martes, 14 de agosto de 2012

EFH y el diablo




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Uruguay y EEUU retoman "diálogo estratégico" de defensa


El subsecretario de Defensa para América Latina, Frank Mora, llegó a Uruguay para reunirse con el ministro Fernández Huidobro; la idea es establecer un diálogo "transparente y frontal"

Uruguay y EE.UU. retomaron hoy en Montevideo, con la llegada al país del subsecretario de Defensa estadounidense para América Latina, Frank Mora, el "diálogo estratégico" entre ambos países, confirmaron fuentes de la embajada estadounidense.

Mora, que estará en Uruguay dos días, se reunirá durante su visita con el ministro de Defensa Nacional Eleuterio Fernández Huidobro, y con las autoridades locales de ese ramo, con las que preparará además la cita de ministros de las Américas de esa área, que se realizará en Uruguay en el mes de octubre.

Este viaje, del que no se difundieron mayores detalles, es "la continuación del diálogo que comenzó el año pasado" en este tema entre ambos Gobiernos y que en 2013 se llevará a los EE.UU., apuntaron a Efe fuentes diplomáticas estadounidenses.

Mora ya visitó Uruguay en marzo de 2011 para establecer "una nueva etapa" de diálogo en materia de Defensa con el objetivo de pasar de una simple cooperación en temas operacionales a establecer un diálogo "transparente y frontal" en cuanto a políticas en la materia, según informó el entonces ministro uruguayo Luis Rosadilla.

En esa ocasión, Mora consideró que este nuevo "diálogo estratégico" que comenzó con Uruguay tiene "características históricas", ya que ambos países "nunca tuvieron una oportunidad para profundizar" sus relaciones en dichos ámbitos.

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Llega a Uruguay subsecretario de Defensa de Estados Unidos

Hello Frank

13.08.2012

imagenUruguay y Estados Unidos retomaron el "diálogo estratégico" en materia militar. Este lunes llegó a nuestro país el subsecretario de Defensa estadounidense para América Latina, Frank Mora, para entrevistarse con el ministro Eleuterio Fernández Huidobro y otras autoridades.
Uruguay y EE.UU. retomaron el lunes en Montevideo, con la llegada al país del subsecretario de Defensa estadounidense para América Latina, Frank Mora, el "diálogo estratégico" entre ambos países, confirmaron fuentes de la embajada estadounidense.
Mora, que estará en Uruguay dos días, se reunirá durante su visita con el ministro de Defensa Nacional uruguayo, Eleuterio Fernández Huidobro, y con las autoridades locales de ese ramo, con las que preparará además la cita de ministros de las Américas de esa área, que se realizará en Uruguay en el mes de octubre.
Este viaje, del que no se difundieron mayores detalles, es "la continuación del diálogo que comenzó el año pasado" en este tema entre ambos gobiernos y que en 2013 se llevará a los EE.UU., apuntaron a Efe fuentes diplomáticas estadounidenses.
Mora ya visitó Uruguay en marzo de 2011 para establecer "una nueva etapa" de diálogo en materia de Defensa con el objetivo de pasar de una simple cooperación en temas operacionales a establecer un diálogo "transparente y frontal" en cuanto a políticas en la materia, según informó el entonces ministro uruguayo Luis Rosadilla.
En esa ocasión, Mora consideró que este nuevo "diálogo estratégico" que comenzó con Uruguay tiene "características históricas", ya que ambos países "nunca tuvieron una oportunidad para profundizar" sus relaciones en dichos ámbitos.
(Fuente: EFE)

Al pasar por un cuartel se enamoró de un coronel

Fernández Huidobro apoya tesis de la defensa de Gómez
13.08.2012
El ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, intercedió en favor de un coronel retirado procesado con prisión y que, según argumenta, no es responsable del homicidio de un preso político ocurrido marzo de 1973, que la justicia le imputa. En la carta, a la que tuvo acceso En Perspectiva, Fernández Huidobro teme que “esté pagando con cárcel un oficial que nada tuvo que ver” y que, al mismo tiempo, “se esté encubriendo a los verdaderos culpables".

 El militar involucrado es el coronel retirado Juan Carlos Gómez, quien se encuentra preso desde hace dos años, cuando la jueza de Paso de los Toros, Lilián Elhorriburu, lo procesó, a pedido de la fiscal Angelita Romano, en calidad de autor del asesinato de Roberto Gomensoro Josman, desaparecido en dictadura y cuyo cráneo fue encontrado años más tarde en el lago de Rincón del Bonete. Por la muerte de Gomensoro Josman también está procesado José Nino Gavazzo en calidad de coautor.

