Aproximadamente veinte años atrás, hubo un gran revuelo con los vendedores ambulantes –bagayeros- que “molestaban” en el radio céntrico. Hubo iniciativas del entonces intendente, de los grupos de presión, de los ediles, etc. buscando “ordenar” un fenómeno que conmovía a nuestra sociedad., especialmente por los reclamos del Centro Comercial. Fue en esos tiempos – previo pasaje por el predio donde se erige la Universidad, en que se creó el “bagayoping”, verdadera “carta de presentación” para los viajeros y turistas que arriban a Salto desde el sur.
La legislación vigente autoriza a cruzar por los pasos fronterizos una determinada cantidad de bienes- sin fines comerciales- algo de 150 dólares, así como monedas y valores hasta determinados montos, sin necesidad de declaración previa.
En aquella circunstancias –así como ahora- se sabía que ese no era el caso de los “comerciantes informales” Era y es gente que compra y vende mercadería, la mayoría de las veces en pequeños volúmenes, comercializándolas muchos veces en el propio comercio minorista del barrio….y como sucede en otras áreas, son contados los que “hacen plata” con esto.
Basta ver la “composición socio económica” de los bolseros, su origen absolutamente barrial, para inferir que tras este fenómeno hay otras raíces que no se ven (o no se quieren ver) En aquella “movida” de los años noventa, pude captar en persona (era Secretario de Bancada – ojo, gratis, no rentado -por las dudas) las evaluaciones de los ediles -de todos los partidos – cuyo eje centraba el análisis en los posibles mas de veinte mil votos en disputa en esos sectores sociales.
Esa “varita mágica” determinó un “acuerdo beneficioso” para “las partes” creándose los famosos “puestos” alrededor de la cancha de Ferro y la feria dominical en la plaza de deportes.
No conozco estudios serios e imparciales de la cuantificación de la probable incidencia negativa de estas actividades, tanto en el comercio local, como en las rentas públicas.
En el primer caso hay que tener en cuenta que desde los tiempos citados al principio, hasta hoy, se instalaron en la ciudad dos cadenas de supermercados, Tata , con dos inmensos locales, Multiahorro, El Revoltijo en el centro, Súper Salto, El Trébol ( uno y dos) además de muchos nuevos comercios barriales, varias distribuidoras y numerosos negociosos de vestimenta y servicios financieros, así como el propio Shopping Terminal. Se registra una importante llegada de inversiones en hotelería y gastronomía que también forman parte de cadenas (al menos nacionales, mas alguna extranjera) sin contar con el aumento de todo tipo de servicios en los centros termales.
Habría que agregar muchos nuevos rubros ligados a los servicios, el crecimiento explosivo del sector comunicaciones, del sector inmobiliario, de los servicios privados en educación, de los transportes ( donde en el transporte interdepartamental de pasajeros dos empresas ejercen un verdadero monopolio, sustituyendo a la vieja Onda) Y habría mucho mas…., por ejemplo las veterinarias, remates ganaderos, venta de vehículos (el boom de las motos chinas) autos, celulares, computadoras, repuestos e insumos, barracas ,etc.
La primera conclusión que surge es:
Al comercio local no le ha ido tan mal en estos años.
La segunda (puede en mi caso ser una omisión o simple desconocimiento); Salta a la vista la escasa proporción de emprendimientos en la producción, comparados con el comercio y los servicios.
Como ejemplo basta decir que de los cuatro o cinco establecimientos dedicados a la avicultura ubicados en los alrededores…hoy se sostiene, sobreviviendo, solamente uno. (Y pollos o huevos no se traen de contrabando, sino que llegan desde otras regiones del país con “ventajas comparativas” y producción a escala) Solamente se pueden apreciar algunos emprendimientos aislados como el cultivo de olivares en la ruta 3 próximo a la entrada a Colonia Garibaldi, la expansión de los cultivos bajo invernáculos y la implantación de la nueva generadora de energía fotovoltaica con capitales japoneses en la zona de Salto Grande.
Pero pongámonos de acuerdo…. La política económica en nuestro país no ha sufrido cambios radicales, profundos, en ninguno de los gobiernos democráticos. Los tibios intentos de la izquierda, no han tocado la matriz esencial, de economía abierta, exportadora de comoditys (o agroexportadora) con escaso valor agregado (léase con trabajo uruguayo incorporado, con salarios y beneficios para mas gente y no solamente para los dueños de las vaquitas, de la soja o la madera) lo que ha conducido -y conducirá inevitablemente siempre- a la reproducción de la pobreza, al aumento comprobado de la brecha entre ricos y pobres, aunque el porcentaje de situaciones extremas de miseria se haya reducido a través de planes asistenciales
Y si se trata de una economía abierta, exportadora, también es -debe serlo, “no tiene otra”- una economía importadora. Porque existe una balanza de pagos y una balanza comercial equilibrada, aunque en los últimos lustros afortunadamente haya dejado de ser desfavorable y generar déficit. Pero además porque debe permitir las importaciones con absoluta libertad comercial, algo que la clase política montevideana (de todos los pelos) llama ostentosamente “la inserción del Uruguay en el mundo” Tristemente podríamos decir que somos cada vez mas orientales, andamos vestidos de chino, con calzados chinos, frazadas, sábanas, juguetes …hasta las navidades son chinas…
¡Cuánto facturarán en las fiestas tradicionales los orientales( de oriente) solo con los cohetes que tira cada familia “oriental”!
