viernes, 22 de marzo de 2013

De la cloaca a la cárcel privada

Ex presos gordos



Jueves 21 de marzo de 2013
Derechos Humanos 
Denuncian que desde 2009 no hubo avances en el sistema carcelario uruguayo
El ex relator de las Naciones Unidas y experto en Derechos Humanos, Manfred Nowak, que ha hecho el seguimiento de la situación de las cárceles en el Uruguay, afirmó que desde su visita en 2009 no ha habido avances en las condiciones que se encuentran los reclusos.

El mantenimiento todavía hoy, de los presos que tienen condena, con aquellos que están con detención preventiva, todos en los mismos celdarios, es el foco principal de los problemas, según dijo el especialista, que está participando de la conferencia “Detección preventiva, situación actual y propuestas de cambio”, que se cumple en Montevideo. Nowak dijo que “se están violando el derecho a la presunción de la inocencia: la prisión preventiva debería ser la excepción y no la regla”, enfatizó.
Recordó que los dos últimos presidentes uruguayos se comprometieron ante las Naciones Unidas a cumplir con las reformas, pero aunque el proyecto “es excelente” los avances no se verifican.

El gran misterio de la “voluntad política”

Según  declaró Nowak a radio Uruguay del SODRE, todos los actores del tema son contestes en la realización de los cambios imprescindibles. Remarcó haber hallado eco positivo tanto en el oficialismo como en todos los sectores de la oposición. “Todos coinciden en la necesidad de proyectos de cambio. No sé donde está la falta de voluntad política para que se concreten”, se cuestionó.
El abogado dijo que tanto Vázquez como Mujica se comprometieron con él para cumplir las recomendaciones hechas en 2009, que incluían la reforma del Proceso Penal, “pero está estancada en el Parlamento y tampoco tuvo avance. Me reuní con el minstro del Interior, con el Fiscal General, con diputados, senadores, todos están interesados en el tema, no sé donde está la falta de voluntad política pero todo esto es fundamental si se quiere cambiar el sistema penitenciario”.
Reconoció avances “en los síntomas” por el aumento de funcionarios civiles en las cárceles y el cierre de algunos módulos de detención “pero es un proceso muy gradual, muy lento y que no trata las causas” remarcó. “Cuando vine por última vez había unos 9.000 presos, ahora se está llegando a los 10.000, pero el 60%-70% sigue sin condena”, señaló.

La situación carcelaria está en grave crisis


Jueves 21.03.2013
Condiciones de detención son un escándalo, según exrelator .


El exrelator contra la tortura de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Manfred Nowak, volvió a criticar duramente el sistema penitenciario uruguayo. "Dos presidentes consecutivos se comprometieron conmigo a realizar una reforma estructural del sistema de justicia penal pero no ha habido avances", aseguró.
Nowak comentó que se reunió ayer con el ministro del Interior Eduardo Bonomi, con fiscales y legisladores. "Todos se mostraron interesados. No sé bien donde está la falta de voluntad política", comentó desorientado y dijo que si bien se han registrado avances en cuanto a los síntomas, como el traslado gradual de la administración penitenciaria de personal policial a civil, la construcción de nuevos centros, el cerrar las latas y algunos módulos en el Comcar, no se solucionan las causas raíz".
"Cuando vine en 2009 había unos 8.000 privados de libertad, el año pasado había 9.000 y este año alcanzan los 10.000. El porcentaje de presos sin condena están entre el 60% y 70%. Entonces no es una cuestión de seguir construyendo plazas sino que es necesario bajar el número de presos", aseguró.
Criticó también que no se separe a los presos preventivos de los condenados lo que, a su entender, viola el derecho a la presunción de inocencia. Según Nowak, la prisión preventiva debería de ser "la excepción y no la regla". "Uruguay tienen un sistema de justicia penal autoritario que nos recuerda mucho a la dictadura. Estas condiciones de detención para Uruguay son un escándalo porque es de los países con un desarrollo más alto en América Latina", afirmó.
La cárcel de Punta de Rieles fue para lo único que el exrelator tuvo palabras de elogio por ser un centro de reclusión que funciona con una filosofía de rehabilitación y que hace la separación de reclusos.
"Si uno desarrolla un sistema penitenciario que esté basado en la rehabilitación esta constituyendo a bajar la delincuencia. Quienes buscan bajar la tasa de delincuencia deberían apostar a un sistema que rehabilite", recomendó.
En 2009, Nowak visitó Uruguay e hizo un informe muy crítico sobre el sistema penitenciario uruguayo y dijo que las condiciones "eran malas, con celdas oscuras, húmedas e inmundas, algunas de las cuales se encontraban en estado deplorable".
El País Digital

