Mujica
anuncia que "cobrará cuentas a Estados Unidos". En ese caso es de
esperarse que le reclame a Obama la apertura de TODOS LOS ARCHIVOS del
Pentágono, la CIA y el Departamento de Estado, en relación a Uruguay,
antes y después de la dictadura. Así quizás podrían esclarecerse los
planes de la CIA aplicados por Mitrione sobre el terreno así como por
quienes le hayan sucedido en relación a torturas y escuadrones de la
muerte. Se podrá esclarecer sobre la ayuda, asesoramiento y apoyo a las
FF.AA. en su embestida asesina contra el conjunto del pueblo, la
instauración de la dictadura y el terrorismo de estado. Se podrán
recoger datos sobre las desapariciones forzadas, las torturas masivas y
el conjunto de crímenes de lesa humanidad llevados adelante en Uruguay
por los esbirros del imperio, bajo su dirección. Sería un aporte para
reemprender los juicios a tanto asesino que anda suelto y sigue
amenazando.
Como siempre Mujica no habla claro ya que la nebulosa es la característica de su política (cuando no se trata de agredir al movimiento sindical y popular ya que en ese caso amenaza e insulta sin ninguna nebulosa) y por lo tanto no se sabe que "cuentas" piensa "cobrarle" al imperio, pero las mencionadas en relación a la intromisión imperial para implantar la dictadura militar, esa debería estar como la "cuenta a cobrar" número uno.
Actuando como "líder regional" Mujica anuncia otros puntos, como ser que le va a decir a Obama que “la democracia no se puede exportar a palos y no se puede imponer lo que piensa cada país”, agregó. El problema es que Mujica le da un apoyo al imperio como promotor de "la democracia" (solo discrepa en "la forma" en como lo hace, "a palos" dice), más el imperio NUNCA, NI ANTES NI AHORA, SE HA PROPUESTO IMPONER NINGUNA "Democracia", por el contrario ha llenado el planeta y América Latina en particular, Uruguay incluído, de golpes militares, masacres, terrorismo de estado, dictaduras sangrientas, decenas de miles de asesinados y de desaparecidos, todo en el marco de la aplicación de la "Doctrina de la Seguridad Nacional" (hoy sustituída por la "guerra al terrorismo" y el "combate al narcotráfico" pero en el fondo es lo mismo, a los efectos prácticos, que la "Doctrina" del pasado). El imperio no ha tratado de "imponer" ninguna democracia, el imperio ha aplastado hasta los atisbos más mínimos de democracia en América Latina. Y sigue en lo mismo con la promoción y el apoyo a los golpes en Honduras y el Paraguay, países que no por casualidad alojan o alojarán bases militares claves para el imperio. El reguero de bases militares en todo el Continente, la permanente agresión y amenazas contra Venezuela u otros procesos en el Continente, nos muestra a las claras que la línea a futuro del imperio será incrementar sus agresiones militares, para derribar lo que haya de democracia.
En consecuencia Mujica se coloca en una postura altamente peligrosa para todo el movimiento liberador en América Latina: la postura de aceptar como buena las tesis imperiales en las que muy pocos creen en el mundo, de guerras para "imponer la democracia". Mujica le hace un favor al imperio avalando lo proclamado por el imperio como la razón de ser de sus guerras y agresiones. Le sugiere al imperio no hacerlo a "los palos" (es decir la forma) pero no cuestiona (es decir acepta) las razones alegadas por el guerrerismo yanqui. América Latina toda y el pueblo uruguayo como parte de la misma tienen sí muchas cuentas para cobrarle al imperio asesino y saqueador. No será reconociéndoles el llamado "justificativo moral" como se cobrarán esas cuentas.
Queda meridianamente claro que no se verá a un "líder regional" tal como promueve el imperio a Mujica, sino que se verá a un presidente latinoamericano funcional a los intereses políticos del imperio EN ESTE MOMENTO, y que es promover posiciones aparentemente "intermedias", es decir continuar con los intentos de aislamiento y socavamiento a Cuba, Venezuela y Bolivia y otros procesos que molesten al imperio ya que son los que no se dejan saquear. La única postura correcta es la de fortalecer la unidad latinoamericana para hacer frente a los planes saqueadores del imperio, en lugar de tratar de levantar una alternativa divisionista como lo hace Mujica, en momentos en los que el imperio tensa sus fuerzas para pasar a la agresión militar (ya comenzada de manera encubierta en Venezuela).
