Estado tapón o estado ratón?

por Hugo Bruschi      en el AÑO DE LA DIGNIDAD.




          Cuando al fin pudimos liberarnos de aquel triste status que nos otorgaron los ingleses, transitamos algunas décadas con un perfil, que sin ser demasiado original, por lo menos delataba la intención de un camino propio. Nuestra posición geográfica no la podemos alterar, ni para bien ni para mal. Pero sí podemos hacernos respetar y no por la fuerza precisamente. No tenemos estatura para ser matones. Lamentablemente aún queda mucha gente que sigue sin entenderlo. Ubicados entre dos colosos, siempre estaremos de algún modo siendo beneficiados o perjudicados, por medidas que aquellos puedan tomar. Medidas que están en su legítimo derecho de ser aplicadas, cuando de la defensa de sus intereses se trate. O es que acaso estos paises tendrán que pedirnos permiso? Bueno, a juzgar por la prédica volcada al Pueblo uruguayo por nuestros gobernantes, pareciera que sí, pues ya no hay medida que el gobierno argentino lleve adelante, que no esté destinada a perjudicarnos....

Esa es la explicación que desde el gobierno merecen estos fracasos, que día a día nos confirman que el camino elegido por nuestros representantes, no conduce sino al aislamiento y revela además la precariedad de nuestra economía que no responde a los intereses nacionales, sino a una imposición extranjera.

Cuando no son los dólares que Argentina controla, son el Puerto, cuando no los turistas que no vienen, a causa de las devaluaciones. Nunca jamás, porque los comerciantes tienen los precios más altos del continente, tratando de hacer la "suya" en tres meses. Uno se pregunta: tendrá Argentina que consultarnos antes de tomar una medida, tendrán que agregar a su gabinete un ministerio llamado "Ministerio del Uruguay"? Desde cuando Argentina debe cargar con la responsabilidad de un hijo discapacitado, cuya paternidad no reclamó jamás? Tendrán que llevarnos a pulso? Aquí correspondería decirles a estos señores como en el tango: "buscate un changador pa`  que te cargue" o de lo contrario "andá a pedirle a UPM que te arregle los problemas. Y bien merecido que lo tendrían. O creen acaso los integrantes del Partido único, que podrán amedrentar a un pais 15 veces más grande diciendo "que hay que ponerlos en su lugar o que les haremos sentir el rigor"? Estas cosas sólo se pueden decir, cuando el espíritu que las anima es la división, tratando de dar por tierra cualquier intento - aún con dificultades y carencias - de integración.  A donde piensan que llegarán jugando al viejo y conocido chantagismo, de que si me va mal aquí me cruzo a la vereda de enfrente? Argentina y Brasil ya los conocen, por tanto están perdiendo el tiempo. Pero estas no son casualidades ni nacen de la nada. Minutos antes de subir al avión que lo llevaría de regreso, George Bush dijo que "Uruguay tendría un papel muy importante a jugar en el cono sur". Cual sería ese papel, acaso del del Israel sudamericano?

Y cuando se ven con el agua al cuello, apuestan a papeles que van desde el matón que mete "pechera", al papel de víctimas agredidas, olvidándose de un principio elemental aprendido en el Martín Fierro: "los hermanos sean unidos, porque esa es la ley primera". Confundieron a sus hermanos y creyeron que hablaban en Inglés. Juegan a los TCL y a las Alianzas del Pacífico, para alegría del amo imperial. Apuestan a las multinacionales del saqueo y la depredación, antes que a las relaciones con Argentina. Le otorgan permiso a una pastera - violando incluso compromisos - para aumentar su producción y envenenar más y mejor el Río Uruguay. Insultan a gobernantes alguno incluso ya fallecido y luego creen que esas "salidas" festejadas por sus alcahuetes, no le pasarán factura. Pero curiosamente, nunca lo oimos decir nada de Obama y sus crímenes, ni de Rockefeller. Esos son símbolo de admniración para este presidente. Ni siquiera cuando las famosas escuchas realizadas contra gobiernos y gobernantes. Allí se limitó a decir "que sería una pérdida de tiempo eschuchar a los gobernantes uruguayos" y tal vez tenga razón. A los esclavos vocacionales, los amos no necesitan vigilarlos pues ellos saben que cuanto más los humilllen, más fieles permanecerán. En una palabra, ellos creen que con el gobierno argentino, ellos pueden hacer lo que con el Pueblo uruguayo. 

