hace tanto tiempo".
La presidenta de Ágora, celebra también que el camino esté lleno de gente joven que quiere construir memoria, como la directora de la Secretaría de Derechos Humanos del gobierno de Canelones, Valeria Rubino. "Ella es muy joven y ha sido un apoyo tremendo, se abrazó a esta causa, es invalorable lo que ha hecho en este tiempo".
Sensibilidad
La directora de la Secretaría de Derechos Humanos del gobierno de Canelones, explicó al Portal que cuando conocieron la iniciativa no dudaron un segundo en preguntar de qué forma podían ser parte y contribuir con el trabajo que se había proyectado. "Fue un trabajo de mucha gente que quiso ayudar, pero en mi caso, cuando me encontré con tantos testimonios de hechos de apariencia delictiva, con tanta evidencia, el camino que tenía era el de la denuncia". Rubino actuó como funcionaria pública que tuvo conocimiento de hechos de apariencia delictiva pero también desde el compromiso humano. "Fueron decenas o cientos de personas, porque no podemos precisar la cifra ya que nadie escribió nada, esas personas estuvieron secuestradas, estaban ahí pero no se registró que salieron de allí, tan solo algunos que luego fueron procesados y fueron trasladados a las cárceles. Pero los que están registrados por algún motivo de traslado a otro sitio de detención y dejaron de ser detenidos clandestinos son la minoría". Para la responsable de DDHH del gobierno de Canelones, lo que existió en "Los Vagones" fue lisa y llanamente el terrorismo de Estado aplicado a detenidos en condiciones clandestinas. "Gracias a la sociedad civil, esto ahora es visible y llegamos a una instancia judicial".
Rubino entiende que todo lo que ha tenido que realizar en este proyecto trasciende el cargo y la función administrativa. Habla de involucramiento y compromiso de la institucionalidad con las políticas de DDHH.
"La gente con el paso del tiempo, viene a contarnos cosas, cuando van envejeciendo y tienen miedo de morir sin haber contado todo, se acercan y nos tratan de ayudar contándonos lo que padecieron o lo que vieron. Como víctimas directas o como vecinos que vieron o escucharon algo".
El trabajo hormiga
En cuanto al proceso de trabajo, la jerarca dijo al Portal que hubo que dejar de lado los escritorios y hacer tarea en territorio. "Cuando se comienza a reconstruir esta historia, como en cualquier orden de la vida, hay que asumir el trabajo de peón. La teoría sirve mucho, los libros son maravillosos, pero si realmente uno quiere meterse con la historia real y poder contar muchísimo que aún no se ha contado, debemos necesariamente realizar el trabajo de peón. Hay que escuchar, leer, volver a escuchar y preguntar más. En estos cuatro años, la sociedad civil ha trabajado miles de horas que aunque hubiera querido, el Estado no habría podido pagar. Miles de horas de trabajo de hormiga, día a día, y nuestra tarea fue colaborar y ayudar a que la información se sistematizara", aseguró.
Cuando se enteró que no existían denuncias presentadas en Canelones sobre las atrocidades cometidas en "Los Vagones", Rubino comprendió que tenía la responsabilidad de que esa información llegara a la Justicia. No solo por ser funcionaria pública "sino porque no entiendo otra forma de proceder" acotó. "Nunca me habría imaginado que todo eso tan brutal no había sido denunciado ante la Justicia", concluyó.
Se realiza primera audiencia de formalización oral y pública en una causa por delitos de lesa humanidad
Los vagones: se imputa a responsables de torturas en centro de detención clandestina en Canelones.
Hoy a las 16.30 se realizará la primera audiencia de
formalización por parte de la Fiscalía Especializada en Crímenes de Lesa
Humanidad de una causa penal contra imputados por torturas en el centro
de detención y reclusión clandestino conocido como “Los vagones”, en la
ciudad de Canelones. La denuncia fue presentada el 6 de mayo. Según
dijo a la diaria la responsable de la Secretaría de Derechos
Humanos de la Intendencia de Canelones, Valeria Rubino –quien presentó
la denuncia ante la Fiscalía que dirige Ricardo Peciballe–, el colectivo
Ágora-Identidad, derechos humanos y memoria canaria fue “recabando
testimonios de personas que fueron secuestradas en ese centro
clandestino de detención y tortura” y los hizo llegar a la Secretaría,
que los empezó a sistematizar, entre otras cosas, para integrarlos a los
contenidos de una página web que está por lanzarse. “Ahí es que empiezo
a ver que testimonio tras testimonio dan cuenta de cuestiones
delictivas”, contó. Rubino averiguó si los hechos testimoniados ya
habían sido denunciados, y al enterarse de que no, decidió “presentar
una denuncia en calidad de funcionaria pública”, ya que si constata
hechos con apariencia delictiva, debe denunciarlos, según está
determinado por la ley.
“Presenté un escrito al fiscal correspondiente de que esa era la información que yo tenía y que me parecía que le competía a su función”, agregó Rubino. “Cualquier funcionario de la intendencia que hubiera constatado esos delitos habría hecho lo mismo”.
Rubino dijo que hasta ese paso fue su iniciativa; luego fue el fiscal el que evaluó que los testimonios constituían suficiente prueba para abrir una causa. Será la primera vez que se dé trámite a una causa penal por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura por medio del nuevo Código de Proceso Penal, que habilita que las audiencias sean orales y públicas. Según pudo saber la diaria, los imputados son tres policías retirados que aparecen reiteradamente en los testimonios de detenidos y torturados como los jerarcas a cargo de los operativos represivos.
“Los vagones” estuvieron ubicados en un primer período en el Parque de Artigas de la ciudad de Canelones, conocido como Prado, y posteriormente fueron trasladados a la zona del barrio Olímpico de la capital departamental. Por “Los vagones” pasaron alrededor de 400 personas, muchas de ellas, en la segunda etapa, víctimas de la Operación Trabajo, uno de los brazos de la Operación Morgan, desatada contra el Partido Comunista en 1975.
“Presenté un escrito al fiscal correspondiente de que esa era la información que yo tenía y que me parecía que le competía a su función”, agregó Rubino. “Cualquier funcionario de la intendencia que hubiera constatado esos delitos habría hecho lo mismo”.
Rubino dijo que hasta ese paso fue su iniciativa; luego fue el fiscal el que evaluó que los testimonios constituían suficiente prueba para abrir una causa. Será la primera vez que se dé trámite a una causa penal por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura por medio del nuevo Código de Proceso Penal, que habilita que las audiencias sean orales y públicas. Según pudo saber la diaria, los imputados son tres policías retirados que aparecen reiteradamente en los testimonios de detenidos y torturados como los jerarcas a cargo de los operativos represivos.
“Los vagones” estuvieron ubicados en un primer período en el Parque de Artigas de la ciudad de Canelones, conocido como Prado, y posteriormente fueron trasladados a la zona del barrio Olímpico de la capital departamental. Por “Los vagones” pasaron alrededor de 400 personas, muchas de ellas, en la segunda etapa, víctimas de la Operación Trabajo, uno de los brazos de la Operación Morgan, desatada contra el Partido Comunista en 1975.
>>> Excavación de Los Vagones
viernes, 29 de noviembre de 2019
Tiempos violentos
por J. Zabalza publicado en VOCES
Haití, Venezuela, Honduras, la vergüenza de Nicaragua, Brasil, Perú, Argentina, Ecuador, cientos de miles por todo Chile, millones de Tupaj Katari en Bolivia y, último momento, Colombia también resiste! Diferentes realidades, cada una con sus particularidades sociales y políticas, pero que, entre todas, componen un panorama cruzado por la violencia que viene de arriba, desde las clases dominantes. Descartaron el modo pacífico de dominación que venían utilizando y dieron rienda suelta a la represión más salvaje, la verdadera razón de ser del Estado. Se quitaron el traje de liberales y dejaron al desnudo el lobo feroz. ¡Insoportable tufillo a ’68, compañeres!
Parece mentira, pero los progresismos latinoamericanos pulieron y afinaron los instrumentos represivos que les prestaron los dueños del poder. El muy moderado impulso de cambio se detuvo en las puertas de los cuarteles. Nadie tocó la esencia de la institución criminal. Los progresismos engordaron a sus sepultureros… les compraron armas, aviones y barquitos nuevos, radares, sistemas Guardian, cámaras de vigilancia y de identificación facial, los entrenaron y los prepararon para comerte mejor. ¿En qué cabeza cabe alimentar los cuervos que te arrancarán los ojos?
Viejos ilusionistas indujeron un mundo imaginario de “oficialidades jóvenes” y “nuevas policías”, pero luego, se miraban sorprendidos al verlos asesinar, violar y torturar con la misma saña sádica que en los ´70. Los pueblos de América Latina, desarmados, a pura sangre y coraje, están enfrentando las fuerzas genocidas. Las horas de los hornos debieran ser horas para cuestionar el monopolio estatal de la violencia, para pensar otras formas de defender territorio, derechos y libertades. La filosofía de la otra mejilla frena la imaginación, nadie piensa ya en pueblos reunidos y armados como los pensó el artiguismo.
Como no somos ninguna excepción, los tiempos violentos ingresaron al país, pero lo hicieron lateralmente, “a la uruguaya”, video de Manini mediante. De cierta manera, el estado de violencia latinoamericano hizo de trasfondo ideológico en el ballotage y multiplicó el rechazo a Manini, más que sus palabras, su impronta miliquera genera rechazo. De todos modos, provocó la avalancha de votos que echó por tierra las profecías de opinión pública. Miles de mujeres y hombres salieron defenderse de la coalición multi reaccionaria mediante el voto. Otra proeza de movilización popular.
En la batalla electoral del 2019 no estuvieron en juego las transformaciones profundas que el Congreso del Pueblo reclamaba medio siglo atrás y que parecen cosa del pasado. Sin embargo, la avalancha popular fue suficiente para dejar dividido en dos el padrón electoral. En una vereda, la mitad que aceptó encubrir con su voto a los futuros posibles los golpistas, portadores de los más reaccionarios sentimientos, esos que sobreviven en los casinos cuarteleros y los salones de las cámaras empresariales. En la vereda de enfrente, un poco más a la izquierda, la otra mitad coreaban “milicos nunca más”, un mensaje antimilitarista aún más expresivo que el enviado en octubre, cuando se frenó la tentativa de sacar el ejército a la calle con fines represivos.
Probablemente parte de esas energías antiautoritarias sean utilizadas como respaldo para acordar y pactar con los partidos de derecha, para hacer una “oposición responsable” en esta democracia plena con un millón de pobres. En un primer momento, los votantes progresistas se indignarán y se sentirán utilizados, pero, con el paso del tiempo, las urgencias por recuperar el gobierno los harán olvidar sus sentimientos negativos. Después de todo, ese es el sentido último de la democracia representativa y liberal y su sistema de partidos.
Siempre tienen otra opción los indignados. La lucha de los movimientos sociales ha logrado conmover la consciencia popular, volviéndola sensible a los grandes problemas sociales y culturales, aquellos que los partidos políticos evitaron tocar en la campaña electoral: Verdad y Justicia, la igualdad de géneros, la libertad de opción sexual, la contaminación de la tierra, el agua y el aire. Tal vez buena cantidad de votantes antiautoritarios se vuelquen a la lucha por transformar la llamada “fiesta cívica” en una manifestación por Nunca Más terrorismo de Estado, no queremos más milicos, no queremos más ejércitos.
El grupo de Whatsapp del Frente Amplio
Salió en Brecha
Emiliano Tuala
29 noviembre, 2019
Lunes 25 de noviembre. 07.03 AM
‹Daniel Martínez ha creado el grupo “2024”›
‹Astori salió del grupo›
‹Martínez añadió a Astori al grupo›
‹Astori salió del grupo›
Martínez —Buenoz díaz, compañeroz
Mujica —HOLA
Andrade —Qué dice compa!
Michelini —Buen día!!!!!!
Villar —Empieza otro día de lucha (tres emojis de puños cerrados)
Cosse —Qué contás
Darío Pérez —Ni tan buenos
Constanza —Buenos días para todos y todas
Bergara —Dani, querido!! Que tengan excelente jornada tú y tu familia! Arriba el FA
Blanca Rodríguez —Mario, podés bajar a desayunar???
Bergara —Ya voy hermosa!!
Murro —Sinceramente no entiendo el objetivo de este grupo
Muñoz —Bueno, en realidad aún no lo sabemos
Martínez —Lez cuento. Quiza lez parezca temprano. Pero eztamoz acá para empezar a trabajar mi candidatura de 2024
‹Andrade salió del grupo›
‹Cosse salió del grupo›
Murro —Pensé que era algo serio
Muñoz —Bueno, en realidad es muy temprano, sí
Michelini —yo estoy para lo que sea. Tiempo tengo jajaja
Constanza —Ídem…
Villar —Estaremos en la trinchera que haya que estar, sea quien sea el comandante de este ejército popular llamado Frente Amplio (tres emojis de brazos musculosos)
Mujica — A VECES… EL SER HUMANO… PARECE UN BICHO ANTROPOLÓGICAMENTE CONSTRUIDO… PA RESURGIR DE SUS CENIZAS… Y OTRAS VECES… ES CENIZA TAN SOLO…
Martínez —Arriba Pepe!!
Mujica — TÚ ERES CENIZA TAN SOLO
Martínez —Arriba Pepe!!
Mujica — Y SI SUPIERA IRME DEL GRUPO ME IBA… PERO TENGO QUE ESPERAR A QUE VENGA LUCÍA Y ME SAQUE…
Martínez —Arriba Pepe!!
Bergara —Dani, querido!! La verdad yo tengo un poco de ganitas de ser candidato, pero tenemos tiempo para charlarlo. Te quiero, pelado!!
Martínez —Arriba Pepe!!