Las cárceles del neoliberalismo

Las cárceles son espacios de castigo pero también lo son de impunidad, esto las convierte en instituciones inhumanas e injustas por su significancia. Mientras se intenta demostrar que son dispositivos de re-socialización, ocultan otra cara caracterizada por el aislamiento y el olvido. Si bien la problemática carcelaria es compleja, lo que se procura en el presente ensayo es analizar en primer lugar, la influencia del neoliberalismo en las políticas públicas carcelarias.
Imágenes de la Presidencia:  estaría en condiciones "aceptables" 







http://archivo.presidencia.gub.uy/sci/fotos/2011/05/2011032505.htm


Demoledor informe de Nowak (2009)

1.Las condiciones de detención en algunas comisarías que visitó el relator de la ONU sobre la Tortura, Manfred Nowak "eran malas, con celdas oscuras, húmedas e inmundas, algunas de las cuales se encontraban en estado deplorable".
2.El Penal de Libertad "sigue siendo conocido por sus condiciones infrahumanas. En particular, los alojamientos en los módulos de acero conocidos como `Las Latas`, son un insulto a la dignidad de los reclusos".
3.En algunos módulos del Comcar de Santiago Vázquez, "el número de reclusos es cinco veces superior a su capacidad. Celdas para dos o tres personas albergan a 11 o 12 internos".
4. La situación de violencia intercarcelaria "es alarmante, ya que durante 2009, tres personas han muerto dentro de la cárcel".
5.En clara violación de las normas legales internacionales, "no hay una separación entre los presos procesados y los condenados".
6.Existen también retrasos importantes en el sistema judicial, "lo cual produce una situación en la que aproximadamente dos tercios de las personas privadas de libertad se encuentran procesadas y no condenadas. En vista que los niveles de criminalidad van en aumento, este porcentaje probablemente aumentará en los próximos años".
7.En los distintos centros de detención de Uruguay, comprobó "disparidades inmensas de condiciones. Los que van a Libertad o al Comcar son los pobres, mientras que personas más pudientes son derivadas a Cárcel Central donde la situación es mejor".
8.Según Nowak, Uruguay es el país de menor criminalidad de América Latina junto con Costa Rica y Chile. Sin embargo, Uruguay se encuentra en los primeros lugares del mundo si se efectúa una comparación de su población carcelaria cada 100.000 habitantes.
9.Los adolescentes detenidos en la Colonia Berro "viven en condiciones extremadamente pobres. Los adolescentes no tienen inodoros en sus celdas y en ocasiones tienen que esperar durante horas para que un funcionario les deje ir al baño. Muchos de ellos reciben sedantes como sustitutos a las drogas".
10.Algunos de los problemas que enfrenta el sistema penitenciario y el sistema de justicia juvenil "son el resultado de la falta de una política penal o penitenciaria integral. Los reclusos tienen pocas oportunidades de rehabilitación y preparación para su reinserción en la sociedad".
11.Las facilidades penitenciarias para las reclusas "se encuentran deterioradas".
12.Pese a la creación del Plan Nacional de Lucha contra la Violencia Doméstica, "preocupa el alto número de casos de violencia doméstica reportados en el país, algunos de los cuales ocurren después que la imposición de medidas cautelares por el Poder Judicial", dijo el relator de la ONU.
El País Digital
Bonomi y Lorenzo presentaron proyecto de cárcel privada

Nowak comentó que se reunió ayer con el ministro del Interior Eduardo Bonomi, con fiscales y legisladores. “Todos se mostraron interesados. No sé bien donde está la falta de voluntad política”, comentó desorientado y dijo que “si bien se han registrado avances en cuanto a los síntomas, como el traslado gradual de la administración penitenciaria de personal policial a civil, la construcción de nuevos centros, el cerrar las latas y algunos módulos en el Comcar, no se solucionan las causas raíz”.

