Mientras tanto, dentro del barrio Marconi, algunos vecinos comentaban:
"Hay bronca con la Policía porque mataron a un tipo que no tenía nada
que ver. Que era malandra, era, no lo vamos a negar, pero en ese momento
no tenía nada que ver con lo que estaba pasando. Los canas lo mataron
mal", dijo un joven que no se identificó.
"Desobediencia civil" en el Marconi
El barrio Marconi se encuentra rodeado desde esta mañana por la Policía y un contingente del grupo GEO.
Dos taxis fueron robados y luego prendidos fuego, informó a Subrayado este mediodía, Óscar Dourado, presidente de la Gremial Única del Taxi. Hubo otros seis móviles apedreados. Uno de los conductores resultó herido.
"Lo que pasó en Marconi demuestra que estamos ante una nueva forma de vivir", se quejó Dourado. El dirigente de la patronal adelantó que en las próximas horas se reunirán con el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, para reclamarle mayores medidas de seguridad para el sector.
Por su parte, desde el Sindicato Único de Trabajadores del Taxi se aseguró a Subrayado que aguardarán la evolución del estado de salud del obrero herido y no descartan tomar medidas de fuerza.
La confrontación comenzó durante el fin de semana.
El domingo dos ladrones efectuaron una rapiña a una panadería ubicada en la calle Rancagua y Torricelli.
Un vecino de la zona alertó a los pocos minutos, que la moto en que llegaron los ladrones estaba en la esquina de Nogueira y Botaro.
Los móviles policiales se dirigieron a esa esquina y encontraron a ocho personas rodeando la moto. Les preguntaron quién era el propietario del vehículo, pero nadie se hizo cargo, por lo cual todos resultaron detenidos.
En ese momento, otras personas que estaban en el lugar comenzaron a apedrear y a disparar contra los policías, que repelieron el ataque con disparos. Allí resultaron politraumatizados tres policías.
Media hora más tarde de estos hechos, en la policlínica de Capitán Tula ingresó ya muerto un joven y proveniente del lugar de la balacera.
En el centro de salud se produjeron incidentes entre la Policía y los familiares del joven fallecido.
Fueron detenidas tres personas más por estos hechos.
La víctima fue identificada como Álvaro Nicolás Sosa Gutiérrez de 25 años, quien había estado en la cárcel por dos delitos de hurto especialmente agravado y uno de lesiones personales.
Desde Jefatura se investiga si la muerte fue resultado del tiroteo o se trató de un hecho aislado.
El joven vivía a media cuadra del incidente con la Policía. Su madre admitió que era adicto a la pasta base, pero dijo que anoche, cuando fue asesinado, estaba recolectando basura.
El joven fallecido en el enfrentamiento es velado desde las 13 horas en una sala municipal de la zona norte de Montevideo.
En barrio permanece con dos puntos de control policial, uno en Aparicio Saravia y San Martín y otro en Saravia y Mendoza con el propósito de parar vehículos y personas sospechosas.
Por la zona se puede circular libremente y en el interior del barrio no hay policías según pudo constatar Subrayado.
El jefe de Policía de Montevideo, Diego Fernández, calificó el episodio como de “grave desobediencia civil”. El jerarca mantuvo reuniones esta mañana con el jefe de Zona y con el comisario a cargo de la Seccional donde se produjeron los incidentes.
Por el caso hay once personas detenidas.
Subrayado 15.10.2012
Barrio Marconi sitiado por brote de violencia
Policía, con apoyo de grupos de choque especializados, como la Guardia Republicana, realizó esta mañana un patrullaje especial en los alrededores del barrio Marconi, donde ayer se registró un tiroteo entre uniformados y vecinos , que dejó como saldo tres policías con traumatismos varios y el fallecimiento, por impacto de bala, de un joven de 25 años.
Fuentes policiales confirmaron a EL PAÍS digital el operativo que comenzó esta mañana, horas después de los violentos incidentes en esa zona, luego que la Policía detuviera a ocho personas en el marco de una investigación por el asalto a una panadería ubicada en las calles Rancagua y Torricelli.
El Jefe de Policía de Montevideo, Diego Fernández, en declaraciones a radio Sarandí, indicó que se "produjeron algunos episodios de violencia ciudadana con ataques a la Policía" donde "incluso participaron algunos niños".
El jerarca policial indicó que en la noche de ayer "se produjo una serie de ataques a la propiedad privada. Incluso hay un taxi que fue incendiado. Cuando Bomberos y efectivos llegaron al lugar fueron atacados".
Según relató, ayer sobre las 19 horas un taximetrista dejó a unos pasajeros en San Martín y Aparicio Saravia. Cuando retomó la marcha fue abordado por un grupo de personas que lo obligaron a bajar del taxi a golpes. Luego robaron el vehículo y a las pocas cuadras lo prendieron fuego.
Más tarde otro trabajador pasó por la misma situación. "Dejó pasaje en Instrucciones y san Martín y se repitió la situación. Lo bajaron a golpes y prendieron fuego el vehículo en el lugar. Hay dos o tres autos más que fueron atacados con piedras pero los conductores no detuvieron la marcha", indicó Dourado.