Para el procesamiento de Gómez, la Justicia se basó en un testigo ex miembro del MLN, Mario Blanco, que dijo que estuvo preso junto con Gomensoro Josman en un cuartel de Paso de los Toros y observó las torturas que éste había sufrido. Además, Blanco involucró en los hechos a Juan Carlos Gómez, que entonces servía como Oficial del Estado Mayor de la Región que incluía a esa unidad del Ejército.

Sin embargo, la defensa de Gómez siempre sostuvo que el asesinato de Gomensoro Josman no ocurrió en Paso de los Toros sino en el cuartel de La Paloma, en el Cerro de Montevideo, como indica el informe final de la Comisión para la Paz.

Recientemente, la Jueza Elhorriburu pidió que declararan algunos integrantes de la Comisión para La Paz, como Gonzalo Fernández y Carlos Ramela, y dirigió un oficio al Ministerio de Defensa para que aportara los datos con los que esa cartera contaba.

Junto con la respuesta del ministerio, la jueza recibió una carta dirigida “A quien corresponda”, fechada el 19 de julio y firmada por Fernández Huidobro, en la que éste apoya la tesis de la defensa de coronel Gómez. El ministro comienza diciendo: "Tengo la convicción personal por motivo de información que me llegó durante la prisión y luego de mi liberación que Roberto Gomensoro fue asesinado en el Grupo de Artillería Nº1”.

En la misiva, Fernández Huidobro también señala que “existen infinidad de relatos escritos y orales de prisioneros y oficiales del Grupo de Artillería nº1 (también conocido como La Paloma) que confirmarían la muerte de Gomensoro allí".

El ministro y exmiembro del MLN agrega: "Hay que investigar las responsabilidades del entonces ministro de Defensa, Jefe del SID (Servicio de Información de  Defensa), Jefe y Segundo Jefe de Artillería nº1 y oficiales que operaban dentro y fuera de la Unidad. Analizar aquella transición en las formas de represión, que con Roberto Gomensoro cambia la metodología al decidirse no entregar los restos a los familiares, como sucedió con otros muertos en la tortura, puede ayudar a esclarecer otros casos de detenidos desaparecidos posteriormente".

Fernández Huidobro culmina planteando: "Temo que esté pagando con cárcel un oficial que nada tuvo que ver en este caso y se esté encubriendo a los verdaderos culpables. Cortando, además, la línea de investigación".



El hijo de puta que está defendiendo:

El titular de Defensa respondió por escrito a la jueza a Lilián Elhorriburu expresándole su convicción de que la muerte de Roberto Gomensoro ocurrió en el cuartel de artillería nº1, en el Cerro y no en Paso de los Toros, tal como declaró el testigo Mario Blanco, otro ex integrante del MLN.
Roberto Gomensoro pertenecía a la Columna 70 del MLN-T. Fue detenido en su casa de Malvin el 12 de marzo de 1973 y fue trasladado al cuartel de Artillería Nº1, en el cerro, conocido como el cuartel de La Paloma.
Sus captores inventaron una fuga y libraron una orden de captura nacional e internacional. Su cuerpo apareció en la zona de Rincón del Bonete, en Tacuarembó el 18 de marzo de ese mismo año, cubierto con una malla de alambres y piedras que no lograron hacer el peso suficiente para hundir el cuerpo.
Todos los testimonios apuntaban a que Gomensoro fue asesinado en torturas en el cuartel de La Paloma y su cuerpo trasladado a Paso de los Toros y tirado al Lago de Rincón del Bonete, pero en noviembre de 2009 apareció el testigo Mario Blanco, ex miembro del MLN, quien dijo haber estado preso junto a Gomensoro en Paso de los Toros y haber sido testigo de su tortura y castración, involucrando a Juan Carlos Gómez, quien era Oficial del Estado Mayor de la Región que incluía a Paso de los Toros.
En agosto de 2010, la jueza de Paso de los Toros Lilián Elhorriburu procesó a Juan Carlos Gómez en calidad de autor y a José Nino Gavazzo en calidad de coautor del asesinato de Roberto Gomensoro, a pedido de la fiscal Angelita Romano.
"Tengo la convicción personal por motivo de información que me llegó durante la prisión y luego de mi liberación que Roberto Gomensoro fue asesinado en el Grupo de Artillería Nº1 en 1973", comienza la misiva escrita por Fernández Huidobro, con fecha del 19 de julio pasado.
"Hacia febrero de 1973 empezó a operarse un cambio en los métodos de lucha antisubversiva, centralizando y profesionalizando la represión alrededor del Servicio de Información de Defensa (SID) La muerte de Roberto Gomensoro se da en medio de ese cambio y su repercusión dentro del Grupo de Artillería Nº1. Su cadáver fue trasladado a Paso de los Toros y se pretendió desaparecerlo, al poco tiempo el cuerpo apareció, pasó muchos años como NN hasta que hace unos años salió a luz la verdad sobre su identidad", señala la carta.
Fernández Huidobro señala también que el pedido de captura no surgió de una unidad militar, sino del SID: "Ninguna Unidad Militar requirió su captura, ni emitió comunicados al respecto. El Servicio de Información de Defensa fue quien comandó esta operación. Los comunicados, requisitorias e informes de una falsa fuga fueron emitidos por las Fuerzas Conjuntas coordinadas por el Servicio de Información de Defensa dependiente del Ministerio de Defensa Nacional. Esto es muy importante: hoy mismo la DINACIE depende directamente del Ministerio de Defensa, así como Sanidad Militar y otras dependencias".
El ex integrante del MLN, hace referencia a "una infinidad de relatos escritos y orales de prisioneros y oficiales del Grupo de Artillería nº1 que confirmarían la muerte de Gomensoro allí".
Además, Fernández Huidobro menciona el libro de Leonardo Haberkorn, Milicos y Tupas en el que el contador Carlos Koncke cuenta que él le preguntó a uno de los militares qué había pasado y este le respondió: "A Gavazzo se le murió un chico, Se le pasó de tiempo en el tacho".
"Hay que investigar las responsabilidades del entonces ministro de Defensa, Jefe del SID, Jefe y Segundo Jefe de Artillería nº1 y oficiales que operaban dentro y fuera de la Unidad. Analizar aquella transición en las formas de represión, que con Roberto Gomensoro cambia la metodología al decidirse no entregar los restos a los familiares, como sucedió con otros muertos en la tortura puede ayudar a esclarecer otros casos de detenidos desaparecidos posteriormente", agrega la carta señalando también el hecho de que las investigaciones de la Comisión para la Paz y las investigaciones elevadas al ex presidente Vázquez en 2005 confirmar la versión que Fernández Huidobro escuchó "durante tantos años".
"Temo que esté pagando con cárcel un oficial que nada tuvo que ver en este caso", señala en referencia a Juan Gómez "y se esté encubriendo a los verdaderos culpables. Cortando, además, la línea de investigación", concluye la misiva enviada al juzgado de Paso de los Toros.
Al ser consultados por el tema, fuentes del Ministerio de Defensa señalaron a Montevideo Portal que no se realizarán declaraciones públicas sobre este asunto.
Otros elementos que contradicen los dichos de Blanco, son las autopsias realizadas por los médicos forenses Emilio Laca y Guido Berro. El primero en ningún momento menciona la castración, mientras que Berro, a partir de muestras fotográficas asegura que el militante no fue castrado.
También las declaraciones del militante de izquierda Luis Otormin, que estaba preso en Rivera junto a Blanco y otros militantes tupamaros. Otormin declaró ante el Tribunal de Apelaciones que estuvo detenido en Rivera en marzo de 1973 y que luego todos fueron trasladados a Salto, en la semana de turismo, sin que nunca Blanco le comentara nada de un traslado a Paso de los Toros, ni de la herida en la rodilla, que Blanco declaró haber sufrido por un golpe recibido "con la bayoneta que lo había castrado a Gomensoro".
En sus declaraciones ante el Tribunal Otormin agregó que no puede saber si en una noche Blanco hubiese sido llevado a esa localidad de Tacuarembó, pero agregó que nunca lo vio renguear o quejarse por la herida.
Al ser consultado sobre este punto, el Cnel (r) Luis Agosto-uno de los militares de La Paloma- prefirió no realizar declaraciones sobre el caso. Otras fuentes de ese cuartel, dijeron a Montevideo Portal que en su momento le confirmaron que había muerto un chico en tortura, pero que nunca supo su nombre, agregando que seguramente era alguien que recién llegaba a La Paloma.
"No fue un rumor, ni un invento, fue una cosa muy concreta. Murió un chico, se les fue la mano y se ahogó. Todo el mundo lo sabía, era una cosa conocida. Estaban doloridos y avergonzados", agregó.
El jueves pasado declararon en la causa los integrantes para la Comisión para la Paz, Carlos Ramela y Gonzalo Fernández, quienes señalaron que según la información que habían recabado en su momento Gomensoro habría muerto en La Paloma, al tiempo que el ex Comandante en Jefe del Ejército, Ángel Bertolotti, declaró en el mismo sentido, respecto a la información que obtuvo cuando realizó las investigaciones que pidió el ex presidente Tabaré Vázquez en 2005.