Apenas la Revolución Cubana mostró sus dignas posturas antiimperialistas y con ello se ganó el respeto y la solidaridad de los pueblos en todo el Continente, el imperio criminal levantó una alternativa "intermedia". Le llamaron la "revolución en libertad" y fué llevada adelante por la Democracia Cristiana chilena con Frei como Presidente. Junto con ello el imperio también promovió la llamada "Alianza para el Progreso", expulsó a Cuba de la OEA, inició el bloqueo que todavía persiste y a renglón seguido pasó directamente al ataque militar con la invasión de Playa Girón. Frei en su momento tomó una serie de medidas para demostrar de que se trataría de una "revolución en libertad". Desarrolló la Reforma Agraria e incluso nacionalizó un sector minero. Igualmente ello no fué suficiente para confundir al pueblo chileno que en 1970 lleva a Allende como Presidente. La llamada "Alianza del Pacífico" ante la cual el gobierno insinuó incluso enviar "observadores" es el intento imperial de quebrar la creciente edificación de pactos regionales, sea UNASUR, la CELAC u otras variantes que han excluído al imperio como factor rector. Ante ello el imperio promueve sus alternativas, por ejemplo la "Alianza del Pacífico".
Es en este contexto que también promociona a Mujica como "líder regional" procurando levantar una alternativa al liderazgo REAL de países que mal que bien llevan adelante una política antiimperialista o que no es del gusto del imperio. Mujica pretende encubrir su encuentro con Obama como que personificará la voz rebelde de los pueblos latinoamericanos que le van a decir las verdades al jefe imperial. Y de esa forma transformarse en un "vocero", promovido por el imperio como "líder regional", de la América que busca zafarse del yugo imperialista. Esto es politiquería y demagogia con el visto bueno imperial.
Como siempre Mujica no habla claro ya que la nebulosa es la característica de su política (cuando no se trata de agredir al movimiento sindical y popular ya que en ese caso amenaza e insulta sin ninguna nebulosa) y por lo tanto no se sabe que "cuentas" piensa "cobrarle" al imperio, pero las mencionadas en relación a la intromisión imperial para implantar la dictadura militar, esa debería estar como la "cuenta a cobrar" número uno.
Actuando como "líder regional" Mujica anuncia otros puntos, como ser que le va a decir a Obama que “la democracia no se puede exportar a palos y no se puede imponer lo que piensa cada país”, agregó. El problema es que Mujica le da un apoyo al imperio como promotor de "la democracia" (solo discrepa en "la forma" en como lo hace, "a palos" dice), más el imperio NUNCA, NI ANTES NI AHORA, SE HA PROPUESTO IMPONER NINGUNA "Democracia", por el contrario ha llenado el planeta y América Latina en particular, Uruguay incluído, de golpes militares, masacres, terrorismo de estado, dictaduras sangrientas, decenas de miles de asesinados y de desaparecidos, todo en el marco de la aplicación de la "Doctrina de la Seguridad Nacional" (hoy sustituída por la "guerra al terrorismo" y el "combate al narcotráfico" pero en el fondo es lo mismo, a los efectos prácticos, que la "Doctrina" del pasado). El imperio no ha tratado de "imponer" ninguna democracia, el imperio ha aplastado hasta los atisbos más mínimos de democracia en América Latina. Y sigue en lo mismo con la promoción y el apoyo a los golpes en Honduras y el Paraguay, países que no por casualidad alojan o alojarán bases militares claves para el imperio. El reguero de bases militares en todo el Continente, la permanente agresión y amenazas contra Venezuela u otros procesos en el Continente, nos muestra a las claras que la línea a futuro del imperio será incrementar sus agresiones militares, para derribar lo que haya de democracia.
En consecuencia Mujica se coloca en una postura altamente peligrosa para todo el movimiento liberador en América Latina: la postura de aceptar como buena las tesis imperiales en las que muy pocos creen en el mundo, de guerras para "imponer la democracia". Mujica le hace un favor al imperio avalando lo proclamado por el imperio como la razón de ser de sus guerras y agresiones. Le sugiere al imperio no hacerlo a "los palos" (es decir la forma) pero no cuestiona (es decir acepta) las razones alegadas por el guerrerismo yanqui. América Latina toda y el pueblo uruguayo como parte de la misma tienen sí muchas cuentas para cobrarle al imperio asesino y saqueador. No será reconociéndoles el llamado "justificativo moral" como se cobrarán esas cuentas.
