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La xenofobia eurosionista, tercer partido en Holanda




Los resultados electorales en Holanda generaron hoy recelos por el avance de la derecha liberal de Mark Rutte al mayor partido del país y el salto en popularidad de la agrupación ultraderechista de Geert Wilders.

Holanda marcó en estas elecciones parlamentarias un retorno al siglo pasado, cuando el Partido Popular por la Libertad y la Democracia (VVD) de Rutte obtuvo una ligera mayoría de los escaños legislativos, giro derechista que sigue la tendencia europea actual.


Al completarse el conteo del 98 por ciento de las boletas, los 31 asientos del VVD les otorga la victoria por apretado margen frente a su cercano seguidor el socialdemócrata Partido del Trabajo (PvdA) de Job Cohen con 30 diputados.

En el tercer lugar se colocó el ultraderechista Partido por la Libertad (PVV) de Geert Wilders, que consiguió 24 puestos y cuya plataforma de corte populista y xenófobo, en concordancia con sus similares de otros países del continente, generan recelo y preocupaciones en no pocos círculos políticos.

“Lo imposible se ha hecho realidad”, afirmó Wilders, quien habló de un día glorioso para el país, cuando cerca de un millón y medio de holandeses eligió “la plataforma optimista” del PVV.

El nuevo escenario destronó al Partido Cristiano Demócrata (CDA) y provocó la renuncia de su líder, el actual primer ministro Jan Peter Balkenende, quien aseguró que no ocupará su escaño en el Parlamento.

Tras estos resultados, comienza ahora el forcejeo por formar la coalición de gobierno, y entre las probabilidades se perfila una alianza de derechas que incluirá al VVD (31 diputados), al CDA (21) y al PVV (24), el cual sólo tendría una mayoría mínima frente a la oposición.

Otra opción tripartita pudiera ser la del VVD, el PvdA (30) y el CDA, que contaría con una sólida mayoría parlamentaria, pero le sería muy complicado gobernar por las diferencias políticas entre sus partes.

Según la práctica, no necesariamente los partidos más votados integran la coalición, por lo que quizás algunos de los pequeños pudieran integrar la alianza en busca de una fortaleza legislativa.

Pero de cualquier manera, el principal reto del nuevo gobierno sería lograr la estabilidad y cohesión para evitar su desintegración antes de concluir el período electoral, como ha ocurrido desde el año 2002 con las coaliciones.

Holanda, con hinchada blanca y racista
JOHANNESBURGO
Es Holanda, país con el que se siente representada la minoría blanca afrikaner que habita en Sudáfrica. Es apenas el siete por ciento de una población de casi 50 millones de habitantes. Son los antiguos boer, los granjeros. Son los que ostentaron el poder político y económico durante la época del apartheid. Los que conquistaron tierras y riquezas. Los que gozaron de privilegios y de una supremacía a costa de la opresión negra.

Hoy, sin que exista una plena justicia social, los derechos de los negros están en un pie de igualdad con los de los afrikaners, que hablan una lengua que la mayoría de los holandeses podría entender.

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Evo en La cumbre de Copenhagen



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