Las tropas de ocupación de la ONU introdujeron el cólera en Haití y no se hacen responsables Cualquier corporación multinacional si hubiera contaminado un país con cólera de la forma en que la ONU lo hizo en Haití , podría ser demandado por cantidades estratosféricas de dinero. Y eso es sólo en principio: ¿Si hubieran sido Unilever o Coca-Cola responsables de un brote de cólera que mató a 8.000 personas e infectó a 640.000 más , es probable que sus ejecutivos tendrían dificultades para llegar a países como visitantes, ya que serían reclamados en la jurisdicción legal universal . Tendrían que lidiar con la Interpol y con sus notificaciones rojas y estas las empresas irían a juicio para indemnizar los daños, similar a cuando el derrame de la BP en el golfo de México.
La ONU y su liderazgo no tiene que preocuparse de nada de esto.
Pero tal vez deberían
Grupos se preparan para demandar a la Minustah
El Comité de seguimiento de la comisión de investigación internacional sobre Haití y Colectivo de movilización por la indemnización de las víctimas de cólera, están organizando, para esa fecha, una jornada internacional de solidaridad y movilización para demandar el retiro de las tropas de ocupación de la vecina nación e indemnización a las víctimas del cólera.
La ONU nunca admitió su responsabilidad
La crisis del cólera en Haití muestra que la ONU está por encima de cualquier ley, incluso de la moral. Miles de haitianos han pagado ya con su propia vida, mientras el organismo ni siquiera acepta su negligencia que ha desembocado en catástrofe.
El
escándalo, relacionado con la ONU y su participación en la propagación
del brote de cólera en Haití, sigue despertando críticas durante más de
dos años. Y la situación se agravó aun más cuando la organización se
negó a indemnizar a las familias de las víctimas. Según los últimos datos, desde octubre de 2010, cuando la enfermedad apareció en el país han muerto unas 8.000 personas.
Recientemente el organismo internacional volvió a negar su responsabilidad en este hecho y rechazó las reclamaciones de las autoridades haitianas que exigen una indemnización por miles de millones de dólares. El secretario general Ban Ki-moon envió al presidente de Haití, Michel Martelly, la notificación de la negativa a pagar, referiéndose a la Convención de la ONU de 1946 que establece inmunidad ante este tipo de demandas.
A lo largo de estos años el organismo internacional ha intentado evitar cualquier pregunta incómoda relacionada con la situación en Haití y ha tratado de encubrir este caso de negligencia, que llevó a un desastre a gran escala.
El periodista Jonathan Katz, que estudió minuciosamente la cronología de la propagación del cólera en Haití y lo describió en su libro 'The Big Truck That Went By', asegura que el organismo internacional impidió de todas las formas posibles a los periodistas investigar el caso e informar al mundo sobre las causas y consecuencias de la tragedia. Además, subrayó que no había habido ningún caso de cólera en Haití desde hace un siglo, pero ahora la enfermedad es endémica y sigue amenazando a los haitianos.
Entre tanto, varios estudios científicos confirmaron que fue la misión de las Naciones Unidas la que introdujo el bacilo de cólera en Haití, uno de los países más pobres del continente americano. Los expertos revelaron que todas las evidencias indican que la bacteria se originó en Nepal y llegó a Haití a través del organismo de soldados pacificadores de la ONU que fueron a prestar ayuda después del devastador terremoto de 2010. La epidemia se extendió por el país debilitado ya que los soldados no mantuvieron unas condiciones sanitarias mínimas y se contaminaron aguas que se utilizaban como agua potable.
Sin embargo, los representantes del organismo desde el primer día de las acusaciones que se generaron entre periodistas, blogueros, juristas y representantes de derechos humanos aseguraron que no tienen culpa y que la infección podría haber llegado al país por muchas otras vías.