Blanca Rodríguez —jajajajajaj lpm
Sendic —en la vida hay que saber retirarse a tiempo
Bonomi —Tal cual
Lunes 25 de noviembre. 10.22 AM
‹Daniel Martínez ha creado el grupo “Intendencia 2020”›.
miércoles, 27 de noviembre de 2019
Aguas privadas
Presentan tercer proyecto de riego de un fondo privado
La Dirección Nacional de Aguas dio vía libre a un nuevo proyecto bajo la polémica Ley de Riego, presentado por un fondo de capitales privados que opera en el litoral uruguayo
Victor Bacchetta
26 noviembre 2019
La Dirección Nacional de Aguas (Dinagua) convoca a una audiencia pública, el próximo 5 de diciembre, para aprobar un nuevo proyecto de riego por embalse de un fondo privado de inversión. Este llamado se realiza pese al pedido de suspensión de las autorizaciones de nuevos proyectos y mientras la Suprema Corte de Justicia (SCJ) evalúa la constitucionalidad de los cambios introducidos en la Ley de Riego.
El proyecto fue presentado el 16 de agosto en la Oficina Regional Salto de la Dinagua, donde tendrá lugar la audiencia pública, por la firma Winterbotham Fiduciaria SA, administradora del Fideicomiso Financiero Tierras del Litoral. Estas mismas firmas presentaron un proyecto de riego similar en el departamento de Paysandú cuya audiencia tuvo lugar en Fray Bentos el pasado mes de setiembre.
La Comisión Nacional en Defensa del Agua y de la Vida (CNDAV) exigió la suspensión de nuevos proyectos de embalses para riego administrados por fondos privados de inversión desde que el Tribunal de lo Contencioso Administrativo elevó a la SCJ, el 6 de agosto pasado, la demanda de varias organizaciones sociales de anulación por inconstitucionales de la Ley de Riego y sus decretos reglamentarios.
El nuevo proyecto de riego por embalse está situado entre las localidades de Lorenzo Geyres y Queguayar en la 6° Sección Judicial del departamento de Paysandú sobre la cañada de Agesta, un afluente del río Queguay Grande, tributario del Río Uruguay. El embalse ocuparía parte del padrón N° 2199, correspondiente al establecimiento La Armonía, y del padrón N° 5908 perteneciente a otro propietario vecino.
Se propone la construcción de un dique de 9,70 metros de altura y 450 metros de longitud para almacenar un máximo de 1:250.000 metros cúbicos de agua. El dique y el embalse cubrirán una superficie total de 50,6 hectáreas, 49,6 sobre el padrón N° 2199 y tres hectáreas adicionales sobre el padrón N° 5908.
La finalidad del proyecto es el riego para atender una rotación de cultivos por siembra directa de maíz, colza u otra cobertura y soja, entre los meses de octubre y marzo, sobre una superficie de 424 hectáreas, 173 situadas sobre el padrón N° 2199 y 251 sobre el padrón N° 977, que pertenecen al mismo propietario.
El proponente afirma que no hay oposición del vecino afectado. De no existir acuerdo, el proyecto puede obtener una autorización condicionada "a los solos efectos de gestionar la imposición judicial de las servidumbres que correspondan". El permiso definitivo dependerá de la obtención de dicha decisión judicial.
Este es el segundo proyecto de riego de Winterbotham Fiduciaria SA, una financiera internacional con sede en Bahamas mencionada en denuncias por lavado de dinero en Brasil . Por su parte, Tierras del Litoral viene invirtiendo en emprendimientos agrícolas en los departamentos de esa zona desde los primeros años 2000.
El proyecto estuvo a cargo inicialmente de la consultora BBF Ingenieros, pero la última versión, en donde se modifican algunas dimensiones, es firmada por Sigmaplus, cuya participación en estos proyectos ha sido motivo de controversia por su relación con el director de la Dirección de Medio Ambiente (Dinama), Alejandro Nario.
Desde 2015 a 2017, Nario fue titular de la Dinama a la vez que “socio sin actividad” de Sigmaplus. Aunque después vendió sus acciones, el notorio aumento de las empresas asesoradas por Sigmaplus que requieren habilitaciones de la Dinama ha mantenido la sospecha de una posible conjunción del interés personal y del público.
martes, 26 de noviembre de 2019
Somos semilla genéticamente manipuladas
Por Marcelo Marchese
LAS DOS FOTOS DEL AÑO QUE EXPLICAN LA DERROTA DEL FA (Y NO LA VICTORIA DE LACALLE)
Con ver el mapa de las elecciones alcanza para entender la crisis del campo: salvo Montevideo y Canelones, todo el País le dio la espalda al oficialismo.
Uruguay hace décadas que está dividido al medio. Se han conformado dos bloques y entre los dos hay un pequeño grupo pendular que define las elecciones y los plebiscitos. En el 2004 ese grupo pendular, harto de la crisis, se inclinó por el FA. Hoy, harto de la crisis, apoyó a Lacalle.
Se pueden dibujar numeritos, hacerse el vivo y engañar a la población, pero una granja cerrada por día y un tambo cerrado cada dos días deshacen cualquier paparrucha y si te quedaba alguna duda de la crisis del campo, acá tenés la elección de ayer y la de octubre.
La primera foto no sólo expresa la crisis, sino también la soberbia del gobierno ¿Por qué fue soberbio el gobierno del FA, así como lo será el gobierno de Lacalle? Porque son meros administradores de políticas establecidas hace tiempo en otro lugar, y esas políticas tienen resuelto empujar al abandono de nuestro campo y el apoderase de nuestra tierra.
El gobierno no escuchó (no puede escuchar) al campo y además de ningunearlo, pretendió impedirle manifestar. Aún la ciudad no oye el clamor que nace de lo profundo del Uruguay, pues el País conoce también esta peligrosa división, y aquellos que vean esta elección como algo episódico y se preocupen de lo sustancial, tienen que echarle el ojo a esta fractura cultural harto peligrosa y deliberada.
Por último, la foto expresa la rebeldía de aquel que no acepta perder lo suyo: su forma de vida, sus tradiciones, su tierra, nuestra tierra y no es casual que quien enfrenta el autoritarismo, al mismo tiempo defiende el campo y se enfrenta a UPM y el modelo forestal que desertifica el País.
La segunda fotografía expresa la entrega de nuestros recursos al capital extranjero. En el río quedaron los 150 millones de la Regasificadora que estaba unida al Puerto de Aguas Profundas y a Aratirí, que darían trabajo según la retórica de una izquierda que le abre las puertas a las trasnacionales con el argumento de generar trabajo, evitando decir que lo que hacen las trasnacionales es levantar dinero a paladas mientras se apoderan de lo nuestro.
Los dos miran al mismo lado. Uno ve una maravilla, el otro ve una gran estafa. El que ve más lejos es el que botijea al otro, pues le pasa la mano por el hombro. Los dos son de izquierda, pero uno no es de izquierda. Desde el momento en que un viejo luchador le pasa la mano por el hombro a un candidato a gerente de las trasnacionales, sus chances de vencer empalidecen.
¿Qué es ser de izquierda? ¿Ser rebelde, lo que implica dudar del mundo que se nos pinta? El FA dejó de ser de izquierda, en última instancia, porque el votante del FA dejó de ser de izquierda. Es un proceso ideológico. El corrimiento empezó por la dirigencia, pero la masa votante no tuvo la independencia de criterio como para decir que era una violación abierta de la historia del FA el impulso a la Bancarización forzosa, Aratirí, la Ley de Riego, la Regasificadora, la Reforma Tributaria que desangró a los trabajadores y el inconcebible Contrato ROU UPM.
No triunfó Lacalle. Triunfó, como viene sucediendo, el capital extranjero. Los burros rebuznan, las gallinas cacarean y las cotorras cotorrean, pero la verdad de la milanesa es que en el planeta 26 sujetos tienen tanta riqueza como 3.800 millones de personas, y esos sujetos, a través de los organismos internacionales y a través de la Banca, a través de los grandes medios de comunicación y a través de todo tipo de instrumentos, escriben la Agenda Política Mundial. El resto es paparrucha. El poder del FA, o el poder del PN, es igual al poder que pueda tener una hoja en medio de un huracán.
Esto no significa ser pesimista. El Poder, en realidad, es de siete mil millones de personas, sólo que cedemos el poder a estos atorrantes, a lo más espurio de la condición humana. El día que descubramos que el Poder es nuestro, comenzará en verdad la Historia de la democracia. Debemos abrir los ojos, pues en los últimos años el capital extranjero ha venido por las riquezas de nuestro continente y ahora, en esta nueva fase, diseñará nuestras leyes, nuestra Justicia, nuestros planes de estudio y se adueñará de los recursos del Estado, tal cual lo expresa el Contrato ROU UPM, un experimento del Banco Mundial en este laboratorio llamado Uruguay.
Todo aquel que minimice el poder de los ciudadanos y rebuzne, cacareé y cotorreé, será una aliado de ese plan siniestro. La contradicción de nuestro tiempo no es entre Democracia y Fascismo, como establecen los burros, las gallinas y las cotorras; la contradicción de nuestro tiempo es entre las grandes corporaciones y el poder de los ciudadanos.
lunes, 25 de noviembre de 2019
Años dándole
...estos "logros" no te lo van a quitar
>>> Tarea cumplida!
Ley de faltas
Ley de piquetes
Ley de ocupaciones
Ley antiterrorista
Los organismos de DDHH se pronuncian contra la aprobación parlamentaria de la ley antiterrorista. Se denuncia el aumento de la represión estatal y de la criminalización de la protesta social, como ya ha pasado en otros países como Argentina y Chile donde se ha aplicado este tipo de leyes.
Decretos de esencialidad
La medida se aplicó cuatro veces durante el segundo mandato de Vázquez
El decreto de esencialidad de la distribución, transporte y carga de combustible no es una novedad para el gobierno de Tabaré Vázquez. Hace un año y medio, el Poder Ejecutivo determinó la misma medida luego de que en junio de 2017 un paro de la Federación de Trabajadores de ANCAP (Fancap) generara el faltante de nafta y supergas durante una semana.
Tal como sucedió en esta oportunidad, la solicitud de esencialidad corrió por cuenta del Ministerio de Industria y se aplicó para "los servicios de importación, producción, distribución y comercialización de todos los combustibles en todo el país públicos y privados”.
Con la nueva medida del Poder Ejecutivo, el gobierno suma el cuarto decreto de esencialidad desde 2015 y la mayoría le valieron enfrentamientos con el PIT-CNT y los legisladores frenteamplistas.
Cuando la determinó para el combustible en 2017, la central sindical rechazó la medida luego de reunirse con una delegación de Fancap. A su vez, la bancada de diputados frenteamplista resolvió solicitar una reunión con los ministros de Trabajo (Ernesto Murro) e Industria (Carolina Cosse).
Unos meses antes, en febrero, el Ministerio de Trabajo había decretado la esencialidad de todos los servicios del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet), luego de que los empleados decidieran dejar de hacer los pronósticos del tiempo así como los específicos para la aviación comercial por reclamos salariales.
La educación estrenó los decretos de esencialidad en el segundo mandato de Vázquez cuando en agosto de 2015, luego de tres meses de conflicto por presupuesto, el gobierno anunció la medida para todos los centros educativos.
“Lo que tenemos que informar no es grato. Es con mucho dolor que tomamos una medida que es muy difícil para el colectivo de los docentes uruguayos", dijo la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, encargada de anunciar la medida.
Bestias sueltas
La Republicana
Departamento de Operaciones Encubiertas (DOE)
(Brecha) El 14 de agosto del año que termina seguramente será recordado. No por las balas de goma, o la fotógrafa herida, sino por la confirmación de un secreto a voces: hay infiltrados de inteligencia en las movilizaciones. “Observadores”, según el Ministerio del Interior. Cuando el diario “El País” difundió la noticia lo hizo bajo el título: “Agentes encubiertos contaron cómo operan los grupos radicales”. Brecha accedió al expediente judicial y releyó su información bajo otra clave: el funcionamiento actual de los aparatos de inteligencia dedicados al control político. Y cómo, en el trayecto, echan mano al poder judicial
Programa de Alta Dedicación Operativa (PADO)
Imagen relacionada Represión y detenciones en la mmarcha....
Cámaras e identificación facial
El guardián
Desde el 21 de diciembre de 2017, momento en que se puso en funcionamiento el Sistema Automatizado de Interceptaciones Legales (Sail), se hicieron 10.100 interceptaciones, según la información que se manejó en la reunión que este lunes mantuvo el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, con autoridades de la Suprema Corte de Justicia (SCJ).
Sail es el programa informático para solicitar la interceptación de llamadas durante una investigación judicial y controla el funcionamiento del sistema de espionaje El Guardián. Según informó el programa Todas las voces de Canal 4, el Ministerio del Interior nunca mandó los reportes trimestrales de las escuchas realizadas y tampoco instrumentó un convenio para que las empresas telefónicas informaran al Poder Judicial sobre las interceptaciones realizadas, dos requisitos claves para vigilar el sistema de escuchas estatal.
>>> Tarea cumplida!
Ley de faltas
Ley Nº 19.120
FALTAS Y CONSERVACIÓN Y CUIDADO DE LOS ESPACIOS PÚBLICOS
"ARTÍCULO 360.-
Será castigado con pena de 7 (siete) a 30 (treinta) días de prestación de trabajo
comunitario: |
||
1º | (Provocación o participación en
desorden en un espectáculo público).- El que, en un espectáculo público de cualquier
naturaleza, al ingresar, durante el desarrollo del mismo o al retirarse, provocare
desorden o participare de cualquier manera en él y siempre que el mismo no constituyere
riña u otro delito. |
|
2º | (Agravio u omisión de asistencia a la autoridad).- El que agraviare a la autoridad legítimamente investida o no le prestare el auxilio que esta reclame, en caso de incendio, naufragio, inundación u otra calamidad pública. |
Ley de piquetes
Ley de ocupaciones
Ley antiterrorista
Los organismos de DDHH se pronuncian contra la aprobación parlamentaria de la ley antiterrorista. Se denuncia el aumento de la represión estatal y de la criminalización de la protesta social, como ya ha pasado en otros países como Argentina y Chile donde se ha aplicado este tipo de leyes.