Queda meridianamente claro que no se verá a un "líder regional" tal como promueve el imperio a Mujica, sino que se verá a un presidente latinoamericano funcional a los intereses políticos del imperio EN ESTE MOMENTO, y que es promover posiciones aparentemente "intermedias", es decir continuar con los intentos de aislamiento y socavamiento a Cuba, Venezuela y Bolivia y otros procesos que molesten al imperio ya que son los que no se dejan saquear. La única postura correcta es la de fortalecer la unidad latinoamericana para hacer frente a los planes saqueadores del imperio, en lugar de tratar de levantar una alternativa divisionista como lo hace Mujica, en momentos en los que el imperio tensa sus fuerzas para pasar a la agresión militar (ya comenzada de manera encubierta en Venezuela).
Apenas la Revolución Cubana mostró sus dignas posturas antiimperialistas y con ello se ganó el respeto y la solidaridad de los pueblos en todo el Continente, el imperio criminal levantó una alternativa "intermedia". Le llamaron la "revolución en libertad" y fué llevada adelante por la Democracia Cristiana chilena con Frei como Presidente. Junto con ello el imperio también promovió la llamada "Alianza para el Progreso", expulsó a Cuba de la OEA, inició el bloqueo que todavía persiste y a renglón seguido pasó directamente al ataque militar con la invasión de Playa Girón. Frei en su momento tomó una serie de medidas para demostrar de que se trataría de una "revolución en libertad". Desarrolló la Reforma Agraria e incluso nacionalizó un sector minero. Igualmente ello no fué suficiente para confundir al pueblo chileno que en 1970 lleva a Allende como Presidente. La llamada "Alianza del Pacífico" ante la cual el gobierno insinuó incluso enviar "observadores" es el intento imperial de quebrar la creciente edificación de pactos regionales, sea UNASUR, la CELAC u otras variantes que han excluído al imperio como factor rector. Ante ello el imperio promueve sus alternativas, por ejemplo la "Alianza del Pacífico".
Es en este contexto que también promociona a Mujica como "líder regional" procurando levantar una alternativa al liderazgo REAL de países que mal que bien llevan adelante una política antiimperialista o que no es del gusto del imperio. Mujica pretende encubrir su encuentro con Obama como que personificará la voz rebelde de los pueblos latinoamericanos que le van a decir las verdades al jefe imperial. Y de esa forma transformarse en un "vocero", promovido por el imperio como "líder regional", de la América que busca zafarse del yugo imperialista. Esto es politiquería y demagogia con el visto bueno imperial.
Colectivo del Blog Noticias Uruguayas
15.04.2014
En el encuentro entre los presidente José Mujica y Barack Obama, Uruguay buscará dar un “salto cualitativo” en la relación bilateral pensando en el largo plazo, según dijeron a El Observador allegados al mandatario uruguayo.
La intención del Poder Ejecutivo es llevar el vínculo político y diplomático a otro nivel, aprovechando el buen momento de las relaciones que se mantuvo con las últimas administraciones norteamericanas.
El acercamiento se fue construyendo con los años. El presidente George Bush (padre) vino a Uruguay bajo la presidencia de Luis Alberto Lacalle (1990-1995).
Con Jorge Batlle (2000-2005) llegó el presidente George W. Bush (hijo) que luego repitió la visita con Tabaré Vázquez (2005-2010).
En esos períodos, los presidentes uruguayos pasaron por Washington y ahora Mujica emprenderá ese camino para entrevistarse con Barack Obama el 12 de mayo.
Además del tema de Philip Morris donde el gobierno buscará el apoyo de Obama en el litigio con la tabacalera, Mujica, dijo a la prensa que planteará a Estados Unidos que invierta en investigación y laboratorios “que significan mucho valor agregado”.
Un pedido similar hizo Mujica a Alemania cuando se reunió con la canciller Angela Merkel.
El mandatario, que varias veces destacó el buen trabajo de la embajadora de Estados Unidos, Julissa Reynoso, llegará a Washington con dos mercados abiertos luego de años de negociación: el de cítricos y el de la carne ovina sin hueso. Además espera la apertura para los cortes con hueso.
Los reclamos de Estados Unidos refieren a lograr el ingreso a Uruguay de pollos y algunos cortes de carne. A Estados Unidos no le interesa tanto vender esos productos a Uruguay pero sí utilizar como carta de presentación para otros mercados la autorización del país, que goza de un alto estatus sanitario.
