Brasileros, Argentinos. Yanquis, Paraguayos ,Princesas Húngaras, Árabes, Neozelandeses es decir Gringos de todo pelo, de todas marcas y señales, de muchos títulos todos ellos son los dueños de las vacas sagradas y de la tierra que MUJICA les entrega a nombre del hambre del pueblo Oriental
Luego de que el presidente José Mujica dijera que no permitirá que extranjeros compren tierras en nuestro país, el ministro de Ganadería Tabaré Aguerre anunció que su homólogo de Arabia Saudita le manifestó interés en comprar tierras uruguayas y que la próxima semana se reunirán.
DIFERENCIAS SUSTANCIALES
El Ministro es un integrante del actual Gobierno, responde políticamente al Presidente de la República y al partido político que lo llevó e éste último a ocupar esa magistratura.
Sus opiniones deben ser las mismas que la del presidente y viceversa.
El diario Acción en varias oportunidades ha expresado la necesidad de debatir el tema extranjerización y concentración de la tierra y personalmente opino lo mismo.
También en reiteradas ediciones se han publicado las cifras que expresan los millones de hectáreas de tierra que han pasado de manos en éstos últimos años, la DIEA también los ha publicado con cifras más exactas.
Los compradores en su inmensa mayoría pertenecen a las llamadas "inversiones extranjeras", compuestas no solo por personas físicas sino también por varias empresas multinacionales.
Seis millones de hectáreas, de las dieciséis que tiene la Patria, han cambiado de propiedad en estos últimos años, es el equivalente a la superficie de los departamentos de Artigas, Salto. Paysandú, Soriano, y Colonia juntos.
Nada se ha hecho desde los Gobiernos para evitar dicha concentración y extranjerización del suelo patrio.
El último intento parlamentario en ese sentido fue un Proyecto de Ley presentado por el nacionalista Carlos Julio Pereyra, proyecto que no salió aprobado y que fuera votado en esa oportunidad por dicho legislador y por toda la bancada del Frente Amplio.
En los programas de Gobierno de ésta última fuerza política estaba claramente establecida la necesidad de frenar ambos procesos, con respecto al tema extraemos conceptos de lo que se afirmaba en la "Propuesta Gobierno Progresista, por Un País Productivo- Estrategias para un Desarrollo Agroindustrial" de la CADESYC (Centro Artiguista por los Derechos, Sociales y Culturales) en su página 14 dice que "debe frenarse el proceso de extranjerización de la propiedad de la tierra, tal cual lo hace todo el mundo, en el sentido que extraterriolariza territorio, convirtiendo porciones del espacio nacional en una especie de zona franca en la que operan las decisiones de ciudadanos extranjeros".
En la página 20 dice que "a partir del 01/03/2005 ni una hectárea más de tierra podrá ser extranjerizada"
Nada se ha hecho para cumplir con esas bases programáticas elaboradas hace más de diez años.
De más está decir que ese ha sido uno de los motivos por los cuales abandonamos dicha fuerza política y que lo hicimos no con poco dolor.
Ahora el mayor exponente del gobierno en cuanto a la cuestión agraria se refiere emite la siguiente consideración:
"Sobre el tema de la concentración y extranjerización de la tierra no puede prohibirse, se tiene que apoyar a los productores para que se queden en el campo".
Sobre ésta afirmación contraponemos la siguiente frase:
"Y porqué no prohibir?", me gustaría escuchar los argumentos en contra de boca del Ministro y más aún de la del Presidente de la República.
Casi todos los países del mundo, tienen normas que prohíben la extranjerización y mucho menos la concentración del recurso tierra en pocas manos.
Es que son países mentalmente desarrollados.
¿Es que acaso los gobiernos europeos no saben lo que podría pasar con la inmensa población agraria si ésta tuviera que emigrar a las ciudades en caso de que el latifundio volviese a existir en esos países?
Le pregunto al Ministro que pensaría él si hipotéticamente un día Bill Gates se levantara con ganas de tener tierras en el Uruguay y para efectuar dicha compra triplicara el actual precio de la misma , -su capital se lo permite-¿ y se quedara el solo con casi todo el Uruguay ?, se lo permitirían ?, sería otra de las esperadas "inversiones extranjeras" que traen tanta esperanza y tantas oportunidades de prosperidad ? o todo lo contrario ?.