Texto completo en: http://actualidad.rt.com/sociedad/view/87665-onu-colera-haiti-negligencia
Recientemente el organismo internacional volvió a negar su responsabilidad en este hecho y rechazó las reclamaciones de las autoridades haitianas que exigen una indemnización por miles de millones de dólares. El secretario general Ban Ki-moon envió al presidente de Haití, Michel Martelly, la notificación de la negativa a pagar, referiéndose a la Convención de la ONU de 1946 que establece inmunidad ante este tipo de demandas.
A lo largo de estos años el organismo internacional ha intentado evitar cualquier pregunta incómoda relacionada con la situación en Haití y ha tratado de encubrir este caso de negligencia, que llevó a un desastre a gran escala.
El periodista Jonathan Katz, que estudió minuciosamente la cronología de la propagación del cólera en Haití y lo describió en su libro 'The Big Truck That Went By', asegura que el organismo internacional impidió de todas las formas posibles a los periodistas investigar el caso e informar al mundo sobre las causas y consecuencias de la tragedia. Además, subrayó que no había habido ningún caso de cólera en Haití desde hace un siglo, pero ahora la enfermedad es endémica y sigue amenazando a los haitianos.
Entre tanto, varios estudios científicos confirmaron que fue la misión de las Naciones Unidas la que introdujo el bacilo de cólera en Haití, uno de los países más pobres del continente americano. Los expertos revelaron que todas las evidencias indican que la bacteria se originó en Nepal y llegó a Haití a través del organismo de soldados pacificadores de la ONU que fueron a prestar ayuda después del devastador terremoto de 2010. La epidemia se extendió por el país debilitado ya que los soldados no mantuvieron unas condiciones sanitarias mínimas y se contaminaron aguas que se utilizaban como agua potable.
Sin embargo, los representantes del organismo desde el primer día de las acusaciones que se generaron entre periodistas, blogueros, juristas y representantes de derechos humanos aseguraron que no tienen culpa y que la infección podría haber llegado al país por muchas otras vías.
Texto completo en: http://actualidad.rt.com/sociedad/view/87665-onu-colera-haiti-negligencia
El
escándalo, relacionado con la ONU y su participación en la propagación
del brote de cólera en Haití, sigue despertando críticas durante más de
dos años. Y la situación se agravó aun más cuando la organización se
negó a indemnizar a las familias de las víctimas. Según los últimos datos, desde octubre de 2010, cuando la enfermedad apareció en el país han muerto unas 8.000 personas.
Recientemente el organismo internacional volvió a negar su responsabilidad en este hecho y rechazó las reclamaciones de las autoridades haitianas que exigen una indemnización por miles de millones de dólares. El secretario general Ban Ki-moon envió al presidente de Haití, Michel Martelly, la notificación de la negativa a pagar, referiéndose a la Convención de la ONU de 1946 que establece inmunidad ante este tipo de demandas.
A lo largo de estos años el organismo internacional ha intentado evitar cualquier pregunta incómoda relacionada con la situación en Haití y ha tratado de encubrir este caso de negligencia, que llevó a un desastre a gran escala.
El periodista Jonathan Katz, que estudió minuciosamente la cronología de la propagación del cólera en Haití y lo describió en su libro 'The Big Truck That Went By', asegura que el organismo internacional impidió de todas las formas posibles a los periodistas investigar el caso e informar al mundo sobre las causas y consecuencias de la tragedia. Además, subrayó que no había habido ningún caso de cólera en Haití desde hace un siglo, pero ahora la enfermedad es endémica y sigue amenazando a los haitianos.
Entre tanto, varios estudios científicos confirmaron que fue la misión de las Naciones Unidas la que introdujo el bacilo de cólera en Haití, uno de los países más pobres del continente americano. Los expertos revelaron que todas las evidencias indican que la bacteria se originó en Nepal y llegó a Haití a través del organismo de soldados pacificadores de la ONU que fueron a prestar ayuda después del devastador terremoto de 2010. La epidemia se extendió por el país debilitado ya que los soldados no mantuvieron unas condiciones sanitarias mínimas y se contaminaron aguas que se utilizaban como agua potable.
