Al gobierno de la República Oriental del Uruguay
A los medios de prensa
Por medio de este comunicado el Comité contra la Impunidad y por la Democracia en América Latina, CIDAL, manifiesta su repudio ante la condena que golpea a la militante de derechos humanos Irma Leites, portavoz de la Plenaria Memoria y Justicia.
Irma Leites participó en una acción de protesta (en 2005) ante el cierre ordenado por la justicia de la causa e investigación del asesinato de la joven madre de 19 años María Claudia de Gelman, crimen cometido por el aparato represivo en el entorno de la política del terrorismo de Estado.
Este aparato judicial que acababa de dictar una sentencia consagrando la impunidad en un crimen horrendo y el secuestro de un recién nacido, encuentra hoy pertinente de encausar por el delito de “desacato y agravio” a quien manifestaba su ira, su disconformidad y su frustración ante dicho aparato judicial, que servia de amparo a autores de crímenes contra la humanidad.
Y de condenar con una sentencia de 12 meses de prisión a quien reclamaba justicia.
Con ello, la justicia uruguaya desvía las normas propias de un sistema judicial democrático, pretendiendo transformar una acción de protesta en "ejemplarización" punitiva.
Quien es condenable ante la opinión pública internacional no es la Señora Irma Leites, sino un sistema judicial represivo, selectivo, y que no admite la diversidad de opiniones. Ante leyes que consagran la impunidad de crímenes horrendos, la desobediencia civil, ou otras acciones que el estado considera injustamente violentas- ante la dimensión del atropello que se pretende denunciar-, están plenamente justificadas.
Protestar es un derecho, manifestar sus opiniones es un deber de ciudadano.
Cidal
(Comité contre l’impunité et pour la démocratie en Amérique Latine)
Bruselas
4 de diciembre 2007
MP3 Escuchá a Irma Leites AQUI
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