“Cuando vine en 2009 había unos 8.000 privados de libertad, el año pasado había 9.000 y este año alcanzan los 10.000. El porcentaje de presos sin condena están entre el 60% y 70%. Entonces no es una cuestión de seguir construyendo plazas sino que es necesario bajar el número de presos”, aseguró.


La industria en las cárceles de EEUU: ¿un gran negocio o nueva forma de esclavitud?

Con un 5% de la población mundial, hoy día Estados Unidos tiene en sus cárceles a un 25% de todos los presos. En su lucha contra la superpoblación de las prisiones estatales, la administración estadounidense dio permiso a empresas privadas para abrir sus propias instituciones penitenciarias. Se sobrentiende que, a diferencia de las instituciones financiadas con el dinero público, estas cárceles tienen fines de lucro.

Aunque hace una década la industria de las prisiones privadas estaba a punto de perecer ahogada en la corrupción y las demandas judiciales, en este momento se está desarrollando a pesar de los escándalos que no dejan de surgir. ¿Cuál es el motivo? La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles, en un informe recién publicado, revela que la continua prosperidad del negocio se debe al brusco auge de la detención de inmigrantes tras los atentados del 11-S, junto con la influencia que las compañías empezaron a ejercer sobre los altos funcionarios del Estado.

Un negocio que prospera por las detenciones de inmigrantes

Entre los años 1999 y 2001 las cárceles privadas experimentaban dificultades graves y tenían que encontrar nuevos mercados para sobrevivir. Y la oportunidad no se hizo esperar: concentraron su atención en la detención de inmigrantes. Tras la adopción en 1996 de la Ley de Responsabilidad para Inmigrantes, que cambió la política de EE. UU. respecto a la inmigración, la cantidad de arrestos se triplicó. Además, después de septiembre de 2001, la detención de inmigrantes se volvió a disparar creando amplias posibilidades para el negocio de las prisiones que se encargó de recoger a casi la mitad de los inmigrantes arrestados.

Los ingresos de las cárceles privadas dependen directamente de la cantidad de presos, lo que les hace abogar por el endurecimiento de los castigos. Para los presos esto significa el alargamiento de los plazos, condiciones antihigiénicas y violencia.




Viernes 22.03.2013

Sistema judicial uruguayo tiene "filosofía dictatorial" Cárceles. Prisión preventiva es la causa del hacinamiento
 