Sin embargo, los representantes del organismo desde el primer día de las acusaciones que se generaron entre periodistas, blogueros, juristas y representantes de derechos humanos aseguraron que no tienen culpa y que la infección podría haber llegado al país por muchas otras vías.
Texto completo en: http://actualidad.rt.com/sociedad/view/87665-onu-colera-haiti-negligencia
Recientemente el organismo internacional volvió a negar su responsabilidad en este hecho y rechazó las reclamaciones de las autoridades haitianas que exigen una indemnización por miles de millones de dólares. El secretario general Ban Ki-moon envió al presidente de Haití, Michel Martelly, la notificación de la negativa a pagar, referiéndose a la Convención de la ONU de 1946 que establece inmunidad ante este tipo de demandas.
A lo largo de estos años el organismo internacional ha intentado evitar cualquier pregunta incómoda relacionada con la situación en Haití y ha tratado de encubrir este caso de negligencia, que llevó a un desastre a gran escala.
El periodista Jonathan Katz, que estudió minuciosamente la cronología de la propagación del cólera en Haití y lo describió en su libro 'The Big Truck That Went By', asegura que el organismo internacional impidió de todas las formas posibles a los periodistas investigar el caso e informar al mundo sobre las causas y consecuencias de la tragedia. Además, subrayó que no había habido ningún caso de cólera en Haití desde hace un siglo, pero ahora la enfermedad es endémica y sigue amenazando a los haitianos.
Entre tanto, varios estudios científicos confirmaron que fue la misión de las Naciones Unidas la que introdujo el bacilo de cólera en Haití, uno de los países más pobres del continente americano. Los expertos revelaron que todas las evidencias indican que la bacteria se originó en Nepal y llegó a Haití a través del organismo de soldados pacificadores de la ONU que fueron a prestar ayuda después del devastador terremoto de 2010. La epidemia se extendió por el país debilitado ya que los soldados no mantuvieron unas condiciones sanitarias mínimas y se contaminaron aguas que se utilizaban como agua potable.
Sin embargo, los representantes del organismo desde el primer día de las acusaciones que se generaron entre periodistas, blogueros, juristas y representantes de derechos humanos aseguraron que no tienen culpa y que la infección podría haber llegado al país por muchas otras vías.
Texto completo en: http://actualidad.rt.com/sociedad/view/87665-onu-colera-haiti-negligencia
La crisis del cólera en
Haití muestra que la ONU está por encima de cualquier ley, incluso de
la moral. Miles de haitianos han pagado ya con su propia vida, mientras
el organismo ni siquiera acepta su negligencia que ha desembocado en
catástrofe.
Texto completo en: http://actualidad.rt.com/sociedad/view/87665-onu-colera-haiti-negligencia
Texto completo en: http://actualidad.rt.com/sociedad/view/87665-onu-colera-haiti-negligencia
La
crisis del cólera en Haití muestra que la ONU está por encima de
cualquier ley, incluso de la moral. Miles de haitianos han pagado ya con
su propia vida, mientras el organismo ni siquiera acepta su negligencia
que ha desembocado en catástrofe.
El escándalo, relacionado con la
ONU y su participación en la propagación del brote de cólera en Haití,
sigue despertando críticas durante más de dos años. Y la situación se
agravó aun más cuando la organización se negó a indemnizar a las
familias de las víctimas. Según los últimos datos, desde octubre de 2010, cuando la enfermedad apareció en el país han muerto unas 8.000 personas.
Recientemente el organismo internacional volvió a negar su responsabilidad en este hecho y rechazó las reclamaciones de las autoridades haitianas que exigen una indemnización por miles de millones de dólares. El secretario general Ban Ki-moon envió al presidente de Haití, Michel Martelly, la notificación de la negativa a pagar, referiéndose a la Convención de la ONU de 1946 que establece inmunidad ante este tipo de demandas.