Los trabajadores agredidos se encuentran en buen estado. "Uno de los conductores fue asistido por una familia de la zona que lo refugió en su casa. El trabajador llamó por teléfono para que lo fueran a buscar y no se podía ingresar a la zona. La situación de ayer fue muy complicada", explicó.
La patronal del taxi aún no ha logrado estimar el valor total de los daños. Sin embargo, Dourado señaló que los vehículos incendiados "quedaron destruidos. No hay posibilidad de hacer nada con ellos".
Leandro Palomeque, vocero del Departamento de Bomberos dijo a EL PAÍS digital que "ayer acudimos a dos incendios de vehículos en vía pública. Ambos en Aparicio Saravia y Jacinto Trápani uno a las 16:44 y otro a las 20:20. Cuando los móviles llegaron a Leandro Gómez efectivos policiales alertaron que no estaban las garantías para que ingresaran los bomberos".
EL PAÍS digital pudo comprobar que además que una camioneta particular fue incendiada.
La Policía colocó barricadas en varios puntos del conflictivo barrio.
La jefatura de Montevideo indicó en un comunicado que "ante esta
situación se estableció un cordón en la zona y se ingresó en conjunto
con el Regimiento de la Guardia Republicana para restablecer el orden,
donde a partir de ese momento no se han registrado más incidentes".
Respecto al joven fallecido, no se ha confirmado aún si el mismo había estado en la rapiña o en el posterior enfrentamiento con los uniformados. Diego Fernández indicó que también podría tratarse de un ajuste de cuentas en un hecho separado de los enfrentamientos entre vecinos y la Policía.
El País Digital 15.10.2012
El Marconi sitiado: 50 hombres, mujeres y niños agredieron a la Policía
El jefe de Policía de Montevideo dijo que hubo un "importante desborde civil"
La Policía cerró varias calles del Marconi donde se siguen sintiendo los ecos de la acción de una turba de vecinos que apedrearon a móviles policiales.
Los hechos comenzaron luego de una rapiña a una panadería de la zona, la Policía se dirigió al lugar y procedió a interrogar e identificar a posibles autores del delito.
En medio del operativo un grupo de vecinos atacó a los efectivos policiales, según declaró el jefe de Policía de Montevideo, Diego Fernández. El jerarca dijo en entrevista con radio Sarandí que se trató de un “desborde civil importante”, que contó con aproximadamente 50 personas, de “ambos sexos y todas las edades. Con mucha participación de niños”, según Fernández.
El ataque incluyo disparos entre delincuentes y policías. Un joven del barrio murió a causa de un disparo, pero no está claro si fue herido en el tiroteo con la Policía. Fernández sostuvo que están haciendo las averiguaciones correspondientes para determinar si fue así, pero que, por ejemplo, “a la misma hora, a cuatro cuadras del lugar, hubo un homicidio”. Ese otro hecho está prácticamente aclarado, dijo el jefe de Policía. Se trató de un joven ultimado por el padre de una muchacha que no quería que tuviera relaciones con el muchacho.
A modo de represalia, por lo que se cree fue una muerte injusta por parte de la Policía, se armo un grupo de represalia y se registraron ayer ataques a vehículos. Por ejemplo, un taxi fue rapiñado y prendido fuego. Cuando los Bomberos y la Policía quiso acceder al lugar, fueron atacados con piedras y tiros al aire, explicó Fernández.
Vecinos del lugar dijeron hace momentos que la Policía cerró varias calles y que por el lugar, conocidos delincuentes recorren la zona con chalecos antibalas y armados.
Los vecinos dicen que el joven fue ejecutado por la Policía, aunque en filas policiales se sospecha que fue abatido por un vecino.
Observador 15.10.2012
- TENSIÓN Y VERSIONES DISÍMILES
El Marconi parece "zona de guerra"
El velorio del joven, que murió este domingo, se realizará en una sala municipal de la zona
En el Marconi se vive un ambiente tenso y el comentario generalizado de los vecinos es que “parece una zona de guerra” luego que el fin de semana unos 50 vecinos la emprendieron contra la Policía que llegó al lugar luego de una rapiña a una panadería. Un joven resultó muerto en un tiroteo y los vecinos enardecidos incendiaron varios autos, entre ellos dos taxis.
Los accesos al barrio están cerrados por vallados policiales como ocurre en las esquinas de Aparicio Saravia y San Martín. Allí hay cuatro policías con chaleco antibalas y con casco haciendo guardia y un camión blindado de la Guardia Republicana.
En Aparicio Saravia y Mendoza hay otro vallado policial similar por un patrullero. Allí hay diez policías que además de chalecos antibalas y cascos utilizan escudos.
Los uniformados piden la cédula al todo persona que circula por allí.