La verdadera revolución de una sociedad no es sólo la productividad, la verdadera revolución de la sociedad sería que la tierra uruguaya diera trabajo a los cientos de miles de uruguayos que han emigrado del mismo a través de éstos años, en los cuales la política agropecuaria no ha cambiado ni un ápice en lo principal, en la tenencia de la tierra.
Se habla y se repite hasta el cansancio por parte del Gobierno del aumento que ha tenido el sector agropecuario.
En el sector lechero, al cual me incorporé hace más de treinta años, solo he visto una caída permanente del sector, de 5200 productores que remitían a Conaprole hoy quedan menos de 2000, en nuestra región que llegó a tener más de 300 establecimientos lecheros hoy no quedan más de 80
De haber tenido los diversos gobiernos (incluido el que hoy está ejerciendo el mismo) políticas para el sector, que llegó a crecer con un ritmo del 5 % acumulativo, hoy la misma empresa que recibía en ese entonces 2.5 millones de litros diarios, tendría que estar recibiendo entre 6 y 7 millones de litros por día.
Y en ese punto estamos dispuestos a debatir la política agropecuaria.
Un sector se engrandece si es capaz de dar oportunidades a la mayor cantidad de productores posibles, el aumento de la productividad se da luego por simple lógica si las reglas de comercialización y los precios de los productos agropecuarios están acordes de los objetivos que se quieren alcanzar.
Por lo menos es lo que pienso yo
Dr. Horacio Zefferino de la Fuente.
(Nota publicada en
10 de setiembre 2010, luego de declaraciones del Ministro del MGAP)
La tierra: un tema tabú que vuelve
Raul Sendic
Hay temas molestos, que son apartados una y otra vez con desdén, y vuelven, profiadamente, cada día más desafiantes. Uno es el de la distribución de la tierra, donde el monopolio de un grupo de familias sobre un tercio de la superficie del país se ha venido a agregar, en los últimos años, el acaparamiento por extranjeros de otra tajada, generalmente fronteriza, que ya llega al 8 por ciento del territorio y sigue creciendo.
Respecto al tema latifundio y reforma agraria, hace tiempo que desapareció del repertorio de los políticos. Es que a medida que decrece la población rural –de 318.000 en 1970 264.000 en 1980-, decrecen los votos del campo y, por consecuencia, la repercusión de sus problemas en la mayoría de los políticos.
Y en lo relativo a la extranjerización de la tierra, cuando surge un grito aislado, como fue el proyecto de Carlos Julio Pereyra para contenerla –recientemente reiterado-, la respuesta de la mayoría fue casi de mofa. Nuestro campo se pobló siempre con inmigrantes, dijo Jorge Batlle, tratando de confundir a aquellos humildes colonos que venían de Europa con un atado al hombro a trabajar, con los actuales capitalistas que compran campos para especular (un 50 por ciento de las tierras en manos de extranjeros con porciones mayores a 2.500 há.). También parece una burla que Juan Raúl Ferreira dijera que si nuestras embajadas no ofrecieran tierras en el exterior, habría que reprochárselo como una omisión.
Mofa y burla porque ambos políticos habían participado en aquel compromiso de la CoNaPro de 1984, que decía: "Análisis del problema de la extranjerización de la tierra en particular, tendiente a legislar con vista a la prohibición de la compra de tierras por parte de extranjeros no residentes".
Un 10 de setiembre distinto
En este 10 de setiembre de 1987 hubo múltiples organismos que volvieron a levantar en alto el Reglamento de Tierras elaborado en 1815 por Artigas, y con gran apoyo popular celebraron actos destinados a reclamar su cumplimiento. Y otra vez resonaron las sencillas frases de aquel Reglamento: "Artículo 6: (…) Se dedicará a fomentar con brazos útiles la población de la campaña. Para ello revisará en cada una de sus respectivas jurisdicciones los terrenos disponibles, y los sujetos dignos de esta gracia con prevención que los más infelices serán los más privilegiados. En consecuencia, los negros libres, los zambos de esta clase, los indios y los criollos pobres, todos podrán ser agraciados con suertes de estancias".
"Artículo 7: Serán igualmente agraciadas las viudas pobres si tuvieren hijos, serán igualmente preferidos los casados a los americanos solteros y éstos a cualquier extranjero".
Este año, el Movimiento de Aspirantes a Colonos, el Movimiento por la Tierra y otras instituciones hicieron actos públicos y propaganda reclamando el cumplimiento de la voluntad de Artigas. También AFInCo, sindicato que agrupa a los trabajadores del Instituto de Colonización, sacó un folleto ilustrativo sobre la gran estafa que se ha consumado sobre el agro.