Montevideo Portal

Ver además:

viernes, 6 de agosto de 2010


Homicidio especialmente agravado para Gavazzo

 
LaRed21Sábado 07 de agosto de 2010
Saña predictatorial. Militares Gómez y Gavazzo incriminados por homicidio, en marzo de 1973

Gomensoro fue castrado y falleció desangrado

La jueza penal de Paso de los Toros, Dra. Lilián Elhorriburu, procesó al Cnel. (r) Juan Carlos Gómez y al Tte. Cnel. (r) José Nino Gavazzo como autor y coautor, respectivamente, del homicidio muy especialmente agravado de Roberto Gomensoro Josman, en marzo de 1973.

  El Cnel Juan Carlos Gomez era terrible, era muy violento. Este muchacho le contestó de malos modos y lo castraron, el que lo castró fue Juan Carlos Gomez

Escrito por: Víctor Carrato
 l Juzgado de Paso de los Toros vivió ayer y desde el mediodía de hoy el momento más importante y más terrible en toda su historia.
Los autos de procesamiento, resumidos por la Suprema Corte de Justicia, son terribles para quien los logre leer.
Según consta en este documento de la Justicia, “El Sr. J G [José Gavazzo] se encontraba en Paso de los Toros a fines de 1972 y principios de 1973″ aunque no fue el único lugar donde actuó torturando prisioneros políticos, siendo autor de varios asesinatos comprobados. Según Gavazzo su “misión fue re interrogar a toda la dirección militar del Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros, a los efectos de poder determinar las múltiples operaciones militares que a través de más de diez años había realizado ese movimiento y no habían sido hasta ese momento determinados los responsables…en Paso de los Toros se hizo en el Batallón de Ingenieros Nº 3″. Según informa la Suprema Corte de Justicia, estas declaraciones fueron realizadas por Gavazzo en diciembre de 2009 cuando en presencia de su abogado defensor se lo condujo a declarar en aquel momento como testigo, al igual que al ex coronel Juan Carlos Gómez, autor del asesinato de Roberto Gomensoro Josman, como quedó probado.
En 1973 Juan Carlos Gómez era mayor, según manifestó uno de los testigos, tenía un vehículo que se desplazaba a alta velocidad y participó en varias oportunidades de las torturas en Tacuarembó. Hoy, con más de 80 años, Gómez vive en una torre en Punta del Este. Fue el último jefe de Policía de Maldonado durante la dictadura.
Otro de los testigos “manifestó que los presos se encontraban en el Campo 3, en una pieza chiquita, entrando en el rancho de paja en la primera puerta”.
Un tercer testigo manifestó que vio dos veces a Gavazzo en el Campo 3 y que el mayor Juan Carlos Gómez “era severo al extremo, difícil de tratar; vivía en Durazno, cuando tenía guardias se quedaba en el Campo 3″.
El testimonio de uno de los testigos, que estuvo detenido desde agosto de 1972 hasta finales de 1973, permitió saber que “en el año 73 un maldito soldado borracho comentó en una reunión que estando en la guardia, que había estado en el movimiento nuestro, y les dijo a los soldados que me preguntaran a mí y eso me mató, y vino de la Región Militar 3, ya el cuartel de ingenieros no tenía nada que ver y vino del Cuartel General de la Región 3, entre ellos G [Gavazzo] y el matador [Juan Carlos Gómez]” . El testigo agregó que “el matador es el capitán J C G [Juan Carlos Gómez] que era en ese momento capitán de la región 3…J C G [Juan Carlos Gómez] a todos los que tenían problemas que no hacían lo que él decía nos vemos en Paso de los Toros y ahí los llevaba al Campo 3 y ahí me llevaron a mí para interrogarme otra vez, en el año 73… Ahí me desnudaron y me colgaron en los galpones y en determinado momento de ese día trajeron a un muchacho rubio, le hicieron lo mismo, lo desnudaron y lo colgaron… A ese chiquilín le hacían preguntas, lo castigaban, G [Gavazzo] era el peor y estaba ese capitán JCG [Juan Carlos Gómez], era terrible, era muy violento… Este muchacho le contestó de malos modos y lo castraron, el que lo castró fue el JCG [Juan Carlos Gómez] y yo lo miré muy feo; cuando él se dio vuelta y vio que yo lo estaba mirando me dio un hachazo con la bayoneta que lo había castrado y me cortó la rótula…