Decretos de esencialidad
La medida se aplicó cuatro veces durante el segundo mandato de Vázquez
El decreto de esencialidad de la distribución, transporte y carga de combustible no es una novedad para el gobierno de Tabaré Vázquez. Hace un año y medio, el Poder Ejecutivo determinó la misma medida luego de que en junio de 2017 un paro de la Federación de Trabajadores de ANCAP (Fancap) generara el faltante de nafta y supergas durante una semana.
Tal como sucedió en esta oportunidad, la solicitud de esencialidad corrió por cuenta del Ministerio de Industria y se aplicó para "los servicios de importación, producción, distribución y comercialización de todos los combustibles en todo el país públicos y privados”.
Con la nueva medida del Poder Ejecutivo, el gobierno suma el cuarto decreto de esencialidad desde 2015 y la mayoría le valieron enfrentamientos con el PIT-CNT y los legisladores frenteamplistas.
Cuando la determinó para el combustible en 2017, la central sindical rechazó la medida luego de reunirse con una delegación de Fancap. A su vez, la bancada de diputados frenteamplista resolvió solicitar una reunión con los ministros de Trabajo (Ernesto Murro) e Industria (Carolina Cosse).
Unos meses antes, en febrero, el Ministerio de Trabajo había decretado la esencialidad de todos los servicios del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet), luego de que los empleados decidieran dejar de hacer los pronósticos del tiempo así como los específicos para la aviación comercial por reclamos salariales.
La educación estrenó los decretos de esencialidad en el segundo mandato de Vázquez cuando en agosto de 2015, luego de tres meses de conflicto por presupuesto, el gobierno anunció la medida para todos los centros educativos.
“Lo que tenemos que informar no es grato. Es con mucho dolor que tomamos una medida que es muy difícil para el colectivo de los docentes uruguayos", dijo la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, encargada de anunciar la medida.
Bestias sueltas
La Republicana
Departamento de Operaciones Encubiertas (DOE)
(Brecha) El 14 de agosto del año que termina seguramente será recordado. No por las balas de goma, o la fotógrafa herida, sino por la confirmación de un secreto a voces: hay infiltrados de inteligencia en las movilizaciones. “Observadores”, según el Ministerio del Interior. Cuando el diario “El País” difundió la noticia lo hizo bajo el título: “Agentes encubiertos contaron cómo operan los grupos radicales”. Brecha accedió al expediente judicial y releyó su información bajo otra clave: el funcionamiento actual de los aparatos de inteligencia dedicados al control político. Y cómo, en el trayecto, echan mano al poder judicial
Programa de Alta Dedicación Operativa (PADO)
Imagen relacionada Represión y detenciones en la mmarcha....
Cámaras e identificación facial
El guardián
Desde el 21 de diciembre de 2017, momento en que se puso en funcionamiento el Sistema Automatizado de Interceptaciones Legales (Sail), se hicieron 10.100 interceptaciones, según la información que se manejó en la reunión que este lunes mantuvo el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, con autoridades de la Suprema Corte de Justicia (SCJ).
Sail es el programa informático para solicitar la interceptación de llamadas durante una investigación judicial y controla el funcionamiento del sistema de espionaje El Guardián. Según informó el programa Todas las voces de Canal 4, el Ministerio del Interior nunca mandó los reportes trimestrales de las escuchas realizadas y tampoco instrumentó un convenio para que las empresas telefónicas informaran al Poder Judicial sobre las interceptaciones realizadas, dos requisitos claves para vigilar el sistema de escuchas estatal.
sábado, 23 de noviembre de 2019
La última palabra
Criaron cuervos
En la tarde de este viernes, el Centro Militar desde su oficina de relaciones públicas difundió el editorial de la revista Nación, financiada por diferentes instituciones militares. Según explicó a Revista Martes el presidente del Centro Militar, Carlos Silva Valiente, no se trata de un comunicado oficial de la institución-como informamos en una primera instancia-pero se tomó la decisión de difundirlo desde el mail institucional por que así se hace habitualmente. Silva explicó que el Centro hará un análisis después de las elecciones. Lo que sigue es el editorial completo.
Este domingo culminará el proceso de redención de los derechos y valores del pueblo oriental, heridos, socavados, despreciados por 15 años de asonada frenteamplista. Será ese día el punto de llegada de muchos sacrificios, de la lucha despareja contra la arbitrariedad de un poder que se quiso total y absoluto para imponerle al Uruguay un perfil del todo ajeno a su historia, a sus más queridas tradiciones, a sus más profundos principios; pero también será el inicio de un compromiso en favor de la restauración de los vínculos que desde siempre unieron a los uruguayos y que la larga prédica y praxis del marxismo casi ponen al borde de la irremediable bancarrota.
Los marxistas finalmente se irán del poder y con ellos felizmente se irá el largo rosario de ofensas a la Constitución, el desorden y despilfarro en todos los niveles de la Administración, el consentimiento y estímulo al delito, el intento claro de destruir la familia tradicional, la voluntad por envilecer las relaciones sociales en base al resentimiento y a divisiones artificiales, la corrupción sin límites que le costó al país miles de millones de dólares que fueron a engrosar cuentas personales o arcas partidarias, los oscuros manejos de una política exterior corrupta y obsecuente dictada desde la Habana y financiada con el dinero sucio de la corrupción venezolana, el
destrato a las buenas formas, la ordinariez de varios dirigentes que en su soberbia creyeron que podían imponer su credo de suciedad, dejadez y malas palabras.
Cuando el último de los gobernantes del Frente Amplio deje el poder veremos la estela de varios crímenes cometidos contra el pasado y contra el futuro del país y nos lamentaremos una y otra vez pensando cómo fue que permitimos tanta maldad
impunemente por tanto tiempo.
Lo acontecido con la enseñanza, que ha dado los peores resultados de toda la historia, dejando a los niños y jóvenes inermes para luchar en un mundo serio y competitivo; lo acontecido con la pobreza, que se apostó a perpetuarla por todos los medios; lo que ocurrió en materia de seguridad pública condenando a los habitantes honestos del país al horror del miedo, de la muerte, de la pérdida de sus bienes y de sus libertades; lo que se hizo con la salud, que convirtió los hospitales no en centro de atención y cura de enfermedades sino en cajas de financiamiento de los inmorales dirigentes comunistas; lo que se perpetró contra el Derecho y la observancia de las normas son todas injurias que no será fácil reparar. El tamaño y la hondura del mal perpetrado son tan grandes, tienen tal volumen que a priori parece imposible siquiera ponerse a limpiar tanto desastre y empezar a crecer con esperanza.
Sería una enorme injusticia que todos los responsables de esta tragedia que apestó las relaciones y enajenó buena parte del porvenir de los uruguayos puedan irse para sus mansiones y gozar viciosamente de sus comodidades mal habidas
sin que nada los conmueva o distraiga de sus goces. Para que esto no vuelva a repetirse, para que nadie se crea que en el Uruguay es posible destruir y menoscabar y humillar sin tener que pagar nada y encima ser premiados con pensiones,
puestos en el exterior o asesorías en empresas amigas, algunos tendrán que ser alcanzados por la mano de la ley y deberán dar cumplida cuenta de tales crímenes.
No estaría bueno tapar con disimulos o postergaciones una acción del Estado
que, en la recuperación de sus valores esenciales, debe dar ejemplo de transparencia, rectitud y fiel observancia de sus deberes.
Queremos decir:
la ley debe caer no suave sino implacablemente sobre los corruptos de toda condición; caer sobre los que entregaron las calles y barrios enteros a
los delincuentes para que los administraran a su antojo, sin ninguna molestia; debe caer sobre los que vilmente vendieron en parcelas la política exterior a los intereses de la narcodictadura de Caracas;
caer sobre los que fundieron las empresas estatales, sobre los que estuvieron en negocios turbios sirviéndose del Estado y, principalmente,
caer sobre los que, como el actual presidente de la República, sistemáticamente violaron la Constitución y los límites que esta impone a su cargo.
Solo así, pensamos, podremos empezar a recuperar la confianza y construir vínculos sinceros y perdurables entre la sociedad y el Estado y entre los ciudadanos entre sí; dos puentes que el marxismo deliberadamente dinamitó en su afán por crear las condiciones propicias para la disolución revolucionaria. Hay que tener firmeza y ser coherentes; no sea cosa que en nombre de una concordia que nunca fue tal, perdamos el derecho a hacer lo que corresponde para terminar definitivamente con las muchas dolencias que nos habrá de dejar esa terrible pesadilla llamada Frente Amplio.
El próximo domingo hay que sellar el camino de un nuevo amanecer. El Marxismo debe empezar a ser definitivamente extirpado del horizonte de nuestro destino nacional.
¡Viva la Patria!
>>> Defender movilizados la democracia
Este pronunciamiento militar en el momento exacto es el empujincito que necesita Martinez que hasta ese momento estaba a placé. Yo se que los militares son bestias, pero se también sé que ellos manejan acciones de inteligencia. Y para rematar aparece el comando Barneix. Pobre Cuquito! s debe de estar pateando los huevos de calentura. Tenia la elección ganada según los últimos sondeos. Todos sabemos que Mujica es un crack para abrazarse al mismo diablo si es necesario, Se abrazó a la Open Society de Soros, a la fundación Rockefeller para financiar sus proyectos, a Fernandez de Fripur, al Paco Casal y ya desde joven a los Tenientes de Artigas. Estos últimos una logía militar de donde vienen las bestias golpistas. Mano a mano hemos quedado,, no me importa lo que has hecho, lo que haces ni lo que harás. Con el Ñato lo sacaron del cajón, lo subimos a general, te sacamos a la política, y Manini con su Cabildo Abierto fue el partido ganador. Salió de la nada. De lo contrario los milicos estarían calladitos. Casualmente el otro día nombraron (Trump) a un nuevo embajador en la embajada de la rambla. Lo primero que hizo fue juntar en su embajada a todos los altos oficiales del ejercito uruguayo. (mas abajo pongo enlace para que los vean en las fotos). Hablaron de las misiones de paz. En la embajada. Y sacaron fotos. Mas tarde en Bolivia ocurrio lo que ocurrió. Y se sabe que en el norte tienen políticas universales para las Américas. Lo que pasa en Venezuela, le pasa a los bolivianos, y lo que le pasa a Bolivia le puede pasar a Uruguay. Gritaron fraude y a Moraales lo sacaron del orto, de la misma forma que a Maduro lo quisieron sacar, y de la misma forma si hoy de noche Martinez nos da una sorpresa a pesar de estar a placé es muy posible que los hasta ahora ganadores griten FRAUDE ELECTORAL. Justo donde la embajada quiere ir en su geo politica. Este pronunciamiento militar puso al sistema democrático ya no es ni la coalición de los blancos, ni la coalicion progre frente amplista. Es la democracia o el golpe. Si hoy gana Martinez los frente amplistas deberan de pasar por los cuarteles a agradecerle el gesto. Se lo deberán a Manini.
Por bestia.
El Muerto
En la tarde de este viernes, el Centro Militar desde su oficina de relaciones públicas difundió el editorial de la revista Nación, financiada por diferentes instituciones militares. Según explicó a Revista Martes el presidente del Centro Militar, Carlos Silva Valiente, no se trata de un comunicado oficial de la institución-como informamos en una primera instancia-pero se tomó la decisión de difundirlo desde el mail institucional por que así se hace habitualmente. Silva explicó que el Centro hará un análisis después de las elecciones. Lo que sigue es el editorial completo.
Este domingo culminará el proceso de redención de los derechos y valores del pueblo oriental, heridos, socavados, despreciados por 15 años de asonada frenteamplista. Será ese día el punto de llegada de muchos sacrificios, de la lucha despareja contra la arbitrariedad de un poder que se quiso total y absoluto para imponerle al Uruguay un perfil del todo ajeno a su historia, a sus más queridas tradiciones, a sus más profundos principios; pero también será el inicio de un compromiso en favor de la restauración de los vínculos que desde siempre unieron a los uruguayos y que la larga prédica y praxis del marxismo casi ponen al borde de la irremediable bancarrota.
Los marxistas finalmente se irán del poder y con ellos felizmente se irá el largo rosario de ofensas a la Constitución, el desorden y despilfarro en todos los niveles de la Administración, el consentimiento y estímulo al delito, el intento claro de destruir la familia tradicional, la voluntad por envilecer las relaciones sociales en base al resentimiento y a divisiones artificiales, la corrupción sin límites que le costó al país miles de millones de dólares que fueron a engrosar cuentas personales o arcas partidarias, los oscuros manejos de una política exterior corrupta y obsecuente dictada desde la Habana y financiada con el dinero sucio de la corrupción venezolana, el
destrato a las buenas formas, la ordinariez de varios dirigentes que en su soberbia creyeron que podían imponer su credo de suciedad, dejadez y malas palabras.
Cuando el último de los gobernantes del Frente Amplio deje el poder veremos la estela de varios crímenes cometidos contra el pasado y contra el futuro del país y nos lamentaremos una y otra vez pensando cómo fue que permitimos tanta maldad
impunemente por tanto tiempo.
Lo acontecido con la enseñanza, que ha dado los peores resultados de toda la historia, dejando a los niños y jóvenes inermes para luchar en un mundo serio y competitivo; lo acontecido con la pobreza, que se apostó a perpetuarla por todos los medios; lo que ocurrió en materia de seguridad pública condenando a los habitantes honestos del país al horror del miedo, de la muerte, de la pérdida de sus bienes y de sus libertades; lo que se hizo con la salud, que convirtió los hospitales no en centro de atención y cura de enfermedades sino en cajas de financiamiento de los inmorales dirigentes comunistas; lo que se perpetró contra el Derecho y la observancia de las normas son todas injurias que no será fácil reparar. El tamaño y la hondura del mal perpetrado son tan grandes, tienen tal volumen que a priori parece imposible siquiera ponerse a limpiar tanto desastre y empezar a crecer con esperanza.
Sería una enorme injusticia que todos los responsables de esta tragedia que apestó las relaciones y enajenó buena parte del porvenir de los uruguayos puedan irse para sus mansiones y gozar viciosamente de sus comodidades mal habidas
sin que nada los conmueva o distraiga de sus goces. Para que esto no vuelva a repetirse, para que nadie se crea que en el Uruguay es posible destruir y menoscabar y humillar sin tener que pagar nada y encima ser premiados con pensiones,
puestos en el exterior o asesorías en empresas amigas, algunos tendrán que ser alcanzados por la mano de la ley y deberán dar cumplida cuenta de tales crímenes.