EDUARDO BARRENECHE
Los activistas europeos Manfred Nowak y Jorg Stippel criticron ayer el proceso penal de Uruguay y advirtieron que el sistema local tiene una "filosofía dictatorial", lo que molestó a operadores judiciales.
En una conferencia realizada ayer en el Centro de Formación de Cooperación Española sobre detención preventiva, se observó las dos corrientes existentes en el país sobre el futuro el proceso penal: una que impulsa una línea más dura y que reclama que los fiscales tengan una mayor participación en la investigación de los delitos, y otra corriente denominada "benigna" que promueve el cese de prisiones preventivas, entre otros postulados.
En su intervención, el exrelator contra la tortura de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el austríaco Manfred Nowak, dijo que el proceso penal uruguayo "está totalmente atrasado, es lento, viene del período de facto y aún expresa ese tipo de filosofía de la dictadura" militar.
La conferencia, titulada "Detención preventiva. Situación actual y propuesta de cambio", fue organizada por el Instituto Ludwing Boltzmann de Derechos Humanos de Austria que dirige el propio Nowak.
El activista advirtió que un sistema penal funciona como "Libia o Bolivia" si la cantidad de presos con prisión preventiva supera el 30% y recordó que Uruguay tiene 9.700 encarcelados, de los cuales un 60% carecen de condena.
"Bolivia es el país que tiene el problema mayor en América Latina. Congo, Liberia y Paraguay son otros países donde recomendamos exactamente lo mismo. Ellos tienen una tasa muy alta de presos con prevención. Uruguay ha reducido de un 70 a un 60%", dijo.
Enseguida advirtió que la prisión preventiva es la causa central del hacinamiento de las cárceles uruguayas.
Destacó que, en el mundo germánico, la prisión preventiva es uno de los elementos clave de lo que se conoce como estado de derecho y advirtió que allí esta medida se usa en forma excepcional para asegurar que exista un juicio justo y que el acusado participe en el mismo.
"Es decir, se trata de un estado basado en el derecho y no en la arbitrariedad. Mientras que uno no sea acusado por un juzgado competente, debe ser tratado como inocente", dijo Nowak.
Recordó que en el Código Penal uruguayo es casi obligatorio que una persona con antecedentes penales que es acusada de un nuevo delito sea enviada a prisión en forma preventiva.
"De acuerdo con el derecho internacional, uno puede haber cumplido la pena y no hay razón para ponerlo en la cárcel otra vez sin juicio. Eso es un castigo. Se viola derechos humanos", señaló.
En otro pasaje de la conferencia, Jorg Stippel, también integrante del Instituto Ludwing Boltzmann de Derechos Humanos, señaló que en Alemania había solo un 16,1% de presos con prisión preventiva y advirtió que le llamaba la atención de que los abogados defensores no impugnaran tales decisiones judiciales.
La fiscal penal Dora Domenech pidió la palabra y señaló que la sociedad uruguaya "vive momentos de gran inseguridad" y "reclama a gritos ser defendida". Agregó que el 99% de las personas encarceladas preventivamente son condenadas porque el sistema los remite con pruebas y apenas un 1% son sobreseídos por inocentes.
El también fiscal penal Gustavo Zubía afirmó que no se podía comparar Alemania y otros países germánicos con Uruguay porque las diferencias económicas y de medios son "abismales". Agregó, en la misma línea que Domenech, que cuando ocurre el procesamiento de una persona están el 90% de las pruebas.
Zubía señaló que, en la línea del fiscal de Corte, Jorge Díaz, los representantes del Ministerio Público deben participar en la investigación de los delitos.
"El sistema político es paranoico. Invierte los roles. Quien investiga es el juez junto con la Policía y luego es el fiscal el que debe decidir si se inicia o no el proceso", dijo.
El comisionado parlamentario Álvaro Garcé salió en defensa de sus ex colegas defensores de oficio al señalar que estos no apelan casos de prisión preventiva porque "es una pérdida de tiempo" que genera "frustración", y agregó que para el defendido "es mejor esperar que la condena llegue lo antes posible".
Garcé dijo que no se debía hacer una falsa oposición entre Uruguay y Alemania y explicó que los derechos humanos son universales más allá de la diversidad cultural de los países.
Jorg Stipp reiteró que la prevención de libertad excesiva no es digna de una democracia. Luego cerró la conferencia afirmando que Alemania comenzó su reforma procesal penal en 1970 y que Uruguay lo hace hoy.
"Hay algunos resabios totalitarios en estados democráticos. Esos resabios hay que superarlos", dijo el activista.

Código de Proceso "es una prioridad"

En la conferencia de ayer sobre detención preventiva, el secretario de la Presidencia, Homero Guerrero, dijo que el gobierno "impulsa fuertemente" la aprobación de un nuevo Código de Proceso Penal que se encuentra a estudio del Parlamento.
Señaló que luego de Semana Santa se realizará un encuentro de la Agrupación de Gobierno en la sede del Frente Amplio (integrantes del gobierno y parlamentarios de la coalición de izquierda) donde se establecerán prioridades legislativas.
Tras advertir que será el representante del gobierno en esa reunión, Guerrero dijo que los temas clave para el Poder Ejecutivo en este año serán las aprobaciones de los nuevos códigos de Proceso Penal y Penal.
"No hay duda que nosotros tenemos que ir a un proceso acusatorio y abandonar el proceso inquisitivo", explicó. Enseguida agregó que el hacinamiento carcelario es una realidad generada por un proceso penal que pone el acento en la prisión preventiva.
Durante su intervención, el exrelator contra la tortura de la Organización de las Naciones Unidas, Manfred Nowak, dijo que veía con beneplácito dichas afirmaciones de Guerrero pero recordó que, en otra visita que hizo hace un año a Uruguay, el presidente José Mujica le había dicho lo mismo.
Por su parte, el fiscal de Corte, Jorge Díaz, indicó que en el sistema procesal uruguayo se da la paradoja que la mayoría de las personas privadas de libertad se les presume inocentes porque enfrentan prisiones preventivas y no tienen sentencia condenatoria y, en cambio, la mayoría de los condenados a penas de prisión están en libertad ambulatoria.
"Es imprescindible una reforma del Código de Proceso Penal", dijo el fiscal de Corte.
El País Digital

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