Roberto “Tito” Gomensoro pasó toda la noche desangrándose. “G [Gavazzo] daba las órdenes y miraba y sonreía mientras los demás las cumplían. Juan Carlos Gómez declaró que en la época detentaba el cargo de mayor, él mismo ordena que castren a Roberto Gomensoro, el que se desangró durante toda la noche perdiendo el conocimiento, en ese momento a otro testigo le rompen los ligamentos…
Esto fue constatado años después, por un médico forense, en cuyo certificado médico se expresa: callo óseo de cara anterior de rótula derecha. En esa época, según declaraciones de Juan Carlos Gómez realizadas el día 5 de agosto de 2010, no había otra persona con apellido G [Gavazzo], “no conozco, no sé, pienso que no debe haber”.
Cuando fue encontrado, se comprobó que al cuerpo de Roberto “Tito” Gomensoro le habían mutilado los órganos genitales, como fue declarado por uno de los testigos.
En un diario de la época en nota redactada por un corresponsal, se expresa: “horribles y espantosas mutilaciones…el cuerpo que se hallaba totalmente desnudo había sido mutilado espantosamente, especialmente sus órganos genitales, que aparecían totalmente cercenados”. Agrega que “…el cadáver fue trasladado a Tacuarembó, donde en el día de hoy se iba a practicar la autopsia , a los efectos de determinar las causas que determinaron su fallecimiento. El cuerpo no presentaba, a simple vista, heridas de ninguna índole, excepción hecha del cercenamiento de los órganos genitales, que pudiera arrojar alguna luz sobre la forma en que fue asesinado”.
Otra testigo manifestó que su padre le comentó que el cadáver tenía piedras entre el tejido y el cuerpo, que estaba desnudo, y “me comentó algo de los genitales, como que estaban mutilados”.
El esposo de la testigo mencionada manifestó que su suegro, que era corresponsal del diario “La Mañana”, hizo una nota sobre el cuerpo encontrado y comentó a nivel familiar que “estaba cubierto por alambre y tenía piedras, y que estaba mutilado pero no sé en qué parte”.
Uno de los testigos declaró que fue a rescatar el cuerpo en esa oportunidad. Ayudó a empujar el cuerpo hasta la orilla, el cuerpo estaba protegido por un tejido con tres piedras dentro, que tenían algo de blanco.
Otro testigo que estuvo de guardia en la morgue durante ocho horas custodiando el cuerpo en esa oportunidad recuerda que “parecía que le habían sacado un testículo”, si bien de la autopsia realizada por el forense de la época, Sr. L [Laca], el mismo declaró el motivo por el cual se quedó con la xx (cabeza) de quien a la postre sería Roberto Gomensoro: “…yo pensaba entregar la cabeza a alguien confiable, yo no confiaba en la policía…”.
“Una vez producido el deceso se ordena al oficial M (que era encargado del Campo 3), que envuelva el cuerpo en una malla de alambre y le coloque piedras para fondear el cuerpo y evitar que suba a la superficie del lago”. A quien M. le comentó “querés que te fondee como al rubio”. El testigo A recuerda que el sargento M gritaba en una oportunidad en el calabozo de la Policía “que al policía que lo había traído preso le iba a hacer lo mismo que le habían hecho al tupamaro, que lo habían tirado envuelto en un tejido”. El testigo MM expresó que M tuvo un problema con su hermano JM, el hermano le pegó a M que estaba borracho y le hizo volar el gorro y M le gritó “a vos te vamos a hacer lo mismo que a ese que tiramos en el lago”. Y F, quien en conversación con el comisario le relató sus investigaciones luego de encontrarse el cadáver, constatándose que el alambrado en el que fue envuelto pertenecía al Batallón y fue traído especialmente para el área perimetral, donde actualmente se encuentran dependencias de la Junta Local. Si bien era sabido en la época que apareció el cuerpo de Gomensoro en las condiciones relatadas anteriormente, curiosamente el indagado G [Gavazzo] manifestó en el día 5 de agosto que no tuvo conocimiento de tal hecho.


2 comentarios:

  1. La foto es HUGO GOMENSORO, hermano de Roberto que fue torturado y asesinado en Buenos Aires.

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  2. En Paso de los Toros se torturó salvajemente. Uno de los oficiales que torturó salvajemente en Paso de los Toros fue Raúl Naranja, hasta ahora impune. Se lo nombre en el libro Ls tupas de Tacuarembó, pero su apellido figura como Naranjo. Se sabe si estuvo implicado en el caso Gomensoro?

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