Ellos creen que en las relaciones internacionales, también puede funcionar el idioma casero de "como te digo una cosa, te digo la otra". Y ese es su gran error, pues no serán alentando falsos sentimientos chauvinistas, en su mejor versión patriotera, que logremos un entendimiento sobre los problemas que las medidas Argentinas nos pudieran acarrear. No será recibiendo barcos de las Malvinas, que nos acercaremos a la verdadera solidaridad con la demanda Argentina sobre estas islas robadas en 1833 por colonialismo británico. No será aceptando una invitación de la embajada colonialista a visitar "sus feudos", que lograremos afianzar los lazos de hermandad con la hermana república. Pero no somos ingenuos, sabemos que esta gente está haciendo los deberes y ellos no pasan precisamente por la integración. Y si hacen buena letra, es para seguir recibiendo algunas donaciones en dólares, como lo hacen con Venezuela. Y esta nación les sigue dando algunas facilidades, porque los conoce y prefieren tenerlos cerca y nunca darles la espalda. Y si no recuerden el episodio registrado cuando se discutía el ingreso de Venezuela al Mercosur. Salieron de Montevideo, Mujica, Almagro y alguno más, dispuestos a negarle el voto a Venezuela y sólo la enérgica posición de Argentina y Brasil, los obligó a votar a favor. El propio Astori asombrado, dijo "esto no es lo que discutimos". Verguenza tendría que darles a estos gobernantes, cuando un gobierno como el argentino, que jamás posó de ex-guerrillero ni mostró tantos o cuantos plomos, hoy están juzgando crímenes de lesa humanidad, mientras aquí los defienden disimulándolos de delitos comunes. 

Verguenza tendría que darles a los que ordeñan tantos o cuantos años de presos con la intención de juntar votos y asegurarse una banca bien paga. Y haciendo todo lo contrario, de lo que ayer decían combatir, es decir al servicio de las peores causas. Ahora apelan al triste papel de niño malo del barrio, que provoca respaldado en el hermano mayor que llegará en su ayuda o a la exaltación de falsos valores, que llevan a las comparsas alquiladas con promesas, a gritar "tenemos la mejor pastera del mundo" o ahora "la regasificadora flotante más grande del mundo", en esta especie de nacionalismo al revés, que nos lleva a ver como nuestro, un emprendimiento extranjero. Esta gente carece de principios, para ellos todo gira en torno a los dólares sin importarles a que precio. 
Ignoran que se puede ser chico y se puede ser digno. De este modo estarán eligiendo como quieren ser tratados, si con respeto o con recelo, si con admiración o con desprecio. Pero esta gente ha confundido políticas de uso doméstico cual un piyama, con política exterior, allí donde los principios hablan de un país, principios inalterables y jamás sujetos a descuento, como lo son la No intervención y la Auto determinación de los Pueblos. Principios incluso puntuales al momento de la fundación del FA, pero para nuestra verguenza, abandonados en Haití y en el Congo por un puñado de dólares. Principios que hablan de una soberanía abandonada en la firma de tratados militares con el enemigo del mundo. O de la entrega de nuestros recursos naturales. Por ello antes de enjuiciar a otros países, por haber tomado medidas que consideran imprescindibles para defender sus economías, tratemos de mirarnos a la cara sin sentir verguenza pero buscando una salida digna a nuestros males, despojándonos de ese complejo de ratón esperando lo que cae de la mesa, para salir a buscar nuestro propio destino en un marco de integración seria. Tal vez entonces, comiencen a respetarnos. Tal vez entonces mereceremos ser respetados.

