Hacerle el juego a la derecha

Oposición apoya al presidente en su crítica a sindicatos educativos 
 Al contrario de lo que suele suceder, los partidos de la oposición apoyaron en bloque al gobierno en su crítica a algunos sindicalistas de la enseñanza. Hablan de "dictadura" sindical a la que hay que "salir a trancar".

El presidente José Mujica dijo el jueves en su audición radial que el problema real que tiene la enseñanza es la actitud de "izquierdismo infantil" de algunos dirigentes sindicales.

"Como en cualquier familia grande hay algunas cabecitas, que creen que se pueden llevar todo por delante" concluyó. Pese a que admitió que hay que problemas que existen, dejó en claro que a su juicio "ningún bien es más importante que darle clase a los muchachos", y que no deberían "ser rehenes" de esta situación, sostuvo el mandatario en la audición "Habla el presidente", de la emisora M24.

La semana pasada, también el vicepresidente Danilo Astori sumó críticas a las decisiones de los sindicatos de la enseñanza. En este sentido, declaró a Subrayado que es "altamente preocupante" la conflictividad en la enseñanza, y que "algunas medidas" tomadas por los docentes "conducen a situaciones lamentables". Astori reconoció que hay problemas de infraestructura, pero dijo que los estudiantes "no se pueden quedar sin clases".

Astori recordó en la misma ocasión que "tenemos un acuerdo educativo entre todos los partidos, que es muy importante", y apuntó que, "medidas como las que han tomado algunos gremios docentes, en medio del diálogo, conducen a situaciones lamentables" como que "los estudiantes no tengan clases".

La oposición se comportó dando pleno respaldo a las afirmaciones de Mujica y Astori.

El senador nacionalista Jorge Larrañaga pidió directamente "terminar con la dictadura sindical". El líder de Alianza Nacional comentó a El País que el problema está en "algunos sindicalistas de la enseñanza".

Desde hace meses, Larrañaga ha sido uno de los más enfáticos críticos de la gestión tanto de Fenapes como de ADES, y ha planteado con severidad su punto de vista al gobierno del presidente Mujica. Inclusive, durante las tratativas posteriores al acuerdo multipartidario en la enseñanza, el líder aliancista hizo fuerte su posición política contraria a la gestión que se estaba dando en la enseñanza pública, particularmente en Secundaria.

"DICTADURA". "Hay una suerte de dictadura sindical en la enseñanza que perjudica a toda la sociedad", insistió Larrañaga. "Eso es inaceptable, intolerable, y va mucho más allá de la calificación de izquierda infantil", añadió, en referencia a lo manifestado por Mujica.

"No tienen derecho a creerse dueños de la marcha de la ecuación, es inadmisible. Hay que terminar con la intolerancia de algún dirigente sindical que se cree propietario de la educación", reiteró Larrañaga.

A su vez, el senador José Amorín (Propuesta Batllista) manifestó que "hace tiempo que los sindicatos no representan a los trabajadores", sino que "trabajan para una cúpula muy pequeña en función de intereses personales y políticos. Durante mucho tiempo la izquierda los utilizó como un apéndice del Frente Amplio. Respeto la tarea sindical si representa a los trabajadores", dijo a El País.

"El presidente Mujica tiene el respaldo de la mayoría de la población para cumplir con los acuerdos concretos. Tiene que seguir hasta el final, lo vamos a respaldar si todos los pasos son para cumplir con los acuerdos", subrayó Amorín.

Agregó que el gobierno "tiene la obligación de hacer cumplir el orden. Rechazamos la violencia pero cuando no hay otra opción se debe apelar a estas cosas. Se debe impedir que sectores minoritarios tranquen el funcionamiento normal del Uruguay", destacó.

También, el presidente del Partido Independiente, Pablo Mieres, fue categórico: "Apoyo lo que dijo Mujica, hay que salir a trancar este accionar sindical destructivo que está perjudicando aún más la educación pública. Se debió haber actuado con más energía, faltó propagandear más que los liceos iban a estar abiertos, se dijo pero no hubo un esfuerzo para que los chiquilines se presentaran, se creía que había clases", declaró a El País.

Agregó que "hay que apostar a quebrar la representatividad de estos dirigentes sindicales".

Para Mieres, la dirección sindical "está radicalizada" y "quiere perjudicar a la situación educativa del país. Son irresponsables y cada vez menos representativos de lo que piensa la mayoría de los docentes".

Firman protocolo por liceos
El jueves pasado terminó un paro que afectó durante cuatro días las clases en los liceos de Montevideo. La medida fue el disparador de la salida del presidente Mujica que se reunió ese día con las autoridades del Consejo de Secundaria (CES) y del Codicen. Al otro día el CES acordó con los sindicatos un protocolo para atender los problemas de infraestructura. Ese mismo día se firmaron compromisos con 12 liceos, entre ellos el 70 del Cerro que comenzará las obras luego de Semana Santa.
El País Digital

Lo que dijo Astori (dar clases abajo de un árbol)

 

“Hay una suerte de dictadura sindical en la enseñanza que perjudica a toda la sociedad”, insistió Larrañaga. “Eso es inaceptable, intolerable, y va mucho más allá de la calificación de izquierda infantil”, 

 Mujica y el gobierno le hacen el juego a la derecha. Alborozados festejan los ataques presidenciales a los sindicatos y van por más.

han dicho:"La oposición se comportó dando pleno respaldo a las afirmaciones de Mujica y Astori."