Esa apertura total nos ha creado una incomodísima situación en el MERCOSUR.
Por más que nuestros genios montevideanos (…de todos los pelos, por las dudas) despotriquen contra Cristina, Vilma, o el gobierno de Venezuela…contra el atraso cambiario (aunque se cuiden mucho de mencionar “la frutillita” del secreto bancario) sin dudas estamos desaprovechando LA OPORTUNIDAD casi única de INTEGRARNOS con las economías de mayor crecimiento mundial de los últimos años.
Lo dijo Astori (creo que se le escapó) en su reciente visita a Salto. Más o menos dijo: “El gobierno argentino cuida sus trabajadores, su producción…”
¡y bueno don Danilo, deje de criticar a “la vieja” haga callar a los que dicen tanta pavada y hacen toda clase de provocaciones…y cópiela, imítela, no es pecado!
¡Ponga aranceles a las importaciones suntuarias, “oriente” la inversión a la producción y el consumo nacional a través de retenciones a la mera exportación de productos vírgenes…”en bruto”!
¡Subsidie la canasta familiar de la mayoría en productos esenciales, para que la gente coma bien en un país productor de alimentos!
Ya lo hizo Batlle Berres en la década del 50 ¡y no se murió nadie por eso! Le ruego que suspenda el concepto frío de la macroeconomía con sus “brillantes resultados” por un lado, y la gente por el otro!
¡…no existe desarrollo sustentable sin beneficios para la gente…de existir ¡para que sirviera!
Por favor ¡pare la extracción de recursos vitales a precios de ganga, que compromete a las generaciones que vendrán, dejándoles un páramo donde fue un vergel…un hueco enorme contaminado, donde había vida, plantas, animales!
¡Frene la megaminería, los monocultivos que destrozan la tierra por lo que nos putearan nuestros tataranietos! ¡Pare la exportación de troncos…solo eso, pues aunque arruinen los suelos y destrocen las rutas y enriquezcan a un usuario de tierras vitales…solo exportamos troncos (nada…nada mas) hasta el portón de entrada de la tristemente célebre Botnia-UPM, ya que en la entrada de esa Zona Franca se termina nuestra soberanía!
¡Deje de permitir que se le mienta al pueblo! Repitiendo desde que están en el gobierno…”que Argentina aquello, que Argentina lo otro”!...”¡que ya tienen papeleras, extracciones dañinas de recursos naturales, megaminería, monocultivos como la soja, etc.!”
Aunque esto sea así, sea cierto…y su pueblo esté en guardia, preocupado, movilizado, organizado, consciente y participativo.
Lo que no es cierto es que a estos hechos consumados los hayan promovido “l El tuerto y la vieja” (para utilizar un lenguaje académico, como a usted le gusta) Todos nuestros “dirigentes”, todas las emisoras de TV, diarios y radios, saben que esto es una pesada herencia del “turco” Menem y Cavalho.
Y saben también que estos dos últimos gobiernos solo han intentado frenar la avalancha, minimizar los daños y reorientar la economía y la producción en beneficio de su gente y de su país (como usted bien lo ha afirmado en su reciente visita a Salto)
¿O por qué cree que el “conflicto del campo” en el país vecino fue una verdadera guerra de clases azuzada por los medios de comunicación corporativos?
¿Por qué cree que los mismos sectores que manifiestan tanto odio a la Señora Cristina Fernández, Presidente de la República Argentina, son los que manifiestamente deseaban… ¡y aplaudieron y festejaron!... la muerte del ex Presidente de Venezuela Hugo Chaves?
¿Porque la mentirosa campaña mediática machaca y machaca, sino por que estos gobiernos han afectado poderosos intereses (sin patria, ni pueblo…la economía por un lado y la gente por el otro) en beneficio de las mayorías postergadas por generaciones, con medidas sencillas pero firmes?
Mientras tanto les sugiero que piensen en grande, que dejen el manual de Adam Smith y David Ricardo y comprendan que en nuestra América se vive una nueva realidad….que no solo es posible integrarse, sino que es imprescindible, so pena de consolidar el proyecto de Lord Ponsomby, convirtiéndonos en un enclave neo colonial contrario a la integración y al servicio de potencias extranjeras… ¡con un gobierno de izquierda!