En la agenda, al menos por ahora, no figura el tema de los presos de Guantánamo que Estados Unidos pidió a Uruguay que reciba y que Mujica aceptó.
El presidente uruguayo había dicho que a cambio le pedirá a Estados Unidos que libere a los tres presos cubanos procesados por cargos de espionaje.
En la proyectada reunión, Mujica también marcará en la Casa Blanca los “gruesos errores que el mundo rico, empezando por Estados Unidos, comete” dijo Mujica a canal 4. Comentó que dialogará con Obama “sin estridencias y sin ser agresivo” pero también “sin renunciar a lo que piensa”.
Estados Unidos “se debe dar cuenta” que los latinoamericanos “somos dueños de nuestra historia” y “ya sea buena o mala, la tenemos que escribir nosotros”, agregó.
“Vivimos en un mundo muy complejo” que “necesita tolerancia” y eso supone “aprender a convivir con los que piensan distinto”, dijo Mujica para quien “la democracia no se puede exportar a palos y no se puede imponer lo que piensa cada país”, agregó.
El presidente viajará a Washington acompañado del canciller Luis Almagro entre otros jerarcas de Presidencia.
En el encuentro entre los presidente José Mujica y Barack Obama, Uruguay buscará dar un “salto cualitativo” en la relación bilateral pensando en el largo plazo, según dijeron a El Observador allegados al mandatario uruguayo.
La intención del Poder Ejecutivo es llevar el vínculo político y diplomático a otro nivel, aprovechando el buen momento de las relaciones que se mantuvo con las últimas administraciones norteamericanas.
El acercamiento se fue construyendo con los años. El presidente George Bush (padre) vino a Uruguay bajo la presidencia de Luis Alberto Lacalle (1990-1995).
Con Jorge Batlle (2000-2005) llegó el presidente George W. Bush (hijo) que luego repitió la visita con Tabaré Vázquez (2005-2010).
En esos períodos, los presidentes uruguayos pasaron por Washington y ahora Mujica emprenderá ese camino para entrevistarse con Barack Obama el 12 de mayo.
Además del tema de Philip Morris donde el gobierno buscará el apoyo de Obama en el litigio con la tabacalera, Mujica, dijo a la prensa que planteará a Estados Unidos que invierta en investigación y laboratorios “que significan mucho valor agregado”.
Un pedido similar hizo Mujica a Alemania cuando se reunió con la canciller Angela Merkel.
El mandatario, que varias veces destacó el buen trabajo de la embajadora de Estados Unidos, Julissa Reynoso, llegará a Washington con dos mercados abiertos luego de años de negociación: el de cítricos y el de la carne ovina sin hueso. Además espera la apertura para los cortes con hueso.
Los reclamos de Estados Unidos refieren a lograr el ingreso a Uruguay de pollos y algunos cortes de carne. A Estados Unidos no le interesa tanto vender esos productos a Uruguay pero sí utilizar como carta de presentación para otros mercados la autorización del país, que goza de un alto estatus sanitario.
En la agenda, al menos por ahora, no figura el tema de los presos de Guantánamo que Estados Unidos pidió a Uruguay que reciba y que Mujica aceptó.
El presidente uruguayo había dicho que a cambio le pedirá a Estados Unidos que libere a los tres presos cubanos procesados por cargos de espionaje.
En la proyectada reunión, Mujica también marcará en la Casa Blanca los “gruesos errores que el mundo rico, empezando por Estados Unidos, comete” dijo Mujica a canal 4. Comentó que dialogará con Obama “sin estridencias y sin ser agresivo” pero también “sin renunciar a lo que piensa”.
Estados Unidos “se debe dar cuenta” que los latinoamericanos “somos dueños de nuestra historia” y “ya sea buena o mala, la tenemos que escribir nosotros”, agregó.
“Vivimos en un mundo muy complejo” que “necesita tolerancia” y eso supone “aprender a convivir con los que piensan distinto”, dijo Mujica para quien “la democracia no se puede exportar a palos y no se puede imponer lo que piensa cada país”, agregó.
El presidente viajará a Washington acompañado del canciller Luis Almagro entre otros jerarcas de Presidencia.
Y si me quedaba algo por ver, hoy resulta que Pedro Bordaberry fue a soplarle letra al Pepe acerca de lo que tiene que pedir cuando hable con Obama: un TLC.
ResponderEliminarA esta altura, creo que ni el más loco de los locos podía anticipar este delirio treinta años atrás.