No estaría bueno tapar con disimulos o postergaciones una acción del Estado
que, en la recuperación de sus valores esenciales, debe dar ejemplo de transparencia, rectitud y fiel observancia de sus deberes.
Queremos decir:
la ley debe caer no suave sino implacablemente sobre los corruptos de toda condición; caer sobre los que entregaron las calles y barrios enteros a
los delincuentes para que los administraran a su antojo, sin ninguna molestia; debe caer sobre los que vilmente vendieron en parcelas la política exterior a los intereses de la narcodictadura de Caracas;
caer sobre los que fundieron las empresas estatales, sobre los que estuvieron en negocios turbios sirviéndose del Estado y, principalmente,
caer sobre los que, como el actual presidente de la República, sistemáticamente violaron la Constitución y los límites que esta impone a su cargo.
Solo así, pensamos, podremos empezar a recuperar la confianza y construir vínculos sinceros y perdurables entre la sociedad y el Estado y entre los ciudadanos entre sí; dos puentes que el marxismo deliberadamente dinamitó en su afán por crear las condiciones propicias para la disolución revolucionaria. Hay que tener firmeza y ser coherentes; no sea cosa que en nombre de una concordia que nunca fue tal, perdamos el derecho a hacer lo que corresponde para terminar definitivamente con las muchas dolencias que nos habrá de dejar esa terrible pesadilla llamada Frente Amplio.
El próximo domingo hay que sellar el camino de un nuevo amanecer. El Marxismo debe empezar a ser definitivamente extirpado del horizonte de nuestro destino nacional.
¡Viva la Patria!
>>> Defender movilizados la democracia
Este pronunciamiento militar en el momento exacto es el empujincito que necesita Martinez que hasta ese momento estaba a placé. Yo se que los militares son bestias, pero se también sé que ellos manejan acciones de inteligencia. Y para rematar aparece el comando Barneix. Pobre Cuquito! s debe de estar pateando los huevos de calentura. Tenia la elección ganada según los últimos sondeos. Todos sabemos que Mujica es un crack para abrazarse al mismo diablo si es necesario, Se abrazó a la Open Society de Soros, a la fundación Rockefeller para financiar sus proyectos, a Fernandez de Fripur, al Paco Casal y ya desde joven a los Tenientes de Artigas. Estos últimos una logía militar de donde vienen las bestias golpistas. Mano a mano hemos quedado,, no me importa lo que has hecho, lo que haces ni lo que harás. Con el Ñato lo sacaron del cajón, lo subimos a general, te sacamos a la política, y Manini con su Cabildo Abierto fue el partido ganador. Salió de la nada. De lo contrario los milicos estarían calladitos. Casualmente el otro día nombraron (Trump) a un nuevo embajador en la embajada de la rambla. Lo primero que hizo fue juntar en su embajada a todos los altos oficiales del ejercito uruguayo. (mas abajo pongo enlace para que los vean en las fotos). Hablaron de las misiones de paz. En la embajada. Y sacaron fotos. Mas tarde en Bolivia ocurrio lo que ocurrió. Y se sabe que en el norte tienen políticas universales para las Américas. Lo que pasa en Venezuela, le pasa a los bolivianos, y lo que le pasa a Bolivia le puede pasar a Uruguay. Gritaron fraude y a Moraales lo sacaron del orto, de la misma forma que a Maduro lo quisieron sacar, y de la misma forma si hoy de noche Martinez nos da una sorpresa a pesar de estar a placé es muy posible que los hasta ahora ganadores griten FRAUDE ELECTORAL. Justo donde la embajada quiere ir en su geo politica. Este pronunciamiento militar puso al sistema democrático ya no es ni la coalición de los blancos, ni la coalicion progre frente amplista. Es la democracia o el golpe. Si hoy gana Martinez los frente amplistas deberan de pasar por los cuarteles a agradecerle el gesto. Se lo deberán a Manini.
Por bestia.
El Muerto
jueves, 21 de noviembre de 2019
Los protagonistas de la disputa
en América Latina
21 de noviembre
por Claudio Katz
Las pancartas son categóricas: “Chile se cansó y despertó”. Un pueblo harto de humillaciones se ha insurreccionado contra el modelo neoliberal. Los padecimientos generados por ese esquema han salido a la superficie. El 70% de los hogares tiene su ingreso comprometido con deudas para solventar la educación, la salud y el ahorro previsional privados. El país comparte el podio de las ocho naciones más desiguales del mundo.
El grueso de la población confronta con un gobierno aislado, que surgió de comicios signados por la abstención. Piñera despliega una represión salvaje, que ya causó más de 20 asesinatos, miles de detenidos e incontables heridos. Los carabineros se drogan para continuar la balacera y disparan a los ojos de los manifestantes, para quitarles la vista de por vida. Hay abrumadoras denuncias de abusos sexuales contra las mujeres detenidas.
El ejército sostiene ese vandalismo para preservar los privilegios legados por Pinochet. Recibe un porcentual fijo de las exportaciones de cobre y sus miembros están exentos de la vejez pauperizada que padece el resto de los jubilados. Pero algunos soldados se han negado a reprimir y los jefes exigen garantías de impunidad para seguir repartiendo palos. La demanda de juicios a sus tropelías se ha instalado en la sociedad.
Piñera está desbordado. Impuso el toque de queda y tuvo que levantarlo. Convocó al dialogo y refuerza la sangría. Todos los días anuncia alguna concesión social sin ningún resultado. El pánico imperante en su círculo íntimo aflora en confesiones graciosas (“tendremos que disminuir nuestros privilegios”)o en la descripción de los manifestantes como “alienígenas”.
Las movilizaciones persisten para no repetir las frustradas experiencias del 2006 y 2011, que desembocaron en cambios cosméticos. La oleada actual comenzó en forma espontánea y sin liderazgo, pero ya emerge una organización por abajo. En los cabildos abiertos se debate cómo encauzar las protestas y las propuestas.
El activismo de los estudiantes se ha extendido a los sindicatos y a los colectivos sociales, que demandan el fin de Piñera y la convocatoria a una Asamblea Constituyente. La presión es tan fuerte, que el propio gobierno maniobra para deformar ambos reclamos.
También los políticos de la Concertación buscan diluir las exigencias del levantamiento. Sostuvieron durante 30 años el régimen y convalidaron la militarización del último mes. Ahora propician el llamado a un plebiscito que asegura la continuidad de Piñera y bloquea la soberanía de una eventual Constituyente. Ensayan un nuevo dique para frenar las movilizaciones.
Ecuador ha sido el segundo epicentro de las revueltas. Las comunidades indígenas resistieron a escala local el aumento del combustible e incorporaron otros sectores popularesasu monumental marcha sobre Quito.
Lenin Moreno se escapó a Guayaquil y apostó al salvajismo represivo, provocando siete muertos y miles de heridos. Pero al cabo de varias jornadas de intensa batallase rindió. Anuló el incremento de las naftas y aceptó la victoria conseguida por la firmeza de la CONAIE. Cuando los indígenas ingresaron en el Parlamento, el presidente tránsfuga recordó cómo tres antecesores suyos fueron tumbados por ese movimiento (1997, 2000 y 2005).
El levantamiento logró la derogación de un decreto redactado por el FMI, en un país asfixiado por el endeudamiento externo. Todo el paquete de reforma laboral y apertura de importaciones ha quedado afectado, en una economía ahogada por la dolarización. Ese cepo impide compensar los ajustes con paliativos monetarios.
Los manifestantes también ocuparon las oficinas del FMI, para advertir a los banqueros cual será el tono de su resistencia. Después del éxito conseguido en las barricadas, los colectivos sociales organizaron un Parlamento de los Pueblos, que propuso aumentos del salario mínimo, impuestos progresivos y mecanismos para salir de la dolarización, junto a la titularización de las tierras y la reestructuración de las deudas campesinas. Estas definiciones ilustran cómo las revueltas comienzan a madurar con proyectos alternativos.
Fue una acción virulenta con protagonismo directo del ejército. Evo renunció a punta de pistola, cuando los generales se negaron a obedecerlo. No dimitió por simple agobio de la crisis (como De la Rúa en el 2001). Fue expulsado de la presidencia por la cúpula militar.
Pero la principal peculiaridad de esta operación fue su tinte fascista. Los gendarmes impusieron una zona liberada, que ocuparon los matones para instaurar el terror. Forzaron la indefensión del gobierno aplicando el manual de las bandas ultra-derechistas. Secuestraron dirigentes sociales, tomaron instituciones públicas y humillaron a los opositores.
Camacho puso en práctica las proclamas de Bolsonaro. Con biblias y rezos evangélicos quemó casas, rapó mujeres y encadenó periodistas. Emitió gritos racistas contra el cholo, mientras sus secuaces se burlaban de los coyas, quemaban la bandera Whipala y golpeaban a los transeúntes de la raza denigrada. En La Paz imperó el vandalismo ensayado en Santa Cruz. La valentía del “macho Camacho” estuvo garantizada por la protección policial.
Ese odio contra los indios recuerda la provocación inicial de Hitler contra los judíos. Camacho no disimula la irracionalidad de sus diatribas contra los pueblos originarios. Considera que las mujeres de esas nacionalidades son brujas satánicas y que los hombres son únicamente aptos para la servidumbre. Como en Alemania durante los años 30 ha creado legiones de resentidos para humillar a los indígenas.
La clase dominante celebra la venganza. Como no digiere que un indio haya ejercido la presidencia, permite las descontroladas tropelías de Camacho. Los poderosos esperan estabilizar el golpe, para equilibrar luego el manejo del estado con sus hombres de confianza. Su prioridad inmediata es consolidar el desplazamiento de Evo.
Por eso invierten lo ocurrido y culpan al líder del MAS de un fraude que justificaría su remoción. Convierten a la víctima en responsable y transforman la impugnación del golpe en una crítica a la ambición de Morales. El presidente electo es presentado como un dictador y los golpistas son elogiados como salvadores de la democracia. La versión light de esta infamia declara que “ambos bandos son culpables”.
Pero los difamadores no presentaron ninguna prueba del alegado fraude. Tampoco objetaron el triunfo de Evo. Sólo discutían si obtuvo el 10% de diferencia requerido para evitar el ballotage. La oposición legitimó la elección con su participación y por eso al principio sólo hablaba de irregularidades. Cuando percibió la posibilidad de perpetrar el golpe improvisó el cuento del fraude.
El protagonismo del Estados Unidos en el complot quedó confirmado con el elogio de Trump a la intervención del ejército. Los jugosos negocios internacionales que ofrecen los golpistas, indujeron también la bendición de la Unión Europea a los usurpadores.
Pero habrá que ver cuál es la consistencia de una mandataria auto-elegida en una asamblea trucha. Añez intentará mantener la presidencia durante el tiempo requerido para amañar elecciones con proscripciones. Oscila entre los compromisos requeridos para montar esa farsa y el simple ejercicio de una dictadura. Bajo su conducción, Bolivia ha retomado sus viejos parámetros de ingobernabilidad.
La heroica resistencia popular se desenvuelve en las duras condiciones de la militarización. En los primeros cinco días hubo 24 muertos. Pero las movilizaciones se extienden desde el bastión de El Alto al resto de las ciudades. Los cabildos organizan la lucha de un pueblo muy experimentado en la batalla callejera.
En el curso de esa acción podrá evaluarse la actitud adoptada por Evo. El principal problema no fue su estrategia de permanencia en el gobierno (plebiscito y reelección), sino la total imprevisión frente al golpe. Quedó atado al arbitraje de la OEA y fue sorprendido por la insubordinación de un ejército, que reforzó con equipamientos y pertrechos. El desmovilizado oficialismo no tuvo repuesta frente a la decidida ofensiva de la derecha. Este balance ya está en la mente de los militantes que ahora priorizan la resistencia.
Ese desenlace propinó una gran derrota a la farsa montada por el juez Moro y sus cómplices de O Globo, para impedir la presidencia del candidato más popular. La conversión del inquisidor en superministro de Bolsonaro desenmascaró ese operativo. Ahora deberán lidiar con las caravanas que exigirán la restitución de los derechos políticos a Lula.
Esa campaña tendrá resonancia continental frente a un mandatario desprestigiado. Bolsonaro carece de la serenidad mínima, requerida para ejercer una función ejecutiva. Mantiene su perfil carnavalesco y no logra hilvanar un discurso. Responde con insultos a cualquier cuestionamiento.
Esa brutalidad agrava los problemas de su entorno. Ya tiene varios familiares comprometidos con el lavado de dinero y algunos testimonios lo vinculan directamente con el asesinato de Marielle Franco.
Bolsonaro depende del sostén de los nueve generales que ejercen el poder efectivo. Sobrevive por el gran servicio que presta a las clases dominantes, a través de sucesivos paquetes de agresión a los trabajadores.
El ex capitán debutó reduciendo el salario mínimo por decreto. Luego motorizó una reforma laboral precarizadora e impulsa cambios regresivos en el sistema previsional. Además, implementa privatizaciones en los estratégicos sectores de la energía, las finanzas y el transporte y se propone rematar antes del 2022, un centenar de empresas estatales. El recorte del presupuesto educativo ha sido tan brutal, como la caza de brujas para destituir funcionarios con ideas progresistas. Sus diatribas anticomunistas incentivan atropellos a los derechos humanos, mientras aumenta el salvajismo de los gendarmes en las favelas.
Pero Bolsonaro no ha podido traducir su verborragia reaccionaria en un programa de concreción del fascismo. Carece de condiciones para materializar ese proyecto. No logró un liderazgo reconocido en el grueso del sistema político conservador y continúa soportando la resistencia popular.
Ya afrontó una huelga de gran acatamiento contra la reforma previsional y una marcha de tres millones de personas contra la homofobia. También las protestas estudiantiles contra los recortes del presupuesto alcanzaron una inédita masividad, bajo la impactante proclama de “libros sí, armas no”.