"Hablan de "dictadura" sindical a la que hay que "salir a trancar""

"Hay una suerte de dictadura sindical en la enseñanza que perjudica a toda la sociedad", insistió Larrañaga.

"Eso es inaceptable, intolerable, y va mucho más allá de la calificación de izquierda infantil", añadió, en referencia a lo manifestado por Mujica."

"Hay que terminar con la intolerancia de algún dirigente sindical que se cree propietario de la educación", reiteró Larrañaga."

A su vez, el senador José Amorín (Propuesta Batllista) manifestó que "hace tiempo que los sindicatos no representan a los trabajadores"

"Durante mucho tiempo la izquierda los utilizó como un apéndice del Frente Amplio."

"El presidente Mujica tiene el respaldo de la mayoría de la población para cumplir con los acuerdos concretos. Tiene que seguir hasta el final, lo vamos a respaldar si todos los pasos son para cumplir con los acuerdos", subrayó Amorín. "

"Agregó que el gobierno "tiene la obligación de hacer cumplir el orden. Rechazamos la violencia pero cuando no hay otra opción se debe apelar a estas cosas. Se debe impedir que sectores minoritarios tranquen el funcionamiento normal del Uruguay", destacó."

"el presidente del Partido Independiente, Pablo Mieres, fue categórico: "Apoyo lo que dijo Mujica, hay que salir a trancar este accionar sindical destructivo que está perjudicando aún más la educación pública. Se debió haber actuado con más energía"

"Agregó que "hay que apostar a quebrar la representatividad de estos dirigentes sindicales".

"Para Mieres, la dirección sindical "está radicalizada" y "quiere perjudicar a la situación educativa del país. Son irresponsables y cada vez menos representativos de lo que piensa la mayoría de los docentes". "

Lo dicho: LA DERECHA VA POR MÁS. 

Más que nada cuando Mujica les ofrece a los sindicatos en bandeja, eterna aspiración de la derecha. Incluso ellos mismos entienden que no es un problema con algunos"ultras" pro Cuba o pro Irán como acusó Mujica y tampoco un asunto de "infiltrados" tal cual sostuvo el Presidente. 

La derecha va al grano: quieren a los sindicatos, reventarlos, quebrarlos,romperlos, sacarles fuerza. El lenguaje empleado por estos "demócratas" que se hacen gárgaras con las libertades ciudadanas, no dejan lugar a dudas: "dictadura que hay que trancar", "terminar con la intolerancia (de los sindicalistas) que se creen propietarios de la educación" " HACE TIEMPO QUE LOS SINDICATOS NO REPRESENTAN A LOS TRABAJADORES" sin explicar cuanto tiempo hace y tampoco a quienes representan los sindicatos.

 "El presidente Mujica tiene el respaldo de la mayoría de la población" (¿estarán incluyendo a todo el Frente Amplio en esa mayoría ?) insistiendo: "tiene que seguir hasta el final" Mujica( "tiene la obligación de hacer cumplir el orden", "cuando no hay otra opción se debe apelar a estas cosas" ("estas cosas" son balas de goma, carros de asalto, represión, golpes y detenciones,pero no se animan a decir que están apoyando y llamando a la represión lisa y llana) y ya en el delirio total "hay que impedir que sectores minoritarios tranquen el funcionamiento normal del Uruguay" justamente cuando se trata de protestas por los partes del Uruguay que no funcionan, por ejemplo los servicios higíenicos en los liceos, o agua potable y electricidad, y como si -además- un modestísimo corte de calle paralizara Uruguay. 

Lo dicho: van por más. Esta gente es la que le aporto ideología a los milicos. El problema no eran los "sediciosos" el problema siempre han sido para la derecha: los sindicatos. 

Y en el entrevero hasta Mieres moja y para hacerse oír tiene que subir la apuesta represiva: "hay que salir a trancar este accionar sindical destructivo" (el mismo verso que los milicos, "destructivo") para a renglón seguido, ya parado en los pedales agregar: "Se debió haber actuado con más energía" (que quería, ¿ granadas de fragmentación ?) para culminar con la más cruda y deschavante revelación de intenciones: "hay que apostar a quebrar la representatividad de estos dirigentes sindicales" quebrar !, si esto no es declaración de guerra le anda muy cerca. 

Lo antes dicho: Mujica y el gobierno le hacen el juego a la derecha y más aun le han abierto todas las puertas y portones para lanzar en malón anti-sindical que con esas características hace mucho que no se veía en Uruguay. 

Infame !

del Colectivo Noticias Uruguayas