07.02.2014,

Un kilo y medio de sebo necesitó Mario San Martín, fumigador con 25 años en el rubro, para matar a la invasión más grande de ratas que vio en la costa de Canelones este verano. “Lo normal es que se mueran con unos gramos”, explicó a El Observador. La plaga que atemorizó a una anciana del balneario Villa Argentina le hizo caer en la cuenta al trabajador de que ésta no es una zafra común y corriente.
La temporada de cría de estos roedores ocurre entre octubre y noviembre. El calor del verano las obliga a abandonar las madrigueras y, por lo tanto, es “normal” que aumente el trabajo de las empresas de control de plagas. Pero la característica de este verano,  es que la mayoría de los llamados proviene de casas ubicadas entre los kilómetros 22 y 26 de Ciudad de la Costa, entre Lagomar y Solymar.
“En promedio atendemos 15 llamados de esa zona por día; antes teníamos dos en todo el departamento”, dijo San Martín, responsable de la empresa Fumiplaga de Las Toscas. Otros cinco llamados provienen de otros puntos de la costa. Una desrratización cuesta entre $ 2.500 y $ 3.500.
Fumigadores de la zona consultados por El Observador coincidieron en que otro factor cooperó en que los roedores salieran a la superficie: las remociones de tierra realizadas por las obras de saneamiento, drenaje pluvial y vialidad que se realizaron el año pasado y ahora están detenidas.
A esto se sumó una semana sin recolección de basura (un festín para los roedores) y las altas precipitaciones de este verano. “Al remover la tierra, las ratas se sienten atacadas y buscan nuevos hábitat”, explicó San Martín.
Horacio Rivera, de Integral House, agregó que el combo de lluvias y ventanas abiertas las lleva a buscar refugio dentro de las casas al tiempo que las elevadas temperaturas aceleran su reproducción. Su empresa recibió en enero 40 llamados por roedores en toda la costa.
Dos focos que atraen a las ratas son los terrenos baldíos linderos y las casas abandonadas. También prefieren los cielorrasos (como ocurrió en la casa de Villa Argentina), pilas de leña, chatarra y motores de heladeras.
No obstante, Leonardo Herou, director de Gestión Ambiental de la Comuna Canaria, informó que no ha aumentado el número de solicitudes de control de plagas y vectores; pero El Observador constató con las empresas y con los propios vecinos que estos optan por llamar directamente a un privado porque la atención municipal se retrasa, o no acaba con la plaga.
Enemigo invisible
El contacto con las empresas ocurre tras escuchar ruidos en la noche, o tras un avistamiento, en particular, de las crías que, según explicaron a El Observador, no tienen la misma actitud sigilosa de los ejemplares adultos. “La rata es un enemigo invisible y muy peligroso. La gente convive con ella y no sabe”, apuntó el técnico de Fumiplaga.
Las ratas pueden transmitir leptospirosis, una enfermedad parecida a una hepatitis pero con un riesgo mayor, además de varias infecciones cutáneas. La prevalencia de la leptospirosis en el país está subvalorada puesto que puede confundirse con un cuadro gripal.
Otro elemento es la disponibilidad de alimentos. Un contenedor desbordado, o con basura alrededor, o hasta la comida del perro al aire libre, atrae a las ratas. “Lo primero que hay que prever en un control de desrratización es no dejar ni comida ni agua a disposición de las ratas. [Con los contenedores] hacemos lo que no hay que hacer”, agregó un fumigador que prefirió no dar su nombre.
Las especies más comunes vistas en Ciudad de la Costa son la rata negra y la rata marrón. La primera vive en el monte; la segunda prefiere entrar a los hogares como la casa de la anciana de Villa Argentina. “Se comieron kilos y kilos de sebo”, ilustró San Martín.
El sebo produce un efecto de saciedad en las ratas. Recién al tercer día empiezan a morir los primeros ejemplares, entre ellos, el líder de la comunidad. El resto deja de comer por temor y muere de hambre y sed. Cuando ocurrió esto, la anciana llamó de nuevo a Fumiplaga porque “empezaron a caer gusanos del techo”. 
La población de ratas no es cuantificable. A nivel internacional se calcula que hay de cinco a siete ratas por cada persona. Si esto se traslada, por ejemplo, a Montevideo, la cantidad de ratas es más de dos veces la población de todo el país.






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