El desorbitado capitán programa varios contragolpes y una movilización de su base social derechista para intentar el re-encarcelamiento de Lula. El próximo escenario emergerá de esa confrontación.
Sus lacayos venezolanos intentaron todos los complots imaginables, pero su capacidad de acción quedó socavada por la fracasada auto-proclamación de Guaidó. Falló también la farsa de la ayuda humanitaria y no pudieron consumar ningún levantamiento militar. La guerra eléctrica no funcionó y la improvisada asonada de Leopoldo López naufragó sin pena, ni gloria.
Las amenazas de provocación militar igualmente persisten enla frontera con Colombia. Por eso el Departamento de Estado dinamita las negociaciones con la oposición. Pero el gobierno ha logrado desbaratar una conspiración tras otra.
En un escenario social muy difícil (y agravado por los gigantescos desaciertos de la política económica), David logró frenar a Goliat. El campo bolivariano mantiene un intenso nivel de movilizaciones callejeras y disputa el espacio público, cada vez que asoma la oposición. Se ha preservado la cohesión militar, a través de una intervención política constante en el ejército, utilizando la carta condicionante de las milicias populares.
Esta conducta ilustra cómo actuar frente a la derecha. Confirma la necesidad de respuestas de la misma escala que las acciones golpistas y sin ningún atisbo de rendición. Venezuela ratifica la conveniencia de exhibir la fuerza junto al accionar diplomático, manteniendo la serenidad y las banderas de la soberanía y la paz. Para vencer a los fascistas hay que actuar sin vacilaciones.
El pueblo hizo valer sus demandas a través de la movilización, en una isla agobiada por el ajuste del FMI. Laley federal impuesta por los financistas para afrontar la bancarrota fiscal genera terribles padecimientos a los trabajadores. Pero por primera vez en la historia deesa nación, un gobernador ha sido tumbado porla presión popular. La crisis continúa y no se avizoran soluciones, en una colonia sin mecanismos políticos para procesar las tensiones habituales de cualquier estado.
En la vecina Haití, las manifestaciones del último semestre han sido monumentales. Todos los días se levantan barricadas en las ciudades, para protestar contra un gobierno que agravó el indescriptible empobrecimiento de la población. La galopante inflación impide a la mitad de los haitianos completar su alimentación cotidiana y la represión se ha cobrado la vida de 51personas. Las principales demandas afectan a tres presidentes, que malversaron los fondos aportados por el chavismo a través de Petrocaribe. Los mandatarios incrementaron sus fortunas personales con los recursos destinados al abaratamiento del combustible.
Los manifestantes exigen la renuncia del títere actual de Washington, que Trump sostiene para recompensar su traición a Venezuela y su alineamiento con la extrema derecha. Pero la marea de protestas no cede y la exigencia de enjuiciar a los ladrones, ya es complementada con el reclamo de una Asamblea Constituyente, para introducir drásticos cambios en el bochornoso sistema electoral.
También Honduras continúa convulsionada por una persistente resistencia contra el régimen sanguinario surgido de un fraude (2017), que reforzó la estafa electoral precedente (2013). Los criminales que conducen el estado no sólo cargan con el asesinato de Berta Cáceres. Han ultimado a 200 militantes populares que enfrentaron la mafia de los gendarmes. El país ha sido convertido en un narcoestado, manejado porun presidente con familiares condenados en Estados Unidos por el tráfico de cocaína.
La mecha de las rebeliones tiende a expandirse a toda la zona y ya impactó en la próspera Panamá. En el istmo se registró una gran marcha universitaria, que repudió el paquetazo de contrarreformas negociado en la Asamblea Legislativa.
La esperanza está centrada en poner fin a la violencia, que ha convertido al país en un gran ataúd de 300 mil muertos reconocidos y 26 mil cadáveres sin identificar. Son incontables los líderes sociales masacrados, en una guerra que sobrepasa los ajustes del crimen organizado.
López Obrador fue votado para terminar con el desplazamiento forzado de poblaciones y para esclarecer masacrescomo la ocurrida en Ayozinatpa.Pero ese anhelo de pacificación y justicia no ha sido satisfecho.Sigue pendiente la desarticulación de las bandas y el esclarecimiento de las complicidades militares.
El logro de esos objetivos choca con la reciente sanción de una norma de seguridad interior, que legaliza la acción de las fuerzas armadas. Esa gravitación ha sido reforzada con la aceptación del chantaje de Trump, para taponar el desplazamiento de los migrantes con mayor despliegue de la Guardia Nacional.
AMLO recibió también una catarata de sufragios para frenar las privatizaciones, recuperar la autosuficiencia alimentaria y reducir el pesado endeudamiento externo. Pero tampoco en este terreno aparecen las medidas prometidas,para implementar una “cuarta transformación” fundacional de México.
La otra convulsión electoral en la región fue suscitada por el triunfo de Fernández en Argentina. Macri no pudo forzar el ballotage y la derecha perdió el gobierno, en el país que catapultó la restauración conservadora.
La prensa hegemónica disimula este resultado con lecturas invertidas de lo ocurrido. Presenta a los perdedores como si hubieran liderado los comicios, por la simple reducción de la distanciade sufragios con la fórmula triunfante.Ese premio consuelo no altera el contundente veredicto de la población contra el ajuste.
Los derechistas inflan su performance para condicionar al nuevo gobierno. Desde sus órganos de opinión lanzan advertencias contra cualquier medida progresista. Mientras convocan de palabra a “cerrar la grieta”, preparan las cacerolas para hacer valer sus exigencias.
La confrontación se dirimirá en las respuestas a la catástrofe económico-social que deja Macri. La derecha atribuye ese colapso a la sociedad, la cultura y la historia de los argentinos. Pero el desplome obedece a razones más terrenales: el modelo neoliberal, las políticas de endeudamiento y los ajustes impuestos por el FMI. Ese dramático escenario induce al reinicio de la movilización, en el país con mayor nivel de organización sindical y social de toda la región. Sin ese resurgimiento de la lucha, no se podrá recomponer el deteriorado ingreso de la población.
También en otros países se libran importantes choques electorales con resultados más contradictorios. En Colombia se verifica el lento surgimiento de fuerzas de centroizquierda, que por primera vez disputan intendencias y gobernaciones con la oligarquía y los paramilitares.
En Uruguay se avizora en cambio un escenario difícil para el Frente Amplio,en el ballotage contra la derecha,luego de 15 años de gobierno. Hace pocos meses en El Salvador, un improvisado derechista consiguió la presidencia, poniendo fin a una década de cuestionable gestión del Farabundo Martí.
Las elecciones constituyen un terreno muy relevante de la confrontación en curso. La derecha articula sus estrategias en el Grupo de Lima y el progresismo define su perfil en el núcleo de Puebla. Construye esa alternativa tomando distancia de los Encuentros Antiimperialistas, el ALBA y el Foro de Sao Paulo.
Estas últimas instancias aportan un explicito sostén a la movilización popular. Como no restringen su acción al terreno de las urnas, mantienen vasos comunicantes con los organismos que emergen de las luchas sociales. Esas modalidades ya se vislumbran en los Cabildos de Chile, en el Parlamento de Pueblos de Ecuador, en los Encuentros de Movimientos en Bolivia y en los Organismos Coordinados de Haití.
Los golpistas actúan con el sostén directo de los gendarmes y aseguran su permanencia con algún socio civil. En Paraguay desplazaron a Lugo, pusieron a Cartes y se afianzaron con Abdo, en comicios signados por la abstención y la ilegitimidad de los mandatarios.
En todos los casos el ejército vuelve a ocupar el primer plano, como garante de nuevas formas autoritarias sostenidas en el estado de excepción. El colombiano Duque encarna la modalidad más acabada de esos mecanismos. Apaña el asesinato de militantes populares, legaliza el accionar de los paramilitares y sepulta los Acuerdos de Paz para ultimar ex combatientes.
Otros golpistas justifican el uso de la fuerza resucitando viejos fantasmas de la guerra fría. Atribuyen las protestas sociales en cualquier rincón del continente, a un plan de subversión monitoreado desde Venezuela y Cuba.
Difunden esas tonterías sin ningún rubor, mientras afinan burdas operaciones judiciales para proscribir a los líderes progresistas. Sin magistrados adictos, las causas que inventan no podrían traspasar la primera instancia de cualquier tribunal. Pero cuentan con los medios de comunicación para proclamar las sentencias que repite el gran público.
Los medios manipulan la información,presentando la corrupción como una enfermedad de los gobiernos que se distancian de las normas conservadoras. Eximen de ese mal a la derecha y por esa razóntienen poca prensa, las coimas de Oderbrecht o las estafas al fisco en los paraísos fiscales. No se ha gastado tinta en describir, por ejemplo, la trama mafiosa de los presidentes peruanos, que encubrieron sus fraudes con pactos de impunidad. Los grandes medios operan como usinas de fake news, que elaboran los servicios de inteligencia a pedido de los grupos derechistas.
El doble discurso de los diarios y emisoras traspasa también todas las fronteras. Diariamente difunden nuevas denuncias sobre Venezuela -calcadas de los informes elaborados por el Departamento de Estado contra Cuba- mientras silencian el asesinato de 648 líderes sociales en Colombia.
La derecha complementa sus mentiras con diversos dispositivos para obstruir la reflexión popular.La ceguera que propicia el fanatismo religioso es el instrumento predilecto de esa operación. Los evangélicos aportan sus recursos multimillonarios para crear miedos y destruir solidaridades.
Trump intenta reconquistar elcontrol estadounidense de las riquezas naturales latinoamericanas. Afianza la subordinación de sus vasallos tradicionales y explora una nueva sociedad con Bolsonaro. Pero habrá que ver si la clase dominante brasileña mantiene ese eje geopolítico, a costa de sus florecientes negocios con China.
La reciente cumbre de los BRICS en Brasilia, incluyó llamativos pronunciamientos propiciados por el gigante asiático a favor del libre-comercio.El propio Bolsonaro ha comenzado a evaluar un Tratado de Libre Comercio con China y tiene en carpeta el patrocinio de Huawei para las nuevas redes informáticas del 5 G. Otra conflictiva tentación proviene de la oferta europea de concertar un TLC, que dinamitaría el MERCOSUR.
Frente a la dura rivalidad que anticipan estas jugadas, Trump acrecienta la presencia regional del Pentágono. Estrecha relaciones con los militares latinoamericanos, para hacer valer los intereses económicos de las empresas estadounidenses.
Esa intervención también obliga a afianzar el neoliberalismo, que ha sido desafiado por la sublevación chilena. Esa revuelta demuele todos los mitos del modelo más ensalzado por los capitalistas de la región. Ahora se percibe con nitidez que el universo trasandino no es un paraíso de crecimiento, sino un infierno de desigualdad. Por esa razón,el descontento contra los 30 pesos del metro se transformó en un levantamiento contra los 30 años de neoliberalismo.
La rebelión trasandina tiene gran impacto internacional porque ha puesto en jaque al niño mimado de la ortodoxia económica. La denuncia que en “Chile torturan, matan y violan” ya irrumpió en los grandes festivales. Todos los circuitos de la comunicación mundial recogen ese dato.
Resulta prematuro predecir cuán doblegados están los cimientos del neoliberalismo. Pero ha salido a flote la enorme vulnerabilidad de ese modelo, frente al estancamiento de los precios de las materias primas, el aumento del endeudamiento y la reducción del crecimiento.
Las protestas han puesto también de relieve que el neoliberalismo es el principal responsable de la desintegración social de América Latina. Genera las migraciones masivas que suceden a la apertura comercial y a la destrucción de la pequeña propiedad agraria. Los desposeídos engrosan las caravanas hacia el Norte, que ningún muro o gendarme puede contener.
Los hipócritas liberales ponderan el flujo irrestricto de capitales y mercancías, pero exigen reforzar el control del movimiento internacional de los migrantes. Propician la persecución y estigmatización de quiénes cruzan la frontera, para enviar remesas a sus empobrecidos familiares.
El neoliberalismo ha provocado,además, la expansión de la delincuencia y una aterradora escala de violencia. De las 50 urbes más peligrosos del planeta 43 se localizan en América Latina. Las maras dominan el entramado de muchos países centroamericanos, corroídos por la ingeniería social regresiva que ensayaron los economistas de Chicago.
Ese modelo es también responsable de la destrucción del medio ambiente y de los recientes incendios en la Amazonia. La quema de grandes bosques es perpetrada adrede para plantar soja o abrir pasturas a la ganadería, bajo la regla mercantil de maximizar la ganancia.
Esta mirada ilustra hasta qué punto los privilegiados viven en una burbuja de Miami y barrios cerrados. Ignora que las protestas no se limitan a impugnar el comportamiento de los políticos. La desigualdad, las privatizaciones, el endeudamiento y los ajustes son invariablemente cuestionados. El FMI, los banqueros y las empresas transnacionales son ubicados en el banquillo de los acusados. Las revueltas tampoco enjuician a todos los partidos o legisladores. Cuando expresan intereses populares, las protestas objetan a los servidores del orden capitalista.
La verdadera clase media no guarda, además, el menor parentesco con el retrato derechista. En los hechos, el ascenso social es muy limitado en el duro contexto regional y coexiste con la precarización o el creciente desempleo. Por eso las revueltas -que encabezan trabajadores, campesinos y estudiantes- incorporan a veces a los comerciantes y dueños de pequeños negocios. Todos buscan contener la degradación del nivel de vida.
La clase media es una etiqueta utilizada por la derecha para improvisar explicaciones. Mezclan peras con manzanas, para forzar interpretaciones amoldadas a sus prejuicios. Por eso sitúan en una misma secuencia cualquier acción de multitudes descontentas, omitiendo el sentido de cada movilización.
Pero las polémicas sobre el escenario actual no involucran sólo a la derecha. También incluyen a ciertos pensadores despistados que se auto-ubican en la izquierda. Esos analistas no logran registrar las diferencias que contraponen a una revuelta popular con un clamor reaccionario.
Esa distinción debe ser expuesta en forma categórica. Una guarimba de escuálidos en Venezuela se localiza en la vereda opuesta de las protestas indígenas de Ecuador. Los seguidores de Camacho en Bolivia son nuestros enemigos y los que defienden a Evo son nuestros aliados.
