Los empresarios se quejan en el informe del BID, el BID los respalda y el gobierno progresista también. Confirmado: los trabajadores son atorrantes.
La baja productividad y los problemas de conducta son las principales causas de los despidos
La falta de hábito y compromiso con el trabajo, se ha transformado hoy día en una preocupación igual o más trascendente que la carencia de personal calificado para las nuevas vacantes que genera el mercado laboral uruguayo, según lo reconocen empresarios y el Poder Ejecutivo.
Esta semana, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) presentó en conjunto con el Ministerio de Trabajo la encuesta “Productividad y Formación de Recursos Humanos en Establecimientos”, donde se comprobó algunos indicios de esta nueva realidad del mercado. El asesor económico de la Cámara de Industrias (CIU), Sebastián Pérez, comentó ayer a El Observador que coincidía con el diagnóstico del BID que identifica a la falta de “habilidades blandas” (hábito, conducta, y compromiso con el trabajo) como las capacidades de los postulantes sobre las cuáles los empresarios están mostrando cada vez mayor preocupación. “Los industriales suelen quejarse de que no encuentran trabajadores con hábitos y rutinas de trabajo saludables”, afirmó.
En la misma línea, el director nacional de Empleo del Ministerio de Trabajo, Eduardo Pereyra, admitió que el gobierno “reconoce esta nueva realidad” y que está tratando de atender esta debilidad que denuncian los empresarios pero que también “asumen” los propios trabajadores.
De hecho, la encuesta del BID –que analizó un conjunto de más de 800 empresas de distintos sectores de actividad– arrojó que la razón principal de despido de un trabajador era la baja productividad y mal desempeño de la tarea (45%), seguido por problemas de conducta (27%).
“El empresario quiere que su empleado llegue en horario, que no tenga problemas de disciplina. En el caso de la industria, se requiere orden y limpieza, y consciencia de la seguridad, al igual que en la construcción”, apuntó Pérez de la CIU. Por ese motivo, indicó que cuando un empresario contrata a un trabajador y no cumple con estos “requisitos mínimos de compromiso con el trabajo” directamente opta por el despido porque “no tiene sentido” invertir para mejorar estas habilidades.
De hecho, la encuesta del BID señala que los empresarios están dispuestos a destinar recursos propios para capacitar a su personal pero en capacidades específicas de su empresa, de manera de asegurar que esa inversión no corra el riesgo que sea expropiada por otro empresario que se lleve a ese trabajador. Según explicó Pérez, en el caso de la industria en general, dado el déficit de los últimos años de personal calificado, “está acostumbrada” a contratar personal no calificado desde el punto de vista técnico. “Hoy el mayor problema no es que no sepa manejar la máquina porque eso se aprende en un período relativamente corto, sino que el trabajador vaya todos los días a su empleo y mantenga las condiciones mínimas de higiene personal”, alertó.
Efecto crisis
El director Nacional de Empleo dijo que una explicación posible a esta “carencia de compromiso” con el empleo debe estar fundada por el impacto de la crisis de 2002. “Pensamos que desde esa época (por la crisis) el trabajo fue perdiendo cierta centralidad en algunos sectores de la población”, admitió Pereyra.
Precisamente, el director de la consultora de Recursos Humanos Advice, Federico Muttoni, informó a El Observador que hay casos de empresas que se encontraron con trabajadores que completaban unos pocos jornales y luego renunciaban sin esgrimir razones fundamentadas. Por otro lado, dijo que también hay situaciones donde los postulantes piden trabajar en “negro” porque no quieren perder los planes de asistencia social que reciben del Ministerio de Desarrollo Social (Mides). Precisamente, la discusión de estos planes de asistencia social está en pleno debate en el seno del Poder Ejecutivo (ver página 4).
Rotación
Los empresarios no solamente deben lidiar con carencias en la formación básica a la hora de contratar a un trabajador, sino con la alta rotación de sus propios recursos humanos. De acuerdo a la encuesta del BID, el 57% de los empleados renuncia a su empleo en busca de una mejora de su salario.
Según explicó el director nacional de Empleo, esto obedece a que hoy en día un empleo no se considera “para toda la vida” como acontecía en el pasado. “Hay mucha rotación porque los trabajadores están tratando constantemente de sumar cursos de capacitación para mejorar en su empleo e ingresos”, señaló Pereyra. En ese sentido, citó como ejemplo el caso del medio rural, donde los empresarios se quejan porque los trabajadores emigran al rubro construcción.
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que trabajador se puede sentir incentivado a trabajar,cuando consciente o INCONSCIENTEMENTE sabe que es explotado,que produce mas de lo que necesita..que forma parte de una maquinaria infernal..que deja horas de su vida ,yo diria casi toda su vida en producir..que al cumplir con los requicitos empresariales (semiesclavitud) pierde TIEMPO (vida ),ocio,para VIVIR,recrearse,SER..se olvida en este informe de l BID,que los trabajores son humanos no maquinas.
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