Pero: ¿que tiene que ver todo esto con “los bagayeros”? …todo, porque son problemas estructurales, que se van a repetir una, mil veces.
Soñemos, no cuesta nada Soñemos por un momento que en el litoral hay mas puentes y menos trabas.
Que –como sucede en Europa- saludamos a los funcionarios al cruzar la FRONTERA…si tenemos ganas. Que no hay terribles demoras y trabas burocráticas y los turistas no jurarán ¡no venir nunca más!
Que acá en Salto y Concordia hay puentes vecinales en los que la gente puede cruzar a pie, en bici…o en lo que sea. Que como en la frontera con Brasil la gente vaya (y venga) a comprar, almorzar, cenar, al baile, al futbol, al basquetbol, a las carreras, al médico, al oculista, al carnaval…etc., etc., etc.
¿Qué puede perder el comercio local?
Es seguro que en pocos días se equilibra naturalmente la situación, se adapta a nuevas demandas y se beneficia con un nuevo y amplio mercado.
Pero fundamentalmente se termina el negocio, con solo trasladar las aduanas a las rutas nacionales…
…claro, en Montevideo capaz que no les importa y desconocen nuestra realidad…sobre todo teniendo en cuenta que el puerto, es la gran ventaja con respecto al resto del país, que su actividad genera una desigualdad monstruosa de ingreso respecto a las demás regiones...y que seguramente habrán demasiados intereses de que la cosa siga así.
Queda demostrado en las infelices declaraciones del Ingeniero Agazi: “¡…que busquen un trabajo!”
Los “bagayeros” son de todos los barrios, muchos de ellos son de Barrio Artigas, Uruguay, Nuevo Uruguay.
La mayor fuente de trabajo en esa zona es en la naranja…poda, carpida, cosecha. ¿Sabe cuanto es el jornal en una comparsa tercerizada…casi sin garantías para el peón, el señor ingeniero? ... $ 260. ¡Doscientos sesenta pesos!
¿Y con eso quien puede vivir si no agrega el “rebusque” de cruzar a Concordia a buscar un surtido?
Pero eso no es lo más importante.
Lo importante es la hipocresía filosófica o la hipócrita filosofía, mas bien la contradicción de su filosofía liberal, o neoliberal. Pues en una economía abierta, de mercado, no puede haber las trabas que hay a la libre circulación de bienes y servicios, personas y capitales.
Quizá este tema es “un fierro caliente” para el gobierno. Me consta haber escuchado a casi todo “el espectro político” hablar de “las bondades del libre comercio”, incluyendo a algún marxista.
Creo que no basta reprimir, prohibir…sobre todo dictando desde un escritorio en Montevideo ¿…hasta cuando? ¿Que hacer?
(No se asuste que el pelao ta muerto)
Habría que “pensar en grande”, en la posibilidad de aplicar un sistema similar al de “la frontera seca” con Brasil.
En muchas ocasiones he meditado en los porque. ¿Porque la prensa sistemáticamente ataca al gobierno y al pueblo argentino?
¿Por qué, para los montevideanos- especialmente para los comerciantes y sus voceros (de los que lamentablemente se hace eco la población, incluso la “ilustrada militancia”) Buenos Aires tiene la peor gente del mundo…?
¿Por qué? ¿Porque Brasil que nos sigue ocupando un pedazo de territorio, (el que está entre Artigas y Rivera, atrás del monumento a Aparicio en Masoller)… es “el bueno”, el serio, confiable y Argentina es la “inestable, tormentosa” y mil calificativos mas que nuestros propios presidentes se encargan irresponsablemente de difundir al mundo?
Esa misma Argentina que alberga a cientos de miles de orientales sin la mínima discriminación.
La misma Argentina que guarda silencio ante nuestros exabruptos, tragándose su justa indignación en interés de construir todos los días y a pesar de los Batlle, los Mujica y los Vázquez, la Patria Grande.
. O esa Entre Ríos que ampara, da trabajo, acepta y cobija a decenas de miles de litoraleños…
¿Por qué?
¿Será por el puerto, por una mera competencia económica entre puertos, que muchas veces nos hizo asumir el papel de alcahuetes, asociados a las potencias de turno?
Mientras tanto “el problema estructural de los kileros”, -como dijera el poeta - de las cárceles desbordadas, de la gente revolviendo la basura, subsistirá para que se luzcan nuestros genios en las campañas electorales (Por si “los compañeros” “ se olvidaron” el territorio delimitado dentro de los Limites Contestados con Brasil, abarca miles de hectáreas en el extremo noreste del departamento de Artigas)
Sergio Cunha – Salto- 17 de abril de 2013
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