Es importante recordar estas obviedades frente a las posturas neutralistas, que pretenden eludir la gran divisoria de campos en disputa. Esas miradas han cuestionado con igual virulencia a Maduró y a Guadió en Venezuela y ahora extienden la misma equivalencia a Bolivia. Objetan los intentos reeleccionistas del MAScon la misma vara que la furia racista de los Comités Cívicos. También repiten la presentación mediática de las acciones derechistas como legitimas protestas de la ciudadanía.
Salta a la vista las gravísimas consecuencias políticas de ese daltonismo político que ignora el peligro del fascismo. La caracterización de la confrontación en Bolivia no es una actividad académica. Es la condición para actuar contra los golpistas, intensificando las marchas de solidaridad. Resulta imposible desenvolver esas acciones si se desconoce a quién combatir y a quién defender.
Resulta muy difícil vencer a los enemigosque son alumbrados por el propio campo. Esa auto-gestación ha sido una desventura permanente de la década pasada. El ultra-reaccionario Lenin Moreno fue el caso más extremo. La propia coalición progresistalo ungió como presidente para enfrentar la candidatura de los conservadores. Moreno no sólo revirtió las mejoras previas,implementando la agenda de las clases dominantes. Posicionó al país en el eje diseñado por la OEA desmantelando la sede de UNASUR en Quito.
Tampoco conviene olvidar que el golpista Temer fue vicepresidente de Dilma y surgió de la frustrante la estrategia de “ampliar los frentes”. Esa misma política ha conducido en México a conformar una alianza de gobierno con evangelistas, conservadores y capitalistas, en desmedro del viejo pilar radical de AMLO.
También el neoliberalismo se recompone,cuando sus cimientos son preservados por los modelos alternativos que implementa la heterodoxia. Se promete erradicar los esquemas regresivos y se termina facilitando su reconstitución. Fue lo ocurrido en Brasil y Argentina en la década pasada, con el mantenimiento de los privilegios a los financistas y el agro-negocio. Es lo que sucede en la actualidad en México con la renovación del NAFTA, aceptando las exigencias de aranceles, patentes e inversiones que reclamó Trump.
La derecha suele recuperar terreno, cuando los gobiernos progresistas identifican ingenuamente sus éxitos electorales con el respaldo político perdurable. Se olvidan que los comicios constituyen un momento de la disputa por el poder. Cuando el control efectivo de la economía, la justicia, el ejército y los medios de comunicación permanece en manos de los grupos dominantes, el retorno de la derecha es una cuestión de tiempo.
Esa vuelta suele coincidir con el fin de gestiones progresistas que incluyeronmejoras en el nivel de vida popular. Esa paradoja se ha verificado en Argentina, Brasil y El Salvador y podría repetirse en Uruguay. En todos los casos los gobiernos de centroizquierda facilitan alivios a la población, que desembocan en la gestación de electorados más conservadores.
Esa contradicción subyace también en la crisis de Bolivia. El MAS afrontó en los últimos años un significativo retroceso electoral, a pesar de los inéditos éxitosque obtuvo en el manejo de la economía. Logró altas tasas de crecimiento, una importante reducción de la pobreza y fuertes inversiones con el uso productivo de la renta gasífera.
La despolitización del movimiento popular es la explicación más frecuente de esa desconexión entre mejoras socio-económicas y retroceso electoral. Algunos estiman que los votantes se tornan más individualistas, a medida que ensanchan su radio de consumo. Consideran que en esa mutación asimilan la propaganda conservadora y olvidan el proceso progresista que permitió su mejoría.
Pero esa despolitización es consecuencia de la continuidad de un sistema que reproduce los privilegios de los capitalistas. La ideología vigente en una sociedad no flota en el vacío. Si el poder de las clases dominantes es preservado, esa preeminencia tiende a extenderse a los comportamientos electorales. Los poderosos recuperan los gobiernos porque nunca perdieron el poder.
El retorno de la derecha no es inexorable, ni expresa un péndulo natural de la vida política. Deriva de la ausencia de radicalidad que impera en el progresismo. En lugar de fomentar transformaciones sustanciales en los momentos oportunos, esa corriente se adapta al status quo. Como rehúye la posibilidad de remover el poder de los grandes capitalistas termina afianzando esa dominación. La experiencia de los gobiernos de centroizquierda confirma que el freno a la radicalización,abre las compuertas para la venganza de la derecha.
El contexto actual incluye ciertos parecidos con el cuadro imperante a principio de siglo, cuando la sucesión de rebeliones en Venezuela, Ecuador, Bolivia y Argentina generó las condiciones para el debut del ciclo progresista. Ese período concluyó con la restauración conservadora, que afronta ahora la impugnación de una nueva generación de movimientos y dirigentes.
La semejanza con lo ocurrido en 1989-2005 se observa en la familiaridad del levantamiento ecuatoriano con el Caracazo. Ambas revueltas se originaron en la misma reacción contra el aumento de los combustibles impuesto por el FMI. También hay equivalencias de la sublevación chilena con el 2001 de Argentina. La demanda contra los exponentes del régimen político (“que se vayan todos”), se concentra ahora en la figura de Piñera y en el esquema de gobierno legado por Pinochet.
Pero lo llamativo del ciclo actual es la magnitud de la participación popular. El número de manifestantes en la calles supera los registros de las últimas dos décadas. En Ecuador se computan marchas varias veces superiores a los picos de masividad, en Haití se estima que cinco millones de personas han actuado en las protestas, en Chile hubo dos millones y en Puerto Rico un millón.
Existen grandes posibilidades de lograr conquistas y cambios de las relaciones de fuerza. No está en juego sólo la reapertura del ciclo progresista. La batalla en curso puede derivar en novedosos e imprevistosescenarios.
Lo importante es comprender el contenido de la confrontación. Los intereses de una minoría de capitalistas chocan con los anhelos de la mayoría popular. El alineamiento derechista de los poderosos contrasta con las propuestas emancipadoras de la izquierda. El triunfo de nuestros pueblos exige construir, fortalecer y renovar ese proyecto.
La derecha generaliza el golpismo con sostén militar, judicial y mediático. El imperialismo agrede para recuperar primacía económica y los desastres generados por el neoliberalismo salen a la superficie.
Los levantamientos no expresan el descontento indiferenciado de la clase media. Hay un antagonismo con las marchas derechistas que el neutralismo no registra. Los poderosos retomar el gobierno por las falencias del progresismo y en escenarios muy abiertos el papel de la izquierda será decisivo.
21 de noviembre
por Claudio Katz
América Latina registra un abrupto cambio, al
calor de grandes confrontaciones entre desposeídos y privilegiados. Esa
disputa incluye revueltas populares y reacciones de los opresores. En un
polo aflora la esperanza colectiva y en el otro el conservadurismo de
las elites.
Las batallas se dirimen en las calles y en las urnas. Los poderosos no sólo recurren a la represión. Manipulan la información, difaman a los luchadores y alientan el resentimiento de la clase media empobrecida. En toda la región los anhelos de igualdad chocan el fascismo y en ningún país se observan resultados definitivos. En un proceso vertiginoso, las victorias significativas coexisten con los preocupantes retrocesos.
Las batallas se dirimen en las calles y en las urnas. Los poderosos no sólo recurren a la represión. Manipulan la información, difaman a los luchadores y alientan el resentimiento de la clase media empobrecida. En toda la región los anhelos de igualdad chocan el fascismo y en ningún país se observan resultados definitivos. En un proceso vertiginoso, las victorias significativas coexisten con los preocupantes retrocesos.
Las revueltas de octubre
La sublevación en Chile es el gran acontecimiento del tsunami latinoamericano. Es la mayor rebelión de la historia del país. Todos los días miles de jóvenes salen de los colegios, universidades y barrios para enfrentar a los gendarmes.Las pancartas son categóricas: “Chile se cansó y despertó”. Un pueblo harto de humillaciones se ha insurreccionado contra el modelo neoliberal. Los padecimientos generados por ese esquema han salido a la superficie. El 70% de los hogares tiene su ingreso comprometido con deudas para solventar la educación, la salud y el ahorro previsional privados. El país comparte el podio de las ocho naciones más desiguales del mundo.
El grueso de la población confronta con un gobierno aislado, que surgió de comicios signados por la abstención. Piñera despliega una represión salvaje, que ya causó más de 20 asesinatos, miles de detenidos e incontables heridos. Los carabineros se drogan para continuar la balacera y disparan a los ojos de los manifestantes, para quitarles la vista de por vida. Hay abrumadoras denuncias de abusos sexuales contra las mujeres detenidas.
El ejército sostiene ese vandalismo para preservar los privilegios legados por Pinochet. Recibe un porcentual fijo de las exportaciones de cobre y sus miembros están exentos de la vejez pauperizada que padece el resto de los jubilados. Pero algunos soldados se han negado a reprimir y los jefes exigen garantías de impunidad para seguir repartiendo palos. La demanda de juicios a sus tropelías se ha instalado en la sociedad.
Piñera está desbordado. Impuso el toque de queda y tuvo que levantarlo. Convocó al dialogo y refuerza la sangría. Todos los días anuncia alguna concesión social sin ningún resultado. El pánico imperante en su círculo íntimo aflora en confesiones graciosas (“tendremos que disminuir nuestros privilegios”)o en la descripción de los manifestantes como “alienígenas”.
Las movilizaciones persisten para no repetir las frustradas experiencias del 2006 y 2011, que desembocaron en cambios cosméticos. La oleada actual comenzó en forma espontánea y sin liderazgo, pero ya emerge una organización por abajo. En los cabildos abiertos se debate cómo encauzar las protestas y las propuestas.
El activismo de los estudiantes se ha extendido a los sindicatos y a los colectivos sociales, que demandan el fin de Piñera y la convocatoria a una Asamblea Constituyente. La presión es tan fuerte, que el propio gobierno maniobra para deformar ambos reclamos.
También los políticos de la Concertación buscan diluir las exigencias del levantamiento. Sostuvieron durante 30 años el régimen y convalidaron la militarización del último mes. Ahora propician el llamado a un plebiscito que asegura la continuidad de Piñera y bloquea la soberanía de una eventual Constituyente. Ensayan un nuevo dique para frenar las movilizaciones.
Ecuador ha sido el segundo epicentro de las revueltas. Las comunidades indígenas resistieron a escala local el aumento del combustible e incorporaron otros sectores popularesasu monumental marcha sobre Quito.
Lenin Moreno se escapó a Guayaquil y apostó al salvajismo represivo, provocando siete muertos y miles de heridos. Pero al cabo de varias jornadas de intensa batallase rindió. Anuló el incremento de las naftas y aceptó la victoria conseguida por la firmeza de la CONAIE. Cuando los indígenas ingresaron en el Parlamento, el presidente tránsfuga recordó cómo tres antecesores suyos fueron tumbados por ese movimiento (1997, 2000 y 2005).
El levantamiento logró la derogación de un decreto redactado por el FMI, en un país asfixiado por el endeudamiento externo. Todo el paquete de reforma laboral y apertura de importaciones ha quedado afectado, en una economía ahogada por la dolarización. Ese cepo impide compensar los ajustes con paliativos monetarios.
Los manifestantes también ocuparon las oficinas del FMI, para advertir a los banqueros cual será el tono de su resistencia. Después del éxito conseguido en las barricadas, los colectivos sociales organizaron un Parlamento de los Pueblos, que propuso aumentos del salario mínimo, impuestos progresivos y mecanismos para salir de la dolarización, junto a la titularización de las tierras y la reestructuración de las deudas campesinas. Estas definiciones ilustran cómo las revueltas comienzan a madurar con proyectos alternativos.
La irrupción de los fascistas
El golpe de estado en Bolivia ha introducido un dramático contrapunto con las sublevaciones de Chile y Ecuador. La derecha tomó la iniciativa y capturó el gobierno.Toda la controversia sobre la definición de esa asonada es ridícula. Se consumó el golpe de estado más abierto, descarado y evidente de las últimas décadas. No tuvo disfraz institucional, ni mascaradas blandas.Fue una acción virulenta con protagonismo directo del ejército. Evo renunció a punta de pistola, cuando los generales se negaron a obedecerlo. No dimitió por simple agobio de la crisis (como De la Rúa en el 2001). Fue expulsado de la presidencia por la cúpula militar.
Pero la principal peculiaridad de esta operación fue su tinte fascista. Los gendarmes impusieron una zona liberada, que ocuparon los matones para instaurar el terror. Forzaron la indefensión del gobierno aplicando el manual de las bandas ultra-derechistas. Secuestraron dirigentes sociales, tomaron instituciones públicas y humillaron a los opositores.
Camacho puso en práctica las proclamas de Bolsonaro. Con biblias y rezos evangélicos quemó casas, rapó mujeres y encadenó periodistas. Emitió gritos racistas contra el cholo, mientras sus secuaces se burlaban de los coyas, quemaban la bandera Whipala y golpeaban a los transeúntes de la raza denigrada. En La Paz imperó el vandalismo ensayado en Santa Cruz. La valentía del “macho Camacho” estuvo garantizada por la protección policial.
Ese odio contra los indios recuerda la provocación inicial de Hitler contra los judíos. Camacho no disimula la irracionalidad de sus diatribas contra los pueblos originarios. Considera que las mujeres de esas nacionalidades son brujas satánicas y que los hombres son únicamente aptos para la servidumbre. Como en Alemania durante los años 30 ha creado legiones de resentidos para humillar a los indígenas.
La clase dominante celebra la venganza. Como no digiere que un indio haya ejercido la presidencia, permite las descontroladas tropelías de Camacho. Los poderosos esperan estabilizar el golpe, para equilibrar luego el manejo del estado con sus hombres de confianza. Su prioridad inmediata es consolidar el desplazamiento de Evo.
Por eso invierten lo ocurrido y culpan al líder del MAS de un fraude que justificaría su remoción. Convierten a la víctima en responsable y transforman la impugnación del golpe en una crítica a la ambición de Morales. El presidente electo es presentado como un dictador y los golpistas son elogiados como salvadores de la democracia. La versión light de esta infamia declara que “ambos bandos son culpables”.