Algunos datos:
La tierra productiva del país alcanza a 16:500.000 há., es decir un 87 por ciento de su territorio.
- 6,1 há/hab. --- Uruguay
- 0,5 há/hab. --- Promedio estimado para países desarrollados
- 0,27 há/hab. --- Promedio estimado para países subdesarrollados
Superficie
- El 85 por ciento de los establecimientos familiares ocupan el 25 por ciento de la superficie, mientras el 15 por ciento de las unidades capitalistas la hacen en el 75 por ciento restante.
- De la tierra productiva del país, la superficie colonizada no alcanza al 3 por ciento.
- El área incorporada a Colonización, desde marzo de 1985, no alcanza al 0,01 por ciento (1.340 há. en dos años). A este ritmo, se necesitarían 20 mil años para colonizar el país con un reparto justo de tierra como quería Artigas.
- El estado, a través del Banco Central, compró deudas incobrables cuya garantía son más de 600.000 há., que deberían por ley pasar al Instituto Nacional de Colonización (INC).
Población rural
Sólo en los últimos 10 años ha emigrado casi un tercio de la población rural.
Promedialmente emigran 6.000 personas por año.
1970 --- 318.166 habitantes
1980 --- 264.216 habitantes
17 por ciento menos
En un país que se dice es agropecuario, sólo el 8 por ciento de la población del país vive en el medio rural.
Existen decenas de miles de familias dispuestas a trabajar la tierra. Colonización ha entregado fracciones sólo a 4.000 familias en sus 39 años de vida.
El INC adjudica promedialmente una fracción por mes.
Estancamiento de la producción
- La producción creció menos del 1 por ciento anual en los últimos 10 años. Como la población ha aumentado en un porcentaje ligeramente superior, el producto bruto por habitante disminuyó.
- Sólo el 10 por ciento de las tierras dedicadas al pastoreo es mejorada con nuevas especies o fertilizantes.
- Los suelos uruguayos sufren un deterioro por uso inadecuado que origina una pérdida de 20.000 há. de tierra por año. Este problema afecta el 10 por ciento de las tierras productivas.
- Las condiciones económicas hacen que se torne no rentable la aplicación de técnicas disponibles.
- A dos años de gobierno democrático no existe un plan mínimo de colonización.
Medidas drásticas sobre la tierra, punto común del pueblo
Está culminando la campaña pro referéndum con la recolección de firmas en los departamentos del interior, y se está viendo que en los mismos las firmas recolectadas superan en algunos casos en más del doble los votos que sacó el Frente Amplio. Quiere decir que alrededor del referéndum se ha logrado transitoriamente ese frente grande que venimos postulando como salida para el país. Hay que reconocer que la presentación por parte de una fracción blanca de un proyecto que declara nula la deuda externa contraída por gobiernos de facto, constituye el adelanto de otro posible punto de coincidencia en uno de los problemas que más miseria está sembrando en nuestro pueblo.
La tierra puede ser otro punto común para el programa de un frente grande. Llevar adelante los proyectos contra la extranjerización de la misma, el pasaje de las tierras embargadas por el Banco Central o colonización, el pasaje de tierras fiscales, en especial los latifundios del Ministerio de Defensa a Colonización, fijar un límite a la superficie que puede tener una sola familia, etc. Y las 8 horas y un aumento de salario real para el peón de estancia, que hoy está en más de un 30 por ciento menos que hace 15 años. Tenemos esos vergonzosos 14.000 pesos para un peón, que fijó hace un par de meses el Ejecutivo, justo en el momento que el precio de la lana se fue al doble en dólares y a más del triple en pesos.
Es la miseria del sector del pueblo que vive o aspira a vivir en el campo, la que está reclamando a gritos esa conjunción popular de fuerzas.
16 de setiembre de 1987
Sigue la verguenza del tema de la tierra que es esencial para un desarrolo economico y social justo en nuestras sociedades no solo en Uruguay sino tambien en America Latina mientras sigan gobiernos entreguistas y alcahuetes del capital de turno poca esperanza habrá para las generaciones futuras,por eso a volver a empezar y a forjar una izquierda verdadera y que no se venda al vil precio de la necesidad.Viva Artigas !!!!!!!!
ResponderEliminar