En Aparicio Saravia y Trapani, a media cuadra de donde vivía el joven fallecido, hay cuatro autos que fueron incendiados en la tarde del domingo en represalia por la muerte de Álvaro Nicolás, de 25 años. Los autos incendiados fueron una camioneta, dos autos, y un taxi al que según relataron los vecinos “una bandita del barrio paró para robarle” y luego prendieron fuego.
Un grupo de vecinos estaban limpiando la calle y tiraba agua a los vehículos.
Una señora dijo a El Observador que están acostumbrados a los enfrentamientos con la Policía. Otra señora dijo que la policía “viene a meter lío para hacerse respetar”.
La familia del joven fallecido, Álvaro Nicolas, vive a media cuadra de allí. La madre del joven dijo que no estaba robando como dice la Policía, sino que estaba “requechando basura”. Aunque admitió que era fumador de pasta base no robaba, aseguró la mujer.
La mujer relató que lo alcanzó una bala en la espalda o en la nuca y que cuando cayó abatido “lo dejaron ahí tirado y se fueron”.
Otros familiares relataron que cuando la madre y la hermana se acercaron los uniformados las zarandearon y les gritaron “sucias”.
Además, dijo que le subió la presión a 24,11 y en la Policlínica del barrio no la atendieron, que la atendieron en la ambulancia. Según dijo la mujer, a las 13 horas van a poder ir a buscar el cuerpo, aunque no saben dónde está ahora. Como cerraron la calle el 405 esta desviado se quedaron sin ómnibus y se quejaban por ello.
Según la Policía, el joven muerto tiene antecedentes y su familia es conocida en el barrio. No aclararon si fue asesinado por una bala policial o por otro vecino, como se dijo en las primeras horas
.
“Acá está todo el cantegril”, dijeron en el entierro del joven asesinado en el Marconi
Unas 70 personas participaron del sepelio de Alejandro Sosa; vecinos aseguran que aunque fumaba pasta base, no robaba
Desgarrador testimonio de la madre del joven muerto en el Marconi
La mujer asegura que la Policía mató a su hijo y que los efectivos lo dejaron tirado en la calle "como un perro".
La madre del joven Álvaro Nicolás Sosa Gutiérrez dio su versión de lo sucedido en el barrio Marconi.
Admitió que su hijo, apodado “El bebe”, era adicto a la pasta base y había estado en la cárcel por el hurto de una moto y por una pelea barrial, pero el domingo no había hecho nada cuando fue baleado a media cuadra de su casa.
El joven de 25 años iba junto a su hermana caminando por la calle recolectando basura cuando cruzó la balacera y recibió un disparo que le ingresó por debajo de la axila y lo hirió mortalmente.
La mujer afirma que los efectivos policiales dejaron a su hijo tirado y no le prestaron asistencia.
Una persona que se trasladaba en un vehículo por el lugar fue quien trasladó al joven herido a la policlínica de Capitán Tula donde se constató el fallecimiento.
La madre asegura que hay testigos que afirman que fue la Policía la que disparó contra su hijo. Conmovida, la mujer dijo que fue destratada y golpeada por los efectivos cuando sufría una descompensación.
“Me gritaron sucia y me tiraron en el medio de la calle”, aseguró.
La mujer reveló que también su hija fue "arrastrada tirada del cabello" por la calle. Aseguró dijo que el joven vivía de lo que recolectaba de la basura y que no molestaba a nadie.
Ante la Justicia. Los cinco policías de la Seccional 12ª comparecen ante la Justicia por la muerte del joven en el Marconi.
El juez Nelson Dos Santos toma declaración a los uniformados para determinar las circunstancias en que Álvaro Nicolás Sosa Gutiérrez recibió un disparo mortal.
También quedaron emplazados nueve civiles para declarar ante el magistrado.
Unos 30 policías siguen rodeado en barrio y dos camionetas patrullan sus calles.
Detrás de las detenciones, hay muchos secretos para develar. Se trata de elementos que fueron parte de los incidentes ocurridos el fin de semana.
Según los vecinos, estos enfrentamientos vienen de tiempo atrás y tienen como telón de fondo el accionar de cárteles de la droga.
La semana pasada, un tiroteo con la Policía determinó la muerte de Néstor Silva, de 29 años. El ataque a Sosa fue la gota que rebalsó el vaso.
Silva murió desangrado sin que nadie investigara las circunstancias de su fallecimiento.
Ahora el juez Dos santos deberá determinar si uno de los cinco agentes fue quien disparó y mató a Álvaro Sosa, de 25 años.
Su muerte generó una gran indignación en el barrio, porque al parecer no tuvo nada que ver con la rapiña a la panadería que dio origen a los incidentes.
Taxistas. La Gremial Única del Taxi se reunió en la tarde de este martes con el jefe de Policía de Montevideo, Diego Fernández, quien le aseguró a la patronal que la presencia de efectivos será constante en zona del barrio Marconi para brindar seguridad a los trabajadores del volante y a los vecinos.
Fernández remarcó que los patrullajes policiales se intensificarán en las zonas de la capital consideradas de alto riesgo.
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