Pero los difamadores no presentaron ninguna prueba del alegado fraude. Tampoco objetaron el triunfo de Evo. Sólo discutían si obtuvo el 10% de diferencia requerido para evitar el ballotage. La oposición legitimó la elección con su participación y por eso al principio sólo hablaba de irregularidades. Cuando percibió la posibilidad de perpetrar el golpe improvisó el cuento del fraude.
El protagonismo del Estados Unidos en el complot quedó confirmado con el elogio de Trump a la intervención del ejército. Los jugosos negocios internacionales que ofrecen los golpistas, indujeron también la bendición de la Unión Europea a los usurpadores.
Pero habrá que ver cuál es la consistencia de una mandataria auto-elegida en una asamblea trucha. Añez intentará mantener la presidencia durante el tiempo requerido para amañar elecciones con proscripciones. Oscila entre los compromisos requeridos para montar esa farsa y el simple ejercicio de una dictadura. Bajo su conducción, Bolivia ha retomado sus viejos parámetros de ingobernabilidad.
La heroica resistencia popular se desenvuelve en las duras condiciones de la militarización. En los primeros cinco días hubo 24 muertos. Pero las movilizaciones se extienden desde el bastión de El Alto al resto de las ciudades. Los cabildos organizan la lucha de un pueblo muy experimentado en la batalla callejera.
En el curso de esa acción podrá evaluarse la actitud adoptada por Evo. El principal problema no fue su estrategia de permanencia en el gobierno (plebiscito y reelección), sino la total imprevisión frente al golpe. Quedó atado al arbitraje de la OEA y fue sorprendido por la insubordinación de un ejército, que reforzó con equipamientos y pertrechos. El desmovilizado oficialismo no tuvo repuesta frente a la decidida ofensiva de la derecha. Este balance ya está en la mente de los militantes que ahora priorizan la resistencia.
Una resonante victoria
Los contrastes que dominan el contexto latinoamericano tuvieron otra manifestación en la liberación de Lula. Esa excarcelación suscitó una inmensa alegría entre los participantes de la campaña contra su detención. Las marchas, campamentos y pronunciamientos internacionales permitieron ese logro.Ese desenlace propinó una gran derrota a la farsa montada por el juez Moro y sus cómplices de O Globo, para impedir la presidencia del candidato más popular. La conversión del inquisidor en superministro de Bolsonaro desenmascaró ese operativo. Ahora deberán lidiar con las caravanas que exigirán la restitución de los derechos políticos a Lula.
Esa campaña tendrá resonancia continental frente a un mandatario desprestigiado. Bolsonaro carece de la serenidad mínima, requerida para ejercer una función ejecutiva. Mantiene su perfil carnavalesco y no logra hilvanar un discurso. Responde con insultos a cualquier cuestionamiento.
Esa brutalidad agrava los problemas de su entorno. Ya tiene varios familiares comprometidos con el lavado de dinero y algunos testimonios lo vinculan directamente con el asesinato de Marielle Franco.
Bolsonaro depende del sostén de los nueve generales que ejercen el poder efectivo. Sobrevive por el gran servicio que presta a las clases dominantes, a través de sucesivos paquetes de agresión a los trabajadores.
El ex capitán debutó reduciendo el salario mínimo por decreto. Luego motorizó una reforma laboral precarizadora e impulsa cambios regresivos en el sistema previsional. Además, implementa privatizaciones en los estratégicos sectores de la energía, las finanzas y el transporte y se propone rematar antes del 2022, un centenar de empresas estatales. El recorte del presupuesto educativo ha sido tan brutal, como la caza de brujas para destituir funcionarios con ideas progresistas. Sus diatribas anticomunistas incentivan atropellos a los derechos humanos, mientras aumenta el salvajismo de los gendarmes en las favelas.
Pero Bolsonaro no ha podido traducir su verborragia reaccionaria en un programa de concreción del fascismo. Carece de condiciones para materializar ese proyecto. No logró un liderazgo reconocido en el grueso del sistema político conservador y continúa soportando la resistencia popular.
Ya afrontó una huelga de gran acatamiento contra la reforma previsional y una marcha de tres millones de personas contra la homofobia. También las protestas estudiantiles contra los recortes del presupuesto alcanzaron una inédita masividad, bajo la impactante proclama de “libros sí, armas no”.
El desorbitado capitán programa varios contragolpes y una movilización de su base social derechista para intentar el re-encarcelamiento de Lula. El próximo escenario emergerá de esa confrontación.
Un ejemplo de respuesta
La victoria democrática en Brasil complementa un triunfo más significativo obtenido en Venezuela. En ese país se libra la disputa más dura de la región. Durante todo el año la derecha intentó capturar su presa más codiciada y sufrió una sucesión de contundentes fracasos. Trump no pudo repetir la invasión de Granada (1983) o Panamá (1989) y debió contentarse con la apropiación de la filial de PDEVESA en Estados Unidos.Sus lacayos venezolanos intentaron todos los complots imaginables, pero su capacidad de acción quedó socavada por la fracasada auto-proclamación de Guaidó. Falló también la farsa de la ayuda humanitaria y no pudieron consumar ningún levantamiento militar. La guerra eléctrica no funcionó y la improvisada asonada de Leopoldo López naufragó sin pena, ni gloria.
Las amenazas de provocación militar igualmente persisten enla frontera con Colombia. Por eso el Departamento de Estado dinamita las negociaciones con la oposición. Pero el gobierno ha logrado desbaratar una conspiración tras otra.
En un escenario social muy difícil (y agravado por los gigantescos desaciertos de la política económica), David logró frenar a Goliat. El campo bolivariano mantiene un intenso nivel de movilizaciones callejeras y disputa el espacio público, cada vez que asoma la oposición. Se ha preservado la cohesión militar, a través de una intervención política constante en el ejército, utilizando la carta condicionante de las milicias populares.
Esta conducta ilustra cómo actuar frente a la derecha. Confirma la necesidad de respuestas de la misma escala que las acciones golpistas y sin ningún atisbo de rendición. Venezuela ratifica la conveniencia de exhibir la fuerza junto al accionar diplomático, manteniendo la serenidad y las banderas de la soberanía y la paz. Para vencer a los fascistas hay que actuar sin vacilaciones.
Batallas sin respiro
Las tensiones en Venezuela extreman otras confrontaciones que se dirimen en la calle. En ese ámbito se zanjó la protesta contra el presidente de Puerto Rico, que se mofaba de las víctimas del huracány desplegabacomentarios homófobos.El pueblo hizo valer sus demandas a través de la movilización, en una isla agobiada por el ajuste del FMI. Laley federal impuesta por los financistas para afrontar la bancarrota fiscal genera terribles padecimientos a los trabajadores. Pero por primera vez en la historia deesa nación, un gobernador ha sido tumbado porla presión popular. La crisis continúa y no se avizoran soluciones, en una colonia sin mecanismos políticos para procesar las tensiones habituales de cualquier estado.
En la vecina Haití, las manifestaciones del último semestre han sido monumentales. Todos los días se levantan barricadas en las ciudades, para protestar contra un gobierno que agravó el indescriptible empobrecimiento de la población. La galopante inflación impide a la mitad de los haitianos completar su alimentación cotidiana y la represión se ha cobrado la vida de 51personas. Las principales demandas afectan a tres presidentes, que malversaron los fondos aportados por el chavismo a través de Petrocaribe. Los mandatarios incrementaron sus fortunas personales con los recursos destinados al abaratamiento del combustible.
Los manifestantes exigen la renuncia del títere actual de Washington, que Trump sostiene para recompensar su traición a Venezuela y su alineamiento con la extrema derecha. Pero la marea de protestas no cede y la exigencia de enjuiciar a los ladrones, ya es complementada con el reclamo de una Asamblea Constituyente, para introducir drásticos cambios en el bochornoso sistema electoral.
También Honduras continúa convulsionada por una persistente resistencia contra el régimen sanguinario surgido de un fraude (2017), que reforzó la estafa electoral precedente (2013). Los criminales que conducen el estado no sólo cargan con el asesinato de Berta Cáceres. Han ultimado a 200 militantes populares que enfrentaron la mafia de los gendarmes. El país ha sido convertido en un narcoestado, manejado porun presidente con familiares condenados en Estados Unidos por el tráfico de cocaína.
La mecha de las rebeliones tiende a expandirse a toda la zona y ya impactó en la próspera Panamá. En el istmo se registró una gran marcha universitaria, que repudió el paquetazo de contrarreformas negociado en la Asamblea Legislativa.
Confrontaciones en las urnas
La gran disputa en América Latina se procesa también en el terreno electoral. El año pasado López Obrador consiguió en México una arrolladora victoria, que cerró el ciclo de sofocantes gobiernos del PRI y del PAN. Con ese impulso electoral desbarató las maniobras de fraude,que preparaban los perdedores para eternizar su manejo del estado. La expectativa suscitada por este cambio quedó expuesta en la multitudinaria manifestación que coronó la asunción de AMLO.La esperanza está centrada en poner fin a la violencia, que ha convertido al país en un gran ataúd de 300 mil muertos reconocidos y 26 mil cadáveres sin identificar. Son incontables los líderes sociales masacrados, en una guerra que sobrepasa los ajustes del crimen organizado.
López Obrador fue votado para terminar con el desplazamiento forzado de poblaciones y para esclarecer masacrescomo la ocurrida en Ayozinatpa.Pero ese anhelo de pacificación y justicia no ha sido satisfecho.Sigue pendiente la desarticulación de las bandas y el esclarecimiento de las complicidades militares.
El logro de esos objetivos choca con la reciente sanción de una norma de seguridad interior, que legaliza la acción de las fuerzas armadas. Esa gravitación ha sido reforzada con la aceptación del chantaje de Trump, para taponar el desplazamiento de los migrantes con mayor despliegue de la Guardia Nacional.
AMLO recibió también una catarata de sufragios para frenar las privatizaciones, recuperar la autosuficiencia alimentaria y reducir el pesado endeudamiento externo. Pero tampoco en este terreno aparecen las medidas prometidas,para implementar una “cuarta transformación” fundacional de México.
La otra convulsión electoral en la región fue suscitada por el triunfo de Fernández en Argentina. Macri no pudo forzar el ballotage y la derecha perdió el gobierno, en el país que catapultó la restauración conservadora.
La prensa hegemónica disimula este resultado con lecturas invertidas de lo ocurrido. Presenta a los perdedores como si hubieran liderado los comicios, por la simple reducción de la distanciade sufragios con la fórmula triunfante.Ese premio consuelo no altera el contundente veredicto de la población contra el ajuste.
Los derechistas inflan su performance para condicionar al nuevo gobierno. Desde sus órganos de opinión lanzan advertencias contra cualquier medida progresista. Mientras convocan de palabra a “cerrar la grieta”, preparan las cacerolas para hacer valer sus exigencias.
La confrontación se dirimirá en las respuestas a la catástrofe económico-social que deja Macri. La derecha atribuye ese colapso a la sociedad, la cultura y la historia de los argentinos. Pero el desplome obedece a razones más terrenales: el modelo neoliberal, las políticas de endeudamiento y los ajustes impuestos por el FMI. Ese dramático escenario induce al reinicio de la movilización, en el país con mayor nivel de organización sindical y social de toda la región. Sin ese resurgimiento de la lucha, no se podrá recomponer el deteriorado ingreso de la población.
También en otros países se libran importantes choques electorales con resultados más contradictorios. En Colombia se verifica el lento surgimiento de fuerzas de centroizquierda, que por primera vez disputan intendencias y gobernaciones con la oligarquía y los paramilitares.
En Uruguay se avizora en cambio un escenario difícil para el Frente Amplio,en el ballotage contra la derecha,luego de 15 años de gobierno. Hace pocos meses en El Salvador, un improvisado derechista consiguió la presidencia, poniendo fin a una década de cuestionable gestión del Farabundo Martí.
Las elecciones constituyen un terreno muy relevante de la confrontación en curso. La derecha articula sus estrategias en el Grupo de Lima y el progresismo define su perfil en el núcleo de Puebla. Construye esa alternativa tomando distancia de los Encuentros Antiimperialistas, el ALBA y el Foro de Sao Paulo.
Estas últimas instancias aportan un explicito sostén a la movilización popular. Como no restringen su acción al terreno de las urnas, mantienen vasos comunicantes con los organismos que emergen de las luchas sociales. Esas modalidades ya se vislumbran en los Cabildos de Chile, en el Parlamento de Pueblos de Ecuador, en los Encuentros de Movimientos en Bolivia y en los Organismos Coordinados de Haití.
Pretextos y manipulaciones
Es evidente que el golpe de estado ha resurgido como instrumento de las clases dominantes. Su reciente implementación en Bolivia corona la secuencia iniciada en Honduras (2009), seguida en Paraguay (2012) y extendida a Brasil (2016).Los golpistas actúan con el sostén directo de los gendarmes y aseguran su permanencia con algún socio civil. En Paraguay desplazaron a Lugo, pusieron a Cartes y se afianzaron con Abdo, en comicios signados por la abstención y la ilegitimidad de los mandatarios.
En todos los casos el ejército vuelve a ocupar el primer plano, como garante de nuevas formas autoritarias sostenidas en el estado de excepción. El colombiano Duque encarna la modalidad más acabada de esos mecanismos. Apaña el asesinato de militantes populares, legaliza el accionar de los paramilitares y sepulta los Acuerdos de Paz para ultimar ex combatientes.
Otros golpistas justifican el uso de la fuerza resucitando viejos fantasmas de la guerra fría. Atribuyen las protestas sociales en cualquier rincón del continente, a un plan de subversión monitoreado desde Venezuela y Cuba.
Difunden esas tonterías sin ningún rubor, mientras afinan burdas operaciones judiciales para proscribir a los líderes progresistas. Sin magistrados adictos, las causas que inventan no podrían traspasar la primera instancia de cualquier tribunal. Pero cuentan con los medios de comunicación para proclamar las sentencias que repite el gran público.
