EFEmié oct 29 2014 20:29
Uruguay abrió hoy formalmente su primer Banco de Alimentos,
con el que se pretende brindar comida a organizaciones y personas
necesitadas a través de la recuperación de productos desechados por
comercios, productores o grandes distribuidores.
"Este banco no es un invento nuestro, ni del Uruguay. Es una institución que existe en varios países que pretende recuperar estos alimentos que se perderían si nosotros no existiéramos, procesarlos y distribuirlos a gente que no tendría otra forma de recibirlos", explicó a la agencia internacional Efe su responsable, Santiago Abdala.
Según indicó Abdala, la organización, que comenzó a operar de forma modesta y sin reconocimiento en 2012, realizó este miércoles su presentación en sociedad ya que finalmente pudo obtener el reconocimiento como fundación social y porque logró inaugurar un almacén automatizado y completamente informatizado que les permitirá incrementar su alcance.
"De momento estamos funcionando con donaciones de empresas, que nos hacen llegar productos que fabrican pero que no se consumen antes de su fecha de vencimiento, por ejemplo. Cuando crezcamos en logística y podamos mantener la cadena de frío podremos comenzar a comprar nosotros y suplir otras necesidades", añadió Abdala.
Hasta el momento, unas 50 organizaciones sociales reciben alimentos del banco, fundamentalmente "producto seco" porque "es lo más fácil de maniobrar trabajar con toda la operación logística".
"Sopas, jugos secos instantáneos, galletas, chocolates, todo lo recibimos poco antes del vencimiento y calculamos para que se puedan consumir también antes de eso. Nos aseguramos de darle tranquilidad a los donantes que sus productos no van a llegar en mal estado", dijo.
Abdala añadió que la idea de la organización es "seguir creciendo", pese a que lo ideal "sería no hacer falta y pasar a ser un recuerdo lindo, pero eso parece que será imposible a corto plazo".
"Este banco no es un invento nuestro, ni del Uruguay. Es una institución que existe en varios países que pretende recuperar estos alimentos que se perderían si nosotros no existiéramos, procesarlos y distribuirlos a gente que no tendría otra forma de recibirlos", explicó a la agencia internacional Efe su responsable, Santiago Abdala.
Según indicó Abdala, la organización, que comenzó a operar de forma modesta y sin reconocimiento en 2012, realizó este miércoles su presentación en sociedad ya que finalmente pudo obtener el reconocimiento como fundación social y porque logró inaugurar un almacén automatizado y completamente informatizado que les permitirá incrementar su alcance.
"De momento estamos funcionando con donaciones de empresas, que nos hacen llegar productos que fabrican pero que no se consumen antes de su fecha de vencimiento, por ejemplo. Cuando crezcamos en logística y podamos mantener la cadena de frío podremos comenzar a comprar nosotros y suplir otras necesidades", añadió Abdala.
Hasta el momento, unas 50 organizaciones sociales reciben alimentos del banco, fundamentalmente "producto seco" porque "es lo más fácil de maniobrar trabajar con toda la operación logística".
"Sopas, jugos secos instantáneos, galletas, chocolates, todo lo recibimos poco antes del vencimiento y calculamos para que se puedan consumir también antes de eso. Nos aseguramos de darle tranquilidad a los donantes que sus productos no van a llegar en mal estado", dijo.
Abdala añadió que la idea de la organización es "seguir creciendo", pese a que lo ideal "sería no hacer falta y pasar a ser un recuerdo lindo, pero eso parece que será imposible a corto plazo".
Distribución de la riqueza
Solución: institucionalizar comer basura.
Chanchos comiendo basura
Medido en hogares, en 2013 el 7,8% eran pobres y el 0,3% eran indigentes, según datos del Instituto Nacional de Estadística.
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