A lo largo de estos años el organismo internacional ha intentado evitar cualquier pregunta incómoda relacionada con la situación en Haití y ha tratado de encubrir este caso de negligencia, que llevó a un desastre a gran escala.
El periodista Jonathan Katz, que estudió minuciosamente la cronología de la propagación del cólera en Haití y lo describió en su libro 'The Big Truck That Went By', asegura que el organismo internacional impidió de todas las formas posibles a los periodistas investigar el caso e informar al mundo sobre las causas y consecuencias de la tragedia. Además, subrayó que no había habido ningún caso de cólera en Haití desde hace un siglo, pero ahora la enfermedad es endémica y sigue amenazando a los haitianos.
Entre tanto, varios estudios científicos confirmaron que fue la misión de las Naciones Unidas la que introdujo el bacilo de cólera en Haití, uno de los países más pobres del continente americano. Los expertos revelaron que todas las evidencias indican que la bacteria se originó en Nepal y llegó a Haití a través del organismo de soldados pacificadores de la ONU que fueron a prestar ayuda después del devastador terremoto de 2010. La epidemia se extendió por el país debilitado ya que los soldados no mantuvieron unas condiciones sanitarias mínimas y se contaminaron aguas que se utilizaban como agua potable.
Sin embargo, los representantes del organismo desde el primer día de las acusaciones que se generaron entre periodistas, blogueros, juristas y representantes de derechos humanos aseguraron que no tienen culpa y que la infección podría haber llegado al país por muchas otras vías.
Recientemente el organismo internacional volvió a negar su responsabilidad en este hecho y rechazó las reclamaciones de las autoridades haitianas que exigen una indemnización por miles de millones de dólares. El secretario general Ban Ki-moon envió al presidente de Haití, Michel Martelly, la notificación de la negativa a pagar, referiéndose a la Convención de la ONU de 1946 que establece inmunidad ante este tipo de demandas.
A lo largo de estos años el organismo internacional ha intentado evitar cualquier pregunta incómoda relacionada con la situación en Haití y ha tratado de encubrir este caso de negligencia, que llevó a un desastre a gran escala.
El periodista Jonathan Katz, que estudió minuciosamente la cronología de la propagación del cólera en Haití y lo describió en su libro 'The Big Truck That Went By', asegura que el organismo internacional impidió de todas las formas posibles a los periodistas investigar el caso e informar al mundo sobre las causas y consecuencias de la tragedia. Además, subrayó que no había habido ningún caso de cólera en Haití desde hace un siglo, pero ahora la enfermedad es endémica y sigue amenazando a los haitianos.
Entre tanto, varios estudios científicos confirmaron que fue la misión de las Naciones Unidas la que introdujo el bacilo de cólera en Haití, uno de los países más pobres del continente americano. Los expertos revelaron que todas las evidencias indican que la bacteria se originó en Nepal y llegó a Haití a través del organismo de soldados pacificadores de la ONU que fueron a prestar ayuda después del devastador terremoto de 2010. La epidemia se extendió por el país debilitado ya que los soldados no mantuvieron unas condiciones sanitarias mínimas y se contaminaron aguas que se utilizaban como agua potable.
Sin embargo, los representantes del organismo desde el primer día de las acusaciones que se generaron entre periodistas, blogueros, juristas y representantes de derechos humanos aseguraron que no tienen culpa y que la infección podría haber llegado al país por muchas otras vías.
Texto completo en: http://actualidad.rt.com/sociedad/view/87665-onu-colera-haiti-negligencia
Desde enero de 2012 no se reportan muertes por cólera en los lugares donde presta atención la Brigada Médica Cubana en Haití. Fuente: Videos Cuba Hoy.
Peor que la cólera es el sistema del 1% que mantienen las tropas de ocupación
Fotos del 1%
Fotos del 99%
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