Los medios manipulan la información,presentando la corrupción como una enfermedad de los gobiernos que se distancian de las normas conservadoras. Eximen de ese mal a la derecha y por esa razóntienen poca prensa, las coimas de Oderbrecht o las estafas al fisco en los paraísos fiscales. No se ha gastado tinta en describir, por ejemplo, la trama mafiosa de los presidentes peruanos, que encubrieron sus fraudes con pactos de impunidad. Los grandes medios operan como usinas de fake news, que elaboran los servicios de inteligencia a pedido de los grupos derechistas.
El doble discurso de los diarios y emisoras traspasa también todas las fronteras. Diariamente difunden nuevas denuncias sobre Venezuela -calcadas de los informes elaborados por el Departamento de Estado contra Cuba- mientras silencian el asesinato de 648 líderes sociales en Colombia.
La derecha complementa sus mentiras con diversos dispositivos para obstruir la reflexión popular.La ceguera que propicia el fanatismo religioso es el instrumento predilecto de esa operación. Los evangélicos aportan sus recursos multimillonarios para crear miedos y destruir solidaridades.
Presiones y demoliciones
Washington no ceja en su acoso contra Venezuela. Su prioridad es recuperar el principal yacimiento petrolero del hemisferio. Ha reforzado también el embargo contra Cuba y conspiró contra Bolivia,para manejar las enormes reservas del litio que acumula el Altiplano. Evo tenía muy avanzadas las tratativas para ampliar la explotación de ese estratégico recurso con firmas chinas.Trump intenta reconquistar elcontrol estadounidense de las riquezas naturales latinoamericanas. Afianza la subordinación de sus vasallos tradicionales y explora una nueva sociedad con Bolsonaro. Pero habrá que ver si la clase dominante brasileña mantiene ese eje geopolítico, a costa de sus florecientes negocios con China.
La reciente cumbre de los BRICS en Brasilia, incluyó llamativos pronunciamientos propiciados por el gigante asiático a favor del libre-comercio.El propio Bolsonaro ha comenzado a evaluar un Tratado de Libre Comercio con China y tiene en carpeta el patrocinio de Huawei para las nuevas redes informáticas del 5 G. Otra conflictiva tentación proviene de la oferta europea de concertar un TLC, que dinamitaría el MERCOSUR.
Frente a la dura rivalidad que anticipan estas jugadas, Trump acrecienta la presencia regional del Pentágono. Estrecha relaciones con los militares latinoamericanos, para hacer valer los intereses económicos de las empresas estadounidenses.
Esa intervención también obliga a afianzar el neoliberalismo, que ha sido desafiado por la sublevación chilena. Esa revuelta demuele todos los mitos del modelo más ensalzado por los capitalistas de la región. Ahora se percibe con nitidez que el universo trasandino no es un paraíso de crecimiento, sino un infierno de desigualdad. Por esa razón,el descontento contra los 30 pesos del metro se transformó en un levantamiento contra los 30 años de neoliberalismo.
La rebelión trasandina tiene gran impacto internacional porque ha puesto en jaque al niño mimado de la ortodoxia económica. La denuncia que en “Chile torturan, matan y violan” ya irrumpió en los grandes festivales. Todos los circuitos de la comunicación mundial recogen ese dato.
Resulta prematuro predecir cuán doblegados están los cimientos del neoliberalismo. Pero ha salido a flote la enorme vulnerabilidad de ese modelo, frente al estancamiento de los precios de las materias primas, el aumento del endeudamiento y la reducción del crecimiento.
Las protestas han puesto también de relieve que el neoliberalismo es el principal responsable de la desintegración social de América Latina. Genera las migraciones masivas que suceden a la apertura comercial y a la destrucción de la pequeña propiedad agraria. Los desposeídos engrosan las caravanas hacia el Norte, que ningún muro o gendarme puede contener.
Los hipócritas liberales ponderan el flujo irrestricto de capitales y mercancías, pero exigen reforzar el control del movimiento internacional de los migrantes. Propician la persecución y estigmatización de quiénes cruzan la frontera, para enviar remesas a sus empobrecidos familiares.
El neoliberalismo ha provocado,además, la expansión de la delincuencia y una aterradora escala de violencia. De las 50 urbes más peligrosos del planeta 43 se localizan en América Latina. Las maras dominan el entramado de muchos países centroamericanos, corroídos por la ingeniería social regresiva que ensayaron los economistas de Chicago.
Ese modelo es también responsable de la destrucción del medio ambiente y de los recientes incendios en la Amazonia. La quema de grandes bosques es perpetrada adrede para plantar soja o abrir pasturas a la ganadería, bajo la regla mercantil de maximizar la ganancia.
Interpretaciones y posturas
La derecha no sólo desconoce los desastres provocados por su gestión. Afirma que su modelo forjó una próspera clase media, que ahora reclama mayor participación en la vida pública. Considera que ese grupo social se rebela contra los políticos que defienden su casta, sin escuchar las demandas de los representados. En esta curiosa interpretación, los desgarradores efectos del modelo neoliberal no estarían en tela de juicio. Sólo habría una falla en el sistema político de un esquema económico floreciente.Esta mirada ilustra hasta qué punto los privilegiados viven en una burbuja de Miami y barrios cerrados. Ignora que las protestas no se limitan a impugnar el comportamiento de los políticos. La desigualdad, las privatizaciones, el endeudamiento y los ajustes son invariablemente cuestionados. El FMI, los banqueros y las empresas transnacionales son ubicados en el banquillo de los acusados. Las revueltas tampoco enjuician a todos los partidos o legisladores. Cuando expresan intereses populares, las protestas objetan a los servidores del orden capitalista.
La verdadera clase media no guarda, además, el menor parentesco con el retrato derechista. En los hechos, el ascenso social es muy limitado en el duro contexto regional y coexiste con la precarización o el creciente desempleo. Por eso las revueltas -que encabezan trabajadores, campesinos y estudiantes- incorporan a veces a los comerciantes y dueños de pequeños negocios. Todos buscan contener la degradación del nivel de vida.
La clase media es una etiqueta utilizada por la derecha para improvisar explicaciones. Mezclan peras con manzanas, para forzar interpretaciones amoldadas a sus prejuicios. Por eso sitúan en una misma secuencia cualquier acción de multitudes descontentas, omitiendo el sentido de cada movilización.
Pero las polémicas sobre el escenario actual no involucran sólo a la derecha. También incluyen a ciertos pensadores despistados que se auto-ubican en la izquierda. Esos analistas no logran registrar las diferencias que contraponen a una revuelta popular con un clamor reaccionario.
Esa distinción debe ser expuesta en forma categórica. Una guarimba de escuálidos en Venezuela se localiza en la vereda opuesta de las protestas indígenas de Ecuador. Los seguidores de Camacho en Bolivia son nuestros enemigos y los que defienden a Evo son nuestros aliados.
Es importante recordar estas obviedades frente a las posturas neutralistas, que pretenden eludir la gran divisoria de campos en disputa. Esas miradas han cuestionado con igual virulencia a Maduró y a Guadió en Venezuela y ahora extienden la misma equivalencia a Bolivia. Objetan los intentos reeleccionistas del MAScon la misma vara que la furia racista de los Comités Cívicos. También repiten la presentación mediática de las acciones derechistas como legitimas protestas de la ciudadanía.
Salta a la vista las gravísimas consecuencias políticas de ese daltonismo político que ignora el peligro del fascismo. La caracterización de la confrontación en Bolivia no es una actividad académica. Es la condición para actuar contra los golpistas, intensificando las marchas de solidaridad. Resulta imposible desenvolver esas acciones si se desconoce a quién combatir y a quién defender.
Lecciones de lo ocurrido
Derrotar al golpismo, al imperialismo y al neoliberalismo es el gran objetivo de las luchas actuales. Para lograr esa meta hay que redoblar la movilización e intensificar la acción política. Pero esa intervención también requiere aprender de los errores que aprovecha la derecha para recomponerse.Resulta muy difícil vencer a los enemigosque son alumbrados por el propio campo. Esa auto-gestación ha sido una desventura permanente de la década pasada. El ultra-reaccionario Lenin Moreno fue el caso más extremo. La propia coalición progresistalo ungió como presidente para enfrentar la candidatura de los conservadores. Moreno no sólo revirtió las mejoras previas,implementando la agenda de las clases dominantes. Posicionó al país en el eje diseñado por la OEA desmantelando la sede de UNASUR en Quito.
Tampoco conviene olvidar que el golpista Temer fue vicepresidente de Dilma y surgió de la frustrante la estrategia de “ampliar los frentes”. Esa misma política ha conducido en México a conformar una alianza de gobierno con evangelistas, conservadores y capitalistas, en desmedro del viejo pilar radical de AMLO.
También el neoliberalismo se recompone,cuando sus cimientos son preservados por los modelos alternativos que implementa la heterodoxia. Se promete erradicar los esquemas regresivos y se termina facilitando su reconstitución. Fue lo ocurrido en Brasil y Argentina en la década pasada, con el mantenimiento de los privilegios a los financistas y el agro-negocio. Es lo que sucede en la actualidad en México con la renovación del NAFTA, aceptando las exigencias de aranceles, patentes e inversiones que reclamó Trump.
La derecha suele recuperar terreno, cuando los gobiernos progresistas identifican ingenuamente sus éxitos electorales con el respaldo político perdurable. Se olvidan que los comicios constituyen un momento de la disputa por el poder. Cuando el control efectivo de la economía, la justicia, el ejército y los medios de comunicación permanece en manos de los grupos dominantes, el retorno de la derecha es una cuestión de tiempo.
Esa vuelta suele coincidir con el fin de gestiones progresistas que incluyeronmejoras en el nivel de vida popular. Esa paradoja se ha verificado en Argentina, Brasil y El Salvador y podría repetirse en Uruguay. En todos los casos los gobiernos de centroizquierda facilitan alivios a la población, que desembocan en la gestación de electorados más conservadores.
Esa contradicción subyace también en la crisis de Bolivia. El MAS afrontó en los últimos años un significativo retroceso electoral, a pesar de los inéditos éxitosque obtuvo en el manejo de la economía. Logró altas tasas de crecimiento, una importante reducción de la pobreza y fuertes inversiones con el uso productivo de la renta gasífera.
La despolitización del movimiento popular es la explicación más frecuente de esa desconexión entre mejoras socio-económicas y retroceso electoral. Algunos estiman que los votantes se tornan más individualistas, a medida que ensanchan su radio de consumo. Consideran que en esa mutación asimilan la propaganda conservadora y olvidan el proceso progresista que permitió su mejoría.
Pero esa despolitización es consecuencia de la continuidad de un sistema que reproduce los privilegios de los capitalistas. La ideología vigente en una sociedad no flota en el vacío. Si el poder de las clases dominantes es preservado, esa preeminencia tiende a extenderse a los comportamientos electorales. Los poderosos recuperan los gobiernos porque nunca perdieron el poder.
El retorno de la derecha no es inexorable, ni expresa un péndulo natural de la vida política. Deriva de la ausencia de radicalidad que impera en el progresismo. En lugar de fomentar transformaciones sustanciales en los momentos oportunos, esa corriente se adapta al status quo. Como rehúye la posibilidad de remover el poder de los grandes capitalistas termina afianzando esa dominación. La experiencia de los gobiernos de centroizquierda confirma que el freno a la radicalización,abre las compuertas para la venganza de la derecha.
La centralidad de la izquierda
Frente a la gran oleada de movilizaciones populares, la derecha prepara contragolpes del mismo alcance. Por eso se avecinan confrontaciones mayores con resultados abiertos.El contexto actual incluye ciertos parecidos con el cuadro imperante a principio de siglo, cuando la sucesión de rebeliones en Venezuela, Ecuador, Bolivia y Argentina generó las condiciones para el debut del ciclo progresista. Ese período concluyó con la restauración conservadora, que afronta ahora la impugnación de una nueva generación de movimientos y dirigentes.
La semejanza con lo ocurrido en 1989-2005 se observa en la familiaridad del levantamiento ecuatoriano con el Caracazo. Ambas revueltas se originaron en la misma reacción contra el aumento de los combustibles impuesto por el FMI. También hay equivalencias de la sublevación chilena con el 2001 de Argentina. La demanda contra los exponentes del régimen político (“que se vayan todos”), se concentra ahora en la figura de Piñera y en el esquema de gobierno legado por Pinochet.
Pero lo llamativo del ciclo actual es la magnitud de la participación popular. El número de manifestantes en la calles supera los registros de las últimas dos décadas. En Ecuador se computan marchas varias veces superiores a los picos de masividad, en Haití se estima que cinco millones de personas han actuado en las protestas, en Chile hubo dos millones y en Puerto Rico un millón.
Existen grandes posibilidades de lograr conquistas y cambios de las relaciones de fuerza. No está en juego sólo la reapertura del ciclo progresista. La batalla en curso puede derivar en novedosos e imprevistosescenarios.
Lo importante es comprender el contenido de la confrontación. Los intereses de una minoría de capitalistas chocan con los anhelos de la mayoría popular. El alineamiento derechista de los poderosos contrasta con las propuestas emancipadoras de la izquierda. El triunfo de nuestros pueblos exige construir, fortalecer y renovar ese proyecto.
Resumen
Las revueltas populares se extienden junto a la reacción de los opresores. En Chile desenmascaran el modelo neoliberal y en Ecuador doblegaron el ajuste del FMI. Pero en Bolivia se consumó un golpe con todos los tintes del fascismo. La liberación de Lula ilustra la intensidad de las resistencias al ensayo reaccionarioen Brasil. Venezuela demuestra cómo enfrentar a la reacción, en un escenario de crecientes protestas en Centroamérica y el Caribe. Las confrontaciones electorales de México y Argentina asumen otro significado.La derecha generaliza el golpismo con sostén militar, judicial y mediático. El imperialismo agrede para recuperar primacía económica y los desastres generados por el neoliberalismo salen a la superficie.
Los levantamientos no expresan el descontento indiferenciado de la clase media. Hay un antagonismo con las marchas derechistas que el neutralismo no registra. Los poderosos retomar el gobierno por las falencias del progresismo y en escenarios muy abiertos el papel de la izquierda será decisivo.
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