miércoles, 30 de marzo de 2011

"Los que ayer sufrieron la impunidad, hoy la sustentan"


Irma Leites: "el aparato represivo en Uruguay no ha sido desmantelado".

La construcción de la impunidad en Uruguay “ha sido una ingeniería muy complicada y hoy siguen sustentándola los mismos que ayer la sufrieron”, advirtió a AIM la dirigente de la organización Plenaria Memoria y Justicia Irma Leites, quien agregó que en su país “la estrategia del olvido ha sido muy fuerte”.

En el congreso de Derechos Humanos que la filial Paraná de la Central de Trabajadores Argentinos realizó la semana pasada en esta ciudad , Leites se refirió a la situación de los derechos humanos en la República Oriental del Uruguay (ROU) y las diferencias o similitudes con Argentina. "Hay diferencias y a la vez, situaciones comunes entre los dos países. El terrorismo de Estado nos legó una sociedad en la que está la pelea contra la impunidad de ayer y de hoy. Entendemos que es la misma lucha, pero con la diferencia que en Uruguay, la estrategia del olvido ha sido muy fuerte; hasta ahora, en mi país no tuvimos ni un solo juicio oral y abierto donde los ciudadanos pudieran hablar abiertamente contra los represores".

Es que en Uruguay, los juicios que se realizaron no fueron por delitos de lesa humanidad; no hay nadie procesado por desaparición de personas ni tampoco por genocidio.

En diálogo con esta Agencia, la militante confirmó: "pretendemos que se haga un solo juicio y con todos los denunciantes comunes, como se planteó en Argentina, ya que de lo contrario tardaremos siglos para juzgar a los represores en forma real. La construcción de la impunidad en Uruguay ha sido una ingeniería muy complicada y hoy sigue sustentada por los mismos que ayer la sufrieron".

La luchadora social aseguró a AIM que "los pocos que están procesados en mi país,  sea porque actuaron en el Plan Condor o por asesinatos, son fruto de la lucha del pueblo, de la lucha de Madres, de organizaciones sociales, de derechos humanos y de los familiares de los desaparecidos que impulsaron esos juicios. Es un movimiento popular que no ha olvidado, pero que tiene graves problemas para instrumentar esos juicios: Uruguay sigue teniendo una ley de Punto Final, que es la de Caducidad, como existió en Argentina hasta que fue derogada. Nosotros no queríamos plebiscitar porque consideramos que es nula e indigna desde su origen".

Por eso relató que como organización de derechos humanos, Plenaria Memoria y Justicia fue "muy crítica a la existencia de los plebiscito sobre este tema, ya que es como si se hiciera uno sobre esclavitud y emergiera a favor por el convencimiento de las grandes mayorías disciplinadas o ignorantes de lo que sucedió. Este es un tema a laudar durante 2011; el Parlamento uruguayo tendría la mayoría de la fuerza histórica que antes la promulgaba como nula y hoy la aprobaría, por los pactos políticos y los acuerdos de negociación".

Momento crucial
Leites, que pertenece a una organización autónoma, consideró que la violación de derechos humanos durante la dictadura militar en Uruguay tuvo por objeto desmantelar el movimiento popular. "Fue contra todo el pueblo y esa lucha sigue hasta el día de hoy con todos los elementos: por eso la necesidad de la condena social a lo sucedido para construir un camino que no vuelva a ese terrorismo de Estado".



Sin embargo, la militante social aclaró que ese camino es "muy empedrado. En mi país no se han desmantelado los aparatos represivos; los represores fueron ascendidos; las mismas fuerzas armadas son enviadas a violar los derechos humanos en otros pueblos, como por ejemplo, en Haití".

Sobre este último punto, Leites aseguró que las organizaciones de derechos humanos uruguayas están "totalmente en contra de la presencia de tropas uruguayas en el Congo y en Haití, donde inclusive han cometido delitos de violación de mujeres y niñas, han disparado contra la población buscando disciplinar esos pueblos...Estos puntos son los que trabajamos junto con lo que llamamos rescates históricos. Por ejemplo, saber por qué peleaban nuestros compañeros, ya que consideramos que existe una suerte de estafa histórica sobre lo subjetivo. Nosotros decimos que los compañeros no murieron peleando por esta democracia, sino por una revolución social, por la búsqueda de los derechos de todos y todas, de la libertad y de la tierra. Desde ese ángulo trabajamos".

Apostar a la memoria

Para Leites, muchos jóvenes de  hoy observan en forma crítica la historia. Sin embargo, "el problema radica en que jugamos con un problema de fondo que es el desarrollo de una mentalidad que no es crítica.  Nuestra responsabilidad es unir a esas generaciones de jóvenes con la mentalidad crítica, ya que en muchas oportunidades estos chicos tienen desarticuladas las esperanzas y eso redunda en la falta de participación".

Uno de los logros de Plenaria Memoria y Justicia, organización integrada por radios comunitarias, trabajadores clasistas, ex presos y presas políticas, sindicatos, cooperativas y estudiantes, es "tener la virtud de interesar a los jóvenes".

Por eso,  Leites aseveró a AIM que "todo puede cambiar. La pelea es muy importante y creemos que posibilita construir otros paradigmas como soñar, vivir de otra manera y no sobrevivir como lo estamos haciendo;  frenar los proyectos destructivos del medio ambiente; conservar los bienes comunes como los recursos naturales y sumar a más gente para construir".

Para la dirigente, los colectivos de personas son importantes porque constituyen sitios de resistencia. "El problema es cómo nos expandimos y hacer que esa movida tenga un eco en la cabeza de las nuevas generaciones para que sean ellos los que produzcan nuevas propuestas para esa construcción. Cuando eso suceda, si que habrá posibilidades de cambio...".

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