Asesinado en Caracas

Este Uruguayo asesinado en Venezuela, era hermano del compañero Detenido-Desaparecido: Oscar Tassino Asyeazu secuestrado el día 19 de julio de 1977.
Su detención se produjo en aquel año, en la calle Máximo Tajes en horas de la mañana.
Fue sometido a una fuerte golpiza. Se lo vió en La Tablada, en dicho operativo de detención fue indentificado el oficial Ferrro, acompañado de su mujer. Este crimen sigue impune.
(Fuente A Todos Ellos).

La víctima salió a medianoche del club y fue secuestrado y golpeado

La zona fue acordonada por efectivos de Polisucre, mientras los del Cicpc levantaban el cuerpo (Fernando Sánchez)

Los investigadores del Cicpc no descartan ninguna hipótesis. La muerte del gerente general del Centro Uruguayo, Marcos Oswaldo Tassino Asteazu, de 67 años, está siendo estudiada minuciosamente, pues se sospecha que pudieron haber actuado funcionarios policiales.

Lo cierto es que cuatro sujetos lo interceptaron, a la medianoche de ayer, cuando circulaba en su vehículo por Los Cortijos, en compañía de su esposa Milagros Hanse.

Según destacó la fuente policial, la víctima salió del club luego de que culminara un campeonato nacional de tango.

Un funcionario de la Policía Metropolitana, que solía escoltarlo cuando salía tarde de la sede, lo acompañó hasta Los Cortijos. Allí fue sometido por los maleantes, quienes lo obligaron a retornar hasta la sede del club para poder gestar un robo masivo.

Las primeras investigaciones del Cicpc determinaron que los sujetos llegaron al club, uno de ellos se quedó con la esposa afuera mientras el resto ingresó con Tassino.

Bajo amenaza de muerte, le exigieron que abriera la caja fuerte para apoderarse del dinero en efectivo.

Al parecer, Tassino fue dominado por los nervios y no podía abrir la máquina. Ello generó ira en los delincuentes, quienes lo golpearon hasta causarle la muerte.

El hombre padecía del corazón y usaba marcapasos. Una de las versiones del hecho indica que falleció luego de un infarto, pues se le desprendió el marcapasos.

Cuando la víctima se desplomó, los maleantes aprovecharon para llevarse un televisor plasma, varios objetos de valor y el vehículo. El cadáver del gerente quedó en uno de los pasillos, cerca de los baños que comunican a la secretaría.

Empleados del centro, además de quienes acudieron al campeonato nacional de tango, manifestaron su indignación por el hecho, pues estiman que Tassino "era un hombre ejemplar y dedicado".

Por ahora los investigadores de la policía científica intentan dilucidar si funcionarios policiales están detrás del hecho.

El cadáver de Tassino fue retirado del lugar, luego de seis horas de espera.

Dejó tres hijos, y uno de ellos reside en Uruguay.

Según dijeron los policías, para el momento del asalto en el lugar había un vigilante privado. También será investigado.

"Tranquilidad perdida"

El Centro Uruguayo está ubicado en la segunda transversal de Los Castaños, en Los Chorros, frente a un vivero.

Dijeron residentes del lugar que la zona se presta para que los delincuentes actúen con frecuencia.

Explicaron que, después del mediodía, todos los días, el robo de celulares y ataques armados es severo, por lo que hacen un llamado a las policías para que hagan un patrullaje más constante. "Por aquí no se puede andar a ninguna hora. Parece mentira, pero los vecinos y quienes caminamos mucho, tememos ser otra víctima del hampa", dijo un residente.

MARTHA PASSEGGI.

Hermano de desaparecido

ÓSCAR TASSINO ASTEAZU nació en Montevideo el 16 de enero de 1937, casado y padre de tres hijos, empleado de UTE, dirigente sindical de su gremio y activo militante del Partido Comunista.
En la fecha que ocurre el secuestro de Tassino, su esposa se encontraba detenida.
Su detención se produce en el domicilio de amigos y compañeros de gremio, Hermes Fulle Fleitas y Ana Regnier de Fulle el 19 de julio de 1977 en horas de la mañana. Allí se había montado una guardia desde la madrugada. Fue sometido a una fuerte golpiza.
Otros presos que lo conocían, lo vieron en el centro de detención clandestino denominado “La Tablada”, en Montevideo. En el operativo de detención fue identificado el oficial Ferro, acompañado por una mujer.

Fulle Fleitas declara: “… el 19 de julio de 1977 irrumpieron en mi casa hombres de particular con armas diciendo “Somos de las Fuerzas Conjuntas, quedate quieto o te quemamos”. A eso de las 9 llegó Tassino, según habíamos convenido, quien fue tirado contra el piso, manoseado y golpeado. Se lo llevaron en un auto, tapándole la cabeza con una bufanda. Al que comandaba el operativo lo llamaban “Coronel” y entre ellos se llamaban “Oscar”. Junto a Tassino se llevaron a Martín Casco, quien llegó a mi casa minutos antes que él…”

En esos días es detenida y conducida al mismo lugar Graciela Salomón, quien relata que escuchó la voz de Tassino: “Después de algunos días de estar detenida y haber sido torturada, en determinado momento cuando me suben – la tortura se realizaba en un lugar al que se accedía por una escalera de mármol – hay un revuelo impresionante, hay una conmoción, gritos, corridas, etc. Entonces la persona que me estaba interrogando me dice: “Tené mucho cuidado, quedate quieta y no te saques la venda”. Esta persona sale y pregunta qué pasa; siguen gritos en determinado momento se oye: “¿Vos qué querías hacer, idiota? Recién te bajamos y ahora te tenemos que subir”. Oigo la voz de Tassino seguida por golpes impresionantes y en determinado momento siento como una cabeza que se rompe contra una pileta. Después un silencio total. Pregunto al que me interrogaba qué había pasado y me dice: “¿Ves?, ese no quería hablar; a vos te va a pasar lo mismo; ése no tiene más posibilidades”. A los dos o tres días, nos ponen unos ponchos, nos sientan a todos, sacan a la gente de plantón. En esas circunstancias llega alguien que supongo era uno de mayor jerarquía y ordena liberar a varios: “Hay que liberar. Tres muertos en quince días es demasiado”.

Ese oficial se refería a las muertes de Luis Eduardo Arigón, Oscar Tassino y Oscar Baliñas. Esta presunción cobra fuerza en tanto que efectivamente, varios detenidos en ese lugar son puestos en libertad con posterioridad a este incidente, entre ellos Graciela Salomón.

(Información tomada del libro “A todos ellos” de madres y familiares de detenidos desaparecidos)

Oscar Tassino sigue aún desaparecido. Faltan muchas respuestas todavía y la única vía de salida a este dilema es la obtención de la verdad y de la justicia.
Cuando la respuesta no llega, se prolonga una especie de culpa colectiva vivida de forma especialmente dolorosa.
Debe haber voluntad política clara y firme de los gobernantes, es necesario que den señales positivas en ese sentido y que pongan en marcha mecanismos más efectivos que incluyan una verdadera colaboración por parte de las Fuerzas Armadas.
Mas temprano que tarde, las sociedades progresan, la humanidad progresa, depende de todos y de todo lo que hagamos en tal sentido, por pequeño que sea.

De Marys Yic